
SERÉIS FORZADOS A NEGAR A CRISTO
Sábado, 17 de diciembre 2016 11:27 - 11:30 - 12:01 am (Domingo, 18 de diciembre 2016)
Padre, en la Biblia Jesús dice “pedid y recibiréis” – como en el dicho popular “el que no llora no mama”. Entonces, todo depende de Tu voluntad, el que “esto” se realice o no. Nuestras oraciones o peticiones o insistencia. Por un lado, ¿cómo sabremos que es Tu Voluntad y si deberíamos pedir siquiera, y en segundo lugar, me imagino que si Tú nos diste el libre albedrío, ¿por qué no deberías tener el Tuyo también? A veces eres muy confuso, Padre. Tiene sentido. Somos creados a tu imagen, y la gente está un poco chalada a veces también.
11:30 pm - 12:01 am
Hijos Beatíficos, amo a cada uno de vosotros tan entrañablemente. Os digo, pedid y os daré todo lo que sea necesario y bueno. Mi Voluntad para vosotros siempre es buena, porque está llena de Amor y gran afecto. No dudéis de Mi Amor por vosotros, Mis Amados Hijos. Las crías de pájaros, anidadas en los árboles, no se preocupan si se morirán de hambre. Vuestros (propios) Hijos Bienamados confían en que vosotros los alimentaréis y los protegeréis y les haréis sentir todo lo que es correcto, seguro y Amoroso. En vuestros seres pequeños o imperfectos seres, ¿cuánto más Amor y atención podéis imaginar que Yo anhelo dar a cada uno de vosotros?
Pues Yo soy el Amor y soy siempre-Amoroso y Eterno. No hay nada que Yo no pueda hacer ni nada que no pueda deshacer. Yo soy el Señor Dios y Padre y miro o anhelo daros tan magníficas gracias, BUENAS Y GRANDES. Confiad en Mí, Mis Amados Hijos, pues ¿quién puede Amaros más que el Mismo que os da la vida? ¿Quién puede amaros más que vuestro Padre Celestial y justo Dios?
Mi Amor por vosotros es perfecto e impermeable. Os amo sin causa ni condición. Mi Amor simplemente ES o lo que es o siempre. [De alguna manera, esto era demasiado grande para que Yo lo captara por escrito.] Mis pequeños y Amados Hijos, cuanto os preocupáis y os volvéis ansiosos por vuestras inquietudes. ¿No lo veis? Colocad vuestros Corazones en Mis Manos y no os preocupéis más. Cuando verdaderamente confiáis en vuestro Creador, el Señor Dios y Padre que os adora, no hay lugar en vuestro Corazón o en vuestros corazones atribulados para la ansiedad. Yo gestiono o disipo todo lo que trae preocupación a vuestras mentes y Corazones. Confiad en Mí, Mis Hijos, pues Yo deseo aliviar la carga de vuestros temores y preocupaciones.
Amados Hijos, estoy siempre con vosotros. Mirad a Mi Hijo Amado, Cristo que cumplirá o responderá a los anhelos que están dentro de vuestros Corazones. Mi Hijo Amado es el único verdadero Jesucristo. Él ha dado Su misma Vida para que tengáis Luz y Vida Eterna entre las vuestras. Su Amor es profundo y precioso. ¡Cuán misericordioso y afectuoso es Mi Hijo Amado! Cuán grande es Su anhelo por cada uno de vosotros y por vuestra Amorosa atención.
No busquéis las respuestas a todas las cosas [Sus misterios], pues sois demasiado pequeños y frágiles para comprender tales cosas. Confiad en que Yo, vuestro Señor Dios y Padre, tengo cada cosa o cada minuto del Mundo bajo control. No dudéis de Mi Amor por vosotros, Mis Amados Hijos, pues es la duda la que será usada contra vosotros, para afligir vuestras mentes y haceros inseguros o indecisos respecto a Mi Amor por vosotros.
Oh, Amados, todavía sois débiles. Orad constantemente y dadme vuestros Corazones. Hay una gran y fuerte tempestad que se acerca a vosotros y vuestra fe en Mí, Vuestro Misericordioso y Amorosísimo Dios, será puesta a prueba en gran forma. Debéis conocer lo que Yo amo y lo que Me ofende. Debéis conocerme, a vuestro Señor Dios, íntimamente. Así el discernimiento y la claridad serán vuestros. Así se encogerán las tinieblas ante las Luces del Amor dentro de vuestras Almas, pues serán encendidas brillantemente por vuestra fe en Mí y Mi Amor eterno por vosotros.
Sin embargo, hay otros Hijos a los que atesoro tan absolutamente, que están destinados a grandes pecados sin arrepentimiento y, por tanto, a las vulgaridades del infierno. Orad y traed a vuestros errantes Hermanas y Hermanos hacia Mí. Deseo alcanzar y mantener a todas las Almas en Mi Corazón. Anhelo preservar todas las Almas de caer al infierno donde Yo no puedo estar. Una vez caídos, Mis Hijos Amados están para siempre perdidos ante las agonías, todo lo que es espantoso y doloroso y ante el deseo insatisfecho de tomar Mi Mano. Pues Mi Presencia ya no estará disponible para ellos y por este conocimiento profundo, desgarrador o perjudicial, todo está perdido y el sufrimiento se hace insoportable por toda la Eternidad.
Así que Yo os digo, Hijos Benditos, no os sentéis ociosamente de regreso a casa en Mi Amor, que es vuestro, de la manera más GRANDE y perpetuo, ¡sino orad! Orad por los necesitados y orad por aquellos que pronto podrían estar perdidos. Orad por discernimiento para los tiempos en que vuestra fe en Mí será cuestionada o se desviará o vagará. Creeréis que Yo estoy ausente, aunque Yo os abrace a cada momento de cada día. Dudaréis de Mi Amor y gran Misericordia por vosotros, así que Yo os digo, orad por discernimiento y el don Espiritual de la constancia en vuestro Amor y fe por vuestro Señor Dios y Padre.
Seréis obligados a negar a Cristo. Vuestra fe será ridiculizada sin descanso. Seréis puestos en duda y acorralados como animales salvajes por temor a que golpeéis a los que descienden sobre vosotros o a los que se opongan o traten de traeros dolor e injusticia. Venid a Mí en estos Tiempos de consternación. No renunciéis a vuestro Amor y fe en Cristo Jesús. Sabed que Él ha sufrido el ridículo y la anarquía o los ataques que tendréis que afrontar, y vuestra confianza y continuo Amor y fe en Mi Hijo Amado os conducirán de manera segura y maravillosamente [milagrosamente a nuestros ojos] más allá de todo lo que buscaría llevar a vuestros Espíritus a las tinieblas de la duda, la negación y el pecado.
Amados Hijos, confiad en Mi Gran Amor por vosotros. Volveos a Mí en todas las cosas. Orad y os doy claridad y discernimiento. Orad y os doy fuerza contra los que os atacarían. Orad y os concedo Mi Paz. Orad, Hijos Míos y descansad en el consuelo de Mi Paz.
Sábado, 17 de diciembre 2016 11:27 - 11:30 - 12:01 am (Domingo, 18 de diciembre 2016)
Padre, en la Biblia Jesús dice “pedid y recibiréis” – como en el dicho popular “el que no llora no mama”. Entonces, todo depende de Tu voluntad, el que “esto” se realice o no. Nuestras oraciones o peticiones o insistencia. Por un lado, ¿cómo sabremos que es Tu Voluntad y si deberíamos pedir siquiera, y en segundo lugar, me imagino que si Tú nos diste el libre albedrío, ¿por qué no deberías tener el Tuyo también? A veces eres muy confuso, Padre. Tiene sentido. Somos creados a tu imagen, y la gente está un poco chalada a veces también.
11:30 pm - 12:01 am
Hijos Beatíficos, amo a cada uno de vosotros tan entrañablemente. Os digo, pedid y os daré todo lo que sea necesario y bueno. Mi Voluntad para vosotros siempre es buena, porque está llena de Amor y gran afecto. No dudéis de Mi Amor por vosotros, Mis Amados Hijos. Las crías de pájaros, anidadas en los árboles, no se preocupan si se morirán de hambre. Vuestros (propios) Hijos Bienamados confían en que vosotros los alimentaréis y los protegeréis y les haréis sentir todo lo que es correcto, seguro y Amoroso. En vuestros seres pequeños o imperfectos seres, ¿cuánto más Amor y atención podéis imaginar que Yo anhelo dar a cada uno de vosotros?
Pues Yo soy el Amor y soy siempre-Amoroso y Eterno. No hay nada que Yo no pueda hacer ni nada que no pueda deshacer. Yo soy el Señor Dios y Padre y miro o anhelo daros tan magníficas gracias, BUENAS Y GRANDES. Confiad en Mí, Mis Amados Hijos, pues ¿quién puede Amaros más que el Mismo que os da la vida? ¿Quién puede amaros más que vuestro Padre Celestial y justo Dios?
Mi Amor por vosotros es perfecto e impermeable. Os amo sin causa ni condición. Mi Amor simplemente ES o lo que es o siempre. [De alguna manera, esto era demasiado grande para que Yo lo captara por escrito.] Mis pequeños y Amados Hijos, cuanto os preocupáis y os volvéis ansiosos por vuestras inquietudes. ¿No lo veis? Colocad vuestros Corazones en Mis Manos y no os preocupéis más. Cuando verdaderamente confiáis en vuestro Creador, el Señor Dios y Padre que os adora, no hay lugar en vuestro Corazón o en vuestros corazones atribulados para la ansiedad. Yo gestiono o disipo todo lo que trae preocupación a vuestras mentes y Corazones. Confiad en Mí, Mis Hijos, pues Yo deseo aliviar la carga de vuestros temores y preocupaciones.
Amados Hijos, estoy siempre con vosotros. Mirad a Mi Hijo Amado, Cristo que cumplirá o responderá a los anhelos que están dentro de vuestros Corazones. Mi Hijo Amado es el único verdadero Jesucristo. Él ha dado Su misma Vida para que tengáis Luz y Vida Eterna entre las vuestras. Su Amor es profundo y precioso. ¡Cuán misericordioso y afectuoso es Mi Hijo Amado! Cuán grande es Su anhelo por cada uno de vosotros y por vuestra Amorosa atención.
No busquéis las respuestas a todas las cosas [Sus misterios], pues sois demasiado pequeños y frágiles para comprender tales cosas. Confiad en que Yo, vuestro Señor Dios y Padre, tengo cada cosa o cada minuto del Mundo bajo control. No dudéis de Mi Amor por vosotros, Mis Amados Hijos, pues es la duda la que será usada contra vosotros, para afligir vuestras mentes y haceros inseguros o indecisos respecto a Mi Amor por vosotros.
Oh, Amados, todavía sois débiles. Orad constantemente y dadme vuestros Corazones. Hay una gran y fuerte tempestad que se acerca a vosotros y vuestra fe en Mí, Vuestro Misericordioso y Amorosísimo Dios, será puesta a prueba en gran forma. Debéis conocer lo que Yo amo y lo que Me ofende. Debéis conocerme, a vuestro Señor Dios, íntimamente. Así el discernimiento y la claridad serán vuestros. Así se encogerán las tinieblas ante las Luces del Amor dentro de vuestras Almas, pues serán encendidas brillantemente por vuestra fe en Mí y Mi Amor eterno por vosotros.
Sin embargo, hay otros Hijos a los que atesoro tan absolutamente, que están destinados a grandes pecados sin arrepentimiento y, por tanto, a las vulgaridades del infierno. Orad y traed a vuestros errantes Hermanas y Hermanos hacia Mí. Deseo alcanzar y mantener a todas las Almas en Mi Corazón. Anhelo preservar todas las Almas de caer al infierno donde Yo no puedo estar. Una vez caídos, Mis Hijos Amados están para siempre perdidos ante las agonías, todo lo que es espantoso y doloroso y ante el deseo insatisfecho de tomar Mi Mano. Pues Mi Presencia ya no estará disponible para ellos y por este conocimiento profundo, desgarrador o perjudicial, todo está perdido y el sufrimiento se hace insoportable por toda la Eternidad.
Así que Yo os digo, Hijos Benditos, no os sentéis ociosamente de regreso a casa en Mi Amor, que es vuestro, de la manera más GRANDE y perpetuo, ¡sino orad! Orad por los necesitados y orad por aquellos que pronto podrían estar perdidos. Orad por discernimiento para los tiempos en que vuestra fe en Mí será cuestionada o se desviará o vagará. Creeréis que Yo estoy ausente, aunque Yo os abrace a cada momento de cada día. Dudaréis de Mi Amor y gran Misericordia por vosotros, así que Yo os digo, orad por discernimiento y el don Espiritual de la constancia en vuestro Amor y fe por vuestro Señor Dios y Padre.
Seréis obligados a negar a Cristo. Vuestra fe será ridiculizada sin descanso. Seréis puestos en duda y acorralados como animales salvajes por temor a que golpeéis a los que descienden sobre vosotros o a los que se opongan o traten de traeros dolor e injusticia. Venid a Mí en estos Tiempos de consternación. No renunciéis a vuestro Amor y fe en Cristo Jesús. Sabed que Él ha sufrido el ridículo y la anarquía o los ataques que tendréis que afrontar, y vuestra confianza y continuo Amor y fe en Mi Hijo Amado os conducirán de manera segura y maravillosamente [milagrosamente a nuestros ojos] más allá de todo lo que buscaría llevar a vuestros Espíritus a las tinieblas de la duda, la negación y el pecado.
Amados Hijos, confiad en Mi Gran Amor por vosotros. Volveos a Mí en todas las cosas. Orad y os doy claridad y discernimiento. Orad y os doy fuerza contra los que os atacarían. Orad y os concedo Mi Paz. Orad, Hijos Míos y descansad en el consuelo de Mi Paz.

NO INTERRUMPÁIS VUESTRAS ORACIONES HACIA MÍ
Viernes 9 de diciembre 2016 3:06 - 4:00 pm
Padre, me gustaría que todos conocieran Tu Amor. Creo que la gente se sorprendería tanto por lo afectuoso que eres. Como un viejo abuelo dulce. Pero aún tendrías tus dientes. Sé que respondes a las oraciones. Rezo por que todo el Mundo se vuelva a Tu Amor. Simplemente no entiendo por qué la gente está tan enojada contigo. ¡Si tan sólo supieran! ¡Y nunca nadie pensaría que el resto de nosotros estamos locos! Cuando vengas, creo que el Mundo va a ser un hermoso lugar.
Amada Hija, Mi Amor es para todos en este Mundo, pues Yo he creado a cada uno de vosotros con tal prodigio, pasión y Amor. ¿Cómo podría negar Mi Gran Amor a aquellos que Yo he hecho? La respuesta es que no puedo, y por eso espero que Mis Amados Hijos se vuelvan a Mí, no simplemente o sólo en su momento de necesidad, sino todos los días, con todas sus alegrías y tristezas, y con todas las cosas pequeñas que creéis que no son importantes para Mí. Vuestras oraciones son canciones para Mis Oídos y todo el Cielo escucha con ansia y anticipación.
Yo soy el Señor Dios y Mi Voluntad para Mis Amados Hijos es Misericordiosa y Amorosa. Yo soy el Señor Dios y Mi Voluntad para vosotros siempre es correcta, con Mi Amor por vosotros en primer lugar en Mis Respuestas. No tengáis miedo, Hijos Míos. Incluso los animales corren de las tormentas y buscan refugio del granizo y el fuego. Despertad a vuestro Amor por Mí y observad cómo ningún desastre os toca. Yo soy el Corazón del Cielo y busco a cada uno de vosotros para que os unáis a Mí en lo alto de los Hermosos Brazos de Mi Reino. No tenéis que preocuparos por orar con palabras elaboradas y con la dignidad de los sacerdotes. ¡Acepto todas vuestras oraciones con LA MÁS GRANDE alegría! Anhelo escuchar vuestras voces regocijarse en vuestro Amor por Mí.
Amados Hijos, Yo soy vuestro Señor Dios y Padre. Adorad a Mi Amadísimo y Hermoso Hijo, Jesucristo, que tanto anhela vuestras atenciones. Nuestro Amor por vosotros es tan grandioso, tan impresionante, tan GRANDE, que anhelamos derramar Nuestro Amor sobre todos Mis Hijos. Abridme vuestros Corazones, Mis Hijos. No dudéis en pronunciar Mi Nombre. Venid a Mí en todas las cosas, pues vuestro Padre Celestial es feliz con vuestra atención, y Yo busco miraros o velar por vosotros como un Padre Bueno y Amorosísimo.
Vuestros Corazones no sufrirían tanto, y vuestras preocupaciones no parecerían insuperables si vuestro Corazón estuviera completamente puesto en el Mío Propio. Vuestras inquietudes no formarían líneas de preocupación en vuestras frentes, si confiarais en vuestro Señor Dios. Ved, Mis Amados Hijos, todo lo que estoy dispuesto a hacer por vosotros, para que podáis entender aunque sea una fracción mínima de Mi Amor por vosotros.
Oh, Amados Hijos, hay víboras en el medio. Matad a los dragones que vienen hacia vosotros y buscan destruir lo que Yo he construido. Al que ha contaminado lo que es Santo y que mancillará a Mis Amados Hijos con lujuria o lascivia. Él convierte todo lo que alguna vez fue blanco y Santísimo en aquello que es negro y sospechoso. Cuidado, pues las palabras del dragón son escupidas como mentiras y engaños. No sigáis a aquellos que mentirían y deshonrarían el Nombre del Amadísimo Jesucristo. Cuando alguien rechaza o desvía o repudia el tesoro otorgado del Salvador, huid de ellos y cerrad los ojos a su maldad. Si aquellos niegan el Pan que es Cristo, si han escupido sobre su Nombre y lo han maldecido por Su Sacrificio, ¡corred!, Mis Amados Hijos y encerraos en el manto protector de la Santísima Madre y Reina del Cielo. Poned vuestros ojos en Mí, para que no seáis cegados por el engaño, que hace que las cosas aparezcan erróneamente. [aparecen de una manera que engaña o que no es correcta] Lo blanco debe ser blanco y no puede ser negro, como el día sólo puede ser día, como la noche es noche. Tened en cuenta que tales palabras y creencias las usarán los hombres en Mi contra y contra Mi gran Amor por Mis Hijos.
Yo os digo, cuando estéis en medio de todas las tinieblas, llamad a Cristo Jesús, porque Él es la perfección en todo lo que es Santo, Eterno y bueno. Él destrozará al Leviatán, que busca asesinar a Mis Amados Hijos. Las tinieblas son mantenidas a raya por Su pura Santidad y Su Poder Beatífico y Santo. Jesucristo es vuestra Salvación, Hijos Míos. No os apartéis de Él. A cambio, seguid Su Camino, pues éste es justo y verdadero y conduce a Mis Hijos Amados a Mí, a vuestro Santo Dios y Padre.
No seáis tontos [sordos] ante las amenazas de este Mundo. La oscuridad os atraería hacia la impiedad. El Mundo está apenas sin pecado y muchos de Mis Hijos Me han relegado con odio, a su Dios Eterno y Padre siempre Amoroso. Se alejan del Amor de Mi Hijo Amadísimo y eligen ser rastrillados sobre carbones y fuego. Están eligiendo el dolor, las agonías, la oscuridad y el miedo eternos. Sus Almas se están poniendo a punto para el maligno, o las oscuridades o el infierno.
Creed que esto es verdad, Mis Hijos. Existe el mal y el que es anticristo [contra Cristo] existe, así como los que ayudan al ángel de la muerte, otrora tan Amados, y (a ellos) les ocasiona gran placer la caída de Mis Amados Hijos. Por lo tanto, Yo os digo, orad. Orad y empezad a Amar a vuestros Hermanos y Hermanas con Corazones honestos y plenos y con compasión. Venid a Mí y seguid lo que Yo acepto y evitad lo que no acepto. No tengáis miedo, Hijos Míos. Cuando estáis Conmigo, evitáis la oscuridad muy fácilmente. Cuando Me prestáis atención o estáis muy atentos a Mí, vuestros ojos miran al Cielo y a la Vida Eterna, y ninguna oscuridad puede apagar vuestra Luz. Cuando vosotros sois Mis Amados y vuestra confianza está totalmente puesta en Mí, esto mortifica o asusta o enfurece al Leviatán y a sus secuaces.
Amadme, a vuestro Señor Dios y Padre. Orad, Hijos Míos, pues la oración previene el mal y convierte lo que es perjudicial en puro polvo. Confiad en que vuestro Señor Dios y Padre escucha y responde todas las oraciones con tanto Amor y afecto. Yo no traigo peso para que Mis Amados Hijos lo carguen, sino que Yo tomo las cargas que os han doblado y llevo su peso felizmente por Mis Amados Hijos. Hijos, recordad todo lo que está escrito, ya que un tiempo llega en el que seréis probados, y vuestra Salvación viene del Hijo de Dios y vuestro Amor por El. Cuando sois Hijos obedientes, cómo me encanta ver vuestros esfuerzos. Anhelo cuidar de vosotros en todos los sentidos y colocar la Luz de Mi Amor dentro de vosotros y de vuestro Corazón.
Alabad el nombre de Jesús, pues Su Amor y Misericordia por vosotros son inconmensurables y Gloriosos. Caminad por Su sendero y conoced la rectitud de la Palabra. Su sendero se ilumina con Su Amor Santo y Entrañable. Con Jesús al frente de vuestra vida, no encontraréis tinieblas que no puedan ser apagadas por la luz. Vosotros no os dejaréis engañar por aquellos que podrían instaros a pecar contra vuestro Señor Dios y Padre. Conocedme íntimamente, Mis Amados Hijos. Sed constantes en la oración y atentos. Yo abro vuestros ojos a Mi Amor y compasión y os doy el poder de discernir lo que es verdaderamente negro y aquello que es verdaderamente blanco. No podéis esperar discernir estas cosas por vuestra propia cuenta, pues la superchería [el que engaña] es vigorosa o fuerte y esperacausar la muerte de las Almas. Por lo tanto, Yo os digo, orad y Yo os traeré discernimiento cuando seáis probados.
Amados Hijos, permaneced cerca de Mí y no os extraviéis. No entréis a una tormenta mal equipados para soportarla. No os detenéis en vuestro trabajo para observar la furia de una tormenta ante vosotros. Así que os digo, no os detengáis en vuestras oraciones a Mí. Oigo a cada una de ellas y son buenas. Amados Hijos, evitad la pretensión y todo lo que os hace jactanciosos. Haced que el sabor de la intolerancia, la avaricia y la glotonería sea amargo a vuestra boca. Encontrad el tesoro de Mi Compasión, conforme vosotros améis y perdonéis con gran e incondicional Misericordia a vuestros Hermanos y Hermanas.
Estoy Enamorado de todos los Hijos de este Mundo y no rechazo a ninguno. Mi Amor es para vosotros, como vuestro Amor es para Mí. Encontrad la verdad en la oración y ataos fuertemente a Mí. Adorad y amad a Mi Hijo Amadísimo, Jesucristo, y no permitáis más que Él tenga que seguir anhelando por vuestro Amor. ¡Dadle vuestro Amor con prodigalidad, excesivamente, y con todo vuestro Corazón! Él atesora vuestro Amor y vuestra atención, tal como Yo atesoro vuestro Amor y atención.
Amados Hijos, orad a Mí y desbloquead o eliminad vuestra confusión. Confiad en Mí, en vuestro Señor Dios y Padre. Mi Amor por vosotros es ilimitado y trato a Mis Amados Hijos con Amor, compasión, amabilidad y afecto. No os perdáis a este Mundo. Orad, Amad y sed fieles a Cristo, vuestro Señor y Gracia Salvadora. No seáis perjudiciales a vuestros Hermanos y Hermanas, pues no hay odio que no destruya, ni ira que no conduzca al pecado.
Amados Hijos, llegará un tiempo en que vuestra fe en Mí será duramente probada. Yo soy vuestra fuerza y y vuestro protector. Confiad en Mí y orad. Orad y Yo pondré Mi Mano sobre vuestra frente y os conduciré correctamente y os guiaré lejos de lo nefasto y vuestra fe en Mí permanecerá sin mancha.
Hijos, preparaos con todo lo que os he dicho. Participad siempre de la Santa Eucaristía, pues la Divinidad inherente a ella es Santísimamente GRANDE y tan insondable para vosotros. Confiad en Mí y Yo os Amo. Confiad en Mí y no careceréis de lo necesario. Dadme vuestro Corazón y cuán preciosos y asombrosos Yo os encuentro. Mi Amor no es templado por condiciones difíciles. Yo lo ofrezco a cada uno de Mis Hijos libremente y GRANDEMENTE. Mi Compasión y Amor son siempre vuestros, Hijos Míos. Orad y encontrad descanso y gloria en Mis respuestas Amorosas. Orad, Hijos Míos, y sabed que la paz de Mi Corazón está dentro del vuestro. Orad, Hijos Míos, y se os otorgará discernimiento. Orad, Mis Hijos, y todo lo que sea perjudicial para vuestra Alma será eliminado o mantenido a raya por Mis Ángeles Celestiales. Amados Hijos, os doy Mi Paz. Paz, Mis Amados. Paz.
Viernes 9 de diciembre 2016 3:06 - 4:00 pm
Padre, me gustaría que todos conocieran Tu Amor. Creo que la gente se sorprendería tanto por lo afectuoso que eres. Como un viejo abuelo dulce. Pero aún tendrías tus dientes. Sé que respondes a las oraciones. Rezo por que todo el Mundo se vuelva a Tu Amor. Simplemente no entiendo por qué la gente está tan enojada contigo. ¡Si tan sólo supieran! ¡Y nunca nadie pensaría que el resto de nosotros estamos locos! Cuando vengas, creo que el Mundo va a ser un hermoso lugar.
Amada Hija, Mi Amor es para todos en este Mundo, pues Yo he creado a cada uno de vosotros con tal prodigio, pasión y Amor. ¿Cómo podría negar Mi Gran Amor a aquellos que Yo he hecho? La respuesta es que no puedo, y por eso espero que Mis Amados Hijos se vuelvan a Mí, no simplemente o sólo en su momento de necesidad, sino todos los días, con todas sus alegrías y tristezas, y con todas las cosas pequeñas que creéis que no son importantes para Mí. Vuestras oraciones son canciones para Mis Oídos y todo el Cielo escucha con ansia y anticipación.
Yo soy el Señor Dios y Mi Voluntad para Mis Amados Hijos es Misericordiosa y Amorosa. Yo soy el Señor Dios y Mi Voluntad para vosotros siempre es correcta, con Mi Amor por vosotros en primer lugar en Mis Respuestas. No tengáis miedo, Hijos Míos. Incluso los animales corren de las tormentas y buscan refugio del granizo y el fuego. Despertad a vuestro Amor por Mí y observad cómo ningún desastre os toca. Yo soy el Corazón del Cielo y busco a cada uno de vosotros para que os unáis a Mí en lo alto de los Hermosos Brazos de Mi Reino. No tenéis que preocuparos por orar con palabras elaboradas y con la dignidad de los sacerdotes. ¡Acepto todas vuestras oraciones con LA MÁS GRANDE alegría! Anhelo escuchar vuestras voces regocijarse en vuestro Amor por Mí.
Amados Hijos, Yo soy vuestro Señor Dios y Padre. Adorad a Mi Amadísimo y Hermoso Hijo, Jesucristo, que tanto anhela vuestras atenciones. Nuestro Amor por vosotros es tan grandioso, tan impresionante, tan GRANDE, que anhelamos derramar Nuestro Amor sobre todos Mis Hijos. Abridme vuestros Corazones, Mis Hijos. No dudéis en pronunciar Mi Nombre. Venid a Mí en todas las cosas, pues vuestro Padre Celestial es feliz con vuestra atención, y Yo busco miraros o velar por vosotros como un Padre Bueno y Amorosísimo.
Vuestros Corazones no sufrirían tanto, y vuestras preocupaciones no parecerían insuperables si vuestro Corazón estuviera completamente puesto en el Mío Propio. Vuestras inquietudes no formarían líneas de preocupación en vuestras frentes, si confiarais en vuestro Señor Dios. Ved, Mis Amados Hijos, todo lo que estoy dispuesto a hacer por vosotros, para que podáis entender aunque sea una fracción mínima de Mi Amor por vosotros.
Oh, Amados Hijos, hay víboras en el medio. Matad a los dragones que vienen hacia vosotros y buscan destruir lo que Yo he construido. Al que ha contaminado lo que es Santo y que mancillará a Mis Amados Hijos con lujuria o lascivia. Él convierte todo lo que alguna vez fue blanco y Santísimo en aquello que es negro y sospechoso. Cuidado, pues las palabras del dragón son escupidas como mentiras y engaños. No sigáis a aquellos que mentirían y deshonrarían el Nombre del Amadísimo Jesucristo. Cuando alguien rechaza o desvía o repudia el tesoro otorgado del Salvador, huid de ellos y cerrad los ojos a su maldad. Si aquellos niegan el Pan que es Cristo, si han escupido sobre su Nombre y lo han maldecido por Su Sacrificio, ¡corred!, Mis Amados Hijos y encerraos en el manto protector de la Santísima Madre y Reina del Cielo. Poned vuestros ojos en Mí, para que no seáis cegados por el engaño, que hace que las cosas aparezcan erróneamente. [aparecen de una manera que engaña o que no es correcta] Lo blanco debe ser blanco y no puede ser negro, como el día sólo puede ser día, como la noche es noche. Tened en cuenta que tales palabras y creencias las usarán los hombres en Mi contra y contra Mi gran Amor por Mis Hijos.
Yo os digo, cuando estéis en medio de todas las tinieblas, llamad a Cristo Jesús, porque Él es la perfección en todo lo que es Santo, Eterno y bueno. Él destrozará al Leviatán, que busca asesinar a Mis Amados Hijos. Las tinieblas son mantenidas a raya por Su pura Santidad y Su Poder Beatífico y Santo. Jesucristo es vuestra Salvación, Hijos Míos. No os apartéis de Él. A cambio, seguid Su Camino, pues éste es justo y verdadero y conduce a Mis Hijos Amados a Mí, a vuestro Santo Dios y Padre.
No seáis tontos [sordos] ante las amenazas de este Mundo. La oscuridad os atraería hacia la impiedad. El Mundo está apenas sin pecado y muchos de Mis Hijos Me han relegado con odio, a su Dios Eterno y Padre siempre Amoroso. Se alejan del Amor de Mi Hijo Amadísimo y eligen ser rastrillados sobre carbones y fuego. Están eligiendo el dolor, las agonías, la oscuridad y el miedo eternos. Sus Almas se están poniendo a punto para el maligno, o las oscuridades o el infierno.
Creed que esto es verdad, Mis Hijos. Existe el mal y el que es anticristo [contra Cristo] existe, así como los que ayudan al ángel de la muerte, otrora tan Amados, y (a ellos) les ocasiona gran placer la caída de Mis Amados Hijos. Por lo tanto, Yo os digo, orad. Orad y empezad a Amar a vuestros Hermanos y Hermanas con Corazones honestos y plenos y con compasión. Venid a Mí y seguid lo que Yo acepto y evitad lo que no acepto. No tengáis miedo, Hijos Míos. Cuando estáis Conmigo, evitáis la oscuridad muy fácilmente. Cuando Me prestáis atención o estáis muy atentos a Mí, vuestros ojos miran al Cielo y a la Vida Eterna, y ninguna oscuridad puede apagar vuestra Luz. Cuando vosotros sois Mis Amados y vuestra confianza está totalmente puesta en Mí, esto mortifica o asusta o enfurece al Leviatán y a sus secuaces.
Amadme, a vuestro Señor Dios y Padre. Orad, Hijos Míos, pues la oración previene el mal y convierte lo que es perjudicial en puro polvo. Confiad en que vuestro Señor Dios y Padre escucha y responde todas las oraciones con tanto Amor y afecto. Yo no traigo peso para que Mis Amados Hijos lo carguen, sino que Yo tomo las cargas que os han doblado y llevo su peso felizmente por Mis Amados Hijos. Hijos, recordad todo lo que está escrito, ya que un tiempo llega en el que seréis probados, y vuestra Salvación viene del Hijo de Dios y vuestro Amor por El. Cuando sois Hijos obedientes, cómo me encanta ver vuestros esfuerzos. Anhelo cuidar de vosotros en todos los sentidos y colocar la Luz de Mi Amor dentro de vosotros y de vuestro Corazón.
Alabad el nombre de Jesús, pues Su Amor y Misericordia por vosotros son inconmensurables y Gloriosos. Caminad por Su sendero y conoced la rectitud de la Palabra. Su sendero se ilumina con Su Amor Santo y Entrañable. Con Jesús al frente de vuestra vida, no encontraréis tinieblas que no puedan ser apagadas por la luz. Vosotros no os dejaréis engañar por aquellos que podrían instaros a pecar contra vuestro Señor Dios y Padre. Conocedme íntimamente, Mis Amados Hijos. Sed constantes en la oración y atentos. Yo abro vuestros ojos a Mi Amor y compasión y os doy el poder de discernir lo que es verdaderamente negro y aquello que es verdaderamente blanco. No podéis esperar discernir estas cosas por vuestra propia cuenta, pues la superchería [el que engaña] es vigorosa o fuerte y esperacausar la muerte de las Almas. Por lo tanto, Yo os digo, orad y Yo os traeré discernimiento cuando seáis probados.
Amados Hijos, permaneced cerca de Mí y no os extraviéis. No entréis a una tormenta mal equipados para soportarla. No os detenéis en vuestro trabajo para observar la furia de una tormenta ante vosotros. Así que os digo, no os detengáis en vuestras oraciones a Mí. Oigo a cada una de ellas y son buenas. Amados Hijos, evitad la pretensión y todo lo que os hace jactanciosos. Haced que el sabor de la intolerancia, la avaricia y la glotonería sea amargo a vuestra boca. Encontrad el tesoro de Mi Compasión, conforme vosotros améis y perdonéis con gran e incondicional Misericordia a vuestros Hermanos y Hermanas.
Estoy Enamorado de todos los Hijos de este Mundo y no rechazo a ninguno. Mi Amor es para vosotros, como vuestro Amor es para Mí. Encontrad la verdad en la oración y ataos fuertemente a Mí. Adorad y amad a Mi Hijo Amadísimo, Jesucristo, y no permitáis más que Él tenga que seguir anhelando por vuestro Amor. ¡Dadle vuestro Amor con prodigalidad, excesivamente, y con todo vuestro Corazón! Él atesora vuestro Amor y vuestra atención, tal como Yo atesoro vuestro Amor y atención.
Amados Hijos, orad a Mí y desbloquead o eliminad vuestra confusión. Confiad en Mí, en vuestro Señor Dios y Padre. Mi Amor por vosotros es ilimitado y trato a Mis Amados Hijos con Amor, compasión, amabilidad y afecto. No os perdáis a este Mundo. Orad, Amad y sed fieles a Cristo, vuestro Señor y Gracia Salvadora. No seáis perjudiciales a vuestros Hermanos y Hermanas, pues no hay odio que no destruya, ni ira que no conduzca al pecado.
Amados Hijos, llegará un tiempo en que vuestra fe en Mí será duramente probada. Yo soy vuestra fuerza y y vuestro protector. Confiad en Mí y orad. Orad y Yo pondré Mi Mano sobre vuestra frente y os conduciré correctamente y os guiaré lejos de lo nefasto y vuestra fe en Mí permanecerá sin mancha.
Hijos, preparaos con todo lo que os he dicho. Participad siempre de la Santa Eucaristía, pues la Divinidad inherente a ella es Santísimamente GRANDE y tan insondable para vosotros. Confiad en Mí y Yo os Amo. Confiad en Mí y no careceréis de lo necesario. Dadme vuestro Corazón y cuán preciosos y asombrosos Yo os encuentro. Mi Amor no es templado por condiciones difíciles. Yo lo ofrezco a cada uno de Mis Hijos libremente y GRANDEMENTE. Mi Compasión y Amor son siempre vuestros, Hijos Míos. Orad y encontrad descanso y gloria en Mis respuestas Amorosas. Orad, Hijos Míos, y sabed que la paz de Mi Corazón está dentro del vuestro. Orad, Hijos Míos, y se os otorgará discernimiento. Orad, Mis Hijos, y todo lo que sea perjudicial para vuestra Alma será eliminado o mantenido a raya por Mis Ángeles Celestiales. Amados Hijos, os doy Mi Paz. Paz, Mis Amados. Paz.

ESTAD TRANQUILOS
Miércoles, 7 de diciembre 2016 3:03 - 3:06 - 3:34 pm
Padre, siento que Tú me estás abrazando a cada momento. Estaba pensando mientras Te visitaba, acerca de que Tú dices que nos hiciste a los humanos a semejanza Tuya. Bueno, mientras oraba, pequeñas luces, como velas con llamas altas anaranjadas, se posaban sobre las cabezas de todos en la misa. Era tan hermoso, y me pregunto, ¿es eso lo que somos? ¿O son nuestras almas de alguna manera? ¿O es el Espíritu Santo diciendo “hola”? Bueno, de cualquier forma, era bonito. Y gracias por Mi “medio-ladrillo”. Oh, y ayúdame a ser más tranquila y más humilde. ¡Soy tan ruidosa!
Amada Hija/Amados Hijos, sois tan agradable(s) para Mí. Como Hijos, no podéis conocer verdaderamente el Amor de vuestro Divino y Santo Padre. Estad tranquilos, Hijos Míos, y orad. Yo busco vuestros Corazones y anhelo vuestro Amor o el Amor de Mis Hijos Amados.
Estad a Mi lado, oh Hijas de Israel. Podéis resistir, pero si apartais vuestra mirada de Mi Santísimo Semblante, así sellaréis vuestros destinos. [Con Dios, podéis soportar cualquier cosa; sin Él, estáis en problemas.] Hijos de Babilonia, vosotros hacéis bien en sufrir. Oh Santos que oráis y Me agradáis tanto, orad, pues vuestros Hermanos y Hermanas están en peligro o no están listos o están amenazados de muerte. Así como el Cordero es llevado a la matanza, así van los Hijos de Sión. Arrepentíos de vuestros caminos, Amados Hijos, pues Israel no permanecerá en pie. Sus paredes se desmoronan y Mis Hijos se arrodillan a los pies de los idólatras. No podéis adorarme y adorar lo que es temporal. No podéis dividir vuestros Corazones por la mitad, dando una parte a este Mundo y la porción menor a Mí, (y) a Cristo Jesús, Mi Hijo y Muy Amado. El Mundo, una vez asumido, toma todo vuestro tiempo y empatía. Por lo tanto, os quedáis sin tiempo para vuestro Señor Dios y Padre, que os Ama más de lo que podáis saber, y os doy Mi Amor, y Yo busco desesperadamente vuestro Amor.
Amados Hijos, no Me rechacéis. Llamo a vuestra puerta con minuciosidad, todos los días, y tan pocos responden. Y tantos Me negáis con regocijo o caéis en tibiezas. Mi Amor es para vosotros, tal como vuestro Amor estaba destinado para Mí, vuestro Señor Dios. Hijitos, venid a Mí por compasión, Misericordia, fuerza y perdón. Yo soy el Señor Dios. Soy un Dios Justo y un Padre Amorosísimo y que perdona. Yo imploro a cada uno de vosotros y no en vano. Venid a Mí, Hijos, y tomad el consuelo y la alegría de Mi Amor.
Amados Hijos, Mi Glorioso y Beatífico Hijo, Cristo Jesús, está ante vosotros o el Mundo ahora. Él está siempre manifiesto o aquí y sólo necesitáis llamarlo en oración llena de adoración. Ánimo, Hijos Amados. El Señor Dios no abandona a Sus Hijos. Seguid a Cristo y cosechad los frutos más dulces en el Cielo. ¡No podéis conocer las alegrías que se presentan ante vosotros! Yo soy el Señor Dios y cómo os adoro, Mis Hijos Pequeños. [¡¡TANTO AMOR!!]
Oh Hijos de la muerte y la violencia, vuestras Almas se encogen con miedo mientras el fuego es arrojado de lo alto. Sabed que Yo estoy presente y guío vuestros Corazones con Mi Amor y Salvación. Hijos, este Mundo es temporal, por lo tanto, ¿qué tenéis que temer? Yo soy el Señor Dios. YO SOY y he sido y lo seré. Yo creo todas las cosas y por lo tanto, Amor lo que he hecho. Yo Amo lo que he creado y por lo tanto, no permitiré que Mis Amadas Creaciones o Hijos se ahoguen o se sofoquen en la confusión o el espanto de la preocupación.
No tengáis miedo de este Mundo, pues éste es transitorio y finito. ¿Por qué debéis temer, como un Hijo del Señor Dios? Yo soy vuestro paciente y Amoroso Padre y no dejo que ningún mal entre en vuestros Corazones, cuando alegráis vuestras Almas al ser Uno Conmigo. Vosotros sois Mis Hijos Benditos de la Luz. No os alejéis de Mí, porque donde hay tinieblas, no habrá Luz, y donde está Mi Luz, las tinieblas desaparecen.
Amados Hijos, creed en Mi Amor o en Mi GRAN Amor por cada uno de vosotros. Si solo pudierais ver o conocer o entender o comprender aunque sea un poco del tamaño y la profundidad de Mi Amor por cada uno de vosotros, seguramente vuestra alegría encendería fuegos en los Corazones de muchos y vuestra confianza en Mi Voluntad sería tan completa o integral. Si tuvierais tan sólo una pequeño semilla de conocimiento, ¡cómo rogaríais para Glorificar Mi Nombre! Lloraríais tan jubilosamente a los pies de Mi Amadísimo Hijo, Jesús, Yahvé, quien es para vosotros, vuestra Salvación y Gloria. A través de Él se os da Vida por toda la eternidad. Ofreced [compartid o dad] vuestro reverente Amor y júbilo a Mi Hijo, pues Cristo anhela vuestro Amor, justo como el Padre tiene sed de vuestro Amor, y lo que dais a Uno, dais al otro y lo que neguéis a uno, así negáis o rechazáis al otro.
Traed alegría a vuestro Amado y Santísimo Señor Dios y Padre. Consideradme como el Primero en vuestra Vida y Amadme sobre todas las cosas. Manteneos lejos de aquellas cosas que os alejan de Mí. Soy el Primero y el Único. Por lo tanto, Yo os digo, no permitáis que este Mundo os aleje u os distraiga de Mí y de Mi Santa Palabra, Cristo. Porque Él es Uno con el Padre y Él le da a cada Hijo nueva Vida, cuando el Amor del Hijo es puro e interminable. Amados Hijos, dadme vuestro Corazón y conoced la paz y Mi Tierno Perdón. [¡¡Tan Amoroso!!] Vosotros sois Mis Hijos Amados, y Mi Mano de Amor y perdón se extiende a vosotros con gozo y con la mayor esperanza.
Amados Hijos, venid a Mí y conoced la paz. Venid a mí y regocijaos en mi GRAN Corazón. Yo te perdonaré, Hijo Mío, y te amo, Hijo Mío. Paz para ti y este día, Yo doy a Mis Hijos paz.
Miércoles, 7 de diciembre 2016 3:03 - 3:06 - 3:34 pm
Padre, siento que Tú me estás abrazando a cada momento. Estaba pensando mientras Te visitaba, acerca de que Tú dices que nos hiciste a los humanos a semejanza Tuya. Bueno, mientras oraba, pequeñas luces, como velas con llamas altas anaranjadas, se posaban sobre las cabezas de todos en la misa. Era tan hermoso, y me pregunto, ¿es eso lo que somos? ¿O son nuestras almas de alguna manera? ¿O es el Espíritu Santo diciendo “hola”? Bueno, de cualquier forma, era bonito. Y gracias por Mi “medio-ladrillo”. Oh, y ayúdame a ser más tranquila y más humilde. ¡Soy tan ruidosa!
Amada Hija/Amados Hijos, sois tan agradable(s) para Mí. Como Hijos, no podéis conocer verdaderamente el Amor de vuestro Divino y Santo Padre. Estad tranquilos, Hijos Míos, y orad. Yo busco vuestros Corazones y anhelo vuestro Amor o el Amor de Mis Hijos Amados.
Estad a Mi lado, oh Hijas de Israel. Podéis resistir, pero si apartais vuestra mirada de Mi Santísimo Semblante, así sellaréis vuestros destinos. [Con Dios, podéis soportar cualquier cosa; sin Él, estáis en problemas.] Hijos de Babilonia, vosotros hacéis bien en sufrir. Oh Santos que oráis y Me agradáis tanto, orad, pues vuestros Hermanos y Hermanas están en peligro o no están listos o están amenazados de muerte. Así como el Cordero es llevado a la matanza, así van los Hijos de Sión. Arrepentíos de vuestros caminos, Amados Hijos, pues Israel no permanecerá en pie. Sus paredes se desmoronan y Mis Hijos se arrodillan a los pies de los idólatras. No podéis adorarme y adorar lo que es temporal. No podéis dividir vuestros Corazones por la mitad, dando una parte a este Mundo y la porción menor a Mí, (y) a Cristo Jesús, Mi Hijo y Muy Amado. El Mundo, una vez asumido, toma todo vuestro tiempo y empatía. Por lo tanto, os quedáis sin tiempo para vuestro Señor Dios y Padre, que os Ama más de lo que podáis saber, y os doy Mi Amor, y Yo busco desesperadamente vuestro Amor.
Amados Hijos, no Me rechacéis. Llamo a vuestra puerta con minuciosidad, todos los días, y tan pocos responden. Y tantos Me negáis con regocijo o caéis en tibiezas. Mi Amor es para vosotros, tal como vuestro Amor estaba destinado para Mí, vuestro Señor Dios. Hijitos, venid a Mí por compasión, Misericordia, fuerza y perdón. Yo soy el Señor Dios. Soy un Dios Justo y un Padre Amorosísimo y que perdona. Yo imploro a cada uno de vosotros y no en vano. Venid a Mí, Hijos, y tomad el consuelo y la alegría de Mi Amor.
Amados Hijos, Mi Glorioso y Beatífico Hijo, Cristo Jesús, está ante vosotros o el Mundo ahora. Él está siempre manifiesto o aquí y sólo necesitáis llamarlo en oración llena de adoración. Ánimo, Hijos Amados. El Señor Dios no abandona a Sus Hijos. Seguid a Cristo y cosechad los frutos más dulces en el Cielo. ¡No podéis conocer las alegrías que se presentan ante vosotros! Yo soy el Señor Dios y cómo os adoro, Mis Hijos Pequeños. [¡¡TANTO AMOR!!]
Oh Hijos de la muerte y la violencia, vuestras Almas se encogen con miedo mientras el fuego es arrojado de lo alto. Sabed que Yo estoy presente y guío vuestros Corazones con Mi Amor y Salvación. Hijos, este Mundo es temporal, por lo tanto, ¿qué tenéis que temer? Yo soy el Señor Dios. YO SOY y he sido y lo seré. Yo creo todas las cosas y por lo tanto, Amor lo que he hecho. Yo Amo lo que he creado y por lo tanto, no permitiré que Mis Amadas Creaciones o Hijos se ahoguen o se sofoquen en la confusión o el espanto de la preocupación.
No tengáis miedo de este Mundo, pues éste es transitorio y finito. ¿Por qué debéis temer, como un Hijo del Señor Dios? Yo soy vuestro paciente y Amoroso Padre y no dejo que ningún mal entre en vuestros Corazones, cuando alegráis vuestras Almas al ser Uno Conmigo. Vosotros sois Mis Hijos Benditos de la Luz. No os alejéis de Mí, porque donde hay tinieblas, no habrá Luz, y donde está Mi Luz, las tinieblas desaparecen.
Amados Hijos, creed en Mi Amor o en Mi GRAN Amor por cada uno de vosotros. Si solo pudierais ver o conocer o entender o comprender aunque sea un poco del tamaño y la profundidad de Mi Amor por cada uno de vosotros, seguramente vuestra alegría encendería fuegos en los Corazones de muchos y vuestra confianza en Mi Voluntad sería tan completa o integral. Si tuvierais tan sólo una pequeño semilla de conocimiento, ¡cómo rogaríais para Glorificar Mi Nombre! Lloraríais tan jubilosamente a los pies de Mi Amadísimo Hijo, Jesús, Yahvé, quien es para vosotros, vuestra Salvación y Gloria. A través de Él se os da Vida por toda la eternidad. Ofreced [compartid o dad] vuestro reverente Amor y júbilo a Mi Hijo, pues Cristo anhela vuestro Amor, justo como el Padre tiene sed de vuestro Amor, y lo que dais a Uno, dais al otro y lo que neguéis a uno, así negáis o rechazáis al otro.
Traed alegría a vuestro Amado y Santísimo Señor Dios y Padre. Consideradme como el Primero en vuestra Vida y Amadme sobre todas las cosas. Manteneos lejos de aquellas cosas que os alejan de Mí. Soy el Primero y el Único. Por lo tanto, Yo os digo, no permitáis que este Mundo os aleje u os distraiga de Mí y de Mi Santa Palabra, Cristo. Porque Él es Uno con el Padre y Él le da a cada Hijo nueva Vida, cuando el Amor del Hijo es puro e interminable. Amados Hijos, dadme vuestro Corazón y conoced la paz y Mi Tierno Perdón. [¡¡Tan Amoroso!!] Vosotros sois Mis Hijos Amados, y Mi Mano de Amor y perdón se extiende a vosotros con gozo y con la mayor esperanza.
Amados Hijos, venid a Mí y conoced la paz. Venid a mí y regocijaos en mi GRAN Corazón. Yo te perdonaré, Hijo Mío, y te amo, Hijo Mío. Paz para ti y este día, Yo doy a Mis Hijos paz.

¡AMOR EXPLOSIVO! (¡Este mensaje era visceral, casi físico en cómo se expresaba Su Amor!)
Jueves, 1 de diciembre 2016 1:11 - 1:48 pm
Oh Hermanos y Hermanas, volveos a Mí en todas las cosas. Vosotros sois Mis Hijos Más Amados y Yo soy vuestro Santo Señor y Padre. No dudéis que la tempestad o prueba vendrá, y Yo os pido u os insto a que prestéis atención a Mis Advertencias. Así como la Santísima Virgen María se preocupa y os pide a cada uno de vosotros, Hijos Míos, que oréis y abráis paso a Mi Hijo Amado, Jesucristo, Señor de todo lo que está arriba, abajo y en medio.
Amados Hijos, sois tan pequeños en vuestros Corazones y entendimiento. [¡Lo dice con tanto afecto!] Mi Amor por vosotros no puede ser cuantificado, pues es Más Grande o más que aquello que es infinito. Asid Mi Amor por vosotros y mantenedme cerca de vuestro Corazón, Hijos Míos, pues ¿cómo puedo conoceros íntimamente si no Me conocéis? Tratadme o visitadme como lo hacéis con un gran amigo.
Ansío por vosotros. Para que compartáis vuestras alegrías conmigo, y vuestros errores, vuestras lágrimas y risas. Anhelo abrazaros, Mis Amados Hijos. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí. No hay mayor Amor que el Mío y Yo espero vuestras peticiones de Misericordia y Amor. Invito a todos Mis Hijos a Mí. Aquellos que se regocijan en Mi invitación, los mantengo cerca de Mi Corazón, porque su fe y Amor por Mí es una cosa Hermosa. Sin embargo, llamo también a Mis Hijos ignorantes y tibios. Llamo a menudo y espero con gran fervor que respondáis.
No permitáis que las tinieblas del pecado os obliguen a ignorarme, a vuestro Dios Más Amoroso. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí. No dudéis que la pecaminosidad engulle vuestra Alma. Es cierto y estoy asombrado o muy consternado cuando Mis Hijos Amados desdeñan el futuro y la historia de sus Almas. [¡Comprendí que eso significaba algo espiritual - y muy alejado de mi alcance!] Amados Hijos, cuando os encerráis lejos de Mí, todo el Cielo gime con lástima y consternación por vosotros o por Mis Hijos. Vosotros sois descarriados, y ¿no pensáis o sentís la condenación que enfrentaréis por vuestra preferencia por todo lo temporal?
Encantadores y Amadísimos Hijos, dejadme ser vuestro Amoroso Progenitor, vuestro Padre, pues Yo cuido de cada uno de vosotros como un buen padre cuida de su hijo. No hay nada que podáis hacer, ningún pecado tan grande que Yo no pueda limpiarlo totalmente con Mi Misericordia y GRAN Amor. Confiad en Mí, vuestro Señor Dios, como un niño o bebé confía en sus padres. Yo os cuidaré y os daré socorro. Voy a llevar las cargas de aflicción, dolor e ira por vosotros y aligerar el peso dentro de vuestros corazones. Yo soy el Señor Dios y no hay nada que podáis hacer que me compela a moverme contra vosotros, Mis Amados Hijos.
Amados Hijos, no pequéis, porque los pecados conducen a las tinieblas y la oscuridad anhela haceros perecer en los fuegos de todo el infierno. No dudéis de la verdad de esto, Mis Hijos. No tengáis miedo, porque cuando me conocéis y me dedicáis vuestro tiempo y vuestra vida, y vuestro Amor por Mí, estaréis a salvo de la ansiedad y lejos del abismo de los pecadores y muertos. [Muerte eterna] Orad, Mis Amados Hijos. Antes de que sepáis o que os deis cuenta de que es el momento, Yo observaré o caminaré entre vosotros para separar la paja de la cosecha. El Hombre será pasado por una criba espiritual, y aquellos que son devotos a Mí, aquellos que adoran y alaban y Aman a Mi Hijo con Corazones llenísimos, no sucumbirán a las tinieblas.
Vosotros debéis realzar vuestras vidas o Corazones o Almas con la oración. Sed constantes en la oración, Mis Hijos. No hay nada que podáis pedir que Yo os lo rechace. Yo doy a Mis Amados Hijos buenos dones y os digo, confiad en Mi Voluntad para vosotros, pues siempre es perfecta. No envío víboras para que muerdan a Mis Hijos y les causen enfermedades. No os doy un vinagre terrible para que lo bebáis. Yo soy vuestro Padre Amoroso y Señor Amoroso. ¿Por qué creéis que quiero lo que es des-Amor o en contra de la Vida o del Alma para Mis Hijos? Confiad en Mí plenamente, Yo os digo, y nunca os hará falta nada.
Contemplad la próxima o vuestra vida en el Cielo y sabed que el rostro de Dios os asombrará (¡ENORMEMENTE! Debido a Su Amor por nosotros - ¡Su Amor nos sorprenderá!) No miento, Hijos Míos. Yo os digo, mantened vuestros ojos en Cristo y renunciad a vuestras preocupaciones temporales y perjudiciales. Amados Míos, poned vuestros Corazones en Mis Manos expectantes. Mi Amor os preserva y Yo os doy tan GRANDE Amor.
Seguid a Cristo Jesús, Mi Hijo Amadísimo y Bendito a quién adoro tanto [Amor explosivo!]. Alejarse de Él es una fuerte o quebrantadora herida a Su Sagrado Corazón. El Cielo se desvanece con Su dolor. Lo que vosotros hacéis o dais al Hijo, así también se le da al Padre. Sabed que esto es cierto: aquellos que ignoran o desprecian a Mi Hijo Más Amado y atento, Cristo Jesús, no gozarán o se regocijarán en la gran luz de la Vida Eterna. Los que son profanos hacia Mi Santo Hijo y se comprometen deliberadamente contra Cristo soportarán o nunca descansarán en un infierno doloroso e infinito. Hay castigos especiales por el pecado, y deseo conservar cada Alma, a cada uno de Mis Amados Hijos. Aborrezco saber cuando un Hijo Amado ha caído a la oscuridad. Me duele Mi Corazón, porque estos Hijos nunca conocerán la Vida Eterna conmigo, el Señor Dios y el Eterno.
Amados Hijos, tomad la mano de Mi Hijo Amado para que Él os guíe en Su sendero de rectitud. Su camino conduce al Reino de los Cielos y a la Gloria de Mi Inmenso e inconmensurable Amor. Orad, y recibís Mi Guía. Orad, y el Espíritu Santo se apropia de vuestras necesidades, y os da sustento. Orad, orad a Mi Hijo Amado y bendecidlo por Su Gran Sacrificio de Vida, para que vosotros pudierais tener Vida Eterna. No ignoréis el regalo de la Nueva Vida, pues no sabéis lo que hacéis a vuestras Almas. A cambio, regocijaos en Mi Amor por vosotros y confiad en Mí plenamente.
Os doy la paz, Hijos Míos. Paz, Amados Hijos y os pido encarecidamente que oréis.
Sed constantes en la oración, Amados Míos y os concedo Mi Paz.
Jueves, 1 de diciembre 2016 1:11 - 1:48 pm
Oh Hermanos y Hermanas, volveos a Mí en todas las cosas. Vosotros sois Mis Hijos Más Amados y Yo soy vuestro Santo Señor y Padre. No dudéis que la tempestad o prueba vendrá, y Yo os pido u os insto a que prestéis atención a Mis Advertencias. Así como la Santísima Virgen María se preocupa y os pide a cada uno de vosotros, Hijos Míos, que oréis y abráis paso a Mi Hijo Amado, Jesucristo, Señor de todo lo que está arriba, abajo y en medio.
Amados Hijos, sois tan pequeños en vuestros Corazones y entendimiento. [¡Lo dice con tanto afecto!] Mi Amor por vosotros no puede ser cuantificado, pues es Más Grande o más que aquello que es infinito. Asid Mi Amor por vosotros y mantenedme cerca de vuestro Corazón, Hijos Míos, pues ¿cómo puedo conoceros íntimamente si no Me conocéis? Tratadme o visitadme como lo hacéis con un gran amigo.
Ansío por vosotros. Para que compartáis vuestras alegrías conmigo, y vuestros errores, vuestras lágrimas y risas. Anhelo abrazaros, Mis Amados Hijos. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí. No hay mayor Amor que el Mío y Yo espero vuestras peticiones de Misericordia y Amor. Invito a todos Mis Hijos a Mí. Aquellos que se regocijan en Mi invitación, los mantengo cerca de Mi Corazón, porque su fe y Amor por Mí es una cosa Hermosa. Sin embargo, llamo también a Mis Hijos ignorantes y tibios. Llamo a menudo y espero con gran fervor que respondáis.
No permitáis que las tinieblas del pecado os obliguen a ignorarme, a vuestro Dios Más Amoroso. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí. No dudéis que la pecaminosidad engulle vuestra Alma. Es cierto y estoy asombrado o muy consternado cuando Mis Hijos Amados desdeñan el futuro y la historia de sus Almas. [¡Comprendí que eso significaba algo espiritual - y muy alejado de mi alcance!] Amados Hijos, cuando os encerráis lejos de Mí, todo el Cielo gime con lástima y consternación por vosotros o por Mis Hijos. Vosotros sois descarriados, y ¿no pensáis o sentís la condenación que enfrentaréis por vuestra preferencia por todo lo temporal?
Encantadores y Amadísimos Hijos, dejadme ser vuestro Amoroso Progenitor, vuestro Padre, pues Yo cuido de cada uno de vosotros como un buen padre cuida de su hijo. No hay nada que podáis hacer, ningún pecado tan grande que Yo no pueda limpiarlo totalmente con Mi Misericordia y GRAN Amor. Confiad en Mí, vuestro Señor Dios, como un niño o bebé confía en sus padres. Yo os cuidaré y os daré socorro. Voy a llevar las cargas de aflicción, dolor e ira por vosotros y aligerar el peso dentro de vuestros corazones. Yo soy el Señor Dios y no hay nada que podáis hacer que me compela a moverme contra vosotros, Mis Amados Hijos.
Amados Hijos, no pequéis, porque los pecados conducen a las tinieblas y la oscuridad anhela haceros perecer en los fuegos de todo el infierno. No dudéis de la verdad de esto, Mis Hijos. No tengáis miedo, porque cuando me conocéis y me dedicáis vuestro tiempo y vuestra vida, y vuestro Amor por Mí, estaréis a salvo de la ansiedad y lejos del abismo de los pecadores y muertos. [Muerte eterna] Orad, Mis Amados Hijos. Antes de que sepáis o que os deis cuenta de que es el momento, Yo observaré o caminaré entre vosotros para separar la paja de la cosecha. El Hombre será pasado por una criba espiritual, y aquellos que son devotos a Mí, aquellos que adoran y alaban y Aman a Mi Hijo con Corazones llenísimos, no sucumbirán a las tinieblas.
Vosotros debéis realzar vuestras vidas o Corazones o Almas con la oración. Sed constantes en la oración, Mis Hijos. No hay nada que podáis pedir que Yo os lo rechace. Yo doy a Mis Amados Hijos buenos dones y os digo, confiad en Mi Voluntad para vosotros, pues siempre es perfecta. No envío víboras para que muerdan a Mis Hijos y les causen enfermedades. No os doy un vinagre terrible para que lo bebáis. Yo soy vuestro Padre Amoroso y Señor Amoroso. ¿Por qué creéis que quiero lo que es des-Amor o en contra de la Vida o del Alma para Mis Hijos? Confiad en Mí plenamente, Yo os digo, y nunca os hará falta nada.
Contemplad la próxima o vuestra vida en el Cielo y sabed que el rostro de Dios os asombrará (¡ENORMEMENTE! Debido a Su Amor por nosotros - ¡Su Amor nos sorprenderá!) No miento, Hijos Míos. Yo os digo, mantened vuestros ojos en Cristo y renunciad a vuestras preocupaciones temporales y perjudiciales. Amados Míos, poned vuestros Corazones en Mis Manos expectantes. Mi Amor os preserva y Yo os doy tan GRANDE Amor.
Seguid a Cristo Jesús, Mi Hijo Amadísimo y Bendito a quién adoro tanto [Amor explosivo!]. Alejarse de Él es una fuerte o quebrantadora herida a Su Sagrado Corazón. El Cielo se desvanece con Su dolor. Lo que vosotros hacéis o dais al Hijo, así también se le da al Padre. Sabed que esto es cierto: aquellos que ignoran o desprecian a Mi Hijo Más Amado y atento, Cristo Jesús, no gozarán o se regocijarán en la gran luz de la Vida Eterna. Los que son profanos hacia Mi Santo Hijo y se comprometen deliberadamente contra Cristo soportarán o nunca descansarán en un infierno doloroso e infinito. Hay castigos especiales por el pecado, y deseo conservar cada Alma, a cada uno de Mis Amados Hijos. Aborrezco saber cuando un Hijo Amado ha caído a la oscuridad. Me duele Mi Corazón, porque estos Hijos nunca conocerán la Vida Eterna conmigo, el Señor Dios y el Eterno.
Amados Hijos, tomad la mano de Mi Hijo Amado para que Él os guíe en Su sendero de rectitud. Su camino conduce al Reino de los Cielos y a la Gloria de Mi Inmenso e inconmensurable Amor. Orad, y recibís Mi Guía. Orad, y el Espíritu Santo se apropia de vuestras necesidades, y os da sustento. Orad, orad a Mi Hijo Amado y bendecidlo por Su Gran Sacrificio de Vida, para que vosotros pudierais tener Vida Eterna. No ignoréis el regalo de la Nueva Vida, pues no sabéis lo que hacéis a vuestras Almas. A cambio, regocijaos en Mi Amor por vosotros y confiad en Mí plenamente.
Os doy la paz, Hijos Míos. Paz, Amados Hijos y os pido encarecidamente que oréis.
Sed constantes en la oración, Amados Míos y os concedo Mi Paz.

¡NUESTRA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA ES LA DEFENSORA MÁS GRANDE DEL HOMBRE!
Lunes, 28 de noviembre de 2016 6:01 - 6:32 pm
Amados Hijos, orad con gran reverencia y profundo Amor cuando invocáis a la Santísima Virgen María. Amados Hijos, ella anhela traeros a ella y bajo la protección de su manto. Amados Hijos, cuando la buscáis, ella os conduce a Mí. Ella es el Amor en la maternidad, así como ella es el Amor en la santidad. Sed amables y reverentes con la Madre más Bendita y benévola. Ella está llena de Amor y afecto por vos y se regocija en vuestras oraciones a ella. Ella intercede o ha intercedido a menudo porque vosotros, Mis Amados Hijos, habéis permanecido fieles a vuestras oraciones. No la hagáis desdichada, pues esto rompe Mi Corazón verla así, así como Mi Corazón se carga de ira cuando ella es insultada o tratada irreverentemente. Ella es la mayor defensora del Hombre y os conduce al camino del Santísimo y Amado Cristo.
Orad, Mis Amados Hijos, pues sabéis lo que viene. No os entretengáis con pensamientos o preocupaciones temerosas, pues Yo llamo a cada uno de Mis Amados Hijos en Mi Propio Tiempo. Podéis encontraros enfrentando el juicio en un año, o diez años, o más. ¿Qué hay que temer cuando estáis en Mis Manos Amorosas? Amados Hijos, no sucumbáis a los males de este mundo. Los pecados son tremendos o enormes / indescriptibles en contenido. Demasiados de Mis Amados Hijos caen en la oscuridad de sus pecados. Muchos de Mis Hijos Amados se alejan de Mí cada día. Esto aflige a Mi Corazón Amoroso y todo el Cielo está destrozado por su des-Amor por Mí.
Amados Hijos, aumentad vuestras oraciones y miradme en todas las cosas. Yo soy la verdad y la luz. Donde Yo estoy, ninguna oscuridad puede entrar. Vaciad vuestros Corazones para que Yo pueda llenaros con Mi Magnífico / GRAN Amor duradero. Permitidme calmar las aprehensiones de vuestras Almas y traer paz a vuestra angustia. Amados Hijos, Yo soy un Padre Amoroso y como un Amoroso y Santo Padre Eterno, Yo veo vuestros pecados. Cuando pecáis, veo sombras proyectadas sobre vuestras Almas. No podéis vivir como si vuestro Padre Eterno fuera simplemente eso. Porque también soy un juez justo y recto y hay consecuencias para el pecado.
Creed que esto es verdad. Cuando el Mundo haya volteado su rostro lejos del Hijo de Dios y cause estragos a las tierras y a los cielos arriba y a las criaturas bajo el mar, así encontrará el Hombre su Alma deficiente. Las montañas se derrumbarán ante el Hombre y la tierra escupirá su destrucción y agitación. Es entonces cuando veréis fuegos corriendo desenfrenados a través de los cielos, como dragones en guerra con los Ángeles. Veréis la lucha, el combate Espiritual de los siglos y os acobardaréis en vuestro gran temor. Entonces el fuego caerá como lluvia sobre el Hombre y la oscuridad se avecinará dolorosamente. Las nubes se desplazarán con turbulencia y todas las criaturas correrán a sus colinas de refugio, pero ninguna sobrevivirá. Todos perecerán.
Amados Hijos, debéis Amarme. No puedo soportar perder un Hijo más al pecado. Estoy consternado y herido y Mi Mayor Deseo es el Amor de vuestros Corazones. Os llamo siempre, sediento de vuestro Amor, esperando pacientemente que vengáis a Mí, a vuestro Santo Padre y Eterno Progenitor que os ama, como ningún otro Amor o satisfacción o GRANDEZA que jamás podáis conocer en la tierra. Mi Amor por cada uno de vosotros es duradero, interminable, ilimitado, fragante, hermosamente GRANDE!
Hijos, confiad en Mí, porque Yo no miento y no rechazo a ningún Hijo que venga a Mí con un Corazón arrepentido. Amados Hijos, os exhorto a orar. Complaced a la Virgen Santísima con vuestras oraciones o en vuestro o el rosario. Ella intercede por el Hombre, y sus intercesiones han mantenido violaciones o desastres y consecuencias enojosas a raya para vosotros. Orad y ella os tomará de vuestra mano y os llevará a Cristo Jesús, que merece todo vuestro Amor, alabanza y adoración. Como con la Reina del Cielo y de la tierra, sed reverentes cuando oréis a Mi Hijo Más Amado. Amadlo con la totalidad (todo) de vuestro Corazón. Él anhela vuestro Amor como yo anhelo vuestro Amor.
Confesad vuestros pecados, porque un corazón penitente es sanado por esto o las admisiones y el Alma se vuelve ansiosa o impaciente de acercarse al Hijo del Hombre y participar de la Santísima y Sagrada Eucaristía. Amados Hijos, no sucumbáis a vuestro orgullo. No seáis indiferentes a Cristo y al GRAN Sacrificio. Él os ha dado nueva Vida para que podáis ver el rostro de Dios. [La impaciencia es en sentido positivo, ¡como cuando un niño está esperando para ir al parque de diversiones!]
No hay ningún tesoro en la tierra que pueda igualar el valor de Mi Inmenso Amor por vosotros, Hijos Míos. No hay ninguna tarea o función o trabajo que sea más esencial o importante (GRANDE!) que el tiempo que elijáis pasarlo Conmigo. Invitadme a vuestros Corazones, Hijos Míos. Yo soy el Señor Dios y Mi Voluntad para vosotros es siempre Amorosa y benigna. Valorad el Sacrificio de Cristo, porque Él ha dado Vida a partir de la Muerte, en Su GRAN Amor por vosotros.
Amados Hijos, continuad orando diariamente, minuciosamente. Os abro Mis Brazos y os doy paz, alivio, gozo y consuelo. Estoy completamente o enteramente lleno de Amor por vosotros, ¡Mis Amados Hijos! [¡Esto fue dicho con tanto afecto!] Yo os digo, por lo tanto, orad y tened la Paz de Mi Amor Eterno en vuestros Corazones y en vuestras mentes. Paz, Mis Amados Hijos. Paz.
Lunes, 28 de noviembre de 2016 6:01 - 6:32 pm
Amados Hijos, orad con gran reverencia y profundo Amor cuando invocáis a la Santísima Virgen María. Amados Hijos, ella anhela traeros a ella y bajo la protección de su manto. Amados Hijos, cuando la buscáis, ella os conduce a Mí. Ella es el Amor en la maternidad, así como ella es el Amor en la santidad. Sed amables y reverentes con la Madre más Bendita y benévola. Ella está llena de Amor y afecto por vos y se regocija en vuestras oraciones a ella. Ella intercede o ha intercedido a menudo porque vosotros, Mis Amados Hijos, habéis permanecido fieles a vuestras oraciones. No la hagáis desdichada, pues esto rompe Mi Corazón verla así, así como Mi Corazón se carga de ira cuando ella es insultada o tratada irreverentemente. Ella es la mayor defensora del Hombre y os conduce al camino del Santísimo y Amado Cristo.
Orad, Mis Amados Hijos, pues sabéis lo que viene. No os entretengáis con pensamientos o preocupaciones temerosas, pues Yo llamo a cada uno de Mis Amados Hijos en Mi Propio Tiempo. Podéis encontraros enfrentando el juicio en un año, o diez años, o más. ¿Qué hay que temer cuando estáis en Mis Manos Amorosas? Amados Hijos, no sucumbáis a los males de este mundo. Los pecados son tremendos o enormes / indescriptibles en contenido. Demasiados de Mis Amados Hijos caen en la oscuridad de sus pecados. Muchos de Mis Hijos Amados se alejan de Mí cada día. Esto aflige a Mi Corazón Amoroso y todo el Cielo está destrozado por su des-Amor por Mí.
Amados Hijos, aumentad vuestras oraciones y miradme en todas las cosas. Yo soy la verdad y la luz. Donde Yo estoy, ninguna oscuridad puede entrar. Vaciad vuestros Corazones para que Yo pueda llenaros con Mi Magnífico / GRAN Amor duradero. Permitidme calmar las aprehensiones de vuestras Almas y traer paz a vuestra angustia. Amados Hijos, Yo soy un Padre Amoroso y como un Amoroso y Santo Padre Eterno, Yo veo vuestros pecados. Cuando pecáis, veo sombras proyectadas sobre vuestras Almas. No podéis vivir como si vuestro Padre Eterno fuera simplemente eso. Porque también soy un juez justo y recto y hay consecuencias para el pecado.
Creed que esto es verdad. Cuando el Mundo haya volteado su rostro lejos del Hijo de Dios y cause estragos a las tierras y a los cielos arriba y a las criaturas bajo el mar, así encontrará el Hombre su Alma deficiente. Las montañas se derrumbarán ante el Hombre y la tierra escupirá su destrucción y agitación. Es entonces cuando veréis fuegos corriendo desenfrenados a través de los cielos, como dragones en guerra con los Ángeles. Veréis la lucha, el combate Espiritual de los siglos y os acobardaréis en vuestro gran temor. Entonces el fuego caerá como lluvia sobre el Hombre y la oscuridad se avecinará dolorosamente. Las nubes se desplazarán con turbulencia y todas las criaturas correrán a sus colinas de refugio, pero ninguna sobrevivirá. Todos perecerán.
Amados Hijos, debéis Amarme. No puedo soportar perder un Hijo más al pecado. Estoy consternado y herido y Mi Mayor Deseo es el Amor de vuestros Corazones. Os llamo siempre, sediento de vuestro Amor, esperando pacientemente que vengáis a Mí, a vuestro Santo Padre y Eterno Progenitor que os ama, como ningún otro Amor o satisfacción o GRANDEZA que jamás podáis conocer en la tierra. Mi Amor por cada uno de vosotros es duradero, interminable, ilimitado, fragante, hermosamente GRANDE!
Hijos, confiad en Mí, porque Yo no miento y no rechazo a ningún Hijo que venga a Mí con un Corazón arrepentido. Amados Hijos, os exhorto a orar. Complaced a la Virgen Santísima con vuestras oraciones o en vuestro o el rosario. Ella intercede por el Hombre, y sus intercesiones han mantenido violaciones o desastres y consecuencias enojosas a raya para vosotros. Orad y ella os tomará de vuestra mano y os llevará a Cristo Jesús, que merece todo vuestro Amor, alabanza y adoración. Como con la Reina del Cielo y de la tierra, sed reverentes cuando oréis a Mi Hijo Más Amado. Amadlo con la totalidad (todo) de vuestro Corazón. Él anhela vuestro Amor como yo anhelo vuestro Amor.
Confesad vuestros pecados, porque un corazón penitente es sanado por esto o las admisiones y el Alma se vuelve ansiosa o impaciente de acercarse al Hijo del Hombre y participar de la Santísima y Sagrada Eucaristía. Amados Hijos, no sucumbáis a vuestro orgullo. No seáis indiferentes a Cristo y al GRAN Sacrificio. Él os ha dado nueva Vida para que podáis ver el rostro de Dios. [La impaciencia es en sentido positivo, ¡como cuando un niño está esperando para ir al parque de diversiones!]
No hay ningún tesoro en la tierra que pueda igualar el valor de Mi Inmenso Amor por vosotros, Hijos Míos. No hay ninguna tarea o función o trabajo que sea más esencial o importante (GRANDE!) que el tiempo que elijáis pasarlo Conmigo. Invitadme a vuestros Corazones, Hijos Míos. Yo soy el Señor Dios y Mi Voluntad para vosotros es siempre Amorosa y benigna. Valorad el Sacrificio de Cristo, porque Él ha dado Vida a partir de la Muerte, en Su GRAN Amor por vosotros.
Amados Hijos, continuad orando diariamente, minuciosamente. Os abro Mis Brazos y os doy paz, alivio, gozo y consuelo. Estoy completamente o enteramente lleno de Amor por vosotros, ¡Mis Amados Hijos! [¡Esto fue dicho con tanto afecto!] Yo os digo, por lo tanto, orad y tened la Paz de Mi Amor Eterno en vuestros Corazones y en vuestras mentes. Paz, Mis Amados Hijos. Paz.

QUÉ PROBLEMA PUEDE PREOCUPAROS, QUE YO NO PUEDA SOLUCIONAR?
Miércoles, 23 de noviembre de 2016 10:44 - 11:26
M¿QUÉ PROBLEMA PUEDE PREOCUPAROS, QUE YO NO PUEDA SOLUCIONAR?
Miércoles, 23 de noviembre de 2016 10:44 - 11:26
Me gusta esa respuesta: que la fe trasciende el conocimiento. ¿Cuán perfecto es esto? ¡Y me di cuenta, Padre, que Tú hiciste a los animales con sonrisas propias! Perros, delfines, leones, incluso jirafas. Supongo que, además de querer la cola de un perro para mostrar amistad, los brazos de un tejón para abrazos, las orejas de un elefante para que yo escuche mejor, un corazón tan grande como el de una vaca (para perdonar más fácilmente), y un pequeño hocico como el de un ratón de campo (para que no abra mi boca demasiado), y la cara sonriente de un delfín. Probablemente yo sería un animal de aspecto divertido, sin embargo, mira lo que hiciste con el ornitorrinco y el pulpo y el perezoso. XO
Amados Hijos, Yo estoy con vosotros siempre y ansío daros Mi Misericordia ilimitada. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí, Mis Pequeños Amados. Buscadme en vuestra hora de necesidad. Yo os protejo y vigilo como un buen padre vigila a un niño. Estoy siempre presente y sólo espero vuestra invitación a vuestro Corazón. Amados Hijos, no sigáis las tentaciones que enfrentáis. Vuestro rechazo a los placeres temporales es una cascada de gozo en Mi Corazón. Rechazad el pecado y Mi Corazón salta con alegría y gran alivio. Mis Amados y Pequeños Hijos, vosotros sois tan pequeños y por lo tanto no podéis comprender las profundidades del daño infligido a vuestras Almas por el pecado. No podéis comprender los perjuicios del pecado.
Yo os digo, a cada uno de vosotros, Hijos Míos, venid a Mí en Mi Gloria y buscad Mi Gran Compasión y perdón. Soy Yo quien os da paz. Soy Yo quien os redime por Mi Hijo Amado, el Señor Jesucristo, a quien Yo os suplico que Améis y adoréis. Él os ha traído Vida de la muerte. Él abre las puertas del Reino de los Cielos al abrir la Misericordia de Su Corazón. Amad a Mi Hijo Amado, pues Él es Mi Más Amado. Ambos languidecemos por vuestro Amor. Buscad Nuestra paz, porque sólo el Único Dios Verdadero os ofrece paz.
Amados Hijos, no disperséis vuestro Amor por los cuatro vientos. Debéis concentrar todo vuestro Amor y toda vuestra atención en Mí y sólo en Mí. Cuando vuestro Amor está disperso, vuestro Amor y fe en Mí se vuelven tibios y cómo Me hiere ver a Mis Hijos tibios caminar por la Vida, sólo vivida a medias o vivida muy poco debido a este estado de tibieza. Buscadme para obtener Amor y Misericordia. Mi Corazón anhela envolveros en Mi Compasión y Amor.
Sabed que Yo perdono a los corazones inquietos y penitentes. No hay nada que Mis Hijos Amados puedan hacer, que Yo no perdone. Cuando me entregáis vuestros corazones, ¡las gracias de Amor y compasión son ENORMES, GRANDES, ASOMBROSAS! Hijos, no os privéis de Mi hermoso don de la Misericordia. Es para vos como Yo soy para vos. Mi Misericordia es abundante y espero que Mis Amados Hijos busquen las grandiosas gracias de este don. Hijos, Cristo adquirió tan GRANDE Misericordia, al permitir que la Muerte lo tomara y Él os dio nuevas vidas, en cuanto Él ascendió a la Vida nueva y Eterna. Oh Hijos desconcertados, buscadme, y Yo os abrazo con los brazos pacientes de vuestro Padre Santo e Indulgente. Yo soy vuestro Padre paciente y Amoroso. Venid a Mí con arrepentimiento en vuestros Corazones y conoced Mi Paz completa.
Amados Hijos, ¿no veis que este acto de gran Misericordia que anhelo daros es un regalo glorioso? ¿Por qué rechazáis Mi invitación al banquete? ¿Por qué guardáis los guijarros que encontráis en la arena y rechazáis el tesoro de oro? ¿Por qué derramáis agua sobre el desierto seco, cuando deberíais saciar vuestra sed? No ignoréis el Don de Mi Misericordia. No rechacéis Mi Amor por vos. Vosotros sanáis por completo por Mi Amor para vos y cuando Me elegís o Me aceptáis, la salud de vuestro Espíritu o Alma es completa.
Sabed esto, Mis Amados Hijos, no soy un Padre entrometido, y aun cuando Yo anhelo profundamente a cada uno de vosotros, espero que vengáis a Mí y a Mi Amor. Esto, Mis Hijos, no es cierto de las tinieblas y el pecado. Las tinieblas os acompañan activamente y resuenan mentiras en vuestros oídos. Por lo tanto, Yo os digo con toda Misericordia y mucho énfasis, cerrad vuestros ojos al pecado cuando os llame. Tapad vuestros oídos firmemente, de manera que vosotros seáis sordos a las tentaciones del pecado y de las tinieblas. Mordeos vuestra lengua, a fin de que evitéis discutir sobre los perjuicios del pecado con aquellos que no están de acuerdo. Así, estaréis a salvo de las asombrosas tinieblas esparcidas por este Mundo.
Vosotros sois Mis Hijos Amados y Yo doy a Mis Hijos regalos buenos y duraderos. Amados Hijos, no os desviéis de vuestro Amor y fe por Mí. Alguna vez vuestras oraciones fueron tan fuertes, pero los primeros brotes de Mi Amor se han desgastado en vosotros, y volvéis a las despreciables preocupaciones de este Mundo. ¿No sabéis o veis que vuestro Padre Amado tiene todo a Su alcance? ¿Qué problema puede preocuparos que Yo no pueda solucionar o reparar?
Yo soy el Señor Dios y soy Poderoso en Mi Amor y justicia. Yo imparto perdón y luz a Mis Hijos Orantes. No os desviéis, Mis Amados, pues cuando os desviáis del camino de Mi Hijo, es cuando estáis en mayor peligro. Vuestras Almas se quedan indefensas y empobrecidas. Amados Hijos, cuánto os Amo y cómo desea Mi Amado y Sagrado Corazón unir a cada uno de vosotros a Mí.
Amados Hijos, ceded en vuestro odio el uno hacia el otro y recurrid a Mí para que os ayude a ablandar vuestros Corazones. Estoy presente en cada Hombre, y Amo a cada Hijo creado por Amor, para el Amor y desde el Amor. Sabed que Yo soy y siempre fui y seré la esencia misma del Amor. No rechacéis al Amor. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí. No hay problemas o conflictos en Mi Amor por vosotros. Mi Amor es incondicional como lo es Mi Gran Misericordia.
Amados Hijos, venid a Mí, antes de que el día se convierta en noche y los cielos se enciendan con fuego. Las tormentas de hoy parecerán pequeñas y manejables, en comparación con las que vienen, pues cuanto más peca este Mundo, mayor será el perjuicio para esta tierra o este mundo. La tierra será levantada o arrasada y los bosques incendiados por los fuegos que provienen de los cielos. Por lo tanto, Yo os digo, Hijos Amados, no os desviéis sino sed fieles y Amorosos hacia Mí.
Extended Mi Amor y Misericordia a vuestros propios Corazones y conceded la paz de vuestro perdón total a aquellos con quienes estéis enojados o deseáis destruir con vuestras palabras o acciones. Mi Misericordia y Amor son vuestros. Compartid estos dones celestiales y santísimos entre vosotros, porque ¿cómo podéis desear recibir Misericordia, sin que vosotros mismos actuéis muy misericordiosamente? Así que Yo os digo, extended la paz del Amor y el perdón entre vosotros.
Amados Hijos, ya es tarde y el Tiempo pasa sigilosamente y vosotros no estáis conscientes. Orad, Hijos Míos. Mantened vuestra fe en Mí. No fracaséis en vuestro Amor y devoción a Mí. Soy feliz de saber de vuestro Amor por Mí y ser abrazado por él. Amados Hijos, procurad limpiar vuestras almas a través de la confesión de vuestros pecados. Es un regalo de paz que se os da. Participad del Santísimo en la Eucaristía, porque las bendiciones que alcanzáis son indescriptibles e innumerables.
Amados Hijos, orad a Mí y Yo os responderé. Yo Amo vuestras oraciones y respondo a cada una, de acuerdo a Mi Sabia y Amorosa Voluntad. Manteneos fieles a Mí y Yo os recompensaré. Perded la fe en Mi Amor y los perjuicios son claros y oscuros. Amados Hijos, orad por los que pronto morirán, pues muchas Almas no están nada preparadas para dirigir su mirada al rostro de Dios. Orad para que las tinieblas en este Mundo sean resistidas por cada uno de Mis Amados Hijos, Sed Mis Amados ejemplos de Amor y fe y Misericordia y alegría por cómo viváis vuestras vidas y cómo os acerquéis a los que os rodean, pues cada uno de vuestros hermanos necesita de vuestra oración.
Amado Hijo, estoy siempre contigo. No te desesperes, sino confía en que tu Padre Amoroso no abandona a Sus Pequeños Hijos, que están tan absortos por las preocupaciones temporales. Ven a Mi Corazón y aumentad vuestra fe en Mí, Hijo, porque eres tú y no Yo quien se ha extraviado del Amor.
Amados Hijos, os doy Mi Amor y paz este día. Paz.
Miércoles, 23 de noviembre de 2016 10:44 - 11:26
M¿QUÉ PROBLEMA PUEDE PREOCUPAROS, QUE YO NO PUEDA SOLUCIONAR?
Miércoles, 23 de noviembre de 2016 10:44 - 11:26
Me gusta esa respuesta: que la fe trasciende el conocimiento. ¿Cuán perfecto es esto? ¡Y me di cuenta, Padre, que Tú hiciste a los animales con sonrisas propias! Perros, delfines, leones, incluso jirafas. Supongo que, además de querer la cola de un perro para mostrar amistad, los brazos de un tejón para abrazos, las orejas de un elefante para que yo escuche mejor, un corazón tan grande como el de una vaca (para perdonar más fácilmente), y un pequeño hocico como el de un ratón de campo (para que no abra mi boca demasiado), y la cara sonriente de un delfín. Probablemente yo sería un animal de aspecto divertido, sin embargo, mira lo que hiciste con el ornitorrinco y el pulpo y el perezoso. XO
Amados Hijos, Yo estoy con vosotros siempre y ansío daros Mi Misericordia ilimitada. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí, Mis Pequeños Amados. Buscadme en vuestra hora de necesidad. Yo os protejo y vigilo como un buen padre vigila a un niño. Estoy siempre presente y sólo espero vuestra invitación a vuestro Corazón. Amados Hijos, no sigáis las tentaciones que enfrentáis. Vuestro rechazo a los placeres temporales es una cascada de gozo en Mi Corazón. Rechazad el pecado y Mi Corazón salta con alegría y gran alivio. Mis Amados y Pequeños Hijos, vosotros sois tan pequeños y por lo tanto no podéis comprender las profundidades del daño infligido a vuestras Almas por el pecado. No podéis comprender los perjuicios del pecado.
Yo os digo, a cada uno de vosotros, Hijos Míos, venid a Mí en Mi Gloria y buscad Mi Gran Compasión y perdón. Soy Yo quien os da paz. Soy Yo quien os redime por Mi Hijo Amado, el Señor Jesucristo, a quien Yo os suplico que Améis y adoréis. Él os ha traído Vida de la muerte. Él abre las puertas del Reino de los Cielos al abrir la Misericordia de Su Corazón. Amad a Mi Hijo Amado, pues Él es Mi Más Amado. Ambos languidecemos por vuestro Amor. Buscad Nuestra paz, porque sólo el Único Dios Verdadero os ofrece paz.
Amados Hijos, no disperséis vuestro Amor por los cuatro vientos. Debéis concentrar todo vuestro Amor y toda vuestra atención en Mí y sólo en Mí. Cuando vuestro Amor está disperso, vuestro Amor y fe en Mí se vuelven tibios y cómo Me hiere ver a Mis Hijos tibios caminar por la Vida, sólo vivida a medias o vivida muy poco debido a este estado de tibieza. Buscadme para obtener Amor y Misericordia. Mi Corazón anhela envolveros en Mi Compasión y Amor.
Sabed que Yo perdono a los corazones inquietos y penitentes. No hay nada que Mis Hijos Amados puedan hacer, que Yo no perdone. Cuando me entregáis vuestros corazones, ¡las gracias de Amor y compasión son ENORMES, GRANDES, ASOMBROSAS! Hijos, no os privéis de Mi hermoso don de la Misericordia. Es para vos como Yo soy para vos. Mi Misericordia es abundante y espero que Mis Amados Hijos busquen las grandiosas gracias de este don. Hijos, Cristo adquirió tan GRANDE Misericordia, al permitir que la Muerte lo tomara y Él os dio nuevas vidas, en cuanto Él ascendió a la Vida nueva y Eterna. Oh Hijos desconcertados, buscadme, y Yo os abrazo con los brazos pacientes de vuestro Padre Santo e Indulgente. Yo soy vuestro Padre paciente y Amoroso. Venid a Mí con arrepentimiento en vuestros Corazones y conoced Mi Paz completa.
Amados Hijos, ¿no veis que este acto de gran Misericordia que anhelo daros es un regalo glorioso? ¿Por qué rechazáis Mi invitación al banquete? ¿Por qué guardáis los guijarros que encontráis en la arena y rechazáis el tesoro de oro? ¿Por qué derramáis agua sobre el desierto seco, cuando deberíais saciar vuestra sed? No ignoréis el Don de Mi Misericordia. No rechacéis Mi Amor por vos. Vosotros sanáis por completo por Mi Amor para vos y cuando Me elegís o Me aceptáis, la salud de vuestro Espíritu o Alma es completa.
Sabed esto, Mis Amados Hijos, no soy un Padre entrometido, y aun cuando Yo anhelo profundamente a cada uno de vosotros, espero que vengáis a Mí y a Mi Amor. Esto, Mis Hijos, no es cierto de las tinieblas y el pecado. Las tinieblas os acompañan activamente y resuenan mentiras en vuestros oídos. Por lo tanto, Yo os digo con toda Misericordia y mucho énfasis, cerrad vuestros ojos al pecado cuando os llame. Tapad vuestros oídos firmemente, de manera que vosotros seáis sordos a las tentaciones del pecado y de las tinieblas. Mordeos vuestra lengua, a fin de que evitéis discutir sobre los perjuicios del pecado con aquellos que no están de acuerdo. Así, estaréis a salvo de las asombrosas tinieblas esparcidas por este Mundo.
Vosotros sois Mis Hijos Amados y Yo doy a Mis Hijos regalos buenos y duraderos. Amados Hijos, no os desviéis de vuestro Amor y fe por Mí. Alguna vez vuestras oraciones fueron tan fuertes, pero los primeros brotes de Mi Amor se han desgastado en vosotros, y volvéis a las despreciables preocupaciones de este Mundo. ¿No sabéis o veis que vuestro Padre Amado tiene todo a Su alcance? ¿Qué problema puede preocuparos que Yo no pueda solucionar o reparar?
Yo soy el Señor Dios y soy Poderoso en Mi Amor y justicia. Yo imparto perdón y luz a Mis Hijos Orantes. No os desviéis, Mis Amados, pues cuando os desviáis del camino de Mi Hijo, es cuando estáis en mayor peligro. Vuestras Almas se quedan indefensas y empobrecidas. Amados Hijos, cuánto os Amo y cómo desea Mi Amado y Sagrado Corazón unir a cada uno de vosotros a Mí.
Amados Hijos, ceded en vuestro odio el uno hacia el otro y recurrid a Mí para que os ayude a ablandar vuestros Corazones. Estoy presente en cada Hombre, y Amo a cada Hijo creado por Amor, para el Amor y desde el Amor. Sabed que Yo soy y siempre fui y seré la esencia misma del Amor. No rechacéis al Amor. Yo soy para vosotros como vosotros sois para Mí. No hay problemas o conflictos en Mi Amor por vosotros. Mi Amor es incondicional como lo es Mi Gran Misericordia.
Amados Hijos, venid a Mí, antes de que el día se convierta en noche y los cielos se enciendan con fuego. Las tormentas de hoy parecerán pequeñas y manejables, en comparación con las que vienen, pues cuanto más peca este Mundo, mayor será el perjuicio para esta tierra o este mundo. La tierra será levantada o arrasada y los bosques incendiados por los fuegos que provienen de los cielos. Por lo tanto, Yo os digo, Hijos Amados, no os desviéis sino sed fieles y Amorosos hacia Mí.
Extended Mi Amor y Misericordia a vuestros propios Corazones y conceded la paz de vuestro perdón total a aquellos con quienes estéis enojados o deseáis destruir con vuestras palabras o acciones. Mi Misericordia y Amor son vuestros. Compartid estos dones celestiales y santísimos entre vosotros, porque ¿cómo podéis desear recibir Misericordia, sin que vosotros mismos actuéis muy misericordiosamente? Así que Yo os digo, extended la paz del Amor y el perdón entre vosotros.
Amados Hijos, ya es tarde y el Tiempo pasa sigilosamente y vosotros no estáis conscientes. Orad, Hijos Míos. Mantened vuestra fe en Mí. No fracaséis en vuestro Amor y devoción a Mí. Soy feliz de saber de vuestro Amor por Mí y ser abrazado por él. Amados Hijos, procurad limpiar vuestras almas a través de la confesión de vuestros pecados. Es un regalo de paz que se os da. Participad del Santísimo en la Eucaristía, porque las bendiciones que alcanzáis son indescriptibles e innumerables.
Amados Hijos, orad a Mí y Yo os responderé. Yo Amo vuestras oraciones y respondo a cada una, de acuerdo a Mi Sabia y Amorosa Voluntad. Manteneos fieles a Mí y Yo os recompensaré. Perded la fe en Mi Amor y los perjuicios son claros y oscuros. Amados Hijos, orad por los que pronto morirán, pues muchas Almas no están nada preparadas para dirigir su mirada al rostro de Dios. Orad para que las tinieblas en este Mundo sean resistidas por cada uno de Mis Amados Hijos, Sed Mis Amados ejemplos de Amor y fe y Misericordia y alegría por cómo viváis vuestras vidas y cómo os acerquéis a los que os rodean, pues cada uno de vuestros hermanos necesita de vuestra oración.
Amado Hijo, estoy siempre contigo. No te desesperes, sino confía en que tu Padre Amoroso no abandona a Sus Pequeños Hijos, que están tan absortos por las preocupaciones temporales. Ven a Mi Corazón y aumentad vuestra fe en Mí, Hijo, porque eres tú y no Yo quien se ha extraviado del Amor.
Amados Hijos, os doy Mi Amor y paz este día. Paz.

DIOS NO NOS ABANDONA
Miércoles, 9 de noviembre de 2016 3:17 AM - 3:56 AM
Padre, quién habría adivinado que hace cuatro años estaba tan en contra de trabajar para Ti, y ahora lo anhelo. ¿Es esta soledad lo que Tú sientes cuando la gente Te abandona?
Amados Hijos, estoy siempre a vuestro lado, Mis Manos sobre vuestros hombros, Mi Cariñoso beso en vuestra frente. Yo soy vuestro gentil y Amoroso Padre y quiero que cada uno de vosotros sepa que sois preciosos para Mí. Vuestros Corazones jóvenes y frágiles no pueden penetrar las gloriosas profundidades de Mi Amor por vosotros. Venid a Mí, Hijos Míos, porque Mi Corazón está lleno de Amor por vosotros. Cómo anhelo por aquellos que Me apartan. ¿Cómo apartáis el Amor de vuestro Creador?
No dudéis nunca de Mi Amor por vosotros, Mis Amados Hijos. Siempre estoy con vosotros y siempre deseo vuestras atenciones. Amados Hijos, sois Míos y cuánto anhelo que digáis lo mismo de Mí, vuestro Amoroso y anhelante Padre. Nunca creáis o penséis que os abandono, Hijos míos. Como he dicho tantas veces o lo he dicho tantas veces (para) que así creáis, Mi Amor es infinito e insondable y no os abandono jamás.
Venid a Mí, oh Hijos de Sión. Los vientos son grandes y vuestras cargas son pesadas. Las nubes nublan vuestra vista y sois cegados por todo lo que encontráis valioso en este Mundo. Poned atención, Mis Amados Hijos, pues las glorias de este Mundo menguan y se marchitan bajo Mi Mirada. Apartad lo que estorba vuestro Amor y servicio a Mí. ¿Acaso no veis el peligro y la desgracia de vuestra idolatría?
Sed uno con vuestro Señor, Dios y Padre, y humillaos a vosotros mismos ante Cristo cuyo Amor todo lo consume. Pedid con todo vuestro corazón que podáis captar las profundidades y la guía de Su Amor. Porque Él es Cristo y Él ha obtenido la Salvación por Su Gran e inmenso Amor para vosotros. Adorad a Cristo como vuestro Salvador y héroe. Él es el cordero, el sacrificio de este Mundo. Amadlo o dadle el Amor, el Amor total dentro de vuestro Corazón que Él tan justamente merece.
Hijos de Sión, no ignoréis Mis Llamados. Vosotros sois mis Hijos Amados e Hijos de antaño que os habéis extraviado. Sabéis lo que Yo vuestro Señor Dios acepto y lo que rechazo. Por lo tanto, ¿por qué rechazáis Mi Gran Amor y guía? ¿No entendéis que Mi Amor anhela penetrar en vuestros Corazones endurecidos? Mi Amor anhela penetrar en vosotros, que estáis perdidos en las tentaciones y asechanzas de este Mundo adúltero.
Venid a Mí, Mis Amados Hijos. Descansad en la seguridad de mi Manto. Os protejo como una madre a sus bebés. Me regocijo en vuestro gozo y lloro en vuestra tristeza. Os ofrezco consuelo, Amor y compasión. Mi Misericordia por vosotros es grande. Sólo necesitáis buscarme. Os ofrezco Mi Amor y perdón con tanta facilidad; sin embargo, muchos de ustedes rechazan Mi Amor.
¿Cómo rechazáis el Amor de vuestro Padre Eterno y Santo Benefactor? ¿No veis la oscuridad de vuestras vidas o hábitos o comportamientos? Yo soy vuestro guía. Yo soy la Verdad. Amor y compasión, Misericordia y perdón. Buscáis conocer aquello de lo que sois salvos, y os digo que es una oscuridad Eterna, forjada con agonías y dolores del mundo Eterno o de la vida Eterna. No es la Vida, sino la nada u oscuridad o indecencia eterna. Me añoraréis en estas tinieblas y vuestras agonías irán aparejadas con vuestro deseo de Mi Amor. La mayor agonía de todas será Mi ausencia Eterna. Hay consecuencias especiales para aquellos que abrazan el pecado tan despreocupadamente. Cuando rechazáis el Amor de vuestro Señor Dios con contundencia, regocijo y conocimiento, cuando negáis la pasión de Cristo Jesús, que salva y reconcilia vuestros Corazones Conmigo, así sufriréis la peor de las tinieblas eternas y rechinaréis vuestros dientes en las agonías de vuestros graves castigos.
Creed Hijos, yo soy un Padre Muy Cariñoso, y sin embargo soy un Dios justo y recto. ¿Acaso debe un progenitor acatar las imprudencias salvajes de un hijo? ¿Recompensará al hijo por sus transgresiones o dejará al hijo que considere las consecuencias de sus errores? Yo no rechazo a ningún pecador. No Me olvido del dolor de vuestros Corazones (no Se aleja de los dolientes). Mi Compasión y Amor y Misericordia son para vosotros. Espero con gran anhelo el Amor de vuestro Corazón. Yo soy vuestro Señor, Dios y Padre. ¿No veis la angustia en Mi Corazón por aquellos Hijos a quienes amo tan entrañablemente y que me han ignorado tan completamente o absolutamente? Mi Corazón llora y sin embargo todavía anhelo por vuestro Amor. Yo no soy un Padre intrusivo, y aunque anhelo tan profundamente por vuestra atención, no aceptaré vuestro Amor forzado, o lo que sea indiferente o tibio en vuestra devoción.
Sois el anhelo de Mi Corazón. ¿Cómo podéis, Hijos Míos, ser tan indiferentes a Mi Amor? ¿Por qué pasáis tanto tiempo ocupándoos con todo lo que es temporal e indigno de vuestra gran preocupación? ¿No consideraréis el estado de vuestra Alma? ¿No os interesaréis por todo lo que es Eterno? Os ofrezco tan grandes dones, no hay comparación con la alegría y satisfacción que tendréis, con lo que se ofrece en este Mundo superficial.
Volveos a Mí, Oh Hijos de Sión. Los vientos soplarán más fuerte y todo lo que era será arrastrado por las arenas y la tierra engullirá lo que sostuvisteis con tanto orgullo. Amados Hijos, Yo soy el Primero y todo y el antes y el después. Yo soy y siempre he sido y no podéis entender la pequeñez de vuestro tiempo. Vosotros sois Mi Más Grande Amor y Mis Amados Hijos. Caminad Conmigo en Mi Gran Amor. Pedid Mi Misericordia y es vuestra. Pedid Mi Perdón, y Mi Corazón se inflama con Mi deseo y disposición de perdonaros, Mis Preciosos Hijos, y os abrazaré en Mis Brazos Amorosos.
Yo soy para vosotros como vosotros sois para mí. Tengo sed de vuestro Amor y cuento los momentos de vuestras alegrías compartidas con vuestro Amoroso y siempre atento Padre y Señor. Estoy aquí para vos, anhelando por vuestro Amor. Venid a Mí en esta hora de apuro. Mirad hacia Mí en las horas de desafío. Sosteneos firmemente a vuestra oración y sabed que Yo escucho vuestros gritos de pesar y dolor, y escucho vuestras peticiones de entendimiento y respondo a todos vuestros deseos, porque Yo soy el Único Dios Verdadero, y no fallo a los Hijos que Aman y adoran a Cristo y al Padre y a todo lo que consume al Espíritu Santo. Tomad la paz que os ofrezco y orad. Mi Paz es para vuestros Corazones anhelantes y yo busco que esto os lleve a Mí. Por lo tanto, Yo os digo, orad y encontrad paz dentro de Mí. Paz, Mis Amados Hijos. Paz.
Miércoles, 9 de noviembre de 2016 3:17 AM - 3:56 AM
Padre, quién habría adivinado que hace cuatro años estaba tan en contra de trabajar para Ti, y ahora lo anhelo. ¿Es esta soledad lo que Tú sientes cuando la gente Te abandona?
Amados Hijos, estoy siempre a vuestro lado, Mis Manos sobre vuestros hombros, Mi Cariñoso beso en vuestra frente. Yo soy vuestro gentil y Amoroso Padre y quiero que cada uno de vosotros sepa que sois preciosos para Mí. Vuestros Corazones jóvenes y frágiles no pueden penetrar las gloriosas profundidades de Mi Amor por vosotros. Venid a Mí, Hijos Míos, porque Mi Corazón está lleno de Amor por vosotros. Cómo anhelo por aquellos que Me apartan. ¿Cómo apartáis el Amor de vuestro Creador?
No dudéis nunca de Mi Amor por vosotros, Mis Amados Hijos. Siempre estoy con vosotros y siempre deseo vuestras atenciones. Amados Hijos, sois Míos y cuánto anhelo que digáis lo mismo de Mí, vuestro Amoroso y anhelante Padre. Nunca creáis o penséis que os abandono, Hijos míos. Como he dicho tantas veces o lo he dicho tantas veces (para) que así creáis, Mi Amor es infinito e insondable y no os abandono jamás.
Venid a Mí, oh Hijos de Sión. Los vientos son grandes y vuestras cargas son pesadas. Las nubes nublan vuestra vista y sois cegados por todo lo que encontráis valioso en este Mundo. Poned atención, Mis Amados Hijos, pues las glorias de este Mundo menguan y se marchitan bajo Mi Mirada. Apartad lo que estorba vuestro Amor y servicio a Mí. ¿Acaso no veis el peligro y la desgracia de vuestra idolatría?
Sed uno con vuestro Señor, Dios y Padre, y humillaos a vosotros mismos ante Cristo cuyo Amor todo lo consume. Pedid con todo vuestro corazón que podáis captar las profundidades y la guía de Su Amor. Porque Él es Cristo y Él ha obtenido la Salvación por Su Gran e inmenso Amor para vosotros. Adorad a Cristo como vuestro Salvador y héroe. Él es el cordero, el sacrificio de este Mundo. Amadlo o dadle el Amor, el Amor total dentro de vuestro Corazón que Él tan justamente merece.
Hijos de Sión, no ignoréis Mis Llamados. Vosotros sois mis Hijos Amados e Hijos de antaño que os habéis extraviado. Sabéis lo que Yo vuestro Señor Dios acepto y lo que rechazo. Por lo tanto, ¿por qué rechazáis Mi Gran Amor y guía? ¿No entendéis que Mi Amor anhela penetrar en vuestros Corazones endurecidos? Mi Amor anhela penetrar en vosotros, que estáis perdidos en las tentaciones y asechanzas de este Mundo adúltero.
Venid a Mí, Mis Amados Hijos. Descansad en la seguridad de mi Manto. Os protejo como una madre a sus bebés. Me regocijo en vuestro gozo y lloro en vuestra tristeza. Os ofrezco consuelo, Amor y compasión. Mi Misericordia por vosotros es grande. Sólo necesitáis buscarme. Os ofrezco Mi Amor y perdón con tanta facilidad; sin embargo, muchos de ustedes rechazan Mi Amor.
¿Cómo rechazáis el Amor de vuestro Padre Eterno y Santo Benefactor? ¿No veis la oscuridad de vuestras vidas o hábitos o comportamientos? Yo soy vuestro guía. Yo soy la Verdad. Amor y compasión, Misericordia y perdón. Buscáis conocer aquello de lo que sois salvos, y os digo que es una oscuridad Eterna, forjada con agonías y dolores del mundo Eterno o de la vida Eterna. No es la Vida, sino la nada u oscuridad o indecencia eterna. Me añoraréis en estas tinieblas y vuestras agonías irán aparejadas con vuestro deseo de Mi Amor. La mayor agonía de todas será Mi ausencia Eterna. Hay consecuencias especiales para aquellos que abrazan el pecado tan despreocupadamente. Cuando rechazáis el Amor de vuestro Señor Dios con contundencia, regocijo y conocimiento, cuando negáis la pasión de Cristo Jesús, que salva y reconcilia vuestros Corazones Conmigo, así sufriréis la peor de las tinieblas eternas y rechinaréis vuestros dientes en las agonías de vuestros graves castigos.
Creed Hijos, yo soy un Padre Muy Cariñoso, y sin embargo soy un Dios justo y recto. ¿Acaso debe un progenitor acatar las imprudencias salvajes de un hijo? ¿Recompensará al hijo por sus transgresiones o dejará al hijo que considere las consecuencias de sus errores? Yo no rechazo a ningún pecador. No Me olvido del dolor de vuestros Corazones (no Se aleja de los dolientes). Mi Compasión y Amor y Misericordia son para vosotros. Espero con gran anhelo el Amor de vuestro Corazón. Yo soy vuestro Señor, Dios y Padre. ¿No veis la angustia en Mi Corazón por aquellos Hijos a quienes amo tan entrañablemente y que me han ignorado tan completamente o absolutamente? Mi Corazón llora y sin embargo todavía anhelo por vuestro Amor. Yo no soy un Padre intrusivo, y aunque anhelo tan profundamente por vuestra atención, no aceptaré vuestro Amor forzado, o lo que sea indiferente o tibio en vuestra devoción.
Sois el anhelo de Mi Corazón. ¿Cómo podéis, Hijos Míos, ser tan indiferentes a Mi Amor? ¿Por qué pasáis tanto tiempo ocupándoos con todo lo que es temporal e indigno de vuestra gran preocupación? ¿No consideraréis el estado de vuestra Alma? ¿No os interesaréis por todo lo que es Eterno? Os ofrezco tan grandes dones, no hay comparación con la alegría y satisfacción que tendréis, con lo que se ofrece en este Mundo superficial.
Volveos a Mí, Oh Hijos de Sión. Los vientos soplarán más fuerte y todo lo que era será arrastrado por las arenas y la tierra engullirá lo que sostuvisteis con tanto orgullo. Amados Hijos, Yo soy el Primero y todo y el antes y el después. Yo soy y siempre he sido y no podéis entender la pequeñez de vuestro tiempo. Vosotros sois Mi Más Grande Amor y Mis Amados Hijos. Caminad Conmigo en Mi Gran Amor. Pedid Mi Misericordia y es vuestra. Pedid Mi Perdón, y Mi Corazón se inflama con Mi deseo y disposición de perdonaros, Mis Preciosos Hijos, y os abrazaré en Mis Brazos Amorosos.
Yo soy para vosotros como vosotros sois para mí. Tengo sed de vuestro Amor y cuento los momentos de vuestras alegrías compartidas con vuestro Amoroso y siempre atento Padre y Señor. Estoy aquí para vos, anhelando por vuestro Amor. Venid a Mí en esta hora de apuro. Mirad hacia Mí en las horas de desafío. Sosteneos firmemente a vuestra oración y sabed que Yo escucho vuestros gritos de pesar y dolor, y escucho vuestras peticiones de entendimiento y respondo a todos vuestros deseos, porque Yo soy el Único Dios Verdadero, y no fallo a los Hijos que Aman y adoran a Cristo y al Padre y a todo lo que consume al Espíritu Santo. Tomad la paz que os ofrezco y orad. Mi Paz es para vuestros Corazones anhelantes y yo busco que esto os lleve a Mí. Por lo tanto, Yo os digo, orad y encontrad paz dentro de Mí. Paz, Mis Amados Hijos. Paz.

OS LLAMO DIARIAMENTE, MINUCIOSAMENTE
Jueves, 20 de octubre 2016
Me dijeron una vez que incluyera mis pensamientos y sentimientos durante estos tiempos, y es divertido. Hoy me has dado verborrea. Tres ladrillazos, (bueno en realidad 4) fueron tirados por uno de Tus lanzamientos de Goose Gossage! [Nota: Goose Gossage fue un lanzador de beisbol de los Yankis de Nueva York)
1. Jesús (según Lucas) no vino aquí para traer paz al Mundo, sino fuego y pasión. La lectura de hoy decía: madre contra padre, hermano contra hermano.... Aquellos que creen contra aquellos que no creen. ¿¿Y acaso no está tan clara esta división en estos días?? Pienso en las mujeres que luchan con sus maridos porque uno u otro no cree en Dios o no quiere tener nada que ver con Él.
2. La fe trasciende el conocimiento. ‘Suficientemente’ dicho. Tengo que compartir esto con un amigo que siempre se vuelve perplejo cuando alguien cuestiona aquí acerca de ser cristiano.
3. Si tuviera que ser acusada y juzgada por ser cristiana, ¿habría suficientes pruebas para condenarme más allá de la duda razonable? ¡Vaya medida ésta, ¿no?!
El Mensaje:
Jueves, 10/20 ... 3:15 - 3:51 pm
Amado Señor, gracias por darme entendimiento.
Amados Hijos, invocadme por Mi Misericordia Infinita, pues vuestros Corazones y Almas deben ser Míos. Mi Amor por vosotros es infinito y sin embargo muchos de Mis Amados Hijos no reconocen a Aquel que los ha creado y que asegura a cada uno de vosotros la alegría y la Gloria de Mi Amor y Perdón.
Amados Hijos, adorad a Mi Amadísimo Hijo, Cristo, cuyo Sacrificio abre el Mundo de la Vida Eterna para vosotros. No os alejéis de este regalo GRANDE, INIMAGINABLE. Sin Mí, hay eterna oscuridad, muerte eterna. Cuando Me Amáis, tenéis Vida Eterna. No vaciléis, Amados Hijos Míos. No dudéis en Amarme o tengáis miedo de Amarme. Mi Amor y compasión son para vosotros. Yo no rechazo a Mis Amados Hijos.
Un Padre que ama a sus Hijos se reconforta al encontrar a uno perdido; un amargado de regreso; un enfermo curado; y uno profano hecho santo de nuevo. Oh Hijos de Mi Luz, daos prisa. ¡Prestad atención! Tomad la Misericordia y la compasión que Yo os doy. ¿Por qué o cómo podéis resistir a Mi Amor?
Confiad en Mí. Yo soy el Amor y todo lo que es, lo he creado y lo que vendrá, lo he creado y vosotros sois Mis Amados Hijos. Vosotros fuisteis creados con Amor, desde el Amor absoluto, y para el Amor. ¿Por qué lucháis y tenéis angustia contra vuestro Más Amoroso Padre, que os quiere acurrucados de una manera segura en Sus Brazos? Me acerco a Mis Amados Hijos. Yo os llamo todos los días, minuciosamente. Añoro que hagáis caso y anhelo vuestro Amor.
Oh Hijos, estoy desconcertado por vuestra falta de Amor a Mi Amado Hijo, el Señor Jesús. Pues Él lo ha dado todo para que pudierais ser salvados en la Vida Eterna. Su regalo no se puede medir. La riqueza temporal y los tesoros que utilizáis para medir vuestras alegrías y penas se mantienen en contra de vuestros Espíritus (almas) y están pensados para impedir que Me busquéis. Estas cosas no tienen el valor que habéis depositado en ellas. Abrid vuestros Corazones. Confiad en vuestro Señor Dios. Confiad profundamente en Mi Hijo. El don que Él os ha ofrecido es mucho mayor, tan inconmensurable, que es una farsa o tontería o ridiculez que lo comparéis con las recompensas mundanas que son tan ordinarias, pero no salen baratas. [Estas cosas nos cuestan nuestras almas.] Pues Mi Divinidad y el Amor de Cristo no tienen límites. Nuestro Amor por vosotros no puede ser abarcado o contenido. ¡Mi Amor por vosotros es abundante, fuerte, grandiosamente GRANDE! Dejadme llenar vuestros Corazones con el Espíritu de la alegría y de la santidad, para que os podáis alejar de las tentaciones del Mundo y sus recompensas sin valor.
Vuestras Almas son tan frágiles, Amados Míos. Tan frágiles como una telaraña, y más frágiles que la risa de un niño. No dañéis vuestras Almas, así como no sofocáis la risa y la alegría de los niños. Amados Hijos, todo el Cielo se alza en alegría cuando uno sólo de Mis Hijos vuelve su Corazón hacia Mí. Oh, Hijos, anhelo por vosotros. Por favor, no me hiráis o no hiráis Mi Corazón al ignorar Mi Gran Amor por vosotros. Clamo a cada uno de vosotros, que Me Améis. Amadme y sólo a Mí, porque yo soy el Señor Dios y lo que se ha hecho, Yo lo he hecho, y (lo que) se hará, Yo lo he hecho.
Hijos sensatos, orad, pues la noche llegará y la luz del día se atenuará rápidamente. Vosotros no podréis encontrar vuestro camino a través de la oscuridad cuando no tenéis luz. Cuando la noche perpetua llegue a los infieles, ¡cómo llorarán y anhelarán por la Luz! Hijos, Mi Luz y Amor está dentro de cada uno de vosotros. Este Mundo busca apagar la Llama Sagrada en vuestro interior. Por lo tanto, Yo os digo, orad Hijos Míos. Orad y Yo escucho vuestras oraciones desesperadas y alegres. Creed, pues Yo respondo a cada oración con todo Mi Gran Amor.
Un buen padre sólo busca el bien y la salud y la alegría para sus Hijos. Yo soy el Señor Dios y Padre Celestial. ¿Y cuánto más Amor y alegría y bondad y salud puedo ejercer para vosotros? Oh, Amados Hijos, Amadme. Ponedme en primer lugar en todas las cosas y nunca os engañaré o haré que os extraviéis. Yo Amo lo que creo y Yo he creado a cada uno de vosotros con Amor y para el Amor y por Amor. ¿Acaso no veis que Mi Amor no es pretencioso, sino paciente?
Venid a Mí, ¡oh Hijos de Israel! Vosotros no tenéis el tiempo para estar en desacuerdo o discutir o debatir sobre los santuarios internos de vuestro conocimiento o lo que creéis, que es simple y temporal. Creed en Mí y apreciad a Mi Hijo Amado. Alabad y adorad a Cristo. Participad del Santísimo, la Eucaristía que es el mismísimo Corazón de Mi Hijo. No podéis imaginar las bendiciones que recibís, y sabed que estáis en plena Comunión con Cristo, cuando participáis de esta bendición. Vosotros estáis dentro de Él, como Él está dentro de vosotros. [! ! ! ]
Oh, Amados Hijos, no seáis testarudos o iracundos. Os traigo Amor y perdón y gran compasión. ¿Por qué no extendéis la mano para recibir tales gracias? ¿Por qué cerráis los ojos a Mi Amor y sin embargo los abrís al pecado? ¿Por qué escucháis las mentiras de la oscuridad y no Mis Llamados de Amor y Misericordia? [Él está tan triste aquí.]
Amados Hijos, orad. No sabéis la desunión que viene. Los templos serán cortados en dos. Las familias se separarán de uno. Las tierras se desconectarán y caerán en el mar. Los fuegos de la tierra caerán del cielo. Dulcísima Sion, tu traición te ha condenado. Serás triturada bajo el peso de tus pecados.
No lloréis, Amados Hijos, sino orad. Orad. Amad. Perdonad. Yo Soy primero y siempre. Por lo tanto Yo os digo, Amadme primero y colocad todas las cosas dentro de vuestra vida delante de Mí, para que podáis ser llevados al sendero recto de vuestro Señor Dios. Orad, Amados Hijos. No podréis discernir la verdad de la mentira, lo blanco de lo negro, si no oráis y recibís el consuelo de Mi Sabiduría. Yo no traiciono a Mis Amados Hijos, sino que arremeto contra los que traicionen a Mis Hijos.
Orad, Amados Hijos, y Yo abriré vuestros ojos para que podáis ver. Amadme, Hijos, y vuestro Amor será correspondido inconmensurablemente. Sabed que Yo deseo a cada uno de vosotros. Amo a cada uno de vosotros tan entrañablemente. Cada uno de vosotros sois preciosos e irremplazables para Mí. Por lo tanto Yo os digo, venid a disfrutar del botín de Mi Gran Amor. Orad siempre, Hijos Míos. Rezad y mirad hacia el sur, donde las aguas no desaparecen. Evitad lo que no es santo. No pequéis, pues hay consecuencias por el pecado. En vuestro Amor por Mí, no pequéis sino que vivid vuestra Vida de una manera que Me agrade, vuestro Señor Dios y Padre Eterno que os ama. Paz, Hijos Míos. Paz y sed Mis Hijos obedientes.
Jueves, 20 de octubre 2016
Me dijeron una vez que incluyera mis pensamientos y sentimientos durante estos tiempos, y es divertido. Hoy me has dado verborrea. Tres ladrillazos, (bueno en realidad 4) fueron tirados por uno de Tus lanzamientos de Goose Gossage! [Nota: Goose Gossage fue un lanzador de beisbol de los Yankis de Nueva York)
1. Jesús (según Lucas) no vino aquí para traer paz al Mundo, sino fuego y pasión. La lectura de hoy decía: madre contra padre, hermano contra hermano.... Aquellos que creen contra aquellos que no creen. ¿¿Y acaso no está tan clara esta división en estos días?? Pienso en las mujeres que luchan con sus maridos porque uno u otro no cree en Dios o no quiere tener nada que ver con Él.
2. La fe trasciende el conocimiento. ‘Suficientemente’ dicho. Tengo que compartir esto con un amigo que siempre se vuelve perplejo cuando alguien cuestiona aquí acerca de ser cristiano.
3. Si tuviera que ser acusada y juzgada por ser cristiana, ¿habría suficientes pruebas para condenarme más allá de la duda razonable? ¡Vaya medida ésta, ¿no?!
El Mensaje:
Jueves, 10/20 ... 3:15 - 3:51 pm
Amado Señor, gracias por darme entendimiento.
Amados Hijos, invocadme por Mi Misericordia Infinita, pues vuestros Corazones y Almas deben ser Míos. Mi Amor por vosotros es infinito y sin embargo muchos de Mis Amados Hijos no reconocen a Aquel que los ha creado y que asegura a cada uno de vosotros la alegría y la Gloria de Mi Amor y Perdón.
Amados Hijos, adorad a Mi Amadísimo Hijo, Cristo, cuyo Sacrificio abre el Mundo de la Vida Eterna para vosotros. No os alejéis de este regalo GRANDE, INIMAGINABLE. Sin Mí, hay eterna oscuridad, muerte eterna. Cuando Me Amáis, tenéis Vida Eterna. No vaciléis, Amados Hijos Míos. No dudéis en Amarme o tengáis miedo de Amarme. Mi Amor y compasión son para vosotros. Yo no rechazo a Mis Amados Hijos.
Un Padre que ama a sus Hijos se reconforta al encontrar a uno perdido; un amargado de regreso; un enfermo curado; y uno profano hecho santo de nuevo. Oh Hijos de Mi Luz, daos prisa. ¡Prestad atención! Tomad la Misericordia y la compasión que Yo os doy. ¿Por qué o cómo podéis resistir a Mi Amor?
Confiad en Mí. Yo soy el Amor y todo lo que es, lo he creado y lo que vendrá, lo he creado y vosotros sois Mis Amados Hijos. Vosotros fuisteis creados con Amor, desde el Amor absoluto, y para el Amor. ¿Por qué lucháis y tenéis angustia contra vuestro Más Amoroso Padre, que os quiere acurrucados de una manera segura en Sus Brazos? Me acerco a Mis Amados Hijos. Yo os llamo todos los días, minuciosamente. Añoro que hagáis caso y anhelo vuestro Amor.
Oh Hijos, estoy desconcertado por vuestra falta de Amor a Mi Amado Hijo, el Señor Jesús. Pues Él lo ha dado todo para que pudierais ser salvados en la Vida Eterna. Su regalo no se puede medir. La riqueza temporal y los tesoros que utilizáis para medir vuestras alegrías y penas se mantienen en contra de vuestros Espíritus (almas) y están pensados para impedir que Me busquéis. Estas cosas no tienen el valor que habéis depositado en ellas. Abrid vuestros Corazones. Confiad en vuestro Señor Dios. Confiad profundamente en Mi Hijo. El don que Él os ha ofrecido es mucho mayor, tan inconmensurable, que es una farsa o tontería o ridiculez que lo comparéis con las recompensas mundanas que son tan ordinarias, pero no salen baratas. [Estas cosas nos cuestan nuestras almas.] Pues Mi Divinidad y el Amor de Cristo no tienen límites. Nuestro Amor por vosotros no puede ser abarcado o contenido. ¡Mi Amor por vosotros es abundante, fuerte, grandiosamente GRANDE! Dejadme llenar vuestros Corazones con el Espíritu de la alegría y de la santidad, para que os podáis alejar de las tentaciones del Mundo y sus recompensas sin valor.
Vuestras Almas son tan frágiles, Amados Míos. Tan frágiles como una telaraña, y más frágiles que la risa de un niño. No dañéis vuestras Almas, así como no sofocáis la risa y la alegría de los niños. Amados Hijos, todo el Cielo se alza en alegría cuando uno sólo de Mis Hijos vuelve su Corazón hacia Mí. Oh, Hijos, anhelo por vosotros. Por favor, no me hiráis o no hiráis Mi Corazón al ignorar Mi Gran Amor por vosotros. Clamo a cada uno de vosotros, que Me Améis. Amadme y sólo a Mí, porque yo soy el Señor Dios y lo que se ha hecho, Yo lo he hecho, y (lo que) se hará, Yo lo he hecho.
Hijos sensatos, orad, pues la noche llegará y la luz del día se atenuará rápidamente. Vosotros no podréis encontrar vuestro camino a través de la oscuridad cuando no tenéis luz. Cuando la noche perpetua llegue a los infieles, ¡cómo llorarán y anhelarán por la Luz! Hijos, Mi Luz y Amor está dentro de cada uno de vosotros. Este Mundo busca apagar la Llama Sagrada en vuestro interior. Por lo tanto, Yo os digo, orad Hijos Míos. Orad y Yo escucho vuestras oraciones desesperadas y alegres. Creed, pues Yo respondo a cada oración con todo Mi Gran Amor.
Un buen padre sólo busca el bien y la salud y la alegría para sus Hijos. Yo soy el Señor Dios y Padre Celestial. ¿Y cuánto más Amor y alegría y bondad y salud puedo ejercer para vosotros? Oh, Amados Hijos, Amadme. Ponedme en primer lugar en todas las cosas y nunca os engañaré o haré que os extraviéis. Yo Amo lo que creo y Yo he creado a cada uno de vosotros con Amor y para el Amor y por Amor. ¿Acaso no veis que Mi Amor no es pretencioso, sino paciente?
Venid a Mí, ¡oh Hijos de Israel! Vosotros no tenéis el tiempo para estar en desacuerdo o discutir o debatir sobre los santuarios internos de vuestro conocimiento o lo que creéis, que es simple y temporal. Creed en Mí y apreciad a Mi Hijo Amado. Alabad y adorad a Cristo. Participad del Santísimo, la Eucaristía que es el mismísimo Corazón de Mi Hijo. No podéis imaginar las bendiciones que recibís, y sabed que estáis en plena Comunión con Cristo, cuando participáis de esta bendición. Vosotros estáis dentro de Él, como Él está dentro de vosotros. [! ! ! ]
Oh, Amados Hijos, no seáis testarudos o iracundos. Os traigo Amor y perdón y gran compasión. ¿Por qué no extendéis la mano para recibir tales gracias? ¿Por qué cerráis los ojos a Mi Amor y sin embargo los abrís al pecado? ¿Por qué escucháis las mentiras de la oscuridad y no Mis Llamados de Amor y Misericordia? [Él está tan triste aquí.]
Amados Hijos, orad. No sabéis la desunión que viene. Los templos serán cortados en dos. Las familias se separarán de uno. Las tierras se desconectarán y caerán en el mar. Los fuegos de la tierra caerán del cielo. Dulcísima Sion, tu traición te ha condenado. Serás triturada bajo el peso de tus pecados.
No lloréis, Amados Hijos, sino orad. Orad. Amad. Perdonad. Yo Soy primero y siempre. Por lo tanto Yo os digo, Amadme primero y colocad todas las cosas dentro de vuestra vida delante de Mí, para que podáis ser llevados al sendero recto de vuestro Señor Dios. Orad, Amados Hijos. No podréis discernir la verdad de la mentira, lo blanco de lo negro, si no oráis y recibís el consuelo de Mi Sabiduría. Yo no traiciono a Mis Amados Hijos, sino que arremeto contra los que traicionen a Mis Hijos.
Orad, Amados Hijos, y Yo abriré vuestros ojos para que podáis ver. Amadme, Hijos, y vuestro Amor será correspondido inconmensurablemente. Sabed que Yo deseo a cada uno de vosotros. Amo a cada uno de vosotros tan entrañablemente. Cada uno de vosotros sois preciosos e irremplazables para Mí. Por lo tanto Yo os digo, venid a disfrutar del botín de Mi Gran Amor. Orad siempre, Hijos Míos. Rezad y mirad hacia el sur, donde las aguas no desaparecen. Evitad lo que no es santo. No pequéis, pues hay consecuencias por el pecado. En vuestro Amor por Mí, no pequéis sino que vivid vuestra Vida de una manera que Me agrade, vuestro Señor Dios y Padre Eterno que os ama. Paz, Hijos Míos. Paz y sed Mis Hijos obedientes.

QUE NUESTRA FE SEA INMUTABLE/QUE VUESTRA FE SEA INMUTABLE
Miércoles, 12 de octubre 2016 las 3:05 - 3:08-15:43
Los perros están llenos de fe, ¿verdad? Ellos no saben a ciencia cierta que su amo está detrás de la puerta giratoria, pero saltarán a través de ella con excitación si su amo los llama. Saltarán a través de éstacon alegría, sin lamenor duda, y con muchísima fe. Pues bien, ¡qué ejemplo! Quiero hacer lo que Mi Señor quiera que yo haga. Por favor, Padre, por favor sé detallado y habla alto.
Oh, Amados Hijos, Mi Gran Misericordia está aquí para vosotros. Dejad que el Gran Amor de vuestro Señor Dios y Padre os atraiga y conduzca a cada uno de vosotros a Mí. Amados Hijos, ¿acaso no podéis ver o entender que sois muy valiosos para Mí? Vosotros soisMis regalos para Mi Precioso y Amado Hijo, Cristo. Él es Jesús, el Hijo de Dios, Mi propio Hijo que os Ama tanto a cada uno de vosotros y que se sacrificó para que no vierais la muerte.
Oh Amados Hijos de Mi Luz, Mis Amados, a quienes adoro con Mi Corazón Amoroso, venid a Mí y a Mi Corazón y conoced las Bendiciones que tengo en espera para vosotros. Seguid a Mi Hijo Amado, porque Él ha marcado una senda clara y Justa para vosotros. Amados Hijos, tened fe y poned vuestra plena confianza en Mi Corazón. No voy a hacer daño a quienes Amo tan bien. Soy un Padre Celestial y Amoroso, y no abandono a Mis Amados Hijos. Anhelo daros los regalos que tengo en espera. Volved vuestros ojos a Mí, vuestro Señor Dios y aumentad vuestra fe en Mí. Que vuestra fe sea inmutable o inamovible o inflexible. Que vuestra fe permanezca como una roca endurecida contra una ladera de montaña. No debéis vacilar en vuestro Amor, en vuestra fe y Confianza en Mí.
Amados Hijos, ¿por qué dudáis de Aquél que os ha creado del Amor, por Amor y para el Amor? No podéis dudar de Aquél a quien pretendéis adorar y Amar. Yo Soy y todo lo que necesitáis viene a través de Mí, vuestro Amoroso Dios y Padre. No envío a Mis Amados Hijos a la guerra sin las espadas para aplastar al Leviatán. No, Amados Hijos. Este Sacrificio ha sido hecho por vosotros, por el Amor de Mi más Bendito y Amado y Querido Hijo, el Señor Cristo. Adorad con todo vuestro Corazón aMi Amado Hijo, Cristo Jesús.
Yo lloro y todo el Cielo permanece sorprendido por el desdeño de los Hijos a quienes Él ama con tanta persistencia. Todo el Cielo se sorprende de que el Hijo de Dios y Su Amor sean desperdiciados por este Mundo temporal. ¿Derramaríais vuestra última botella de agua mientras os preparáis para afrontar el desierto estéril? ¿Liberaríais a vuestro ejército de combatientes y a sus caballos y hombres antes de entrar en batalla? No, Yo os lo digo, pues sólo un insensato desperdiciaría su agua y sólo un insensato desmantelaría su ejército ante el peligro.
Amados Hijos, ¿no veis que ya habéis renunciado a lo que es protector, Amoroso, nutritivo y perdonador? Lloro, pues Mis queridos Hijos no ven y no escuchan el dulce llamado de Mi Corazón y las espléndidas invitaciones que tengo para vosotros, que os traen a Mi puerta o a las puertas del Cielo.
Sabed esto, Mis Hijos, sois de lo más débiles cuando no oráis. Amado Hijo, no debes tomarte un descanso o decaer en tus oraciones, pues eres buscado y el Leviatán tiene sus ojos deformes puestos en ti, porque él sabe que tu Amor por Mí ha florecido hacia una apasionada y Amorosa gracia y que Yo te agracio con el fuego de Mi Amor y el conocimiento del poder en la oración. No decaigas o disminuyas en tu devoción hacia Mí, Hijo. No seas ciego al pecado y a las tribulaciones que este Mundo ha traído sobre sí mismo. No seas sordo a Mis anhelantes llamados de Amor.
Buscad todo lo que Yo os ofrezco, Hijos. Buscad Mi Amor, que siempre está ahí ante vosotros. Entregad el reconocimiento de este Mundo a cambio de traerme alegría por vuestra Amorosa obediencia. Amados Hijos, venid a Mí. Debéis venir a Mí, vuestro Celestial y Eterno Dios, pues debéis buscar Mi Perdón en el ámbito de esta casa temporal. Amados Hijos, descargad vuestros Corazones en llanto y venid a Mí por Paz. Nunca os rechazaré, ni jamás Yo dejaré de amaros.
Yo te digo, Amado y desesperado Hijo, yo soy para tí y eres para Mí. ¿Por qué no confías en Mi Voluntad para tí? ¿Por qué te privas de los dones de tu Padre Amoroso? Permíteme guiar toda tu Vida. Entrégate libremente a Mí y todas las cosas bajo Mi Mano Bendita son tuyas. Yo no dejo que las bestias [animales] desaparezcan ante las tempestades. ¿Por qué deberías temer por tu propia seguridad o bienestar? Veo por tus necesidades, pues yo soy tu Padre Santo y Eterno. Yo seco las lágrimas de tus ojos y creo para ti un Plan Amoroso, para que, si Me das toda tu confianza, ya no tengas que luchar o preocuparte o temer.
Yo te sostengo en Mis Manos Amorosas como el padre de un recién nacido sostiene a su hijo. Yo te sujeto con tanta ternura y Amor y orgullo. Te sostengo, pues eres una criatura pequeña tan preciosa y, con mucho cuidado, Mis Manos con Amor te envuelven y pongo Mi beso de Paz sobre tu frente. [¡¡WOW!! ¡¿Cuán amoroso es eso?!]
Amados Hijos, confiad en Mí. Aumentad vuestra fe en Mí. Cuando llegue la hora oscura, vuestras oraciones os van a proporcionar luz. Y cuando la furia de esta tierra haga erupción violentamente y las llamas caigan del cielo y grandes aullidos dejen sordos a aquellos que han rechazado Mi Amor, tendréis auxilio; y la paz y protección de Mi Amor serán fuertes dentro de vuestros corazones. Por lo tanto, Yo os digo, no esperéis a la oscuridad para encender vuestras lámparas. No esperéis a que llegue la tormenta para cerrar con postigos vuestros hogares. No luchéis contra el dragón sin la fuerza de vuestra espada Celestial de oración.
Sois preciosos para Mí. Yo os extraño. Anhelo escuchar vuestras preocupaciones y vuestros pecados y, por Mi Gran Amor y perdón dispuesto, levantaros de vuestra vergüenza. No es necesario que viváis una Vida de miseria, donde no conozcáis paz alguna y no sintáis ningún Amor. No descartéis el Amor de Cristo, porque Él anhela levantaros. Orad, Amados Míos. El tiempo pasa rápidamente y seréis puestos a elegir en qué devociones pasaréis vuestro tiempo. No os aferréis a fruta amarga que ha pasado de su maduración. No elijáis lo que es transitorio y os trae alegría sólo por un momento. Elegid la Vida Eterna, el Amor, y el profundo perdón de Cristo, vuestro Señor Dios.
Creed en el poder de vuestro Señor Dios. Todas las cosas son posibles a través de Mí. Mantened fuerte vuestra fe en Mí. Confiad en Mí en todas las cosas. Venid a Mí por el perdón y venid a Mí, porMi Grande y rotundo Amor.
Paz, Amados Míos. Paz.
Miércoles, 12 de octubre 2016 las 3:05 - 3:08-15:43
Los perros están llenos de fe, ¿verdad? Ellos no saben a ciencia cierta que su amo está detrás de la puerta giratoria, pero saltarán a través de ella con excitación si su amo los llama. Saltarán a través de éstacon alegría, sin lamenor duda, y con muchísima fe. Pues bien, ¡qué ejemplo! Quiero hacer lo que Mi Señor quiera que yo haga. Por favor, Padre, por favor sé detallado y habla alto.
Oh, Amados Hijos, Mi Gran Misericordia está aquí para vosotros. Dejad que el Gran Amor de vuestro Señor Dios y Padre os atraiga y conduzca a cada uno de vosotros a Mí. Amados Hijos, ¿acaso no podéis ver o entender que sois muy valiosos para Mí? Vosotros soisMis regalos para Mi Precioso y Amado Hijo, Cristo. Él es Jesús, el Hijo de Dios, Mi propio Hijo que os Ama tanto a cada uno de vosotros y que se sacrificó para que no vierais la muerte.
Oh Amados Hijos de Mi Luz, Mis Amados, a quienes adoro con Mi Corazón Amoroso, venid a Mí y a Mi Corazón y conoced las Bendiciones que tengo en espera para vosotros. Seguid a Mi Hijo Amado, porque Él ha marcado una senda clara y Justa para vosotros. Amados Hijos, tened fe y poned vuestra plena confianza en Mi Corazón. No voy a hacer daño a quienes Amo tan bien. Soy un Padre Celestial y Amoroso, y no abandono a Mis Amados Hijos. Anhelo daros los regalos que tengo en espera. Volved vuestros ojos a Mí, vuestro Señor Dios y aumentad vuestra fe en Mí. Que vuestra fe sea inmutable o inamovible o inflexible. Que vuestra fe permanezca como una roca endurecida contra una ladera de montaña. No debéis vacilar en vuestro Amor, en vuestra fe y Confianza en Mí.
Amados Hijos, ¿por qué dudáis de Aquél que os ha creado del Amor, por Amor y para el Amor? No podéis dudar de Aquél a quien pretendéis adorar y Amar. Yo Soy y todo lo que necesitáis viene a través de Mí, vuestro Amoroso Dios y Padre. No envío a Mis Amados Hijos a la guerra sin las espadas para aplastar al Leviatán. No, Amados Hijos. Este Sacrificio ha sido hecho por vosotros, por el Amor de Mi más Bendito y Amado y Querido Hijo, el Señor Cristo. Adorad con todo vuestro Corazón aMi Amado Hijo, Cristo Jesús.
Yo lloro y todo el Cielo permanece sorprendido por el desdeño de los Hijos a quienes Él ama con tanta persistencia. Todo el Cielo se sorprende de que el Hijo de Dios y Su Amor sean desperdiciados por este Mundo temporal. ¿Derramaríais vuestra última botella de agua mientras os preparáis para afrontar el desierto estéril? ¿Liberaríais a vuestro ejército de combatientes y a sus caballos y hombres antes de entrar en batalla? No, Yo os lo digo, pues sólo un insensato desperdiciaría su agua y sólo un insensato desmantelaría su ejército ante el peligro.
Amados Hijos, ¿no veis que ya habéis renunciado a lo que es protector, Amoroso, nutritivo y perdonador? Lloro, pues Mis queridos Hijos no ven y no escuchan el dulce llamado de Mi Corazón y las espléndidas invitaciones que tengo para vosotros, que os traen a Mi puerta o a las puertas del Cielo.
Sabed esto, Mis Hijos, sois de lo más débiles cuando no oráis. Amado Hijo, no debes tomarte un descanso o decaer en tus oraciones, pues eres buscado y el Leviatán tiene sus ojos deformes puestos en ti, porque él sabe que tu Amor por Mí ha florecido hacia una apasionada y Amorosa gracia y que Yo te agracio con el fuego de Mi Amor y el conocimiento del poder en la oración. No decaigas o disminuyas en tu devoción hacia Mí, Hijo. No seas ciego al pecado y a las tribulaciones que este Mundo ha traído sobre sí mismo. No seas sordo a Mis anhelantes llamados de Amor.
Buscad todo lo que Yo os ofrezco, Hijos. Buscad Mi Amor, que siempre está ahí ante vosotros. Entregad el reconocimiento de este Mundo a cambio de traerme alegría por vuestra Amorosa obediencia. Amados Hijos, venid a Mí. Debéis venir a Mí, vuestro Celestial y Eterno Dios, pues debéis buscar Mi Perdón en el ámbito de esta casa temporal. Amados Hijos, descargad vuestros Corazones en llanto y venid a Mí por Paz. Nunca os rechazaré, ni jamás Yo dejaré de amaros.
Yo te digo, Amado y desesperado Hijo, yo soy para tí y eres para Mí. ¿Por qué no confías en Mi Voluntad para tí? ¿Por qué te privas de los dones de tu Padre Amoroso? Permíteme guiar toda tu Vida. Entrégate libremente a Mí y todas las cosas bajo Mi Mano Bendita son tuyas. Yo no dejo que las bestias [animales] desaparezcan ante las tempestades. ¿Por qué deberías temer por tu propia seguridad o bienestar? Veo por tus necesidades, pues yo soy tu Padre Santo y Eterno. Yo seco las lágrimas de tus ojos y creo para ti un Plan Amoroso, para que, si Me das toda tu confianza, ya no tengas que luchar o preocuparte o temer.
Yo te sostengo en Mis Manos Amorosas como el padre de un recién nacido sostiene a su hijo. Yo te sujeto con tanta ternura y Amor y orgullo. Te sostengo, pues eres una criatura pequeña tan preciosa y, con mucho cuidado, Mis Manos con Amor te envuelven y pongo Mi beso de Paz sobre tu frente. [¡¡WOW!! ¡¿Cuán amoroso es eso?!]
Amados Hijos, confiad en Mí. Aumentad vuestra fe en Mí. Cuando llegue la hora oscura, vuestras oraciones os van a proporcionar luz. Y cuando la furia de esta tierra haga erupción violentamente y las llamas caigan del cielo y grandes aullidos dejen sordos a aquellos que han rechazado Mi Amor, tendréis auxilio; y la paz y protección de Mi Amor serán fuertes dentro de vuestros corazones. Por lo tanto, Yo os digo, no esperéis a la oscuridad para encender vuestras lámparas. No esperéis a que llegue la tormenta para cerrar con postigos vuestros hogares. No luchéis contra el dragón sin la fuerza de vuestra espada Celestial de oración.
Sois preciosos para Mí. Yo os extraño. Anhelo escuchar vuestras preocupaciones y vuestros pecados y, por Mi Gran Amor y perdón dispuesto, levantaros de vuestra vergüenza. No es necesario que viváis una Vida de miseria, donde no conozcáis paz alguna y no sintáis ningún Amor. No descartéis el Amor de Cristo, porque Él anhela levantaros. Orad, Amados Míos. El tiempo pasa rápidamente y seréis puestos a elegir en qué devociones pasaréis vuestro tiempo. No os aferréis a fruta amarga que ha pasado de su maduración. No elijáis lo que es transitorio y os trae alegría sólo por un momento. Elegid la Vida Eterna, el Amor, y el profundo perdón de Cristo, vuestro Señor Dios.
Creed en el poder de vuestro Señor Dios. Todas las cosas son posibles a través de Mí. Mantened fuerte vuestra fe en Mí. Confiad en Mí en todas las cosas. Venid a Mí por el perdón y venid a Mí, porMi Grande y rotundo Amor.
Paz, Amados Míos. Paz.

NO IGNORÉIS A JESÚS, PARA NO PERDER LA VIDA ETERNA
Miércoles, 14 de septiembre 2016
“Por una pequeña ganancia, los hombres trabajan y se fatigan, pero poco pensamiento se le da a la pérdida del alma.” – Mi Imitación de Cristo.
¡Espero poder recordar todas las revelaciones que me diste en la Misa y en la Adoración! En primer lugar, mientras Tú cargabas la Cruz, la Verónica secó Tu Rostro. Me imaginé lo fresco y tierno que sentiste su contacto. Cómo su bondad y valentía deben haberte dado un poco de paz y tal vez un poco de alegría en que alguien se preocupara lo suficiente para consolarte. Como ese singular alivio que sentimos cuando alguien nos cuida con delicadeza, con dignidad, cuando estamos enfermos.
Tu humildad, tu completa humildad con la figura de la Cruz.... La Cruz representa nuestro Amor por Ti, nuestro agradecimiento por Tu Sacrificio, y que somos cristianos, quienes expresamos nuestro Amor y nuestra devoción a Ti. Y, sin embargo, en Tus tiempos, ser colgado en una Cruz era para los corruptos de la sociedad – los ladrones y asesinos, y la "mugre". Fue una muerte degradante. Y aquí estás, el Hijo de Dios, que es toda gracia y bondad y gloria, siendo matado en una Cruz. ¿Cómo podemos cualquiera de nosotros quejarnos cuando nos insultan o nos hacen sentir insignificantes? ¿Cómo podemos quejarnos y sentir lástima por nosotros mismos cuando nos excluyen, nos hacen el vacío, nos insultan, y dicen mentiras y calumnias acerca de nosotros? Tú, el Hijo de Dios, que pasaste por todo esto y peor. Te hiciste hombre. ¡Cuánto más humilde esto te hace y cuánto más Amor demuestras, de lo que cualquiera de nosotros alguna vez lo intentamos!
Voy a tratar de “disfrutar” en Tu Nombre, cualquier momento que yo me sienta de esa manera. La sociedad es buena en hacer que las personas se sientan inadecuadas, en verdad. Supongo que muchas de las cosas que Tú me mostraste entraron en mi Corazón y se me han olvidado porque mi cerebro es pequeño. Está bien. Yo quería darte todo mi agradecimiento por lo que me has dado. Por comunicarte conmigo en formas tan simples y hermosas que yo pueda entender. Gracias por la cinta adhesiva y las correas elásticas. Veo la diferencia entre estar cerca de Ti y extraviarse. Estar extraviada lejos de Ti me hizo sentir miserable, intranquila e inquieta. XOXO
11:48-12:21p.m. (33 minutos)
Hijos Preciosos, Yo lanzo Mi Gran Misericordia sobre este Mundo e invito a cada uno de vosotros a Mi Mesa. Vosotros sois Mis Hijos Amados y necesitáis la guía fuerte y santa y correcta de vuestro Padre Bendito. Venid a Mí con arrepentimiento y Amor, y vuestros pecados serán perdonados por Mí. Oh, Hijos Preciosos, sois demasiado pequeños para entender la naturaleza y la fuerza o las bendiciones o la profundidad de Mi Misericordia. Vosotros sois demasiado pequeños para captar el consuelo y alivio que Mi Perdón da a vuestras almas. Aceptad Mi ofrecimiento de Misericordia y venid a Mí, a Vuestro Amado Padre y Señor Dios.
El Rey del Cielo, el Rey de la Gloria os hace señas y anhela por vuestro Amor. Oh, Hijos Pequeños, Amados, dad a Mi Hijo Amado, Jesucristo, la totalidad de vuestro Amor y adoración. Él debe estar siempre en el primerísimo plano de vuestras vidas. Aún no captáis la esencialidad o lo crucial de hacer esto. Hijos, ¿por qué rechazáis al Hijo de Dios y Su Gran Amor por vosotros? El es un Amor tierno y compasivo, y no imparte cargas, sino sólo alegría y redención sobre vosotros. No ignoréis al Salvador del Hombre, para que no perdáis la Vida Eterna.
Amados Hijos, aferraos a vuestras oraciones. Venid a Mí todos los días, pues Yo escucho cada llamado, cada palabra pronunciada a Mí. Escucho vuestras peticiones de Misericorida, de ayuda, por la salud de todo lo que llena vuestros Corazones. Oigo vuestras alabanzas y me prodigo o deleito profusamente en ellas. [Le da una gran alegría a Dios] Hijos, confiad en Mí. Confiad en Mi Voluntad para vosotros. Yo respondo a todas vuestras oraciones con SANTIDAD Y GRAN AMOR extremos. No hago a Mis Hijos a un lado. Estoy impaciente por vuestros Corazones, Mis Hijos. Venid a Mí ahora, mientras que el sol está cálido y la brisa fresca. Atrancad vuestras puertas y ventanas de la tormenta que viene, permaneciendo cerca de Mí, de vuestro Padre Celestial y Señor Dios. Porque Yo he hecho todas las cosas, todos los animales y las plantas. Toda la naturaleza se inclina ante Mi Voluntad y es como un regalo para Mis Amados Hijos.
Los pecados de este Mundo sacuden el núcleo o la salud de este Mundo o este planeta o esta Tierra. [Físicamente, en forma muy literal] Vuestros pecados sacuden los cimientos de la Tierra y nubes de fuego harán erupción desde los cielos. Granizará fuego y los desiertos serán estériles y los jardines más exuberantes se secarán y el Mundo estará en la miseria.
Amados Hijos, elegid la Vida. Elegid la Vida Perpetua y Eterna. Arrepentíos de vuestros pecados y conoced lo que Yo Amo y lo que Yo no aceptaré. Sed fieles a vuestros Corazones, pues el Espíritu Santísimo os habla y os guía justamente, al hablar a vuestros Corazones. Escuchad, pues Él susurra, y orad, para que recibáis discernimiento.
Muchos están a la espera de profetizar erróneamente, para engañar a Mis Amados Hijos, y para haceros aceptar todo lo que es pecado. Ellos serán tan buenos o sorprendentes sofistas, que muchos serán engañados. Serán tan astutos, que muchos creerán que lo que es un pecado devastador no es nada más que la naturaleza del Hombre, después de todo. Que lo blanco no es negro y lo negro no puede ser de color blanco. Mis Hijos, no os dejéis engañar por aquellos que promueven o alientan a que pequéis.
Amados Hijos, escucho vuestras preguntas y dudas o recelos. Yo os digo, ¿cómo podéis saber lo que Me gusta y acepto y lo que Me ofende, lo que no acepto, si no me conocéis? No Me podéis conocer cuando no oráis, cuando estáis perpetuamente ausentes de Mi Casa. No podéis discernir sin las gracias y las poderosas bendiciones dadas a vosotros a través de Mi Hijo Amado, Jesucristo, con el cuerpo y la sangre de la Eucaristía. Si Mis Amados Hijos pudieran comprender, cuando menos en forma ínfima, lo que es recibir un regalo tan GRANDE, cuánto valoraríais a vuestros sacerdotes y buscaríais tener la Santísima Eucaristía en vuestra lengua siempre o diariamente o constantemente. Hijos, por Mi discernimiento, debéis acercaros a Mí, vuestro Señor Dios y Padre Eterno, porque Yo soy el Amor y YO SOY, y todo lo que es ha sido derramado sobre vosotros, por Mi Amor a Mis Creaciones.
Amados Hijos, venid a Mí con Amor y arrepentimiento. Pedid Mi Misericordia Divina y será vuestra. Aliviad vuestros Corazones del pecado y conoced la paz y las bendiciones de Mi Perdón y compasión. Yo soy Amor. Soy vuestro Padre Eterno. ¿Qué Padre no Ama a sus Hijos totalmente o con un corazón que explota? ¿Qué Padre apartaría a un Hijo Amado? Yo no rechazo a ningún Hijo, pues vosotros sois Míos. Vosotros sois para Mí como Yo soy para vos. Fuisteis hechos desde el Amor, para el Amor, con Amor. Satisfaced las exclamaciones de vuestras almas, viniendo a vuestro Señor Dios y Padre. Dejad que os llene con Mi Amor y Mis gracias. Así podréis conocer el perdón, la paz y el alivio del Amor más puro, interminable, inamovible e incondicional. Permitidme traeros consuelo.
Sé que muchos de Mis Hijos viven en el dolor. Veo la ira de este Mundo y os insto a perdonar, así como queréis ser perdonados. Amad, como deseáis ser Amados. Sabed que cada perdón que otorguéis a aquellos que odiaríais, Me trae gran gozo y alegría, y Yo pongo grandes Misericordias y consuelos en vuestros Corazones.
Amad a vuestros Hermanos y Hermanas. No os juzguéis unos a los otros, pues no estáis capacitados para juzgar. Yo soy el Señor justo. En Mi Purísima Perfección, sólo Yo puedo juzgar. ¿Cómo juzgarían Mis Amados Hijos a los muy preciosos Hijos que Yo he creado? No juzguéis, sino Amad. Dad misericordia y compasión a los que sufren por el odio y la ira. Rezadme y Yo os guiaré y pondré la luz de Mi Amor Eterno dentro de vuestros Corazones. Amad, Hijos Míos. Es esencial. Perdonad, Hijos Míos, pues esto también es fundamental para vuestras almas.
Venid a Mí, constantemente y siempre. Renovad vuestro Amor por Mí todos los días. Observad cómo, por vuestras propias oraciones, vuestros Corazones crecen, como también lo hace vuestra comprensión o discernimiento de Mi Voluntad. Orad, Amados Hijos. Orad y confiad en Mi Amor Eterno.
Miércoles, 14 de septiembre 2016
“Por una pequeña ganancia, los hombres trabajan y se fatigan, pero poco pensamiento se le da a la pérdida del alma.” – Mi Imitación de Cristo.
¡Espero poder recordar todas las revelaciones que me diste en la Misa y en la Adoración! En primer lugar, mientras Tú cargabas la Cruz, la Verónica secó Tu Rostro. Me imaginé lo fresco y tierno que sentiste su contacto. Cómo su bondad y valentía deben haberte dado un poco de paz y tal vez un poco de alegría en que alguien se preocupara lo suficiente para consolarte. Como ese singular alivio que sentimos cuando alguien nos cuida con delicadeza, con dignidad, cuando estamos enfermos.
Tu humildad, tu completa humildad con la figura de la Cruz.... La Cruz representa nuestro Amor por Ti, nuestro agradecimiento por Tu Sacrificio, y que somos cristianos, quienes expresamos nuestro Amor y nuestra devoción a Ti. Y, sin embargo, en Tus tiempos, ser colgado en una Cruz era para los corruptos de la sociedad – los ladrones y asesinos, y la "mugre". Fue una muerte degradante. Y aquí estás, el Hijo de Dios, que es toda gracia y bondad y gloria, siendo matado en una Cruz. ¿Cómo podemos cualquiera de nosotros quejarnos cuando nos insultan o nos hacen sentir insignificantes? ¿Cómo podemos quejarnos y sentir lástima por nosotros mismos cuando nos excluyen, nos hacen el vacío, nos insultan, y dicen mentiras y calumnias acerca de nosotros? Tú, el Hijo de Dios, que pasaste por todo esto y peor. Te hiciste hombre. ¡Cuánto más humilde esto te hace y cuánto más Amor demuestras, de lo que cualquiera de nosotros alguna vez lo intentamos!
Voy a tratar de “disfrutar” en Tu Nombre, cualquier momento que yo me sienta de esa manera. La sociedad es buena en hacer que las personas se sientan inadecuadas, en verdad. Supongo que muchas de las cosas que Tú me mostraste entraron en mi Corazón y se me han olvidado porque mi cerebro es pequeño. Está bien. Yo quería darte todo mi agradecimiento por lo que me has dado. Por comunicarte conmigo en formas tan simples y hermosas que yo pueda entender. Gracias por la cinta adhesiva y las correas elásticas. Veo la diferencia entre estar cerca de Ti y extraviarse. Estar extraviada lejos de Ti me hizo sentir miserable, intranquila e inquieta. XOXO
11:48-12:21p.m. (33 minutos)
Hijos Preciosos, Yo lanzo Mi Gran Misericordia sobre este Mundo e invito a cada uno de vosotros a Mi Mesa. Vosotros sois Mis Hijos Amados y necesitáis la guía fuerte y santa y correcta de vuestro Padre Bendito. Venid a Mí con arrepentimiento y Amor, y vuestros pecados serán perdonados por Mí. Oh, Hijos Preciosos, sois demasiado pequeños para entender la naturaleza y la fuerza o las bendiciones o la profundidad de Mi Misericordia. Vosotros sois demasiado pequeños para captar el consuelo y alivio que Mi Perdón da a vuestras almas. Aceptad Mi ofrecimiento de Misericordia y venid a Mí, a Vuestro Amado Padre y Señor Dios.
El Rey del Cielo, el Rey de la Gloria os hace señas y anhela por vuestro Amor. Oh, Hijos Pequeños, Amados, dad a Mi Hijo Amado, Jesucristo, la totalidad de vuestro Amor y adoración. Él debe estar siempre en el primerísimo plano de vuestras vidas. Aún no captáis la esencialidad o lo crucial de hacer esto. Hijos, ¿por qué rechazáis al Hijo de Dios y Su Gran Amor por vosotros? El es un Amor tierno y compasivo, y no imparte cargas, sino sólo alegría y redención sobre vosotros. No ignoréis al Salvador del Hombre, para que no perdáis la Vida Eterna.
Amados Hijos, aferraos a vuestras oraciones. Venid a Mí todos los días, pues Yo escucho cada llamado, cada palabra pronunciada a Mí. Escucho vuestras peticiones de Misericorida, de ayuda, por la salud de todo lo que llena vuestros Corazones. Oigo vuestras alabanzas y me prodigo o deleito profusamente en ellas. [Le da una gran alegría a Dios] Hijos, confiad en Mí. Confiad en Mi Voluntad para vosotros. Yo respondo a todas vuestras oraciones con SANTIDAD Y GRAN AMOR extremos. No hago a Mis Hijos a un lado. Estoy impaciente por vuestros Corazones, Mis Hijos. Venid a Mí ahora, mientras que el sol está cálido y la brisa fresca. Atrancad vuestras puertas y ventanas de la tormenta que viene, permaneciendo cerca de Mí, de vuestro Padre Celestial y Señor Dios. Porque Yo he hecho todas las cosas, todos los animales y las plantas. Toda la naturaleza se inclina ante Mi Voluntad y es como un regalo para Mis Amados Hijos.
Los pecados de este Mundo sacuden el núcleo o la salud de este Mundo o este planeta o esta Tierra. [Físicamente, en forma muy literal] Vuestros pecados sacuden los cimientos de la Tierra y nubes de fuego harán erupción desde los cielos. Granizará fuego y los desiertos serán estériles y los jardines más exuberantes se secarán y el Mundo estará en la miseria.
Amados Hijos, elegid la Vida. Elegid la Vida Perpetua y Eterna. Arrepentíos de vuestros pecados y conoced lo que Yo Amo y lo que Yo no aceptaré. Sed fieles a vuestros Corazones, pues el Espíritu Santísimo os habla y os guía justamente, al hablar a vuestros Corazones. Escuchad, pues Él susurra, y orad, para que recibáis discernimiento.
Muchos están a la espera de profetizar erróneamente, para engañar a Mis Amados Hijos, y para haceros aceptar todo lo que es pecado. Ellos serán tan buenos o sorprendentes sofistas, que muchos serán engañados. Serán tan astutos, que muchos creerán que lo que es un pecado devastador no es nada más que la naturaleza del Hombre, después de todo. Que lo blanco no es negro y lo negro no puede ser de color blanco. Mis Hijos, no os dejéis engañar por aquellos que promueven o alientan a que pequéis.
Amados Hijos, escucho vuestras preguntas y dudas o recelos. Yo os digo, ¿cómo podéis saber lo que Me gusta y acepto y lo que Me ofende, lo que no acepto, si no me conocéis? No Me podéis conocer cuando no oráis, cuando estáis perpetuamente ausentes de Mi Casa. No podéis discernir sin las gracias y las poderosas bendiciones dadas a vosotros a través de Mi Hijo Amado, Jesucristo, con el cuerpo y la sangre de la Eucaristía. Si Mis Amados Hijos pudieran comprender, cuando menos en forma ínfima, lo que es recibir un regalo tan GRANDE, cuánto valoraríais a vuestros sacerdotes y buscaríais tener la Santísima Eucaristía en vuestra lengua siempre o diariamente o constantemente. Hijos, por Mi discernimiento, debéis acercaros a Mí, vuestro Señor Dios y Padre Eterno, porque Yo soy el Amor y YO SOY, y todo lo que es ha sido derramado sobre vosotros, por Mi Amor a Mis Creaciones.
Amados Hijos, venid a Mí con Amor y arrepentimiento. Pedid Mi Misericordia Divina y será vuestra. Aliviad vuestros Corazones del pecado y conoced la paz y las bendiciones de Mi Perdón y compasión. Yo soy Amor. Soy vuestro Padre Eterno. ¿Qué Padre no Ama a sus Hijos totalmente o con un corazón que explota? ¿Qué Padre apartaría a un Hijo Amado? Yo no rechazo a ningún Hijo, pues vosotros sois Míos. Vosotros sois para Mí como Yo soy para vos. Fuisteis hechos desde el Amor, para el Amor, con Amor. Satisfaced las exclamaciones de vuestras almas, viniendo a vuestro Señor Dios y Padre. Dejad que os llene con Mi Amor y Mis gracias. Así podréis conocer el perdón, la paz y el alivio del Amor más puro, interminable, inamovible e incondicional. Permitidme traeros consuelo.
Sé que muchos de Mis Hijos viven en el dolor. Veo la ira de este Mundo y os insto a perdonar, así como queréis ser perdonados. Amad, como deseáis ser Amados. Sabed que cada perdón que otorguéis a aquellos que odiaríais, Me trae gran gozo y alegría, y Yo pongo grandes Misericordias y consuelos en vuestros Corazones.
Amad a vuestros Hermanos y Hermanas. No os juzguéis unos a los otros, pues no estáis capacitados para juzgar. Yo soy el Señor justo. En Mi Purísima Perfección, sólo Yo puedo juzgar. ¿Cómo juzgarían Mis Amados Hijos a los muy preciosos Hijos que Yo he creado? No juzguéis, sino Amad. Dad misericordia y compasión a los que sufren por el odio y la ira. Rezadme y Yo os guiaré y pondré la luz de Mi Amor Eterno dentro de vuestros Corazones. Amad, Hijos Míos. Es esencial. Perdonad, Hijos Míos, pues esto también es fundamental para vuestras almas.
Venid a Mí, constantemente y siempre. Renovad vuestro Amor por Mí todos los días. Observad cómo, por vuestras propias oraciones, vuestros Corazones crecen, como también lo hace vuestra comprensión o discernimiento de Mi Voluntad. Orad, Amados Hijos. Orad y confiad en Mi Amor Eterno.

NUESTRAS ALMAS SON SAGRADAS Y TAN FRÁGILES
Jueves, 08 de septiembre 2016 las 3:05 - 3:21-16:09
Jesús como un ser humano: yo me figuro, Tú debes haber tenido miedo cuando oraste en la roca pidiendo a Nuestro Padre que retirara esta copa, si hubiera sido posible. Y luego, pienso en qué forma se te habrá roto el Corazón al ser traicionado por Judas, aunque quizás Tú sabías que iba a suceder. Y los golpes ... No los querías , pero los anticipaste, dado que Tú estabas tratando con soldados ... la otra cosa que me parece tan humana y tan horrenda y tan esencialmente ligada para Mí a Tu humanidad y Amor singular para nosotros fueron los clavos. ¿Sabías que usarían clavos en lugar de cuerdas, como lo hicieron con los ladrones? Si no lo sabías, ¡qué horrible conocimiento nuevo de la tortura que enfrentaste! ... Mi Corazón está tan espantado por la imagen de los soldados martillando esos clavos. Cuando pienso en ello, siento como mi propia alma aúlla por Ti Así que tal vez, así fue - las Almas y el Amor de los que amaban y Te Amaban dieron alaridos de dolor por Ti, mientras Tú sufrías. Ojalá yo hubiera sido como Verónica. Espero que hubiera sido amable y lo suficientemente valiente para tratar de llevarte algún consuelo, mientras soportabas todo por nosotros. De todos modos quería decirte ¡gracias! No sólo por guiarme y salvarme al soportar este tipo de cosas terribles, sino también por hacerte a Ti mismo humano, pues Tú sabías que esa sería la única manera en que el Hombre podría entender, aunque remotamente, Tu orientación y el Amor de Nuestro Padre por nosotros. Lo que Él quiere de nosotros y para nosotros. Y nosotros AUN lo entendemos mal! Así que gracias por mostrarme que Tú te ríes y sientes alegría. Que eres juguetón y cariñoso. Que Tú conoces el miedo y el dolor de la muerte. Que Tú eres generoso, sabio, y lleno de perdón. Que eres compasivo y tienes un gran Amor para Tu Madre :-). Que Tú sentiste ira y dolor. Que Tú nos mostraste lo que realmente es la humildad, y el perdón y la rectitud. Te veo y veo esas cualidades todos los días en los demás, y sin embargo, nunca somos perfectos. Veo que a veces nosotros seguimos y nos comportamos a Tu imagen. El Espíritu Santo guía (o estimula) nuestras Almas a la bondad, la generosidad, la compasión, el Amor ... .xoxoxox
3:21-4:09 pm
Oh, Amados Hijos, adorad al que contempláis en la Santísima Cruz, pues él es Mi Hijo Amado, y por vuestro Amor y adoración hacia Él, Mi Corazón se alegra. Amados Hijos, no tienen mucho tiempo para elegir. ¿No veis los regalos que os doy a vosotros? ¿No oís Mis llamados?
No ignoréis las advertencias de una gran tormenta, pero preparaos antes de que golpee o aterrice. ¿Por qué desearíais ser barridos o muertos cuando, con la previsión y planificación, viviríais a través de la tormenta con seguridad y calidez? Oh Hijos, ¡oídme! a vuestro Amado Señor Dios y Padre. No esperéis. No seáis frívolos con vuestro tiempo. Buscad Mi Misericordia y el perdón, pues ellos son vuestros para que los toméis. Ellos son el tesoro de vuestras Almas, y sin embargo, muchos de Mis Hijos están tan pobres y hambrientos dentro de este Mundo. Las Almas de Mis Amados Hijos padecen hambre por falta de santidad y de la oración.
El fruto de un árbol no puede ser cosechado si el árbol no tiene agua o no se ha regado abundantemente. Cuando, vosotros, Mis Hijos, no os dedicáis devotamente a Mí, a vuestro Señor Dios, que os Ama, vosotros estáis privados de todo lo que es de Mí. ¿Por qué buscáis las tinieblas en lugar de la Luz? ¿Por qué corrompéis lo que es bueno con lo que es terrible? Vuestros ojos se cierran a la comprensión ya que a vuestras Almas no se les da alimento. Y cuando un árbol está escaso de agua, no prospera, sino que muere. Venid a Mí por el Amor y la compasión y dad socorro a vuestras Almas.
Vuestro Padre Celestial ama a cada uno de Sus / Mis Hijos tan bien, Yo nunca os dejaré morir de hambre. Venid a Mí, Mis bellos Hijos, y disfrutad de Mi Abrumador Amor. No dudéis, por el contrario, confiad en Mí. Yo os llevo a la Verdad, el Amor y la rectitud. Evitad las tentaciones y reconocimientos de este Mundo, Mis Hijos. Estas son sólo cosas temporales o regalos y no hacen nada por vuestras Almas. Mis Amados Hijos, sabed que vuestras Almas son sagradas y tan frágiles. No podéis someter a vuestras Almas al pecado sin su devastación, y esta devastación suena fuertemente, como un lamento en Mi Corazón.
Amados Hijos, volved a Jesucristo, que es Mi Hijo Amado. Él os ha salvado para la Perpetuidad o la Vida Eterna con Amor. Tan solo hay que elegir el Amor (Dios). Elegid a la Luz. Elegid a Cristo que está tan enamorado de cada uno de vosotros. Rendid culto y adoración a Jesucristo, porque Él es la verdad y la Palabra. Al colocar el Señor Dios en el primer plano [como prioridad] de vuestras vidas, ¡qué bendecidos sois vosotros y que saludables son vuestras Almas! No soy una carga y Mi Perdón es un regalo comprado por Mi Santo y Amadísimo Hijo. ¿Quién os puede decir que os Ama más entrañablemente y más profundamente que el Eterno, que os ha creado para el Amor, del Amor y con Amor? [Y Dios ha dicho que Él es Amor].
Amados Hijos, no os extraviéis. Ni siquiera por un momento, no os alejéis de Mi Amor. Vosotros no conocéis la hora a la que os llamaré. No conocéis las devastaciones del pecado sobre vuestras Almas. Por lo tanto Yo os digo, reparad vuestras frágiles Almas mediante Mi búsqueda y aceptando con todos vuestros Corazones Mi Amor y Misericordia y Mis Gracias. Mi Corazón es insondablemente GRANDE, inmenso, y no podéis entender Mi Gran Capacidad de Amor y por lo tanto para perdonar. La Misericordia es vuestra, Mis Hijos. Tomad esta gloriosa recompensa que Yo pongo ante vos, con entusiasmo y agradecimiento. Venid a Mí con Corazones humildes, arrepentidos, Amorosos y Yo os abrazo fuertemente con Mi Gran Amor.
Recorred el camino del Amor que Cristo ha puesto ante vos y honrad Su Gran Sacrificio con todos vuestros Corazones. Expresadle vuestro Amor, agradecimiento y alabanzas llenas de adoración. Él es el Amor perfecto y Él es Mi Amadísimo Hijo, Cristo. Cuando Lo herís con vuestra indiferencia, vos Me herís, pues Yo soy Su Padre Amoroso, y lo que le suceda a Él me acontece a Mí. Cuando alabáis al Hijo, así también alabáis al Padre, y la alegría en el Cielo es grandiosa o grande [como un espectacular santo!]. Cuando ignoráis a Mi Hijo, todo el Cielo se sorprende por la necedad de este Mundo, la indiferencia o falta de respeto o tanto anti-Amor. [Anti-Amor es todo lo contrario al Amor, o lo que es del anti-Cristo.]
Cristo ha dado a cada uno de vosotros un regalo resplandeciente y precioso. La Vida Eterna es demasiado grande para que lo entiendan vuestras pequeñas Almas. Tampoco no captáis lo terrible de una eternidad sin Mí. Porque Yo soy el Amor y sin Amor, vos sois separados (de Él ... y puestos en ...) en tormentos y sufrimientos. No dejéis de creer que los pecados son perjudiciales. Hay sufrimientos especiales o consecuencias o castigos, para aquellos que caen en el pecado e ignoran a Cristo. Oh, Amados Hijos, no cometáis este acto de no-Amor. Vosotros no conocéis el horror de lo que hacéis. Implorad Mi Amor y ataos vosotros mismos a la Gloria de Mi Hijo Amado! Él ha dado a cada uno de vosotros el camino a la Vida Eterna.
Amados Hijos, creed que vuestro Amado Señor Dios y Padre os da buenos regalos y no os guía al jardín de las víboras, sino a las Glorias del Amor. No esperéis, Mis Hijos. Confiad en Mi Amor y elegidme. Elegid la Redención, el perdón y la Misericordia. Oh Hijos, Mi Misericordia es tan GRANDE, e incondicional! Solo necesitáis venir a Mí, y ¡cómo Mi Corazón Amoroso se deleita en vuestro Amor!
Venid a Mí, Hijos y mostrad que vuestro Amor no ha necesitado incitación, destrucción, o condiciones. Venid a Mí libremente, por el Amor puro de vuestros Corazones, e id hacia Mí ahora.
Este Mundo está destruido por el pecado y el cuerpo de la Tierra grita salvajemente. Sed uno con vuestro Señor Dios y sabed que la fuerza de Mi Amor os guía y os hace sanos.
Los estruendos de esta Tierra crecerán con los más inusuales dolores. Escuchad las rocas retumbar mientras caen de las montañas y el fuego que se propaga como un río incontenible. Ved los fuegos que caen de los cielos y los agujeros sin fondo que aparecen en los campos ante vosotros. Ved tales tormentas con vientos que asolan la tierra y los incendios que destruyen lo que hay en su camino. Ved lo que tierra escupe (no escupe, sino combate), ya que es el pecado lo que perturba este Mundo. El pecado es el camino de la devastación, Mis Hijos, y ¡cómo este Mundo abraza las tinieblas!
Mi Corazón Bendito está cargado de desesperación y tristeza, pues muchos de Mis Hijos no se dan por entendidos y, a cambio, someten sus Corazones a las falsedades y las mentiras de los sofistas. Amados Hijos, corred de los que podrían separaros de Mi Amor. Escapad de aquellos que quieren denunciar a Mi Amado Hijo, Cristo.
Habrá aquellos que viven en la oscuridad y los que están más ciegos que dirigirán a los tontos y débiles. ¿Cómo podréis conocer Mi Voluntad cuando no me conocéis? ¿Cómo podréis ver el camino ante vos, sin la guía Santa de Mi Luz o Espíritu que me precede?
Amados Hijos, Yo os insto de la manera más esencial o determinada o con gran urgencia a que oréis, sigáis, Améis y obedezcáis y apreciéis a Mi Hijo Amado. Es por medio de Él que vendréis a Mí. Cuando lo negáis y a Su Amor, Yo no os reconoceré en el día del juicio y os trataré como a un extraño al Amor.
Orad, Amados Hijos, y preparad vuestros Corazones. Participad de la Santa Eucaristía siempre. No conocéis las profundidades y las bendiciones eclesiásticas que recibiréis por vuestra devoción. Dentro de la Eucaristía está Mi Hijo y Su interminable Amor por vos. Él alimenta vuestra alma y os pone en comunión Amorosa con Su Sacratísimo Corazón. [Muy poderoso] Por lo tanto, Yo os digo Amados Hijos, id a Cristo con arrepentimiento y Amor, tan frecuentemente como sea posible, pues un día cercano el pozo de la Iglesia se secará y una serie de dudas [sospechas] evolucionarán a la incredulidad y traiciones dentro de Mi Santísima Iglesia (y esto) traerá al Mundo a sus rodillas.
Orar y participad de la Eucaristía. Venid a Mí, y aceptad Mi Gran Amor. Os voy a dar auxilio cuando el suelo sea estéril y las Almas de Mi Pueblo padezcan de hambre por falta de Mí y de los que Me sirven con Corazones veraces y con gran Amor por Mí, como los de los Hijos inocentes que Yo Amo tan encarecidamente (se le dará ayuda en esos momentos). Amados Hijos, orad, porque pronto seréis confundidos y seréis atraídos lejos del Amor. Sólo a través de la oración constante y devota recibiréis vosotros discernimiento. Sólo a través de la oración más profunda recibiréis vosotros consuelo. Es sólo a través de la gran oración que vosotros no seréis guiados por mal camino.
Venid a Mí ahora, y entended lo que acepto y lo que no acepto. No caigáis con los tibios, que confían en Mis conveniencias [lo cómodo]. Yo soy el Señor Dios. Soy Eterno y Poderoso. Mis Hijos, debéis ponerme primero para que no muráis en la oscuridad y lo temporal, que os lleve lejos de Mi Amor. Por lo tanto, Yo os digo, ¡orad!, Mis Hijos. Orad y Yo os guiaré y protegeré y daré consuelo a través de la tormenta.
Paz, Mis Hijos. Ofreced el uno al otro todo lo que sea Amor.
Jueves, 08 de septiembre 2016 las 3:05 - 3:21-16:09
Jesús como un ser humano: yo me figuro, Tú debes haber tenido miedo cuando oraste en la roca pidiendo a Nuestro Padre que retirara esta copa, si hubiera sido posible. Y luego, pienso en qué forma se te habrá roto el Corazón al ser traicionado por Judas, aunque quizás Tú sabías que iba a suceder. Y los golpes ... No los querías , pero los anticipaste, dado que Tú estabas tratando con soldados ... la otra cosa que me parece tan humana y tan horrenda y tan esencialmente ligada para Mí a Tu humanidad y Amor singular para nosotros fueron los clavos. ¿Sabías que usarían clavos en lugar de cuerdas, como lo hicieron con los ladrones? Si no lo sabías, ¡qué horrible conocimiento nuevo de la tortura que enfrentaste! ... Mi Corazón está tan espantado por la imagen de los soldados martillando esos clavos. Cuando pienso en ello, siento como mi propia alma aúlla por Ti Así que tal vez, así fue - las Almas y el Amor de los que amaban y Te Amaban dieron alaridos de dolor por Ti, mientras Tú sufrías. Ojalá yo hubiera sido como Verónica. Espero que hubiera sido amable y lo suficientemente valiente para tratar de llevarte algún consuelo, mientras soportabas todo por nosotros. De todos modos quería decirte ¡gracias! No sólo por guiarme y salvarme al soportar este tipo de cosas terribles, sino también por hacerte a Ti mismo humano, pues Tú sabías que esa sería la única manera en que el Hombre podría entender, aunque remotamente, Tu orientación y el Amor de Nuestro Padre por nosotros. Lo que Él quiere de nosotros y para nosotros. Y nosotros AUN lo entendemos mal! Así que gracias por mostrarme que Tú te ríes y sientes alegría. Que eres juguetón y cariñoso. Que Tú conoces el miedo y el dolor de la muerte. Que Tú eres generoso, sabio, y lleno de perdón. Que eres compasivo y tienes un gran Amor para Tu Madre :-). Que Tú sentiste ira y dolor. Que Tú nos mostraste lo que realmente es la humildad, y el perdón y la rectitud. Te veo y veo esas cualidades todos los días en los demás, y sin embargo, nunca somos perfectos. Veo que a veces nosotros seguimos y nos comportamos a Tu imagen. El Espíritu Santo guía (o estimula) nuestras Almas a la bondad, la generosidad, la compasión, el Amor ... .xoxoxox
3:21-4:09 pm
Oh, Amados Hijos, adorad al que contempláis en la Santísima Cruz, pues él es Mi Hijo Amado, y por vuestro Amor y adoración hacia Él, Mi Corazón se alegra. Amados Hijos, no tienen mucho tiempo para elegir. ¿No veis los regalos que os doy a vosotros? ¿No oís Mis llamados?
No ignoréis las advertencias de una gran tormenta, pero preparaos antes de que golpee o aterrice. ¿Por qué desearíais ser barridos o muertos cuando, con la previsión y planificación, viviríais a través de la tormenta con seguridad y calidez? Oh Hijos, ¡oídme! a vuestro Amado Señor Dios y Padre. No esperéis. No seáis frívolos con vuestro tiempo. Buscad Mi Misericordia y el perdón, pues ellos son vuestros para que los toméis. Ellos son el tesoro de vuestras Almas, y sin embargo, muchos de Mis Hijos están tan pobres y hambrientos dentro de este Mundo. Las Almas de Mis Amados Hijos padecen hambre por falta de santidad y de la oración.
El fruto de un árbol no puede ser cosechado si el árbol no tiene agua o no se ha regado abundantemente. Cuando, vosotros, Mis Hijos, no os dedicáis devotamente a Mí, a vuestro Señor Dios, que os Ama, vosotros estáis privados de todo lo que es de Mí. ¿Por qué buscáis las tinieblas en lugar de la Luz? ¿Por qué corrompéis lo que es bueno con lo que es terrible? Vuestros ojos se cierran a la comprensión ya que a vuestras Almas no se les da alimento. Y cuando un árbol está escaso de agua, no prospera, sino que muere. Venid a Mí por el Amor y la compasión y dad socorro a vuestras Almas.
Vuestro Padre Celestial ama a cada uno de Sus / Mis Hijos tan bien, Yo nunca os dejaré morir de hambre. Venid a Mí, Mis bellos Hijos, y disfrutad de Mi Abrumador Amor. No dudéis, por el contrario, confiad en Mí. Yo os llevo a la Verdad, el Amor y la rectitud. Evitad las tentaciones y reconocimientos de este Mundo, Mis Hijos. Estas son sólo cosas temporales o regalos y no hacen nada por vuestras Almas. Mis Amados Hijos, sabed que vuestras Almas son sagradas y tan frágiles. No podéis someter a vuestras Almas al pecado sin su devastación, y esta devastación suena fuertemente, como un lamento en Mi Corazón.
Amados Hijos, volved a Jesucristo, que es Mi Hijo Amado. Él os ha salvado para la Perpetuidad o la Vida Eterna con Amor. Tan solo hay que elegir el Amor (Dios). Elegid a la Luz. Elegid a Cristo que está tan enamorado de cada uno de vosotros. Rendid culto y adoración a Jesucristo, porque Él es la verdad y la Palabra. Al colocar el Señor Dios en el primer plano [como prioridad] de vuestras vidas, ¡qué bendecidos sois vosotros y que saludables son vuestras Almas! No soy una carga y Mi Perdón es un regalo comprado por Mi Santo y Amadísimo Hijo. ¿Quién os puede decir que os Ama más entrañablemente y más profundamente que el Eterno, que os ha creado para el Amor, del Amor y con Amor? [Y Dios ha dicho que Él es Amor].
Amados Hijos, no os extraviéis. Ni siquiera por un momento, no os alejéis de Mi Amor. Vosotros no conocéis la hora a la que os llamaré. No conocéis las devastaciones del pecado sobre vuestras Almas. Por lo tanto Yo os digo, reparad vuestras frágiles Almas mediante Mi búsqueda y aceptando con todos vuestros Corazones Mi Amor y Misericordia y Mis Gracias. Mi Corazón es insondablemente GRANDE, inmenso, y no podéis entender Mi Gran Capacidad de Amor y por lo tanto para perdonar. La Misericordia es vuestra, Mis Hijos. Tomad esta gloriosa recompensa que Yo pongo ante vos, con entusiasmo y agradecimiento. Venid a Mí con Corazones humildes, arrepentidos, Amorosos y Yo os abrazo fuertemente con Mi Gran Amor.
Recorred el camino del Amor que Cristo ha puesto ante vos y honrad Su Gran Sacrificio con todos vuestros Corazones. Expresadle vuestro Amor, agradecimiento y alabanzas llenas de adoración. Él es el Amor perfecto y Él es Mi Amadísimo Hijo, Cristo. Cuando Lo herís con vuestra indiferencia, vos Me herís, pues Yo soy Su Padre Amoroso, y lo que le suceda a Él me acontece a Mí. Cuando alabáis al Hijo, así también alabáis al Padre, y la alegría en el Cielo es grandiosa o grande [como un espectacular santo!]. Cuando ignoráis a Mi Hijo, todo el Cielo se sorprende por la necedad de este Mundo, la indiferencia o falta de respeto o tanto anti-Amor. [Anti-Amor es todo lo contrario al Amor, o lo que es del anti-Cristo.]
Cristo ha dado a cada uno de vosotros un regalo resplandeciente y precioso. La Vida Eterna es demasiado grande para que lo entiendan vuestras pequeñas Almas. Tampoco no captáis lo terrible de una eternidad sin Mí. Porque Yo soy el Amor y sin Amor, vos sois separados (de Él ... y puestos en ...) en tormentos y sufrimientos. No dejéis de creer que los pecados son perjudiciales. Hay sufrimientos especiales o consecuencias o castigos, para aquellos que caen en el pecado e ignoran a Cristo. Oh, Amados Hijos, no cometáis este acto de no-Amor. Vosotros no conocéis el horror de lo que hacéis. Implorad Mi Amor y ataos vosotros mismos a la Gloria de Mi Hijo Amado! Él ha dado a cada uno de vosotros el camino a la Vida Eterna.
Amados Hijos, creed que vuestro Amado Señor Dios y Padre os da buenos regalos y no os guía al jardín de las víboras, sino a las Glorias del Amor. No esperéis, Mis Hijos. Confiad en Mi Amor y elegidme. Elegid la Redención, el perdón y la Misericordia. Oh Hijos, Mi Misericordia es tan GRANDE, e incondicional! Solo necesitáis venir a Mí, y ¡cómo Mi Corazón Amoroso se deleita en vuestro Amor!
Venid a Mí, Hijos y mostrad que vuestro Amor no ha necesitado incitación, destrucción, o condiciones. Venid a Mí libremente, por el Amor puro de vuestros Corazones, e id hacia Mí ahora.
Este Mundo está destruido por el pecado y el cuerpo de la Tierra grita salvajemente. Sed uno con vuestro Señor Dios y sabed que la fuerza de Mi Amor os guía y os hace sanos.
Los estruendos de esta Tierra crecerán con los más inusuales dolores. Escuchad las rocas retumbar mientras caen de las montañas y el fuego que se propaga como un río incontenible. Ved los fuegos que caen de los cielos y los agujeros sin fondo que aparecen en los campos ante vosotros. Ved tales tormentas con vientos que asolan la tierra y los incendios que destruyen lo que hay en su camino. Ved lo que tierra escupe (no escupe, sino combate), ya que es el pecado lo que perturba este Mundo. El pecado es el camino de la devastación, Mis Hijos, y ¡cómo este Mundo abraza las tinieblas!
Mi Corazón Bendito está cargado de desesperación y tristeza, pues muchos de Mis Hijos no se dan por entendidos y, a cambio, someten sus Corazones a las falsedades y las mentiras de los sofistas. Amados Hijos, corred de los que podrían separaros de Mi Amor. Escapad de aquellos que quieren denunciar a Mi Amado Hijo, Cristo.
Habrá aquellos que viven en la oscuridad y los que están más ciegos que dirigirán a los tontos y débiles. ¿Cómo podréis conocer Mi Voluntad cuando no me conocéis? ¿Cómo podréis ver el camino ante vos, sin la guía Santa de Mi Luz o Espíritu que me precede?
Amados Hijos, Yo os insto de la manera más esencial o determinada o con gran urgencia a que oréis, sigáis, Améis y obedezcáis y apreciéis a Mi Hijo Amado. Es por medio de Él que vendréis a Mí. Cuando lo negáis y a Su Amor, Yo no os reconoceré en el día del juicio y os trataré como a un extraño al Amor.
Orad, Amados Hijos, y preparad vuestros Corazones. Participad de la Santa Eucaristía siempre. No conocéis las profundidades y las bendiciones eclesiásticas que recibiréis por vuestra devoción. Dentro de la Eucaristía está Mi Hijo y Su interminable Amor por vos. Él alimenta vuestra alma y os pone en comunión Amorosa con Su Sacratísimo Corazón. [Muy poderoso] Por lo tanto, Yo os digo Amados Hijos, id a Cristo con arrepentimiento y Amor, tan frecuentemente como sea posible, pues un día cercano el pozo de la Iglesia se secará y una serie de dudas [sospechas] evolucionarán a la incredulidad y traiciones dentro de Mi Santísima Iglesia (y esto) traerá al Mundo a sus rodillas.
Orar y participad de la Eucaristía. Venid a Mí, y aceptad Mi Gran Amor. Os voy a dar auxilio cuando el suelo sea estéril y las Almas de Mi Pueblo padezcan de hambre por falta de Mí y de los que Me sirven con Corazones veraces y con gran Amor por Mí, como los de los Hijos inocentes que Yo Amo tan encarecidamente (se le dará ayuda en esos momentos). Amados Hijos, orad, porque pronto seréis confundidos y seréis atraídos lejos del Amor. Sólo a través de la oración constante y devota recibiréis vosotros discernimiento. Sólo a través de la oración más profunda recibiréis vosotros consuelo. Es sólo a través de la gran oración que vosotros no seréis guiados por mal camino.
Venid a Mí ahora, y entended lo que acepto y lo que no acepto. No caigáis con los tibios, que confían en Mis conveniencias [lo cómodo]. Yo soy el Señor Dios. Soy Eterno y Poderoso. Mis Hijos, debéis ponerme primero para que no muráis en la oscuridad y lo temporal, que os lleve lejos de Mi Amor. Por lo tanto, Yo os digo, ¡orad!, Mis Hijos. Orad y Yo os guiaré y protegeré y daré consuelo a través de la tormenta.
Paz, Mis Hijos. Ofreced el uno al otro todo lo que sea Amor.

Miércoles, 07 de septiembre 2016 03:10-15:50
“El que desea guardar la gracia de Dios, agradézcale la gracia que le ha dado, y sufra con paciencia cuando le fuere retirada. Haga oración continua, para que le sea tornada, y sea cauto, prudente y humilde porque no la pierda.” - De Mi Imitación de Cristo
Gran confirmación. Gracias. Lección aprendida…. XO
Amados Hijos, Yo siempre estoy con vosotros y anhelo vuestra atención. Amados Hijos, anhelo vuestras oraciones, porque son como canciones para Mis oídos Celestiales. Creed en Mí, Hijos Míos. Creed en Mi GRAN Amor y capacidad para perdonar. Soy vuestro Padre que os adora y deseo verter Mi Amor sobre este Mundo.
Este Mundo es astuto, y sin embargo no está preparado. Clamad hacia Mí y preparad vuestros Corazones con Amor, Misericordia, y oración. No juzguéis a vuestros Hermanos y Hermanas a quienes Amo tanto, pues Yo he creado a cada uno de vosotros con Amor y para el Amor. ¿Cómo puede cualquier hijo acusar o juzgar a otro, cuando Yo os he hecho a cada uno de vosotros, y la perfección y el juicio son Míos?
Amados Hijos, venid a Mí con arrepentimiento en vuestros Corazones y Amor y humildad en vuestras Almas. Yo anhelo que cada uno de Mis Amados Hijos venga a Mí, para adorar y Amar profundamente a Mi Más Beatífico y Amado Hijo, Cristo. Gracias a Su Amor Purísimo sois salvados para la Vida Eterna. Pero cada uno de vosotros tiene que llamar a su Señor Dios. Venid a Mí por Mi Gran Misericordia, y os restauraré. Venid a Mí para obtener Misericordia, y limpiaré vuestras Almas. Venid a Mí por Mi GRANDÍSIMO Amor y produciréis la justicia y la alegría de la Vida Eterna.
Amados Hijos, sois tan pequeños y frágiles ante Mis Ojos [¡Esto lo dice con tanto Amor! ¡Somos tan absolutamente apreciados por Él!] No veis, porque sois ciegos en vuestra fragilidad. No oís, ya que sois tan pequeños. No entendéis o anheláis por Mí porque no oráis. Los que Me rezan cada día o perpetuamente o constantemente son el bálsamo que trae alegría a Mi Corazón, que alivia el dolor de echar de menos a Mis Amados Hijos.
Escucho y respondo vuestras oraciones, y os doy buenos regalos y orientación saludable o útil o justa. Abridme vuestros Corazones, Amados Hijos. No esperéis a prepararos para la tormenta. No os quedéis de brazos cruzados y confiéis en este Mundo y sus palabras. Porque Yo soy el Señor Dios y busco vuestros Corazones, como Yo anhelo que busquéis el Mío. Mi Amor por vosotros es infinito. Mi Misericordia es vuestra riqueza. Venid por el tesoro de Mi Amor y perdón.
Amados Hijos, ¡tal cantidad de Amadas Almas se extravían de Mí todos los días! Los que rechazan a Cristo, Mi Amadísimo Hijo, rechazan al Padre Eterno y no pueden disfrutar o entrar en el don que Mi Hijo ha dado a cada uno de vosotros, de la Vida Eterna con Amor. Amados Hijos, Yo soy justo y soy Misericordioso. Miro con bondad a los humildes y con gran alivio y alegría, perdono y Amo a los Hijos que Me otorgan todo su Corazón y toda su atención. Yo anhelo por vuestro Amor y afecto. Soy un padre afectuoso y Me da gran alegría dar buenos regalos a Mis Amados Hijos.
Mis Amados Hijos, sabed que hay un tiempo para recibir regalos y un tiempo para trabajar. Debéis hacer el trabajo correcto para vuestras Almas y caminar por el sendero que el Beatífico Jesucristo ha abierto para vosotros. No soy una carga, por el contrario (Yo) aligero el peso de vuestras preocupaciones o inquietudes. Dadme vuestros Corazones y sabréis que Mi Gloria es un regalo sobre vosotros, y Yo besaré vuestra frente y os daré fortaleza en tiempos de trauma o devastación. Amados Hijos, no podéis esperar una retribución cuando no hayáis trabajado. No podéis esperar alegría si no Amáis. Debéis trabajar y vivir la Vida que agrada a vuestro Santo y Amoroso Padre. Esto no es una carga, sino una ayuda o apoyo o (aquello que auxilia) para que todo sea manejable.
Mi Amor os muestra la belleza y lo esencial de vuestras oraciones y vuestro Amor por Mí. Mi Amor por vosotros es interminable. Amo a cada uno de vosotros de manera incondicional. No restrinjo Mi Amor por vosotros. No espero o exijo perfección de vosotros. Os extraño. Anhelo vuestro Amor. Anhelo vuestra calidez y compañía [Él es cariñoso]. Amados Hijos, no soy un Dios intrusivo. Yo aprecio y deseo vuestro Amor por Mí, pero no voy o no puedo exigirlo a Mis Amados Hijos. Por lo tanto, cada uno de vosotros debe encontrar su camino a Mí con la guía de Cristo Jesús, Mi más Amado Hijo, que os Ama.
Somos Uno en Nuestro Amor por vosotros y por lo tanto, cuando partís del Padre, también os alejáis del Hijo. Cuando rechazáis al Hijo, así también rechazáis al Padre y Yo no os conoceré. Así que Yo os digo, no hagáis de vuestro Padre Amoroso y Santo Señor un extraño en vuestras vidas. Venid a Mí, y conoced Mi GRANDÍSIMO Amor y la paz de Mi Perdón. Mi Misericordia es infinita y Mi Corazón está siempre abierto GRANDEMENTE para vosotros, Mis Amados Hijos.
Orad, Hijos Míos y llevad la Misericordia para aguantar cuando vuestros Corazones sean golpeados por este Mundo. Perdonad y Amad y volveos a Mí, pues Yo os mostraré Amor y Perdón. Yo soy el Señor Dios, y todo lo que hago y todo lo que doy es bueno. Confiad en Mí, pues Yo soy el Señor Dios.
Cristo Jesús, Mi Hijo Amado, os adora a vosotros y cuán grande es Su Amor, al precio de Su Vida, Él compró o abrió la puerta a cada uno de vosotros para la Vida Eterna entre Nosotros.
Amados Hijos, hay consecuencias por el pecado. Sabed que esto es cierto. El Reino de los Cielos es Mi perfección y anhelo por vosotros, por cada uno de vosotros, para que conozcáis Su MARAVILLA, BELLEZA o ser Espiritualmente sobrecogidos por él. [¡Al igual que un niño está asombrado en un parque de diversiones!] Yo os quiero conmigo, pues sois para Mí, como Yo soy para vosotros. En su perfección, no hay lugar para lo imperfecto, y el pecado es la máxima imperfección. Por lo tanto, Yo os digo, venid a Mí con Amor y arrepentimiento, y las puertas del Cielo estarán abiertas para vosotros. El Padre y el Hijo y el Espíritu y los que son Beatíficos os darán la bienvenida a cada uno de vosotros, de la manera más alegre.
Sabed, Mis Hijos, lo que Yo acepto y lo que no acepto. Sabed o creed en vuestro corazón que Yo os Amo. Confiad en Mí. Sed fieles y atentos a vuestro Dios, que os Ama tan completamente. Asíos o id con pasión y desesperada necesidad a Cristo y beneficiaos todos los días de las Grandes Bendiciones del más Santo de los Santos. Mis Hijos tienen que participar de este regalo pues es inimitable y esencial para vuestras Almas. Aprovechad el obsequio ante vosotros, pues un día el ladrón tomará vuestros hogares y tesoros y el acceso a sus bendiciones desaparecerá por completo. [Es decir, el acceso a la Iglesia y la Santa Eucaristía.] Tomad o participad de la Santísima Eucaristía, Hijos Míos. Es la Gran Bendición y purifica y trae bendiciones, grandes bendiciones para vosotros.
Amad, Hijos Míos. Amadme y Amad a los demás, especialmente a aquellos que actúan mal con vosotros. Es una cosa fácil disfrutar de las bayas dulces, ya que son maduras y dulces. Es una cosa difícil plantar los árboles, labrar la tierra, y esperar hasta la cosecha. Por lo tanto, Yo me encariño con los que Aman a sus enemigos. Amad a los que os lastimen. Colocad el Amor y la Misericordia de Mi Corazón en el vuestro, por medio de la oración y del Amor. Mi Amor y perdón son un ejemplo a seguir para lo que vuestras vidas puedan ser, esto es, pacíficas y justas. Esforzaos por perdonar y Amar.
Honráis a Cristo, Mi Hijo Amado, cuando demostráis la plenitud de vuestro Corazón, amando profundamente a los que Él Ama profundamente y perdonando libremente a los que Él perdonará. Trabajad ahora, tan difícil como el trabajo es cuando los demás están jugando. Trabajad hacia lo que es justo y recto, y vuestras recompensas serán mucho más generosas que las alegrías más resplandecientes que buscáis en la tierra. Orad, Amad, perdonad. Dadme vuestros Corazones. Seguid a Mi Hijo Amado. Así conoceréis la paz y las Glorias del Cielo.
“El que desea guardar la gracia de Dios, agradézcale la gracia que le ha dado, y sufra con paciencia cuando le fuere retirada. Haga oración continua, para que le sea tornada, y sea cauto, prudente y humilde porque no la pierda.” - De Mi Imitación de Cristo
Gran confirmación. Gracias. Lección aprendida…. XO
Amados Hijos, Yo siempre estoy con vosotros y anhelo vuestra atención. Amados Hijos, anhelo vuestras oraciones, porque son como canciones para Mis oídos Celestiales. Creed en Mí, Hijos Míos. Creed en Mi GRAN Amor y capacidad para perdonar. Soy vuestro Padre que os adora y deseo verter Mi Amor sobre este Mundo.
Este Mundo es astuto, y sin embargo no está preparado. Clamad hacia Mí y preparad vuestros Corazones con Amor, Misericordia, y oración. No juzguéis a vuestros Hermanos y Hermanas a quienes Amo tanto, pues Yo he creado a cada uno de vosotros con Amor y para el Amor. ¿Cómo puede cualquier hijo acusar o juzgar a otro, cuando Yo os he hecho a cada uno de vosotros, y la perfección y el juicio son Míos?
Amados Hijos, venid a Mí con arrepentimiento en vuestros Corazones y Amor y humildad en vuestras Almas. Yo anhelo que cada uno de Mis Amados Hijos venga a Mí, para adorar y Amar profundamente a Mi Más Beatífico y Amado Hijo, Cristo. Gracias a Su Amor Purísimo sois salvados para la Vida Eterna. Pero cada uno de vosotros tiene que llamar a su Señor Dios. Venid a Mí por Mi Gran Misericordia, y os restauraré. Venid a Mí para obtener Misericordia, y limpiaré vuestras Almas. Venid a Mí por Mi GRANDÍSIMO Amor y produciréis la justicia y la alegría de la Vida Eterna.
Amados Hijos, sois tan pequeños y frágiles ante Mis Ojos [¡Esto lo dice con tanto Amor! ¡Somos tan absolutamente apreciados por Él!] No veis, porque sois ciegos en vuestra fragilidad. No oís, ya que sois tan pequeños. No entendéis o anheláis por Mí porque no oráis. Los que Me rezan cada día o perpetuamente o constantemente son el bálsamo que trae alegría a Mi Corazón, que alivia el dolor de echar de menos a Mis Amados Hijos.
Escucho y respondo vuestras oraciones, y os doy buenos regalos y orientación saludable o útil o justa. Abridme vuestros Corazones, Amados Hijos. No esperéis a prepararos para la tormenta. No os quedéis de brazos cruzados y confiéis en este Mundo y sus palabras. Porque Yo soy el Señor Dios y busco vuestros Corazones, como Yo anhelo que busquéis el Mío. Mi Amor por vosotros es infinito. Mi Misericordia es vuestra riqueza. Venid por el tesoro de Mi Amor y perdón.
Amados Hijos, ¡tal cantidad de Amadas Almas se extravían de Mí todos los días! Los que rechazan a Cristo, Mi Amadísimo Hijo, rechazan al Padre Eterno y no pueden disfrutar o entrar en el don que Mi Hijo ha dado a cada uno de vosotros, de la Vida Eterna con Amor. Amados Hijos, Yo soy justo y soy Misericordioso. Miro con bondad a los humildes y con gran alivio y alegría, perdono y Amo a los Hijos que Me otorgan todo su Corazón y toda su atención. Yo anhelo por vuestro Amor y afecto. Soy un padre afectuoso y Me da gran alegría dar buenos regalos a Mis Amados Hijos.
Mis Amados Hijos, sabed que hay un tiempo para recibir regalos y un tiempo para trabajar. Debéis hacer el trabajo correcto para vuestras Almas y caminar por el sendero que el Beatífico Jesucristo ha abierto para vosotros. No soy una carga, por el contrario (Yo) aligero el peso de vuestras preocupaciones o inquietudes. Dadme vuestros Corazones y sabréis que Mi Gloria es un regalo sobre vosotros, y Yo besaré vuestra frente y os daré fortaleza en tiempos de trauma o devastación. Amados Hijos, no podéis esperar una retribución cuando no hayáis trabajado. No podéis esperar alegría si no Amáis. Debéis trabajar y vivir la Vida que agrada a vuestro Santo y Amoroso Padre. Esto no es una carga, sino una ayuda o apoyo o (aquello que auxilia) para que todo sea manejable.
Mi Amor os muestra la belleza y lo esencial de vuestras oraciones y vuestro Amor por Mí. Mi Amor por vosotros es interminable. Amo a cada uno de vosotros de manera incondicional. No restrinjo Mi Amor por vosotros. No espero o exijo perfección de vosotros. Os extraño. Anhelo vuestro Amor. Anhelo vuestra calidez y compañía [Él es cariñoso]. Amados Hijos, no soy un Dios intrusivo. Yo aprecio y deseo vuestro Amor por Mí, pero no voy o no puedo exigirlo a Mis Amados Hijos. Por lo tanto, cada uno de vosotros debe encontrar su camino a Mí con la guía de Cristo Jesús, Mi más Amado Hijo, que os Ama.
Somos Uno en Nuestro Amor por vosotros y por lo tanto, cuando partís del Padre, también os alejáis del Hijo. Cuando rechazáis al Hijo, así también rechazáis al Padre y Yo no os conoceré. Así que Yo os digo, no hagáis de vuestro Padre Amoroso y Santo Señor un extraño en vuestras vidas. Venid a Mí, y conoced Mi GRANDÍSIMO Amor y la paz de Mi Perdón. Mi Misericordia es infinita y Mi Corazón está siempre abierto GRANDEMENTE para vosotros, Mis Amados Hijos.
Orad, Hijos Míos y llevad la Misericordia para aguantar cuando vuestros Corazones sean golpeados por este Mundo. Perdonad y Amad y volveos a Mí, pues Yo os mostraré Amor y Perdón. Yo soy el Señor Dios, y todo lo que hago y todo lo que doy es bueno. Confiad en Mí, pues Yo soy el Señor Dios.
Cristo Jesús, Mi Hijo Amado, os adora a vosotros y cuán grande es Su Amor, al precio de Su Vida, Él compró o abrió la puerta a cada uno de vosotros para la Vida Eterna entre Nosotros.
Amados Hijos, hay consecuencias por el pecado. Sabed que esto es cierto. El Reino de los Cielos es Mi perfección y anhelo por vosotros, por cada uno de vosotros, para que conozcáis Su MARAVILLA, BELLEZA o ser Espiritualmente sobrecogidos por él. [¡Al igual que un niño está asombrado en un parque de diversiones!] Yo os quiero conmigo, pues sois para Mí, como Yo soy para vosotros. En su perfección, no hay lugar para lo imperfecto, y el pecado es la máxima imperfección. Por lo tanto, Yo os digo, venid a Mí con Amor y arrepentimiento, y las puertas del Cielo estarán abiertas para vosotros. El Padre y el Hijo y el Espíritu y los que son Beatíficos os darán la bienvenida a cada uno de vosotros, de la manera más alegre.
Sabed, Mis Hijos, lo que Yo acepto y lo que no acepto. Sabed o creed en vuestro corazón que Yo os Amo. Confiad en Mí. Sed fieles y atentos a vuestro Dios, que os Ama tan completamente. Asíos o id con pasión y desesperada necesidad a Cristo y beneficiaos todos los días de las Grandes Bendiciones del más Santo de los Santos. Mis Hijos tienen que participar de este regalo pues es inimitable y esencial para vuestras Almas. Aprovechad el obsequio ante vosotros, pues un día el ladrón tomará vuestros hogares y tesoros y el acceso a sus bendiciones desaparecerá por completo. [Es decir, el acceso a la Iglesia y la Santa Eucaristía.] Tomad o participad de la Santísima Eucaristía, Hijos Míos. Es la Gran Bendición y purifica y trae bendiciones, grandes bendiciones para vosotros.
Amad, Hijos Míos. Amadme y Amad a los demás, especialmente a aquellos que actúan mal con vosotros. Es una cosa fácil disfrutar de las bayas dulces, ya que son maduras y dulces. Es una cosa difícil plantar los árboles, labrar la tierra, y esperar hasta la cosecha. Por lo tanto, Yo me encariño con los que Aman a sus enemigos. Amad a los que os lastimen. Colocad el Amor y la Misericordia de Mi Corazón en el vuestro, por medio de la oración y del Amor. Mi Amor y perdón son un ejemplo a seguir para lo que vuestras vidas puedan ser, esto es, pacíficas y justas. Esforzaos por perdonar y Amar.
Honráis a Cristo, Mi Hijo Amado, cuando demostráis la plenitud de vuestro Corazón, amando profundamente a los que Él Ama profundamente y perdonando libremente a los que Él perdonará. Trabajad ahora, tan difícil como el trabajo es cuando los demás están jugando. Trabajad hacia lo que es justo y recto, y vuestras recompensas serán mucho más generosas que las alegrías más resplandecientes que buscáis en la tierra. Orad, Amad, perdonad. Dadme vuestros Corazones. Seguid a Mi Hijo Amado. Así conoceréis la paz y las Glorias del Cielo.

¿ACASO NO VEIS LO QUE LA TIERRA OS MUESTRA?
Viernes, 26 de agosto 2016 12:44-12:47 - 1:16 Adoración
**** Cinta adhesiva y correas elásticas. Gracias por Tu dirección. Me centraré en hacerte feliz conmigo. Debo Amar a los demás y perdonar a cualquiera que traiga división a mi Corazón, y siempre ponerte en primer lugar ****. Gracias por hablar alto, Padre. XO
Es con gran Amor, que Yo os digo, Mis Amados Hijos, que sois Mis pequeños y frágiles Amores. Me preocupo por cada uno de vosotros y como un Padre Amoroso, busco traeros a Mis Brazos. Busco traeros paz y perdón y protección y tan grandes dones. Estoy dispuesto a bendeciros con tantas maravillas Celestiales. No abandonéis vuestro Amor por Mí. No abandonéis a vuestro Padre Amoroso que es Amor Eterno.
No podéis matar al dragón sin la oración constante y regular. No podéis luchar contra lo que es oscuro, tan oscuro, sin Mi Mano sobre vuestro hombro y Mis Ángeles Amados que lo mantienen a raya. Yo soy el único Dios verdadero y a través de Mi Hijo Amado, Jesucristo, vivís y viviremos como uno solo. Amados Hijos, vosotros dudáis de las tinieblas de este mundo. No veis que haya consecuencias por vuestros pecados.
Oh, Amados Hijos, no Me traigáis miseria. No traigáis lágrimas a los ojos de Mi Hijo Amado que os ama como Yo os Amo. Anhelamos por vosotros y os ofrecemos nuestra compasión, nuestro Amor y perdón. Él es Mi más Beatífico y Amoroso Hijo. Él anhela por vosotros, como Yo anhelo por vosotros. Como un solo Dios, estamos sedientos de vuestro Amor.
Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestro Tiempo. ¿Acaso no veis lo que la Tierra os muestra? ¿No oís Mis llamados continuos? Quiero que vengáis a Mí, con Amor y entusiasmo. Soy vuestro Padre Amoroso y deseo ver a Mis Amados Hijos alegres, y junto a Mí en la pasión de Mi Amor Eterno.
Amados Hijos, no dudéis de que la oscuridad existe y desea enviaros donde Yo no estoy. Amados Hijos, las consecuencias del pecado son varias y terribles. No podéis ver o comprender esto, ya que vuestras Almas son tan frágiles y ciegas.
Amados Hijos, veo a cada uno de vosotros. No necesitáis temer a Aquel que os Ama, que os ha creado a partir de las profundidades internas de Mi Amor, y que conoce cada parte o partícula de vuestro ser. [Como que, TODOS los elementos más pequeños, hasta nuestros glóbulos sanguíneos!] Conozco los contornos de vuestros Corazones y entiendo vuestra vergüenza. Yo os beso la frente cuando tenéis miedo y cuando dudáis. Venid a Mí, Mis Bellos Hijos, y poned el bálsamo de vuestro Amor sobre Mi Corazón Adolorido.
Amados Hijos, no os podéis demorar. No podéis esperar a que la estación pase para sembrar vuestros campos. No podéis esperar a que la tormenta llegue para cerrar las contra-ventanas de vuestros hogares contra su furia. ¿Por qué, entonces, cuando vuestras Almas son tan frágiles y Santas, como regalos que os he otorgado, las tratáis con tal desprecio?
Orad, Hijos Míos, y regresad a vuestro Padre Amoroso y Eterno Dios, que os Ama y anhela por vosotros. Orad y adorad a Mi Amado Hijo, el Señor Jesucristo, que os dio Vida sacrificando la Suya hasta la Muerte. Amados Hijos, venid a Mí con Amor y temor y arrepentimiento en vuestros corazones. Con Corazones humildes, venid a vuestro Señor Dios y conoced la alegría y el regalo del perdón de Aquel que os ha creado desde el Amor y con Amor, y para el Amor.
No apeléis a este Mundo para el conocimiento, el reconocimiento, el Amor o la riqueza. Yo os doy todo lo que necesitáis como Amados Hijos Míos. Confiad en Mí y sabed con todo vuestro Corazón que Yo soy vuestro Señor Dios y Padre Celestial que desea llevar Mi Amor y el vuestro a buen término. Orad, Hijos Míos. La oración está ausente en tantos y este Mundo sufre, pues empuja Mi Amor fuera de los Corazones de Mis Hijos. No llevéis a Mis Amadas Florecillas [niños, jóvenes] por mal camino. Este es un gran pecado y no lo tolero. Voy a derribar a aquellos que llevan a Mis Amadas Flores lejos de Mí, pues ¿quién es más inocente que Mis Pequeñas Flores? [niños pequeños]
Volved y adorad a Mi Amado Hijo, Cristo. No podéis sondear las profundidades de Su Amor y de Su Misericordia y esperanza. Él es como la esposa que espera con anhelo, creyendo en el regreso (de su marido). Él espera que cada uno de vosotros vayáis a Su Corazón por Misericordia y Amor. Sus Brazos están abiertos para vosotros, y sin embargo le dais la espalda. Él espera con tanto anhelo. Venid a vuestro Señor Dios. No podéis comprender el deseo que tengo por vuestro Amor, Hijos Míos. Orad, Amados Míos. Orad y Amad, pues el Mundo se ahoga en su oscuridad por la falta de Amor, perdón y oración. [Creo que dice esposa, porque las mujeres tenemos una gran capacidad para amar y el deseo de que nuestros seres queridos estén sanos y salvos. No dejaba de pensar en una mujer caminando como si estuviera viuda, vigilando el océano.]
No permitáis que vuestros Corazones y vuestras Almas se calen en aquello que es oscuro. Orad y no os hagáis cegar por las mascaradas de la oscuridad. No podéis discernir sin la fuerza de la oración y la Amorosa y Beatífica guía del Espíritu Santo. ¿Cómo vais a saber cuándo lo que parece oscuro es claro, y lo que parece claro es oscuro? No os dejéis engañar por los sofistas y aquellos que os cegarían a la luz y os llevarían hacia la oscuridad.
Soy vuestro Señor Dios y Padre. Confiad en Mi Voluntad por vosotros. Poned en Mí la totalidad de vuestros Corazones y de vuestro Amor. Orad y traedme consuelo. Amados Hijos, Yo estoy esperando para daros Mi Misericordia. Tomad lo que es vuestro ahora, Amados Míos, y conoceréis la Vida duradera. Paz, Hijos Míos. Paz.
[Recuerden cómo Él dijo esto antes. Es un engaño decir que lo que es blanco/luz sea negro/oscuridad – cuando acabamos siendo convencidos de que lo malo es bueno y viceversa].
Viernes, 26 de agosto 2016 12:44-12:47 - 1:16 Adoración
**** Cinta adhesiva y correas elásticas. Gracias por Tu dirección. Me centraré en hacerte feliz conmigo. Debo Amar a los demás y perdonar a cualquiera que traiga división a mi Corazón, y siempre ponerte en primer lugar ****. Gracias por hablar alto, Padre. XO
Es con gran Amor, que Yo os digo, Mis Amados Hijos, que sois Mis pequeños y frágiles Amores. Me preocupo por cada uno de vosotros y como un Padre Amoroso, busco traeros a Mis Brazos. Busco traeros paz y perdón y protección y tan grandes dones. Estoy dispuesto a bendeciros con tantas maravillas Celestiales. No abandonéis vuestro Amor por Mí. No abandonéis a vuestro Padre Amoroso que es Amor Eterno.
No podéis matar al dragón sin la oración constante y regular. No podéis luchar contra lo que es oscuro, tan oscuro, sin Mi Mano sobre vuestro hombro y Mis Ángeles Amados que lo mantienen a raya. Yo soy el único Dios verdadero y a través de Mi Hijo Amado, Jesucristo, vivís y viviremos como uno solo. Amados Hijos, vosotros dudáis de las tinieblas de este mundo. No veis que haya consecuencias por vuestros pecados.
Oh, Amados Hijos, no Me traigáis miseria. No traigáis lágrimas a los ojos de Mi Hijo Amado que os ama como Yo os Amo. Anhelamos por vosotros y os ofrecemos nuestra compasión, nuestro Amor y perdón. Él es Mi más Beatífico y Amoroso Hijo. Él anhela por vosotros, como Yo anhelo por vosotros. Como un solo Dios, estamos sedientos de vuestro Amor.
Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestro Tiempo. ¿Acaso no veis lo que la Tierra os muestra? ¿No oís Mis llamados continuos? Quiero que vengáis a Mí, con Amor y entusiasmo. Soy vuestro Padre Amoroso y deseo ver a Mis Amados Hijos alegres, y junto a Mí en la pasión de Mi Amor Eterno.
Amados Hijos, no dudéis de que la oscuridad existe y desea enviaros donde Yo no estoy. Amados Hijos, las consecuencias del pecado son varias y terribles. No podéis ver o comprender esto, ya que vuestras Almas son tan frágiles y ciegas.
Amados Hijos, veo a cada uno de vosotros. No necesitáis temer a Aquel que os Ama, que os ha creado a partir de las profundidades internas de Mi Amor, y que conoce cada parte o partícula de vuestro ser. [Como que, TODOS los elementos más pequeños, hasta nuestros glóbulos sanguíneos!] Conozco los contornos de vuestros Corazones y entiendo vuestra vergüenza. Yo os beso la frente cuando tenéis miedo y cuando dudáis. Venid a Mí, Mis Bellos Hijos, y poned el bálsamo de vuestro Amor sobre Mi Corazón Adolorido.
Amados Hijos, no os podéis demorar. No podéis esperar a que la estación pase para sembrar vuestros campos. No podéis esperar a que la tormenta llegue para cerrar las contra-ventanas de vuestros hogares contra su furia. ¿Por qué, entonces, cuando vuestras Almas son tan frágiles y Santas, como regalos que os he otorgado, las tratáis con tal desprecio?
Orad, Hijos Míos, y regresad a vuestro Padre Amoroso y Eterno Dios, que os Ama y anhela por vosotros. Orad y adorad a Mi Amado Hijo, el Señor Jesucristo, que os dio Vida sacrificando la Suya hasta la Muerte. Amados Hijos, venid a Mí con Amor y temor y arrepentimiento en vuestros corazones. Con Corazones humildes, venid a vuestro Señor Dios y conoced la alegría y el regalo del perdón de Aquel que os ha creado desde el Amor y con Amor, y para el Amor.
No apeléis a este Mundo para el conocimiento, el reconocimiento, el Amor o la riqueza. Yo os doy todo lo que necesitáis como Amados Hijos Míos. Confiad en Mí y sabed con todo vuestro Corazón que Yo soy vuestro Señor Dios y Padre Celestial que desea llevar Mi Amor y el vuestro a buen término. Orad, Hijos Míos. La oración está ausente en tantos y este Mundo sufre, pues empuja Mi Amor fuera de los Corazones de Mis Hijos. No llevéis a Mis Amadas Florecillas [niños, jóvenes] por mal camino. Este es un gran pecado y no lo tolero. Voy a derribar a aquellos que llevan a Mis Amadas Flores lejos de Mí, pues ¿quién es más inocente que Mis Pequeñas Flores? [niños pequeños]
Volved y adorad a Mi Amado Hijo, Cristo. No podéis sondear las profundidades de Su Amor y de Su Misericordia y esperanza. Él es como la esposa que espera con anhelo, creyendo en el regreso (de su marido). Él espera que cada uno de vosotros vayáis a Su Corazón por Misericordia y Amor. Sus Brazos están abiertos para vosotros, y sin embargo le dais la espalda. Él espera con tanto anhelo. Venid a vuestro Señor Dios. No podéis comprender el deseo que tengo por vuestro Amor, Hijos Míos. Orad, Amados Míos. Orad y Amad, pues el Mundo se ahoga en su oscuridad por la falta de Amor, perdón y oración. [Creo que dice esposa, porque las mujeres tenemos una gran capacidad para amar y el deseo de que nuestros seres queridos estén sanos y salvos. No dejaba de pensar en una mujer caminando como si estuviera viuda, vigilando el océano.]
No permitáis que vuestros Corazones y vuestras Almas se calen en aquello que es oscuro. Orad y no os hagáis cegar por las mascaradas de la oscuridad. No podéis discernir sin la fuerza de la oración y la Amorosa y Beatífica guía del Espíritu Santo. ¿Cómo vais a saber cuándo lo que parece oscuro es claro, y lo que parece claro es oscuro? No os dejéis engañar por los sofistas y aquellos que os cegarían a la luz y os llevarían hacia la oscuridad.
Soy vuestro Señor Dios y Padre. Confiad en Mi Voluntad por vosotros. Poned en Mí la totalidad de vuestros Corazones y de vuestro Amor. Orad y traedme consuelo. Amados Hijos, Yo estoy esperando para daros Mi Misericordia. Tomad lo que es vuestro ahora, Amados Míos, y conoceréis la Vida duradera. Paz, Hijos Míos. Paz.
[Recuerden cómo Él dijo esto antes. Es un engaño decir que lo que es blanco/luz sea negro/oscuridad – cuando acabamos siendo convencidos de que lo malo es bueno y viceversa].

A QUIEN SEGUÍS?
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Lunes, 22 de agosto 2016, 3:10-03:34 *
Padre, mi cerebro y mi corazón son demasiado pequeños. ¿Cómo puede cualquiera de nosotros mantenerse al nivel de Tus expectativas y de Tu Amor?
Amada Hija, no espero que puedas igualar Mi Amor e Intimidad. YO SOY y todo lo que soy es Amor y tú eres tan Amada y pequeña y Yo soy tan infinito en mi Amor. Yo soy el Eterno y todo lo que soy es tuyo. Amada Hija, tú eres Mía, como Yo soy tuyo. No rechaces tu Amor por Mí. No denuncies tus intentos de Amor, porque Yo veo cada hebra o partícula de Amor que ofreces. Incluso en tu miedo y duda, tu Amor vacilante Me conmueve. No eres perfecta y Yo no espero perfección. Sólo hay un Dios verdadero, y ese Yo soy y la perfección es Mía. No es lo que es pomposo o digno de crédito o que espera ser reconocido con fuerte y alta estima. [El nuestro - nuestro amor no puede ser presuntuoso o jactancioso.] Mi Amor es afable e incongruente con lo que tú entiendes. No necesito fidelidad o cautela o reconocimiento para ser Amor absoluto. Tengo plenitud en Mí Mismo y soy siempre Amor. GRANDE, más allá de lo tangible.
Amados Hijos, Mi deseo más grande es que vengáis a Mí. No es necesario que vengáis a Mí como (si fuerais) prisioneros. Vosotros debéis venir a Mí, con fe y alegría. Yo no fuerzo Mi Voluntad sobre Mis Amados Hijos. Por lo tanto, os desviáis por vuestra propia voluntad. Amados Hijos, amad y apreciad y valorad el Amor de vuestro Señor Dios y el Sacrificio Salvador de Jesucristo. Amadlo, a Cristo, ahora, hoy, pues pronto las Bendiciones de Su Regalo se irán y los que dudan caerán y los que no crean, los que dudan se desmoronarán en polvo. Por lo tanto, os digo, Amad y orad y adorad o apoyad a los que son los más santos y guiados por el Espíritu. No sigáis a los que rechazan a otros. Seguid a los que conocen lo que Yo acepto y lo que no acepto. Porque hay muchos que guiarán a Mis Amados Hijos por el mal camino. Pesado es Mi Corazón, pues estos hombres sufrirán siete veces más que un pecador por su orientación defectuosa e innoble. Orad por aquellos que se han extraviado, pues ellos guían a Mi Rebaño torcidamente. Sus almas ponen en peligro a las Almas de sus rebaños o seguidores y esto trae dolor a Mi Corazón.
No esperéis para venir a Mí, Hijos Míos. No discernáis con vuestra mirada Mundana. Discernid, por medio de la oración, el título de vuestros Corazones. Os quedaréis cegados de otro modo, y por lo tanto, si no oráis, no entenderéis cuando la oscuridad sea luz y la luz sea oscuridad. De este modo, vuestra confusión os va a dificultar en un momento de gran necesidad. Únicamente, volved hacia el Padre Eterno que os Ama, Yo os doy auxilio y recompensa.
Amados Hijos, no podéis conocer los gránulos de tiempo que Yo he creado. Estoy aquí ahora y siempre he estado y siempre estaré. Con demasiado Amor por Mis Amados para que lo puedan comprender. Por lo tanto, os digo, tenéis que confiar en vuestro Padre Celestial que os Ama como ningún otro y ser obedientes a Mi Palabra en vuestra confianza. Yo no llevo a Mis Amados Hijos al peligro o al derroche. Yo os protejo y os llevo a la plenitud de la Vida. Confiad en Mí y seguid Mi Corazón y Voluntad.
Amados Hijos, no tenéis conocimiento de todo o de lo que os espera, o de lo que viene. ¿Por qué deberíais esperar a que la tormenta violenta aterrice, para entonces cerrar vuestras ventanas con postigos? ¿Por qué esperar a que golpee el impacto del desastre, cuando podéis estar protegidos del dolor? Amados Hijos, vosotros sois Míos, como Yo soy vuestro. Sólo necesitáis volver al Señor Dios que os Ama.
Pronunciad el Nombre Hermoso de Mi Hijo, Jesucristo, pues Yo lo Amo, como Él os Ama. Buscad la protección de Su Amor y arrodillaos a Sus Pies, rogando por Su Guía Santa. Seguid el Amor del Corazón de Cristo. Así seréis conducidos al Padre, pues Yo estoy ansioso por Mis Hijos.
Oh, Amados Hijos, reconoced las señales que os indican que la tierra se desmorona y los cielos se encenderán con fuegos y todos los animales se dispersarán atemorizados. Las tierras se hundirán y los pueblos de la duda abdicarán su poder y elegirán lo temporal en lugar de lo que es puro y verdadero. Amados Hijos, orad contra esta catástrofe. Demasiados, demasiados de mis Hijos Amados dudan de Mi Justicia y de la de la Tierra natural. Los vientos son más fuertes que el paso de un hombre. La muerte arremolinada de las tormentas va a superar el Hombre, a pesar de sus esfuerzos. ¿Por qué deberíais luchar contra Aquel que es y siempre será, quien es todopoderoso, infinito, bueno, y está esperando?
No temáis a vuestro Señor Dios. Vosotros sois para Mí, como Yo soy para vos. No tengáis miedo cuando los vientos soplen y los fuegos iluminen los cielos. Yo siempre estoy con Vosotros y espero vuestra inquebrantable fe en Mí, vuestro Señor Dios y Padre. Por lo tanto, Yo os digo, paz Hijos Míos. Vosotros sois todo lo que Yo deseo. Paz y vivid en la senda del Señor Dios, Jesucristo. Paz, Hijos Míos, y sed amables y compasivos unos con otros.
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Lunes, 22 de agosto 2016, 3:10-03:34 *
Padre, mi cerebro y mi corazón son demasiado pequeños. ¿Cómo puede cualquiera de nosotros mantenerse al nivel de Tus expectativas y de Tu Amor?
Amada Hija, no espero que puedas igualar Mi Amor e Intimidad. YO SOY y todo lo que soy es Amor y tú eres tan Amada y pequeña y Yo soy tan infinito en mi Amor. Yo soy el Eterno y todo lo que soy es tuyo. Amada Hija, tú eres Mía, como Yo soy tuyo. No rechaces tu Amor por Mí. No denuncies tus intentos de Amor, porque Yo veo cada hebra o partícula de Amor que ofreces. Incluso en tu miedo y duda, tu Amor vacilante Me conmueve. No eres perfecta y Yo no espero perfección. Sólo hay un Dios verdadero, y ese Yo soy y la perfección es Mía. No es lo que es pomposo o digno de crédito o que espera ser reconocido con fuerte y alta estima. [El nuestro - nuestro amor no puede ser presuntuoso o jactancioso.] Mi Amor es afable e incongruente con lo que tú entiendes. No necesito fidelidad o cautela o reconocimiento para ser Amor absoluto. Tengo plenitud en Mí Mismo y soy siempre Amor. GRANDE, más allá de lo tangible.
Amados Hijos, Mi deseo más grande es que vengáis a Mí. No es necesario que vengáis a Mí como (si fuerais) prisioneros. Vosotros debéis venir a Mí, con fe y alegría. Yo no fuerzo Mi Voluntad sobre Mis Amados Hijos. Por lo tanto, os desviáis por vuestra propia voluntad. Amados Hijos, amad y apreciad y valorad el Amor de vuestro Señor Dios y el Sacrificio Salvador de Jesucristo. Amadlo, a Cristo, ahora, hoy, pues pronto las Bendiciones de Su Regalo se irán y los que dudan caerán y los que no crean, los que dudan se desmoronarán en polvo. Por lo tanto, os digo, Amad y orad y adorad o apoyad a los que son los más santos y guiados por el Espíritu. No sigáis a los que rechazan a otros. Seguid a los que conocen lo que Yo acepto y lo que no acepto. Porque hay muchos que guiarán a Mis Amados Hijos por el mal camino. Pesado es Mi Corazón, pues estos hombres sufrirán siete veces más que un pecador por su orientación defectuosa e innoble. Orad por aquellos que se han extraviado, pues ellos guían a Mi Rebaño torcidamente. Sus almas ponen en peligro a las Almas de sus rebaños o seguidores y esto trae dolor a Mi Corazón.
No esperéis para venir a Mí, Hijos Míos. No discernáis con vuestra mirada Mundana. Discernid, por medio de la oración, el título de vuestros Corazones. Os quedaréis cegados de otro modo, y por lo tanto, si no oráis, no entenderéis cuando la oscuridad sea luz y la luz sea oscuridad. De este modo, vuestra confusión os va a dificultar en un momento de gran necesidad. Únicamente, volved hacia el Padre Eterno que os Ama, Yo os doy auxilio y recompensa.
Amados Hijos, no podéis conocer los gránulos de tiempo que Yo he creado. Estoy aquí ahora y siempre he estado y siempre estaré. Con demasiado Amor por Mis Amados para que lo puedan comprender. Por lo tanto, os digo, tenéis que confiar en vuestro Padre Celestial que os Ama como ningún otro y ser obedientes a Mi Palabra en vuestra confianza. Yo no llevo a Mis Amados Hijos al peligro o al derroche. Yo os protejo y os llevo a la plenitud de la Vida. Confiad en Mí y seguid Mi Corazón y Voluntad.
Amados Hijos, no tenéis conocimiento de todo o de lo que os espera, o de lo que viene. ¿Por qué deberíais esperar a que la tormenta violenta aterrice, para entonces cerrar vuestras ventanas con postigos? ¿Por qué esperar a que golpee el impacto del desastre, cuando podéis estar protegidos del dolor? Amados Hijos, vosotros sois Míos, como Yo soy vuestro. Sólo necesitáis volver al Señor Dios que os Ama.
Pronunciad el Nombre Hermoso de Mi Hijo, Jesucristo, pues Yo lo Amo, como Él os Ama. Buscad la protección de Su Amor y arrodillaos a Sus Pies, rogando por Su Guía Santa. Seguid el Amor del Corazón de Cristo. Así seréis conducidos al Padre, pues Yo estoy ansioso por Mis Hijos.
Oh, Amados Hijos, reconoced las señales que os indican que la tierra se desmorona y los cielos se encenderán con fuegos y todos los animales se dispersarán atemorizados. Las tierras se hundirán y los pueblos de la duda abdicarán su poder y elegirán lo temporal en lugar de lo que es puro y verdadero. Amados Hijos, orad contra esta catástrofe. Demasiados, demasiados de mis Hijos Amados dudan de Mi Justicia y de la de la Tierra natural. Los vientos son más fuertes que el paso de un hombre. La muerte arremolinada de las tormentas va a superar el Hombre, a pesar de sus esfuerzos. ¿Por qué deberíais luchar contra Aquel que es y siempre será, quien es todopoderoso, infinito, bueno, y está esperando?
No temáis a vuestro Señor Dios. Vosotros sois para Mí, como Yo soy para vos. No tengáis miedo cuando los vientos soplen y los fuegos iluminen los cielos. Yo siempre estoy con Vosotros y espero vuestra inquebrantable fe en Mí, vuestro Señor Dios y Padre. Por lo tanto, Yo os digo, paz Hijos Míos. Vosotros sois todo lo que Yo deseo. Paz y vivid en la senda del Señor Dios, Jesucristo. Paz, Hijos Míos, y sed amables y compasivos unos con otros.

HIJOS DE SION
Viernes, 12 de agosto 2016 3:12-15:45
Oh Hijos, Mi Amor por vos es abundante y anhelo poder llevaros en Mi Amor con vuestra plena disposición. Yo soy el Señor Dios y Padre, y Amo a cada uno de vosotros tan inmensamente. Volved a Mí y a Mi Amor, y conoced la eterna Alegría, Paz y el Amor Más Grande. Venid a Mí, a través de vuestro Amor y plegarias a Mi Amado Hijo, Jesucristo, cuyo Corazón está lleno de Amor y Misericordia para este Mundo. Él ha establecido un camino seguro hacia Mí y a Mi Amor por su Amado y Milagroso, SANTO y GRANDE Sacrificio. Ningún otro acto de Amor ha sido tan GRANDE, MARAVILLLOSO, lleno de Oportunidad, Abundancia.
Yo soy el Señor Dios y anhelo por los Corazones de Mis Hijos.
Escuchadme, Hijos de Sión, pues vuestros pecados son muchos y Mi juicio de vos es justo. No os dejéis engañar por la paciencia y el engaño de las tinieblas ante vosotros. No soy un Padre y Dios intrusivo [entrometido], incluso con Mi Amor inmenso y Anhelo por vosotros. Tened en cuenta, Mis Amados Hijos, que las tinieblas si son intrusivas. Ellas desean arrebatar a Mis Amados Hijos de Mi y causar estragos en vuestras almas.
Amados Hijos, dadle la mano a Mi Amado Hijo, Jesucristo, pues vuestras almas son tan débiles y frágiles. Reunid fuerza para evitar el pecado por medio de las oraciones más profundas y un gran Amor por el Señor Jesucristo. Cuando alabáis al Hijo, vos alabáis al Padre, y al condenar al Hijo, de la misma manera vos condenáis al Padre. Y donde estaréis cuando las puertas del Cielo estén cerradas ante todas las tinieblas? Mi Reino es la perfección en la gracia, y no hay pecado adentro, porque Mi Corazón es el Amor y Amo a cada uno de vosotros y Yo deseo que estén cada uno de vosotros conmigo eternamente.
Yo no honro al pecado, Mis Amados. No podéis entrar al santuario cuando vuestra ropa está poseída [enloquecida] y las manos y los pies sucios. Vosotros no podéis entrar en el Reino de Dios cuando hay pecado asentado sobre vuestra pecho. Amados Hijos, buscad Mi GRAN Amor y Misericordia. Es un regalo, un regalo de Amor para vos y al mismo tiempo tan pocos de Mis Amados Hijos se acercan a Mí, para tomar este regalo de Amor.
Oh, Hijos errantes, no permitáis a vosotros mismos abrumarse con las vanidades y la destrucción de este Mundo temporal. A cambio, volved vuestros ojos hacia Mi Hijo, Cristo, que os adora tan INMENSAMENTE. Volved a Él, pues Su Amor y compasión son Eternos y no se desvanecen. Mi Amor no es temporal. Es grande y eterno. Elegid Mi Amor y perdón para que podáis vivir en Amor eterno, alegría, santidad.
Me hacéis feliz con vuestras oraciones fervientes, Mis Hijos. Todo lo que vosotros decís y oráis, Yo lo escucho con oídos ansiosos y atentos. Confiad en Mí, pues Mi Voluntad para vos es siempre correcta y Amorosa. Yo no llevo a Mis Hijos a lo que es veneno para vuestras almas. Vosotros sois Mis Hijos Amados, y Yo soy vuestro siempre Amoroso Padre. ¡Cuánto deseo que Mis Hijos sean alegres y llenos de paz! ¡Cuánto deseo que Mis Hijos vuelvan sus Corazones hacia Mí!
Yo soy la Vida, el Amor y YO SOY siempre y soy Eterno. No puedo reducir Mi Amor por vos, sino expandirlo. Mi Amor es GRANDE y sin fin. Amados Hijos, tratad vuestras Amadas Almas con cuidado, ya que son frágiles y fácilmente sucumben al pecado o a la tentación del pecado. Mirad al Cielo y a todo lo que es Santo y Eterno. No sucumbáis a los placeres momentáneos que os llevan al pecado. Por el contrario, orad a vuestro Dios, el Más Amoroso y Yo os concedo tanta dulce alegría y paz.
En la medida que os acerquéis a vosotros mismos, más cerca de Mi Corazón Amoroso, la alegría que encontrabais en lo temporal es sustituida por una alegría interior Espiritual, profunda, y GRANDE que Yo os doy a vosotros como un regalo por vuestro Amor y fe. No os conforméis con una pieza de oro cuando podríais obtener un cofre lleno, si vuestro trabajo es hecho.
Hijos, el Cordero de Dios está ante vos, anhelando por vuestro Amor, confianza y devoción. Traed vuestros Corazones al Sagrado Corazón de Amor y sed abrumados por la gran Santidad, lo milagroso de Su Grandioso Amor. Abríos a Él. ¡Cuánto Él anhela vuestro Amor, como el Padre anhela por vuestro Amor!
Amados Hijos, preparad vuestros Corazones con la oración y devociones y la santidad de la Eucaristía. Llega un lapso de Tiempo en el que todo lo que es el más Santo de los Santos se ocultará o será tomado o se le impedirá estar con vos; ¿y donde estarán vuestros Corazones sin fe y confianza solidas, arraigando o atando o uniendo a vosotros mismos a Mi Corazón?
Hijos, este Mundo no es inmune a los castigos de sus entrañas, pues el Mundo retumba en protesta, y cuando una vez era de día, será de noche y cuando había canto, ahora hay lamentos, y donde había alegría habrá angustia. Amados Hijos, preparad vuestros Corazones con la oración constante. Sin la oración, vosotros sois débiles y un blanco fácil para las tinieblas. Vos sois fácilmente tomados y fácilmente heridos. Por lo tanto, Yo os digo, cuidad vuestras almas con gran firmeza y orad a vuestro Señor Dios, que os ama tan bien.
Amados Hijos, no dejéis de creer. Soy un Padre Amoroso y un Dios Justo. No podéis pecar y ser indiferentes a las consecuencias, pues éstas existen y cerrar los ojos a esto o negar esto es herir vuestras Almas casi en forma permanente. No podéis negar a vuestro Señor, ni podéis desdeñar a Mi Amado Hijo, Cristo, y ser salvados.
Amados Hijos, volved a Mí. Volved a Mi Amor y compasión. Yo estoy listo y ansioso para daros Mi Santo y purificador Perdón. Mi Amor y Misericordia son regalos tan INCREÍBLES, ASOMBROSOS, INCONMENSURABLES! No neguéis a vuestras Almas estos dones. ¡No os neguéis Mi Gran Amor!
Amados Hijos, Amad. Volved a Mí con Amor. Amad a Mis Amados Hijos y daos vuestro propio Amor y Misericordia el uno al otro. Amados Hijos, Mi Corazón se llena de alegría cuando vos estáis perdonando y amando a otros Hijos.
Reunid vuestra fuerza con vuestras plegarias. Siempre estoy con vosotros y siempre con esperanza, siempre esperando escuchar los clamores y las oraciones y palabras de vuestras Almas. Amados Hijos, os Amo y hoy os doy Mi Paz. Orad y la alegría es vuestra. Orad y vuestras almas vienen a lo Eterno con alegría. Orad y Mi Santa orientación es vuestra.
Orad y aumentad vuestro Amor y confianza en Mí.
Paz, Amados. Paz.
Viernes, 12 de agosto 2016 3:12-15:45
Oh Hijos, Mi Amor por vos es abundante y anhelo poder llevaros en Mi Amor con vuestra plena disposición. Yo soy el Señor Dios y Padre, y Amo a cada uno de vosotros tan inmensamente. Volved a Mí y a Mi Amor, y conoced la eterna Alegría, Paz y el Amor Más Grande. Venid a Mí, a través de vuestro Amor y plegarias a Mi Amado Hijo, Jesucristo, cuyo Corazón está lleno de Amor y Misericordia para este Mundo. Él ha establecido un camino seguro hacia Mí y a Mi Amor por su Amado y Milagroso, SANTO y GRANDE Sacrificio. Ningún otro acto de Amor ha sido tan GRANDE, MARAVILLLOSO, lleno de Oportunidad, Abundancia.
Yo soy el Señor Dios y anhelo por los Corazones de Mis Hijos.
Escuchadme, Hijos de Sión, pues vuestros pecados son muchos y Mi juicio de vos es justo. No os dejéis engañar por la paciencia y el engaño de las tinieblas ante vosotros. No soy un Padre y Dios intrusivo [entrometido], incluso con Mi Amor inmenso y Anhelo por vosotros. Tened en cuenta, Mis Amados Hijos, que las tinieblas si son intrusivas. Ellas desean arrebatar a Mis Amados Hijos de Mi y causar estragos en vuestras almas.
Amados Hijos, dadle la mano a Mi Amado Hijo, Jesucristo, pues vuestras almas son tan débiles y frágiles. Reunid fuerza para evitar el pecado por medio de las oraciones más profundas y un gran Amor por el Señor Jesucristo. Cuando alabáis al Hijo, vos alabáis al Padre, y al condenar al Hijo, de la misma manera vos condenáis al Padre. Y donde estaréis cuando las puertas del Cielo estén cerradas ante todas las tinieblas? Mi Reino es la perfección en la gracia, y no hay pecado adentro, porque Mi Corazón es el Amor y Amo a cada uno de vosotros y Yo deseo que estén cada uno de vosotros conmigo eternamente.
Yo no honro al pecado, Mis Amados. No podéis entrar al santuario cuando vuestra ropa está poseída [enloquecida] y las manos y los pies sucios. Vosotros no podéis entrar en el Reino de Dios cuando hay pecado asentado sobre vuestra pecho. Amados Hijos, buscad Mi GRAN Amor y Misericordia. Es un regalo, un regalo de Amor para vos y al mismo tiempo tan pocos de Mis Amados Hijos se acercan a Mí, para tomar este regalo de Amor.
Oh, Hijos errantes, no permitáis a vosotros mismos abrumarse con las vanidades y la destrucción de este Mundo temporal. A cambio, volved vuestros ojos hacia Mi Hijo, Cristo, que os adora tan INMENSAMENTE. Volved a Él, pues Su Amor y compasión son Eternos y no se desvanecen. Mi Amor no es temporal. Es grande y eterno. Elegid Mi Amor y perdón para que podáis vivir en Amor eterno, alegría, santidad.
Me hacéis feliz con vuestras oraciones fervientes, Mis Hijos. Todo lo que vosotros decís y oráis, Yo lo escucho con oídos ansiosos y atentos. Confiad en Mí, pues Mi Voluntad para vos es siempre correcta y Amorosa. Yo no llevo a Mis Hijos a lo que es veneno para vuestras almas. Vosotros sois Mis Hijos Amados, y Yo soy vuestro siempre Amoroso Padre. ¡Cuánto deseo que Mis Hijos sean alegres y llenos de paz! ¡Cuánto deseo que Mis Hijos vuelvan sus Corazones hacia Mí!
Yo soy la Vida, el Amor y YO SOY siempre y soy Eterno. No puedo reducir Mi Amor por vos, sino expandirlo. Mi Amor es GRANDE y sin fin. Amados Hijos, tratad vuestras Amadas Almas con cuidado, ya que son frágiles y fácilmente sucumben al pecado o a la tentación del pecado. Mirad al Cielo y a todo lo que es Santo y Eterno. No sucumbáis a los placeres momentáneos que os llevan al pecado. Por el contrario, orad a vuestro Dios, el Más Amoroso y Yo os concedo tanta dulce alegría y paz.
En la medida que os acerquéis a vosotros mismos, más cerca de Mi Corazón Amoroso, la alegría que encontrabais en lo temporal es sustituida por una alegría interior Espiritual, profunda, y GRANDE que Yo os doy a vosotros como un regalo por vuestro Amor y fe. No os conforméis con una pieza de oro cuando podríais obtener un cofre lleno, si vuestro trabajo es hecho.
Hijos, el Cordero de Dios está ante vos, anhelando por vuestro Amor, confianza y devoción. Traed vuestros Corazones al Sagrado Corazón de Amor y sed abrumados por la gran Santidad, lo milagroso de Su Grandioso Amor. Abríos a Él. ¡Cuánto Él anhela vuestro Amor, como el Padre anhela por vuestro Amor!
Amados Hijos, preparad vuestros Corazones con la oración y devociones y la santidad de la Eucaristía. Llega un lapso de Tiempo en el que todo lo que es el más Santo de los Santos se ocultará o será tomado o se le impedirá estar con vos; ¿y donde estarán vuestros Corazones sin fe y confianza solidas, arraigando o atando o uniendo a vosotros mismos a Mi Corazón?
Hijos, este Mundo no es inmune a los castigos de sus entrañas, pues el Mundo retumba en protesta, y cuando una vez era de día, será de noche y cuando había canto, ahora hay lamentos, y donde había alegría habrá angustia. Amados Hijos, preparad vuestros Corazones con la oración constante. Sin la oración, vosotros sois débiles y un blanco fácil para las tinieblas. Vos sois fácilmente tomados y fácilmente heridos. Por lo tanto, Yo os digo, cuidad vuestras almas con gran firmeza y orad a vuestro Señor Dios, que os ama tan bien.
Amados Hijos, no dejéis de creer. Soy un Padre Amoroso y un Dios Justo. No podéis pecar y ser indiferentes a las consecuencias, pues éstas existen y cerrar los ojos a esto o negar esto es herir vuestras Almas casi en forma permanente. No podéis negar a vuestro Señor, ni podéis desdeñar a Mi Amado Hijo, Cristo, y ser salvados.
Amados Hijos, volved a Mí. Volved a Mi Amor y compasión. Yo estoy listo y ansioso para daros Mi Santo y purificador Perdón. Mi Amor y Misericordia son regalos tan INCREÍBLES, ASOMBROSOS, INCONMENSURABLES! No neguéis a vuestras Almas estos dones. ¡No os neguéis Mi Gran Amor!
Amados Hijos, Amad. Volved a Mí con Amor. Amad a Mis Amados Hijos y daos vuestro propio Amor y Misericordia el uno al otro. Amados Hijos, Mi Corazón se llena de alegría cuando vos estáis perdonando y amando a otros Hijos.
Reunid vuestra fuerza con vuestras plegarias. Siempre estoy con vosotros y siempre con esperanza, siempre esperando escuchar los clamores y las oraciones y palabras de vuestras Almas. Amados Hijos, os Amo y hoy os doy Mi Paz. Orad y la alegría es vuestra. Orad y vuestras almas vienen a lo Eterno con alegría. Orad y Mi Santa orientación es vuestra.
Orad y aumentad vuestro Amor y confianza en Mí.
Paz, Amados. Paz.

NO DEJÉIS QUE VUESTRO AMOR POR MÍ MENGUE.
Miércoles, 27 de julio 2016 4:51-16:22 (31m)
Estoy aquí, con vos, siempre Amoroso, siempre a la espera de vuestra atención, por breve que sea. Vuestras lágrimas de dolor y vergüenza me tocan y Yo lleno vuestro Corazón de Amor. Os doy Mi Compasión y Paciencia y compasión. ¿No sabéis, Mi Hija, que Mi Amor os puede llenar, independientemente de vuestras debilidades?
Yo soy el Señor Dios y vuestro Amoroso, Cariñoso Padre. Mi Amor y afecto por vosotros son maduros y sólidos o firmes o bien establecidos. No dejo ir a Mis Amados Hijos, para que sus corazones se cambien o transformen por el Amor, porque el Amor es Eterno y el Amor es Gracia Salvífica. No Me podéis conocer o entender o reconocer cuando no Amáis. Hay aquellos que no Aman, y sus almas desafortunadas están en peligro por el pecado. Orad por estas Almas, pues ellas saquean la belleza y la inocencia de Mis Hijos y causan estragos en este Mundo. Hay pocos, pero suficientes, y cómo van a causar estragos. Sabed que las oraciones de los inocentes, los sabios, los santos, frenan la caída del hombre.
Yo Soy el Único y Verdadero Dios. Soy un juez justo y un Padre cálido. El juez ve sobre vos con frialdad, con nada más que objetividad u objeción o distanciamiento. Es esta la frialdad que asusta al Alma que nunca ha buscado la Misericordia. Oh, confundidos e infelices Hijos, ¿por qué os enfrentáis al frío sin Misericordia? Porque al dar un solo paso, vos recibís una recompensa, alimentos, seguridad, y la alegría oculta. Porque por un aliento, por una onza de confianza y humildad, se os da Amor incondicional, alivio, consuelo, y el más puro e incondicional Amor y Perdón.
Pensad, Mis Amados Hijos, nada que perdonar? Me canso o estoy cansado por vuestra creencia en esto. Hijos, Amados Hijos, vos sois Mis Amores y Yo soy de tal manera que Mi Amor por vos es Eterno, gratificante, y GRANDE. Vosotros no podéis comprenderme o lo que YO SOY porque Yo soy el Señor Dios que ha hecho a cada uno de vosotros y que ha Amado a cada uno y que ha Amado e invitado a cada uno de vosotros por Amor. Un Padre Amoroso busca Amor para sus Hijos Amados. Es dado, buscado y apreciado.
Oh, Amados Hijos, no dejéis que vuestras heridas y dudas o desfavores os aparten de Mí. No dejéis que vuestra fe y Amor en Mí mengue. Veo y conozco vuestros dolores y coloco Mi Mano sobre vuestra frente para traeros Mi Paz. No podéis conocer, sino sólo seguir Mi Voluntad. Es justa y buena. Vosotros no entendéis Mi voluntad para vos, pero Yo no os conduzco a los bosques aislados de la muerte, ni os doy áspides para contentaros, por Gloria. Yo soy el Señor Dios y Mi Amor por vos es completo, imparcial y total.
Desconcertados Hijos, hay paz en este mundo. La Paz puede ser mediante el perdón y el Amor más grande. Amados Hijos, vuestros corazones son tan jóvenes, tan frágiles y pequeños. Confiad en Mí y perdonad a vuestros hermanos y hermanas. A pesar de que uno ya esté muerto, perdonadlo. Incluso si un enemigo destruye la casa, perdonad y Amad. Acaso creéis que Yo no veo vuestra agonía, desesperación, y la fuerza del perdón? No sabéis que vuestro perdón de los enemigos me trae alegría extrema y total? Consuelo total. ¿Cómo contemplé a la Humanidad al ver a Mi Hijo Amado sacrificado de la manera más dolorosa y exhaustiva? Y aun os Amo. Yo os he Amado, Mis Amados Hijos, primero y siempre. Me habéis eludido, ignorado, ridiculizado, me habéis hecho daño; sin embargo, Yo estoy aquí siempre, vuestro Amado y Afabilísimo Padre.
No sabéis o imagináis la profundidad del Amor de Cristo? Él es Mi Hijo Amado y Él os da a cada uno de vosotros la Vida eterna por medio de Su Misericordia y compasión. ¿Quién puede salvaros de la Muerte Eterna, sino Jesucristo quién venció a la Muerte, para que pudierais disfrutar o estar seguros o salvados por los deseos intensos y el Amor del Cielo? La admisión al Reino de Dios no es una cosa fácil o asegurada. Por lo tanto, Cristo os ruega que meditéis y oréis profundamente. Pensad en la temporalidad o lo temporal o lo (poco) perdurable de esta vida y de los adornos ridículos o inútiles de este Mundo que atienden al ego, a la vanidad, la codicia, la ira, y el vicio, y a vivir en consecuencia. Os ruego que reflexionéis y vengáis a Mí en vuestra vida diaria.
No podéis encallar cuando Yo estoy con vos. No hay tormenta que no podáis enfrentar, cuando camináis sobre la senda del Señor. No hay traición que pueda tener éxito cuando vuestro Corazón está sumergido profundamente en el Corazón del Señor. Amados Hijos, uníos a Cristo y seguid Su senda tenazmente, con paciencia y con gran fervor. No seáis frívolos con el Tiempo, pues llega un día en el que la alegría del Cielo llegue a ser escasa y la autoridad o la fuerza de Mi Voluntad quede clara. Mejor estar bien dentro de las puertas antes de la puesta del sol, que ser colocado fuera de las puertas durante la noche del hurto.
Mirad a Mí, Amados Hijos. Orad y no os alejéis. Yo reúno a los que Me agradan y extraño a aquellos que complacen a este Mundo. Venid a Mí con la oración y conoced Mi Paz. Yo espero a cada uno de vosotros con gran anhelo y deseo de tener vuestro Amor dado libre y GRANDEMENTE a Mí, a vuestro Padre Amoroso y Generoso. Orad, Mis Hijos, y estad alerta en vuestra adoración. Orad y tened cuidado con los que os alejan de Mi Amor. Tened cuidado y sabed que Yo estoy siempre a vuestro lado. Donde hay Amor y perdón, ahí YO ESTOY. Paz, Mis Hijos. Paz.
Miércoles, 27 de julio 2016 4:51-16:22 (31m)
Estoy aquí, con vos, siempre Amoroso, siempre a la espera de vuestra atención, por breve que sea. Vuestras lágrimas de dolor y vergüenza me tocan y Yo lleno vuestro Corazón de Amor. Os doy Mi Compasión y Paciencia y compasión. ¿No sabéis, Mi Hija, que Mi Amor os puede llenar, independientemente de vuestras debilidades?
Yo soy el Señor Dios y vuestro Amoroso, Cariñoso Padre. Mi Amor y afecto por vosotros son maduros y sólidos o firmes o bien establecidos. No dejo ir a Mis Amados Hijos, para que sus corazones se cambien o transformen por el Amor, porque el Amor es Eterno y el Amor es Gracia Salvífica. No Me podéis conocer o entender o reconocer cuando no Amáis. Hay aquellos que no Aman, y sus almas desafortunadas están en peligro por el pecado. Orad por estas Almas, pues ellas saquean la belleza y la inocencia de Mis Hijos y causan estragos en este Mundo. Hay pocos, pero suficientes, y cómo van a causar estragos. Sabed que las oraciones de los inocentes, los sabios, los santos, frenan la caída del hombre.
Yo Soy el Único y Verdadero Dios. Soy un juez justo y un Padre cálido. El juez ve sobre vos con frialdad, con nada más que objetividad u objeción o distanciamiento. Es esta la frialdad que asusta al Alma que nunca ha buscado la Misericordia. Oh, confundidos e infelices Hijos, ¿por qué os enfrentáis al frío sin Misericordia? Porque al dar un solo paso, vos recibís una recompensa, alimentos, seguridad, y la alegría oculta. Porque por un aliento, por una onza de confianza y humildad, se os da Amor incondicional, alivio, consuelo, y el más puro e incondicional Amor y Perdón.
Pensad, Mis Amados Hijos, nada que perdonar? Me canso o estoy cansado por vuestra creencia en esto. Hijos, Amados Hijos, vos sois Mis Amores y Yo soy de tal manera que Mi Amor por vos es Eterno, gratificante, y GRANDE. Vosotros no podéis comprenderme o lo que YO SOY porque Yo soy el Señor Dios que ha hecho a cada uno de vosotros y que ha Amado a cada uno y que ha Amado e invitado a cada uno de vosotros por Amor. Un Padre Amoroso busca Amor para sus Hijos Amados. Es dado, buscado y apreciado.
Oh, Amados Hijos, no dejéis que vuestras heridas y dudas o desfavores os aparten de Mí. No dejéis que vuestra fe y Amor en Mí mengue. Veo y conozco vuestros dolores y coloco Mi Mano sobre vuestra frente para traeros Mi Paz. No podéis conocer, sino sólo seguir Mi Voluntad. Es justa y buena. Vosotros no entendéis Mi voluntad para vos, pero Yo no os conduzco a los bosques aislados de la muerte, ni os doy áspides para contentaros, por Gloria. Yo soy el Señor Dios y Mi Amor por vos es completo, imparcial y total.
Desconcertados Hijos, hay paz en este mundo. La Paz puede ser mediante el perdón y el Amor más grande. Amados Hijos, vuestros corazones son tan jóvenes, tan frágiles y pequeños. Confiad en Mí y perdonad a vuestros hermanos y hermanas. A pesar de que uno ya esté muerto, perdonadlo. Incluso si un enemigo destruye la casa, perdonad y Amad. Acaso creéis que Yo no veo vuestra agonía, desesperación, y la fuerza del perdón? No sabéis que vuestro perdón de los enemigos me trae alegría extrema y total? Consuelo total. ¿Cómo contemplé a la Humanidad al ver a Mi Hijo Amado sacrificado de la manera más dolorosa y exhaustiva? Y aun os Amo. Yo os he Amado, Mis Amados Hijos, primero y siempre. Me habéis eludido, ignorado, ridiculizado, me habéis hecho daño; sin embargo, Yo estoy aquí siempre, vuestro Amado y Afabilísimo Padre.
No sabéis o imagináis la profundidad del Amor de Cristo? Él es Mi Hijo Amado y Él os da a cada uno de vosotros la Vida eterna por medio de Su Misericordia y compasión. ¿Quién puede salvaros de la Muerte Eterna, sino Jesucristo quién venció a la Muerte, para que pudierais disfrutar o estar seguros o salvados por los deseos intensos y el Amor del Cielo? La admisión al Reino de Dios no es una cosa fácil o asegurada. Por lo tanto, Cristo os ruega que meditéis y oréis profundamente. Pensad en la temporalidad o lo temporal o lo (poco) perdurable de esta vida y de los adornos ridículos o inútiles de este Mundo que atienden al ego, a la vanidad, la codicia, la ira, y el vicio, y a vivir en consecuencia. Os ruego que reflexionéis y vengáis a Mí en vuestra vida diaria.
No podéis encallar cuando Yo estoy con vos. No hay tormenta que no podáis enfrentar, cuando camináis sobre la senda del Señor. No hay traición que pueda tener éxito cuando vuestro Corazón está sumergido profundamente en el Corazón del Señor. Amados Hijos, uníos a Cristo y seguid Su senda tenazmente, con paciencia y con gran fervor. No seáis frívolos con el Tiempo, pues llega un día en el que la alegría del Cielo llegue a ser escasa y la autoridad o la fuerza de Mi Voluntad quede clara. Mejor estar bien dentro de las puertas antes de la puesta del sol, que ser colocado fuera de las puertas durante la noche del hurto.
Mirad a Mí, Amados Hijos. Orad y no os alejéis. Yo reúno a los que Me agradan y extraño a aquellos que complacen a este Mundo. Venid a Mí con la oración y conoced Mi Paz. Yo espero a cada uno de vosotros con gran anhelo y deseo de tener vuestro Amor dado libre y GRANDEMENTE a Mí, a vuestro Padre Amoroso y Generoso. Orad, Mis Hijos, y estad alerta en vuestra adoración. Orad y tened cuidado con los que os alejan de Mi Amor. Tened cuidado y sabed que Yo estoy siempre a vuestro lado. Donde hay Amor y perdón, ahí YO ESTOY. Paz, Mis Hijos. Paz.

viernes, 15 de julio de 20016 2:15-14:47
Padre, ¿dónde se ha ido mi alegría? Es como si una luz se hubiera apagado y el Mundo sea su propio asco de nuevo. Te extraño. Extraño tus chistes y sorpresas divertidas. ¿Estoy en "descanso?" Bueno, Yo oraré y veré. Siento que Tú me atraes y Yo soy feliz de complacer a mi Papá perfecto.
Amados Hijos, vos debéis recurrir a Mí y aceptar Mi gran Amor por vosotros y la provocación. Yo deseo que cada uno de vosotros venga a las Manos seguras de su Amado Padre. Vosotros no podéis captar que YO SOY el Amor?
Deseo capturar vuestro Amor y conceder a Mis Amados Hijos grandes y santos regalos. ¡Cómo anhelo por vos! Tengo sed de cada uno de vosotros. Soy vuestro Padre Amado y Justo Juez. Mi Amor es Grande como lo es mi decepción por lo que veo en este Mundo de pecado. Pero Yo soy el Padre más compasivo y misericordioso. Venid a Mí, Mis Hijos. Venid a Mí con todos vuestros pecados y conoced la paz de Mi Perdón y mi Amor completo o íntegro. Yo os traigo paz con mi Amor y cuando vosotros Me dais vuestros corazones, ciertamente vos conoceréis o entenderéis la Gloria de Mi Amor.
Volved a Mí, Amados Hijos de la Luz. Yo veo a cada uno de vosotros, Mis Pequeños Hijos, y lloro por su desdeño hacia Mí. Vuestro desdeño por el Verdadero y Amado Cristo. El Cielo retumba en estado de shock y consternación por vuestro desdeño. Jesucristo es el Rey del Cielo y de la tierra. Él es el Rey de Toda la Gloria y Él es Mi más Amado y Beatífico Hijo. Cuando el encuentra alegría en Mis Hijos, así Yo comparto Su alegría. Cuando Él llora por Mis Hijos del Mundo, así también Yo lloro. Cuando vos adoráis al Hijo, adoráis al Padre. Y en la medida en que causéis consternación o hiráis al Hijo, también es herido el Padre.
Hijos pequeños, no traicionéis al Amor. Todo es para vos y Mi Amor es tan GRANDE, ESPECTACULAR o llenará vuestros corazones más de lo que os podáis dar cuenta o conozcáis. Mis Hijos son criaturas tan pequeñas o diminutas. Sois Mis Amados y Yo anhelo que mi Gran Amor sea correspondido.
Los vientos ya no tardan en soplar y en que el conjunto de animales salvajes de gigantes o demonios o dragones se abatan entre Mis Amados Hijos. Orad y sed misericordiosos con vuestros hermanos y hermanas. No hay otra manera o cosa que mitigue toda la agitación o el caos que viene por el pecado (a causa de nuestros pecados) o que vuestros pecados han traído estos estragos sobre vuestras cabezas. Sin embargo, os digo, a los constantes en la oración y Mis Amados, no tengáis miedo. Orad y amad a vuestro Santísimo Padre y cómo se calma mi Corazón. Se calma como un lago sin viento (sin olas). Se calma y se vuelve más cariñoso o más afectuoso.
¿Cómo puedes ser más cariñoso ??
Es la realidad de Mi Amor que, una vez asido por Mis Amado Hijos, las puertas de la alegría son abiertas por Mi Misericordia y el Perdón. Cuando Mis Amados Hijos, finalmente llegan a su Padre Amoroso, ellos sienten Mi Gran Afecto por primera vez y son hechos jubilosos por este nuevo Amor.
Uno que no conocían antes?
Amados Hijos, no podéis extraviaros solos por un desierto sin fin y sobrevivir sin la dulzura del agua. De la misma manera, vuestras Almas no pueden sobrevivir cuando vosotros no Me conocéis ni Me Amáis. Yo atraigo a cada uno de Mis Amados Hijos al Amor, a dar Amor, y a abrir vuestros corazones a Mi Amor.
No rechacéis Mis Apasionados Regalos de Amor y Misericordia . El juicio es un compañero frío y estéril, cuando no hay Misericordia para templar el juicio. Sabed que soy un Dios compasivo y un Padre severo. Veo los pecados del Hombre y miro con tanto desagrado y disgusto sobre éste o estos. No piensen que Yo acepto al pecado o a la maldad. Yo no lo acepto. Por lo tanto, Mis Amados Hijos deben conocer o discernir lo que Me gusta y lo que no acepto. El Espíritu guía a los constantes en la oración y os lleva al camino dulce y alegre de Cristo.
Amad a mi Amado y Sagrado Hijo, Jesucristo, pues, por su Amor por vosotros, vosotros sois redimidos del pecado. No rechacéis el Amor de Cristo que sacrificó la Vida para que vos pudierais evitar la muerte (la muerte eterna). No podéis comprender la naturaleza (LA GRANDEZA) del Sacrificio del Hijo del Hombre, porque vos sois aun finitos. Su Amor y su Sagrada Sangre os salvan de una oscuridad viciosa y eterna en la que no Me podréis encontrar o no Me encontraréis.
Cada uno de Mis Amados Hijos es recibido con Amor y compasión en Mis Brazos. No huyáis del Amor, sino corred hacia él. Yo soy un Dios majestuoso, santo y poderoso. Soy vuestro Padre Eterno y anhelo que Mis Amados Hijos se vuelvan a Mí. Estoy aquí, con vosotros siempre. No dudéis, sino daos cuenta o aseguraos de que mi Amor es verdadero y real y es vuestro.
Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestros días o el Tiempo. No esperéis en obsesiones Mundanas para obtener alegría y confort hasta que ya no tengáis más tiempo. Vosotros debéis venir a vuestro Santo Padre y Amado Dios inmediatamente. No soy un Amante intrusivo, pero ansío por vosotros tan grandemente. No esperéis. ¡No esperéis! Os imploro para que os deis cuenta y por vuestro Amor.
Hijos dulces, sabed llega un Momento en el que la Bondad, el Milagro, la ENORMIDAD del Cristo no serán encontradas por la mayoría. Habrá un lapso (una momento), donde el desierto sea estéril y su sed de Mí muy grande. No esperéis, sino tomad suficiente de vuestras aguas espirituales y preparaos para esa esterilidad. Amados Hijos, orad siempre. Orad siempre y sentid Mi Paz entre vosotros, Mis Amados Hijos. Paz este día y siempre conmigo.
Miércoles, 20 de julio 2016 3:08-03:34
Una vez más, lo siento. Si Tú quieres decir algo, por favor, Padre, habla en voz alta.
Amados Hijos, Yo soy para vos, como vos sois para Mí. Yo estoy con vosotros y doto a Mis Amados Hijos. Tened fe y confianza en Mi Voluntad Celestial para vosotros. No alimento a Mis Hijos Amados a los leones, ni os ofrezco víboras para jugar.
Vosotros sois para Mí, como Yo soy para vos. No os alejéis de Mí, Mis Hijos. Demasiados de vosotros están tan lejos de Mí. Tantos de vosotros rechazan mi Amor abierto y perdón dispuesto. Todo el Cielo está asombrado por vuestro desdeño de Mi Amor. El Corazón del Cielo, mi Amado Hijo, Jesucristo, se lamenta por vosotros y anhela vuestro Amor y llora por vuestro desdén. ¡Cuánto os Ama sin razón! (fuera de nuestro ámbito de razonamiento o entendimiento). Es un Amor GRANDE por vos, Mis Hijos, y sin embargo, vos rechazáis el don y la Gloria de Su Sacrificio para la Vida eterna.
Amados Hijos, no podéis saberlo o entenderlo, pues vuestros corazones son infantes. Mi Amor es el del océano (como un gran océano), inmenso, bello, fuerte, sin límites. Yo soy el Señor Dios. Yo Soy y he sido, y lo seré. Yo estoy en cada uno de vosotros y expando mi Amor a través de vos y Me lleno de alegría cuando Mis Hijos corresponden a Mi Amor.
Amados Hijos, no os dignéis a poner a prueba la Gloria de su Señor Dios. Soy un Señor justo. Soy un Padre compasivo. Soy vuestro Padre Celestial, y ansío por vuestro Amor, dado libremente a Mí, pues Yo no soy intrusivo. Voy a pedir vuestro Amor. Anhelaré por él. Pero No voy a exigir u obligar vuestro Amor. Vuestro Amor es un regalo para Mí cuando lo ofrecéis. Yo no soy intrusivo.
Sabed, Amados Hijos, que las tinieblas si son intrusivas. Por su diseño, os atraen por vuestra curiosidad humana. No pongáis vuestros corazones en peligro. No hiráis vuestras frágiles Almas al empaparos en las tinieblas desenfrenadas de este Mundo. A cambio, mirad a Mí y encontrad la paz y la alegría y el Amor y el alivio de Mi Gran Misericordia y Mi perdón.
Sois para Mí. Vosotros sois para el Amor. Venid a Mí, Amados Hijos. No seáis frívolos con vuestro tiempo, pues no sabéis cuando los cielos retumbarán y caerán. Cuando el fuego se desplome de los cielos grises. Cuando los dragones rojos den la vuelta. Aferraos a Mi Amor, pues Yo os protejo de la muerte. Por Mi Misericordia y Amor, a vos se os concede la Vida Eterna. ¿Quién va a elegir piedras y guijarros sobre el oro? ¿Quién va a rechazar el agua en gran sed? *** ¿Quién va a cerrar los ojos a las oscuridades y abrazar la Luz de Mi Amor Eterno?
Hijos, Amados Hijos, optad por Mí. (Vuestro) Señor Dios, que os adora y anhela por vosotros y besa vuestra frente para traeros consuelo y paz. Os sostengo en Mis Manos como si vosotros fuerais una piedra o cristal rompible. Mis Amados Hijos, vos sois tan frágiles. Confiad en Mí. Colocad vuestra confianza en Mí. Soy vuestro Padre bueno y os protegeré y alimentaré y os Amaré con todo lo que hay de Mí, y Yo soy el Todo de Todo.
Amados Hijos, pasad con cuidado, porque los dragones rojos matan. Ellos respiran fuego en el cielo e incluso mientras rugen, ellos echan ojos oscuros sobre tantas tierras. Ellos vuelan y están absorbiendo los manantiales de esta tierra y todo lo que sigue está en ruinas. Amados Hijos, orad. Orad y Amadme y a vuestros Hermanos y Hermanas Terrenales. Reservad vuestros corazones para el Amor y sólo el Amor.
No juzguéis, porque ése es Mi trabajo. Yo soy el Señor Dios y la perfección. Amad y perdonad a vuestros Hermanos y Hermanas, y orad. Vuestras oraciones para Mí son como la música en los aposentos del Cielo, donde hay alegría y abrazos a vuestras oraciones.
No tengáis miedo, Mis Amados Hijos. Nunca perdáis la fe en Cristo Jesús, Mi Hijo Beatífico a quien Yo Amo. Confiad en Él y permitid que mi Hijo Amado os guíe a Mí mientras lo Améis y confiéis en él. Cuando vos Amáis al Hijo, vos Amáis al Padre. Cuando vos ignoráis al Hijo, así vos ignoráis al Padre.
Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo soplo Vida a cada uno de vosotros y anhelo por vuestro Amor. Amados Hijos, no os extraviéis, sino caminad por la senda que Mi Hijo Amado ha puesto delante de vos, para que podáis disfrutar o encontrar el Amor GRANDE en el Reino de los Cielos. Decid “Si” a Mi Amor y abríos a Mi Abrazo. Conocedme, Amados Hijos, y no os alejéis. Orad, Mis Hijos y sabed que escucho cada oración y respondo a cada oración y Mi Voluntad para vos es perfecta y buena. Orad, Mis Hijos, y estad en paz. Paz, Mis Amados. Paz.

Soy vuestro Padre Amado
Jueves, 30 de junio 2016 3:15-15:42
¿Y por qué me aguantas ??
Amor, Mi Hija. Estoy lleno de Amor por vos y Yo soy el Amor. Mis Hijos son Mi Amor, y ¡acaso puede un padre que adora, dar la espalda a un niño indefenso y dulce o amable o inocente?
Os protejo como a un niño. Os amo como a un niño. Espero con entusiasmo por vos, como un niño. Soy vuestro Amado Progenitor y Padre Santísimo. Os he hecho por Amor y desde el Amor y con tanto Amor. No dudéis que Yo soy el Padre que Ama y protege y anhela veros felices y atesorados.
Mi Voluntad es para vuestra gracia, Mis Hijos. ¡Cómo colmo de Bendiciones, grandes Bendiciones sobre vos!. Emanan del Amor y Yo soy Amor. Colocad esta seguridad o verdad dentro de vuestros corazones, Amor mío. Amo a cada uno de vosotros tan entrañablemente, incluso cuando me ignoráis. Venid a Mí, Mis Amados Hijos, porque Yo soy para vos, como vos sois para Mí.
Amados Hijos, no tenéis que esperar mucho. Por lo tanto, Yo os digo, estad listos. Preparaos para la Gloria de Dios, del Hijo, que es Cristo, para que venga a llenaros de Su maravilla y Amor y compasión y pasión por el Amor.
Él es el REY del Cielo y de la tierra. Por lo tanto Yo os digo, Mis Amados Hijos, adorad a Cristo Jesús. Amadlo con Corazones abiertos y GRANDES. No reservéis nada de vuestro Amor, porque Él lo anhela como Yo lo anhelo, y se Lo merece, como Yo lo merezco. Vuestro Amor es un bálsamo para Su Corazón Roto. Su Sagrado Corazón es tierno y está golpeado por las heridas de este Mundo. ¡Cuánto anhela Él abrazaros, como Yo, pues Nosotros somos Uno y Amamos a cada uno de vosotros como únicas, sorprendentes, y Bellas Creaturas.
¿Cómo pueden dudar Mis Amados Hijos de Mi más Bendito y Sagrado Amor? Hijos, ¡cuánto os anhelo! Tengo sed de vos y de vuestro Amor y atención. Venid a Mí, a toda prisa y no temáis. Estoy siempre, siempre con vos y no dejo o no puedo dejaros, a vos Mis Hermosos y Amados Hijos, solos a su suerte. Mi Corazón es vuestro, mis Hijos. Por lo tanto Yo os digo, prestad atención y comprended la compasión y disposición de obtener Misericordia de Mí. Es vuestra. Es un árbol que da grandiosos frutos. Arrancad las Bendiciones de Mi Amor. La compasión, el perdón, la Misericordia. Estos son Mis MÁS GRANDES Regalos para vos, forjados o comprados por Mi Hijo, Mi Hijo Bendito, por medio de Su Vida y Alma.
Mi Hijo Amado es Cristo, Jesús. Rendidle Culto y adoradlo. Seguidle a Él y a su Bendito Camino, hacia la Gloria en el Cielo. Oh, Hijos Míos, vos sois tales maravillas, tan increíbles .... Mi Amor por vos es suave y puro y os envuelve como el calor del sol. Yo Soy vuestro Padre Amado y busco a cada uno de vosotros para atesoraros o penetrarlos en Mi Gran y Glorioso Amor [ENORME!]. No sois más que cosas pequeñas y sin embargo, tan grandes en Mi Corazón.
Venid a Mí, Mis Hijos. Venid a la Bondad y Bendición. ¿Por qué retrasarse? ¿Por qué arrojar el río de la Misericordia? ¿Por qué pasar por alto la abundancia de Mi Amor? Yo soy el Señor Dios y veo u observo a cada uno de vosotros con ojos cariñosos y Amorosos. Yo veo y espero y me pregunto por vuestra vacilación. Venid al Amor, porque Yo soy vuestro para obtenerme.
Hijos Pequeños y Maravillosos, venid a Mí, a vuestro Padre Celestial. Permitidme abrazaros en el Amor y el perdón. Anhelo mostrar Mi Amor por vos más GRANDEMENTE o más obviamente, pues los ojos de Mis Hijos son débiles y vuestros Amados Corazones fatigados. Amados Hijos, no dudéis de Mi Amor por cada uno de vosotros. Yo no separo a Mis Amados Hijos, sino que os abrazo en el Amor, a todos juntos como Un Amor perfecto.
Amados Hijos, este Mundo está cansado de sus pecados y conoce el carácter definitivo de la catástrofe. Yo soy el Señor Dios y mitigo estas cosas, estos terribles bostezos del Mundo, que duelen por causa de Mi siempre-ardiente Amor por vos.
Soy el aquí y el ahora y el siempre. Anheladme, Amados Hijos. Deseadme con vehemencia, y enviad vuestras oraciones, ya que son canciones en las alturas del Cielo. Vuestras voces claman a Mí y Yo las escucho. Yo escucho y respondo a cada uno de vosotros. Estad quietos, Mis Hijos, y llevad vuestros corazones preocupados a descansar. Yo estoy con vosotros siempre y por lo tanto, ¿cómo podéis dudar? ¿Cómo podéis dudar que Yo estoy en el Mundo en el que vivís y no me restrinjo por sus reglas de Amor limitadas o pequeñísimas [capacidades limitadas para amar.] Pues no hay límites o reglas de Amor.
Venid a Mí, Mi Hijo. Traedme vuestras esperanzas y deseos. Traedme vuestras oraciones de miedo. Confiad en Mí para fortalecer vuestros Corazones y rescatar vuestras Almas. Confiad en Mí, Mis Amados Hijos, porque vos sois míos y Yo soy vuestro. Confiad en Mí y Mi Voluntad para vosotros es de lo más verdadera y Buena.
Amados Hijos, Yo os digo descansad. No os fatiguéis pero sed constantes en la oración. Yo deseo vuestras oraciones entusiastas y Amo las canciones que cantáis por ellas. Amados Hijos, Yo soy vuestro, como vos sois Míos. Por lo tanto, yo os digo, descansad en el conocimiento y la confianza de Mi GRAN Amor.
En verdad, Mis Hijos, os digo que, recéis y seáis devotos a Cristo, que es Mi Hijo. Mi hijo Devoto. Y tal alegría y Amor creciente o pulsante o en aumento lleváis a Mi corazón. [Es decir, en términos de pulsante, que Su Amor es una cosa en crecimiento - algo que no podemos entender, y ¡cómo crece!]
Paz mis Hijos. Abrazad Mi Paz este día y todos los demás días. Paz. Paz.
Jueves, 30 de junio 2016 3:15-15:42
¿Y por qué me aguantas ??
Amor, Mi Hija. Estoy lleno de Amor por vos y Yo soy el Amor. Mis Hijos son Mi Amor, y ¡acaso puede un padre que adora, dar la espalda a un niño indefenso y dulce o amable o inocente?
Os protejo como a un niño. Os amo como a un niño. Espero con entusiasmo por vos, como un niño. Soy vuestro Amado Progenitor y Padre Santísimo. Os he hecho por Amor y desde el Amor y con tanto Amor. No dudéis que Yo soy el Padre que Ama y protege y anhela veros felices y atesorados.
Mi Voluntad es para vuestra gracia, Mis Hijos. ¡Cómo colmo de Bendiciones, grandes Bendiciones sobre vos!. Emanan del Amor y Yo soy Amor. Colocad esta seguridad o verdad dentro de vuestros corazones, Amor mío. Amo a cada uno de vosotros tan entrañablemente, incluso cuando me ignoráis. Venid a Mí, Mis Amados Hijos, porque Yo soy para vos, como vos sois para Mí.
Amados Hijos, no tenéis que esperar mucho. Por lo tanto, Yo os digo, estad listos. Preparaos para la Gloria de Dios, del Hijo, que es Cristo, para que venga a llenaros de Su maravilla y Amor y compasión y pasión por el Amor.
Él es el REY del Cielo y de la tierra. Por lo tanto Yo os digo, Mis Amados Hijos, adorad a Cristo Jesús. Amadlo con Corazones abiertos y GRANDES. No reservéis nada de vuestro Amor, porque Él lo anhela como Yo lo anhelo, y se Lo merece, como Yo lo merezco. Vuestro Amor es un bálsamo para Su Corazón Roto. Su Sagrado Corazón es tierno y está golpeado por las heridas de este Mundo. ¡Cuánto anhela Él abrazaros, como Yo, pues Nosotros somos Uno y Amamos a cada uno de vosotros como únicas, sorprendentes, y Bellas Creaturas.
¿Cómo pueden dudar Mis Amados Hijos de Mi más Bendito y Sagrado Amor? Hijos, ¡cuánto os anhelo! Tengo sed de vos y de vuestro Amor y atención. Venid a Mí, a toda prisa y no temáis. Estoy siempre, siempre con vos y no dejo o no puedo dejaros, a vos Mis Hermosos y Amados Hijos, solos a su suerte. Mi Corazón es vuestro, mis Hijos. Por lo tanto Yo os digo, prestad atención y comprended la compasión y disposición de obtener Misericordia de Mí. Es vuestra. Es un árbol que da grandiosos frutos. Arrancad las Bendiciones de Mi Amor. La compasión, el perdón, la Misericordia. Estos son Mis MÁS GRANDES Regalos para vos, forjados o comprados por Mi Hijo, Mi Hijo Bendito, por medio de Su Vida y Alma.
Mi Hijo Amado es Cristo, Jesús. Rendidle Culto y adoradlo. Seguidle a Él y a su Bendito Camino, hacia la Gloria en el Cielo. Oh, Hijos Míos, vos sois tales maravillas, tan increíbles .... Mi Amor por vos es suave y puro y os envuelve como el calor del sol. Yo Soy vuestro Padre Amado y busco a cada uno de vosotros para atesoraros o penetrarlos en Mi Gran y Glorioso Amor [ENORME!]. No sois más que cosas pequeñas y sin embargo, tan grandes en Mi Corazón.
Venid a Mí, Mis Hijos. Venid a la Bondad y Bendición. ¿Por qué retrasarse? ¿Por qué arrojar el río de la Misericordia? ¿Por qué pasar por alto la abundancia de Mi Amor? Yo soy el Señor Dios y veo u observo a cada uno de vosotros con ojos cariñosos y Amorosos. Yo veo y espero y me pregunto por vuestra vacilación. Venid al Amor, porque Yo soy vuestro para obtenerme.
Hijos Pequeños y Maravillosos, venid a Mí, a vuestro Padre Celestial. Permitidme abrazaros en el Amor y el perdón. Anhelo mostrar Mi Amor por vos más GRANDEMENTE o más obviamente, pues los ojos de Mis Hijos son débiles y vuestros Amados Corazones fatigados. Amados Hijos, no dudéis de Mi Amor por cada uno de vosotros. Yo no separo a Mis Amados Hijos, sino que os abrazo en el Amor, a todos juntos como Un Amor perfecto.
Amados Hijos, este Mundo está cansado de sus pecados y conoce el carácter definitivo de la catástrofe. Yo soy el Señor Dios y mitigo estas cosas, estos terribles bostezos del Mundo, que duelen por causa de Mi siempre-ardiente Amor por vos.
Soy el aquí y el ahora y el siempre. Anheladme, Amados Hijos. Deseadme con vehemencia, y enviad vuestras oraciones, ya que son canciones en las alturas del Cielo. Vuestras voces claman a Mí y Yo las escucho. Yo escucho y respondo a cada uno de vosotros. Estad quietos, Mis Hijos, y llevad vuestros corazones preocupados a descansar. Yo estoy con vosotros siempre y por lo tanto, ¿cómo podéis dudar? ¿Cómo podéis dudar que Yo estoy en el Mundo en el que vivís y no me restrinjo por sus reglas de Amor limitadas o pequeñísimas [capacidades limitadas para amar.] Pues no hay límites o reglas de Amor.
Venid a Mí, Mi Hijo. Traedme vuestras esperanzas y deseos. Traedme vuestras oraciones de miedo. Confiad en Mí para fortalecer vuestros Corazones y rescatar vuestras Almas. Confiad en Mí, Mis Amados Hijos, porque vos sois míos y Yo soy vuestro. Confiad en Mí y Mi Voluntad para vosotros es de lo más verdadera y Buena.
Amados Hijos, Yo os digo descansad. No os fatiguéis pero sed constantes en la oración. Yo deseo vuestras oraciones entusiastas y Amo las canciones que cantáis por ellas. Amados Hijos, Yo soy vuestro, como vos sois Míos. Por lo tanto, yo os digo, descansad en el conocimiento y la confianza de Mi GRAN Amor.
En verdad, Mis Hijos, os digo que, recéis y seáis devotos a Cristo, que es Mi Hijo. Mi hijo Devoto. Y tal alegría y Amor creciente o pulsante o en aumento lleváis a Mi corazón. [Es decir, en términos de pulsante, que Su Amor es una cosa en crecimiento - algo que no podemos entender, y ¡cómo crece!]
Paz mis Hijos. Abrazad Mi Paz este día y todos los demás días. Paz. Paz.

AMAD A MI MÁS SAGRADO HIJO
Martes, 21 de junio 2016 03:16-03:54
****
Padre, me preocupo. Me preocupo por aquellos que necesitan de Tus palabras.
Y ¿no os preocuparás por ti misma, Pequeña Hija? **** Tú eres Mi Conducto, Mi Embarcación, y todas las cosas que digo, revelo, son para el mejoramiento de Mis Queridos Hijos.
¿Cómo dudáis, Mis Amados! ¿Cómo os basáis en este tipo de cosas humanas! Secad vuestros ojos, Mis Hijos Amados ****. Yo soy el Único y Verdadero Dios. A través de Mí, hay Vida. Sin Mí, solo muerte. No podéis servir a Mí y a este Mundo. Aprended esto, Mis Hijos, pues no podéis olvidar Mi Amor, porque estáis cansados de este Mundo. Yo doy fuerza a Mis Hijos y anhelo escuchar sus voces pronunciando alabanzas a Mi nombre.
¿No veis o sentís el Amor que emana de Mí y hacia vos? **** Soy Amor y Yo Amo y lo que Yo Amo, lo valoro y adoro y protejo. Vosotros sois Mi Amor, Mi Amor eterno y por eso ruego a vosotros que estéis conmigo. Venid a Mí con toda vuestra pecaminosidad y Yo voy a envolver vuestro Corazón en compasión y Amor. Soy para vos, como vos sois para Mí. No dudéis. No confiéis en lo externo para traeros la creencia sólida o Amor no correspondido.
Estoy con vosotros. Estoy con ustedes cuando os dormís y cuando os despertáis. Yo estoy con vosotros cuando dudáis y cuando oráis. Estoy con vosotros cuando vos sois débiles y cuando sois fuertes. Yo estoy con vos, y anhelo vuestro Amor. ¡Cuánto vuestro Amado y Entrañablísimo Padre os adora! [Sensación enorme de Amor aquí.] Venid a Mí con todo vuestro miedo y conoced la paz de la Vida Eterna y el Amor.
Yo os elevo hasta Mi Corazón y os doy una elección.
Quedad perplejos [maravillados] de Amor y dejad que siempre os lleve, pues yo soy el Amor y deseo que vengáis a Mí. Yo soy el Señor Dios. Todo lo que hago, lo hago por Mis Hijos dentro de este Mundo, ya sea que haya Amor u odio o indiferencia para Mi Hijo. Os doy grandes regalos de bendiciones y esperando a que puedan llegar a conocer o entender o confiar en la Gloria de Mi Amor. [Es decir, Él tiene paciencia con nuestra falta de Amor y nos da el don de contar con más tiempo para arrepentirse, debido a Su Amor por nosotros.]
Mi Amor es Jesucristo, quien ha dado a este Mundo todo. ¡No podéis vivir sin el Amor de Cristo! ¡Cuánto añoramos por vosotros y rogamos o esperamos con gran Amor, que volváis a vuestro Señor Dios por consuelo, redención, Amor y Vida eterna. No hay nadie, sino Mi Amado y entrañable Hijo, Cristo. No se puede venir a Mí, sino a través de vuestro Amor honesto o sincero o en aumento por el Hijo. Él es Mi Hijo, a quien Yo Amo desde todos los siglos. Sabed que vuestro culto al Hijo me trae alegría y al adorar al Hijo, vos adoráis al Padre y me enamoráis con vuestro Amor.
No puedo dejar que el Amor de muchos sea superado por las tinieblas de unos pocos. Por lo tanto os digo, Amados Hijos Míos, rezad, ya que hay perversidad sobre vos. Orad y Mi protección Amorosa es vuestra. No seáis ingenuos ante el mal, por el contrario, reconoced su abundancia y su deseo de llevar a Mis Hijos hacia abajo. Vuestra oración disminuye lo que viene, así (como) quita el mal. Yo soy el Señor Dios. Yo soy un Dios celoso y un Señor justo. Mantengo a los enemigos a distancia y Yo doy la bienvenida a Mis ciudadanos en la seguridad de Mi Reino o Mi Santo Reino. No os dejéis engañar, ya que hay muchos que os van a engañar. Buscad a los que Aman al Hijo de Dios y rechazad los que solo fingen hacerlo. [Los que fingen amarle sólo para ganar significancia o importancia.] El Espíritu Santo guía a los constantes en la oración a la luz del Cordero. No dudéis sino sed constantes en la oración.
No echéis vuestros lotes con los de Satanás o el Leviatán. Él está entre vosotros y aun cuando Yo os digo, no temáis, Yo os digo sed conscientes de sus engaños y habilidades sutiles. El Mundo se ha echado a andar con el simple accionamiento de una hoja de plata por el que es "inofensivo" o parece inofensivo. Os digo, rezad por la claridad y permitid que el Espíritu Santo os guie. Hay los que son buenos y los que tratan de herir al Señor Dios. [Al no amarlo o no rezar, o engañando a los demás.]
Sed conscientes de vuestras oraciones y poned vuestro Amor y lealtad y confianza en Cristo Jesús. Él es el Camino, la Luz, el Sendero. No os desviéis de Su Amor. Donde haya una grieta o debilidad en el Amor, en el Amor puro, ahí están las tinieblas que tratan de entrar en el Alma. Por lo tanto Yo os digo, orad. Venid a Mí, para obtener la fuerza, el perdón, la pasión y el Amor. Yo soy el Dios Padre y Jesucristo es Mi Hijo. Trabajad y orad en Mi Nombre y conoced la gloria de Dios en el Cielo! **** A Jesucristo, que ha salvado y es Mi Hijo Amado y Dispuesto. Todos aquellos que son parte de, o una pieza de Amor postraos a Sus pies para adoradle y Amar a Mi Hijo Más Sagrado.
Tened cuidado con los que pudieran engañaros al no hablar de Cristo, Mi Hijo Amado, pues los que negarán son aquellos que son más oscuros y tortuosos. Yo soy el Señor Dios, y Jesucristo es Mi Hijo Amado. Él es vuestra salvación. Él es la salvación del Mundo y por lo tanto, debe ser glorificado, Amado y adorado. Adorad a los pies de Jesucristo y sabed que vosotros sois inmersos o envueltos en la Vida Eterna, nacidos de Amor, por Amor, porque vos sois tan Amados.
[ ¡¡Guau!!]
Mis Hijos, calmaos y sabed que lo que es, será, y todo lo que Yo soy es el Amor. Confiad en Mí y no conoceréis ningún miedo. Confiad en Mí y vivid en la alegría. Confiad en Mí y Yo sé que os guiaré al camino de la Misericordia y la redención. Vos sois perdonados, cuando venís con humildad hacia Mí. Vos sois Mis Amores, pues el médico cura a los que están enfermos, y el Señor Amoroso calma las heridas de los más grandes pecadores y es grandemente gratificado por vuestras súplicas.
Mi Amor por vos es arrebatador y grandioso [Grande!]. No podéis ahuyentar Mi Amor, porque es vuestro. No podéis ahuyentarme, ya que son Míos. Amadme con todos vuestros frágiles y humildes corazones y, por tanto, Yo os concedo paz en este día y en todos los demás.
Martes, 21 de junio 2016 03:16-03:54
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Padre, me preocupo. Me preocupo por aquellos que necesitan de Tus palabras.
Y ¿no os preocuparás por ti misma, Pequeña Hija? **** Tú eres Mi Conducto, Mi Embarcación, y todas las cosas que digo, revelo, son para el mejoramiento de Mis Queridos Hijos.
¿Cómo dudáis, Mis Amados! ¿Cómo os basáis en este tipo de cosas humanas! Secad vuestros ojos, Mis Hijos Amados ****. Yo soy el Único y Verdadero Dios. A través de Mí, hay Vida. Sin Mí, solo muerte. No podéis servir a Mí y a este Mundo. Aprended esto, Mis Hijos, pues no podéis olvidar Mi Amor, porque estáis cansados de este Mundo. Yo doy fuerza a Mis Hijos y anhelo escuchar sus voces pronunciando alabanzas a Mi nombre.
¿No veis o sentís el Amor que emana de Mí y hacia vos? **** Soy Amor y Yo Amo y lo que Yo Amo, lo valoro y adoro y protejo. Vosotros sois Mi Amor, Mi Amor eterno y por eso ruego a vosotros que estéis conmigo. Venid a Mí con toda vuestra pecaminosidad y Yo voy a envolver vuestro Corazón en compasión y Amor. Soy para vos, como vos sois para Mí. No dudéis. No confiéis en lo externo para traeros la creencia sólida o Amor no correspondido.
Estoy con vosotros. Estoy con ustedes cuando os dormís y cuando os despertáis. Yo estoy con vosotros cuando dudáis y cuando oráis. Estoy con vosotros cuando vos sois débiles y cuando sois fuertes. Yo estoy con vos, y anhelo vuestro Amor. ¡Cuánto vuestro Amado y Entrañablísimo Padre os adora! [Sensación enorme de Amor aquí.] Venid a Mí con todo vuestro miedo y conoced la paz de la Vida Eterna y el Amor.
Yo os elevo hasta Mi Corazón y os doy una elección.
Quedad perplejos [maravillados] de Amor y dejad que siempre os lleve, pues yo soy el Amor y deseo que vengáis a Mí. Yo soy el Señor Dios. Todo lo que hago, lo hago por Mis Hijos dentro de este Mundo, ya sea que haya Amor u odio o indiferencia para Mi Hijo. Os doy grandes regalos de bendiciones y esperando a que puedan llegar a conocer o entender o confiar en la Gloria de Mi Amor. [Es decir, Él tiene paciencia con nuestra falta de Amor y nos da el don de contar con más tiempo para arrepentirse, debido a Su Amor por nosotros.]
Mi Amor es Jesucristo, quien ha dado a este Mundo todo. ¡No podéis vivir sin el Amor de Cristo! ¡Cuánto añoramos por vosotros y rogamos o esperamos con gran Amor, que volváis a vuestro Señor Dios por consuelo, redención, Amor y Vida eterna. No hay nadie, sino Mi Amado y entrañable Hijo, Cristo. No se puede venir a Mí, sino a través de vuestro Amor honesto o sincero o en aumento por el Hijo. Él es Mi Hijo, a quien Yo Amo desde todos los siglos. Sabed que vuestro culto al Hijo me trae alegría y al adorar al Hijo, vos adoráis al Padre y me enamoráis con vuestro Amor.
No puedo dejar que el Amor de muchos sea superado por las tinieblas de unos pocos. Por lo tanto os digo, Amados Hijos Míos, rezad, ya que hay perversidad sobre vos. Orad y Mi protección Amorosa es vuestra. No seáis ingenuos ante el mal, por el contrario, reconoced su abundancia y su deseo de llevar a Mis Hijos hacia abajo. Vuestra oración disminuye lo que viene, así (como) quita el mal. Yo soy el Señor Dios. Yo soy un Dios celoso y un Señor justo. Mantengo a los enemigos a distancia y Yo doy la bienvenida a Mis ciudadanos en la seguridad de Mi Reino o Mi Santo Reino. No os dejéis engañar, ya que hay muchos que os van a engañar. Buscad a los que Aman al Hijo de Dios y rechazad los que solo fingen hacerlo. [Los que fingen amarle sólo para ganar significancia o importancia.] El Espíritu Santo guía a los constantes en la oración a la luz del Cordero. No dudéis sino sed constantes en la oración.
No echéis vuestros lotes con los de Satanás o el Leviatán. Él está entre vosotros y aun cuando Yo os digo, no temáis, Yo os digo sed conscientes de sus engaños y habilidades sutiles. El Mundo se ha echado a andar con el simple accionamiento de una hoja de plata por el que es "inofensivo" o parece inofensivo. Os digo, rezad por la claridad y permitid que el Espíritu Santo os guie. Hay los que son buenos y los que tratan de herir al Señor Dios. [Al no amarlo o no rezar, o engañando a los demás.]
Sed conscientes de vuestras oraciones y poned vuestro Amor y lealtad y confianza en Cristo Jesús. Él es el Camino, la Luz, el Sendero. No os desviéis de Su Amor. Donde haya una grieta o debilidad en el Amor, en el Amor puro, ahí están las tinieblas que tratan de entrar en el Alma. Por lo tanto Yo os digo, orad. Venid a Mí, para obtener la fuerza, el perdón, la pasión y el Amor. Yo soy el Dios Padre y Jesucristo es Mi Hijo. Trabajad y orad en Mi Nombre y conoced la gloria de Dios en el Cielo! **** A Jesucristo, que ha salvado y es Mi Hijo Amado y Dispuesto. Todos aquellos que son parte de, o una pieza de Amor postraos a Sus pies para adoradle y Amar a Mi Hijo Más Sagrado.
Tened cuidado con los que pudieran engañaros al no hablar de Cristo, Mi Hijo Amado, pues los que negarán son aquellos que son más oscuros y tortuosos. Yo soy el Señor Dios, y Jesucristo es Mi Hijo Amado. Él es vuestra salvación. Él es la salvación del Mundo y por lo tanto, debe ser glorificado, Amado y adorado. Adorad a los pies de Jesucristo y sabed que vosotros sois inmersos o envueltos en la Vida Eterna, nacidos de Amor, por Amor, porque vos sois tan Amados.
[ ¡¡Guau!!]
Mis Hijos, calmaos y sabed que lo que es, será, y todo lo que Yo soy es el Amor. Confiad en Mí y no conoceréis ningún miedo. Confiad en Mí y vivid en la alegría. Confiad en Mí y Yo sé que os guiaré al camino de la Misericordia y la redención. Vos sois perdonados, cuando venís con humildad hacia Mí. Vos sois Mis Amores, pues el médico cura a los que están enfermos, y el Señor Amoroso calma las heridas de los más grandes pecadores y es grandemente gratificado por vuestras súplicas.
Mi Amor por vos es arrebatador y grandioso [Grande!]. No podéis ahuyentar Mi Amor, porque es vuestro. No podéis ahuyentarme, ya que son Míos. Amadme con todos vuestros frágiles y humildes corazones y, por tanto, Yo os concedo paz en este día y en todos los demás.
TENGO SED DE VUESTRA ATENCIÓN
Jueves, 12 de mayo 2016 3:12-15:42
Hija, Mi Amada Hija, Yo estoy siempre contigo y no te dejo sola. Yo estoy contigo siempre y no debes dudar. Porque el Cordero es Mi Hijo Amado y Él anhela salvarte y a otros. Él Llora como Yo lloro, pues este Mundo es un Mundo desolado, pecaminoso.
Orad, Mis Amados y veréis la Gracia de Dios. Seres Santos, que sois tan puros, daos prisa para aumentar el número de las Almas que Yo llevaré. Soy Yo, el Señor Dios y Padre Inmortal que busca a todos los Hijos entre vosotros. No tengo más que Amor por Mis Hijos Amados, y aquellos que duden de esto por sus propias inequidades, sólo necesitan llamarme y Mi Compasión y Perdón son vuestros
Hijos, anhelo por vos. Anhelo por vuestro Amor. ¿No creéis en Mi Amor Eterno por vosotros? Ansío hasta el dolor por vuestro Amor y tengo sed de vuestra atención. Volved a Mí, Mis Amados Hijos, y sabed que la Misericordia es vuestra. Volved a Mí, Mis Amados y Yo seré glorificado y hecho feliz por vuestro Amor. No os apartéis de Mí, aunque sea por un día, ni una hora. Es esto lo que arruina vuestras almas. Mi Amor os cubre con calidez y alegría y tantas bendiciones. No podéis vivir sin la Gloria de Mi GRAN Amor.
Mis Hijos, estoy aquí por cada uno de vosotros y no arrojo ninguna calumnia sobre Mis Hijos Amorosos. Soy vuestro Padre Todopoderoso y Eterno. ¿Qué padre no Ama a su hijo? ¿Qué padre no impediría al hijo del daño (de ser dañado)? Busco Amar a cada uno de vosotros y el Momento para que correspondáis a mi Amor es ahora. Aumentad vuestra fe en Mí y estad atentos. Anhelo escuchar vuestras voces clamando por Mí. Es una canción en el Cielo y Yo respondo a todos vuestros llamados. Si os encontráis en la angustia, llamadme. Cuando tengáis miedo, clamad por vuestro Padre Amoroso. No dudéis en confiar en Mí, pues un hijo confía en su padre. Yo soy el Señor Dios y Padre, y todo lo que hago es por vosotros, Mis Amados Hijos. Incluso en Mi consternación, Yo os Amo como nadie más. Vosotros no sois capaces de medir Mi GRAN Amor por vosotros. Si tan solo pudierais saber, qué contentos y llenos de júbilo seríais. ¡Qué tan grandes serían vuestros corazones!, pues Yo soy el Amor y el Hombre no puede vivir sin Amor.
Venid a Mí, Hijos abandonados. Veo vuestras heridas y lloro por vos. Veo vuestros sufrimientos y anhelo confortaros con Mi Amor Puro y Eterno. Venid a Mí, Mis Desconcertados Hijos. Cuando el tiempo os haya fatigado de la Vida, volved a Mí con todas vuestras ansiedades y sabed que Mi Amor os sostendrá. Vosotros sois Mis Hijos Amados, y Yo os he hecho de Mi Amor y por Mi Amor. No dudéis sino creed con todos vuestros corazones o de todo corazón en Mi Amor por vosotros. Yo soy el Señor Dios y doy a Mis Hijos buenos regalos. Yo os doy miel para comer y la leche más pura para beber. No os doy de alimento a las puercas, ni os pongo a jugar con víboras. Os alejo de los pecados y comportamientos que son inconvenientes a vuestra Alma.
Venid a Mí, Hijos de la Luz, y sabed o entended que seréis protegidos de Mis tormentas de furia. La Humanidad no desaparecerá, pero sufrirá por sus pecados. Hay consecuencias por el pecado, Mis Hijos. Mi Amor por vos os llama a que os alejéis de todo pecado para que no perezcáis en los Infiernos Eternos. Para que no sufráis por las tormentas de la Humanidad que deben venir. Yo soy el Señor Dios y Amo a cada uno de vosotros. No cerréis vuestros ojos a Mí o a Mi Amor. ¿Vosotros rechazáis un puñado de oro, una vez que se os ofrece? ¿Renunciáis a una taza de agua fresca en el desierto? ¿Por qué rechazaríais el Amor de vuestro Padre Eterno, quien es mucho más GRANDE que cualquier cosa que podáis conocer?
No Me rechacéis o a Mi Amor, Mis Hijos. Causa gran perjuicio para vuestros corazones pensar que esto es justo. Soy para vos, como vosotros sois para Mí. Sabed que estoy siempre con vosotros cuando sois felices, cuando estáis tensos, y cuando os enfrentéis a las tormentas rampantes del Leviatán o causadas como resultado de vuestro juego con el Leviatán. Él os insta a pecar, y Yo os digo: alejaos de las tinieblas y cerrad vuestros ojos y oídos a ellas. Proteged vuestras almas con la Inocencia y el Amor y por lo tanto (y al hacerlo, vosotros estáis viniendo) venid a Mí por el Amor, la fuerza, la renovación y el Amor Eterno y perdurable.
Venid a Mí, Mis Hijos. Tan graves tormentas o cosas de la naturaleza o de otro tipo (?) vienen, como una continuación del pecado. Los pecados son terribles y la tierra se extiende o grita en la consternación. Las tierras se caerán y temblarán a vuestros pies. Cientos se pierden en los hoyos que emergen de la tierra. Rayos y fuego borran a la Humanidad y vosotros debéis orar. Habrá grandes fuegos en los cielos, tantos que todo el Mundo los verá y quedará debilitado por el miedo y el horror. Por lo tanto, Yo os digo, volved a Mí. Hacedme lo más importante en vuestros corazones y pasad vuestros días conmigo y con los que Me rinden culto y Me adoran.
Alabad al Hijo del Hombre y el Tesoro de Mi Corazón. Alabad y Amad a Mi Amado Hijo, el Señor Jesús, porque él es Cristo y Él es el Más Amado por Mí, el Padre Eterno. Buscadme o a Él cuando necesitéis paz, Amor, compasión y ser sanados. Os llenaremos con Nuestro Amor y veréis la Gloria del Dios Único. Venid a Mí, Mis Hijos. No esperéis. Os deseo vehementemente. Venid a Mí con arrepentimiento y Amor ya os perdonaré todo [a todos]. Venid a Mí, sin embargo. ¡No esperéis! Os doy Mi Paz y hoy y todos los días de aquí en adelante y los anteriores. Paz, Mis Hijos. Orad, Mis Hijos.
Jueves, 12 de mayo 2016 3:12-15:42
Hija, Mi Amada Hija, Yo estoy siempre contigo y no te dejo sola. Yo estoy contigo siempre y no debes dudar. Porque el Cordero es Mi Hijo Amado y Él anhela salvarte y a otros. Él Llora como Yo lloro, pues este Mundo es un Mundo desolado, pecaminoso.
Orad, Mis Amados y veréis la Gracia de Dios. Seres Santos, que sois tan puros, daos prisa para aumentar el número de las Almas que Yo llevaré. Soy Yo, el Señor Dios y Padre Inmortal que busca a todos los Hijos entre vosotros. No tengo más que Amor por Mis Hijos Amados, y aquellos que duden de esto por sus propias inequidades, sólo necesitan llamarme y Mi Compasión y Perdón son vuestros
Hijos, anhelo por vos. Anhelo por vuestro Amor. ¿No creéis en Mi Amor Eterno por vosotros? Ansío hasta el dolor por vuestro Amor y tengo sed de vuestra atención. Volved a Mí, Mis Amados Hijos, y sabed que la Misericordia es vuestra. Volved a Mí, Mis Amados y Yo seré glorificado y hecho feliz por vuestro Amor. No os apartéis de Mí, aunque sea por un día, ni una hora. Es esto lo que arruina vuestras almas. Mi Amor os cubre con calidez y alegría y tantas bendiciones. No podéis vivir sin la Gloria de Mi GRAN Amor.
Mis Hijos, estoy aquí por cada uno de vosotros y no arrojo ninguna calumnia sobre Mis Hijos Amorosos. Soy vuestro Padre Todopoderoso y Eterno. ¿Qué padre no Ama a su hijo? ¿Qué padre no impediría al hijo del daño (de ser dañado)? Busco Amar a cada uno de vosotros y el Momento para que correspondáis a mi Amor es ahora. Aumentad vuestra fe en Mí y estad atentos. Anhelo escuchar vuestras voces clamando por Mí. Es una canción en el Cielo y Yo respondo a todos vuestros llamados. Si os encontráis en la angustia, llamadme. Cuando tengáis miedo, clamad por vuestro Padre Amoroso. No dudéis en confiar en Mí, pues un hijo confía en su padre. Yo soy el Señor Dios y Padre, y todo lo que hago es por vosotros, Mis Amados Hijos. Incluso en Mi consternación, Yo os Amo como nadie más. Vosotros no sois capaces de medir Mi GRAN Amor por vosotros. Si tan solo pudierais saber, qué contentos y llenos de júbilo seríais. ¡Qué tan grandes serían vuestros corazones!, pues Yo soy el Amor y el Hombre no puede vivir sin Amor.
Venid a Mí, Hijos abandonados. Veo vuestras heridas y lloro por vos. Veo vuestros sufrimientos y anhelo confortaros con Mi Amor Puro y Eterno. Venid a Mí, Mis Desconcertados Hijos. Cuando el tiempo os haya fatigado de la Vida, volved a Mí con todas vuestras ansiedades y sabed que Mi Amor os sostendrá. Vosotros sois Mis Hijos Amados, y Yo os he hecho de Mi Amor y por Mi Amor. No dudéis sino creed con todos vuestros corazones o de todo corazón en Mi Amor por vosotros. Yo soy el Señor Dios y doy a Mis Hijos buenos regalos. Yo os doy miel para comer y la leche más pura para beber. No os doy de alimento a las puercas, ni os pongo a jugar con víboras. Os alejo de los pecados y comportamientos que son inconvenientes a vuestra Alma.
Venid a Mí, Hijos de la Luz, y sabed o entended que seréis protegidos de Mis tormentas de furia. La Humanidad no desaparecerá, pero sufrirá por sus pecados. Hay consecuencias por el pecado, Mis Hijos. Mi Amor por vos os llama a que os alejéis de todo pecado para que no perezcáis en los Infiernos Eternos. Para que no sufráis por las tormentas de la Humanidad que deben venir. Yo soy el Señor Dios y Amo a cada uno de vosotros. No cerréis vuestros ojos a Mí o a Mi Amor. ¿Vosotros rechazáis un puñado de oro, una vez que se os ofrece? ¿Renunciáis a una taza de agua fresca en el desierto? ¿Por qué rechazaríais el Amor de vuestro Padre Eterno, quien es mucho más GRANDE que cualquier cosa que podáis conocer?
No Me rechacéis o a Mi Amor, Mis Hijos. Causa gran perjuicio para vuestros corazones pensar que esto es justo. Soy para vos, como vosotros sois para Mí. Sabed que estoy siempre con vosotros cuando sois felices, cuando estáis tensos, y cuando os enfrentéis a las tormentas rampantes del Leviatán o causadas como resultado de vuestro juego con el Leviatán. Él os insta a pecar, y Yo os digo: alejaos de las tinieblas y cerrad vuestros ojos y oídos a ellas. Proteged vuestras almas con la Inocencia y el Amor y por lo tanto (y al hacerlo, vosotros estáis viniendo) venid a Mí por el Amor, la fuerza, la renovación y el Amor Eterno y perdurable.
Venid a Mí, Mis Hijos. Tan graves tormentas o cosas de la naturaleza o de otro tipo (?) vienen, como una continuación del pecado. Los pecados son terribles y la tierra se extiende o grita en la consternación. Las tierras se caerán y temblarán a vuestros pies. Cientos se pierden en los hoyos que emergen de la tierra. Rayos y fuego borran a la Humanidad y vosotros debéis orar. Habrá grandes fuegos en los cielos, tantos que todo el Mundo los verá y quedará debilitado por el miedo y el horror. Por lo tanto, Yo os digo, volved a Mí. Hacedme lo más importante en vuestros corazones y pasad vuestros días conmigo y con los que Me rinden culto y Me adoran.
Alabad al Hijo del Hombre y el Tesoro de Mi Corazón. Alabad y Amad a Mi Amado Hijo, el Señor Jesús, porque él es Cristo y Él es el Más Amado por Mí, el Padre Eterno. Buscadme o a Él cuando necesitéis paz, Amor, compasión y ser sanados. Os llenaremos con Nuestro Amor y veréis la Gloria del Dios Único. Venid a Mí, Mis Hijos. No esperéis. Os deseo vehementemente. Venid a Mí con arrepentimiento y Amor ya os perdonaré todo [a todos]. Venid a Mí, sin embargo. ¡No esperéis! Os doy Mi Paz y hoy y todos los días de aquí en adelante y los anteriores. Paz, Mis Hijos. Orad, Mis Hijos.

Jueves, 28 de abril 2016 3:15-16:05
Amados Hija / Hijos, Yo estoy siempre con vos. No os desviéis de vuestras devociones a Mí. Soy el Poderoso y Eterno. Venid a Mi Misericordia y sabed que vuestro pecado se os perdonará. Vaciad vuestros Corazones a Mí, Mis Hijos, pues Yo os Amo a cada uno de vosotros tan bien. Mi Divinidad habla y Mis Palabras son Amorosas y Misericordiosas. Venid a Mí, Mis Amados. No tengáis miedo. Yo no rechazo a nadie de Mi Amor perdurable y anhelo que todos vosotros vengáis a Mí. Incluso el más humilde pecador, el que esté más lleno de dolor y ansiedad o malestar puede venir a Mí con Amor y Yo os abrazo con Amor y Misericordia. Por lo tanto, os digo, no dudéis en venir a Mí en vuestros grandes pesares o ansiedad.
No tengáis miedo, Mis Hijos. Soy Yo, el que os ama, el que os creó, y el que anhela por vos. Yo os doy la bienvenida a Mis Brazos y calmo vuestro inmenso sufrimiento con el bálsamo de Mi Gran Amor. Amados Hijos, la oscuridad desciende sobre este Mundo pecador. Por lo tanto, os digo, daos prisa y convertid vuestros Corazones a Mí, a través de Mi Amado Hijo, Cristo. El os Ama, y Yo os Amo. No somos inmunes al dolor, Mis pequeños Hijos. Ver a Mis Amados lastimados o con dolor o dirigiéndose a las tinieblas trae gran tristeza y lástima a Mi Adolorido Corazón. Yo ofrezco tantas bendiciones, tantos regalos, cuando os volvéis a Mí con Amor y arrepentimiento. ¿Por qué alguno de Mis Hijos duda de Mi Gran Amor por cada uno de vosotros?
Mi Amor no se cansa, sino perdura y busca a los martirizados, los solitarios, los lastimosos. Yo soy el Amor y, como tal, os busco para que Yo llene vuestros Corazones y almas con Amor y alegría, Paz. No huyáis de Mí, Mis Bellos Corderos. Yo soy el Señor Dios y Mi Amor es vuestro. Tomadlo, y sentid su expansión en vuestros Corazones cansados. Mi Amor es para vos, Mis Hijos. Siempre para vos. No podéis saber el grado de GRANDEZA, LA GRAN EXTENSIÓN de Mi Amor por vosotros. Vuestros propios Corazones no están llenos aun o son lo suficientemente grandes como para comprender. Por lo tanto, os digo, orad y conoceréis la Belleza de Mi Amor en la Vida Eterna.
Amados Hijos, vos tenéis tan poco tiempo y Yo os insto a que aumentéis vuestro Amor por Mí y por vuestros hermanos. Voy a ignorar (perdonar) todos los pecados cuando vengáis a Mí en el Amor, la confianza y el arrepentimiento. Tratad a vuestros hermanos con Mi mansedumbre y Amor, como lo desearíais de Mí. Amados Hijos, no seáis crueles con vuestros hermanos. Por el contrario, vaciad vuestros Corazones, para que Yo los llene de Amor, y Yo soy el Amor. Hijos Apacibles, vos sois Mi Gracia y vuestros Amorosas manos y ojos me traen a vuestro Señor Dios y Padre, tanta alegría o alegría GRANDE.
Enseñad a otros a seguir el Camino Santo que Mi Hijo Amado ha puesto delante de vos. Cristo se vació a Sí mismo sobre este Mundo, para que sea posible que todos tengan Vida Eterna y una alegría tan ferviente e incomprensible. Su Amor por vos es tan GRANDE. No podéis conocer Su grado o profundidad o contenido. Pero Yo os digo, deseadme fervientemente, anhelad Mi Amor y Yo estoy con vosotros, sosteniendo vuestras manos en las Mías, dando Mi Beso sobre vuestras cejas emproblemadas, y llenando el Corazón que me deis con el AMOR MAS GRANDE.
Oh, Amados Hijos, vosotros tenéis poco tiempo, y sin duda este Mundo contemplará el milagro o a la Bendición que es Cristo. Sin duda, Su Nombre será glorificado y ya no más será vilipendiado. Las tormentas harán que este Mundo llore, y los vientos soplen y destrocen a este Mundo, y las lluvias caerán para ahogar la tierra y los incendios se extenderán y se comerán a los planes de este Mundo. Por lo tanto, Yo os digo, rezad Mis Hijos. No seáis frívolos con vuestro Tiempo.
Yo soy el Señor Dios y Yo soy el juez capaz y glorificado. Soy justo y Yo Amo. No supongáis que el castigo o las consecuencias no existen. Esas son las creencias de los insensatos. ¿Pues qué buen padre permite que sus Hijos Amados se comporte como diablillos sin consecuencias? El buen padre disciplina a sus hijos para que se conviertan en moradores firmes de Mi Corazón Beatífico. Por eso Yo os digo, Mis Amados Hijos, no viváis vuestras vidas con arrogancia, pues el MOMENTO llega a cada uno de vosotros. Yo anhelo por todos vosotros y vos enfrentaréis al Justo Juez, con la compasión y la frialdad o la objetividad o frialdad.
[Él Ama, así como él es partidario de la disciplina]
Yo soy el Señor Dios y llamaré a Mi Amado Hijos constantemente y siempre. Mi Amor es benigno y Maravilloso. No ocultéis vuestros Corazones de Mí, de vuestro Creador Amoroso. Amados Hijos, no podéis destruir las bendiciones que Yo os doy a vosotros. Vuestros rechazos marchitan Mi Corazón y destruyen vuestras almas.
Amados Hijos, no rechacéis a Mis Amadas y Amorosas Florecillas [los niños]. Mis Pequeñas Flores son tesoros en el Reino de los Cielos, y cuando una es herida o rechazada, sin duda los Corazones en el Cielo se lamentan en la tristeza.
Amados Hijos, las tinieblas de este Mundo son grandes y en crecimiento. El pecado en este Mundo es cada vez mayor. Descubrid uno y vosotros encontraréis que el otro sigue. Retiraos vosotros mismos de estas oscuridades que no tienen piedad por vuestros Corazones y buscan demoler vuestras almas. Creedme, Mis Amados Hijos, vuestras almas son cosas o entidades tan delicadas y frágiles. Cuando os entregáis a la oscuridad y al pecado, ¡cómo sufre y se destroza vuestra Alma!. Las piezas de vuestras almas son heridas y mordidas o destrozadas o tratadas con violencia. No podéis saber o entender la fetidez de esto. Vosotros no comprendéis vuestras heridas todavía. Por lo tanto Yo os digo, rezad a Mí, Mis Hijos, pues vuestras oraciones son canciones para Mí y Yo respondo a cada una, con Amor en Mis intenciones.
Gloriosos y Amados Hijos, orad siempre y siempre Amad, y ¡cómo vos seréis recompensados por Mí! Dejad vuestros dolores que os cansan en Mis Manos Amorosas, porque Yo sé lo que son para Mí. Amados Hijos, orad y Adoradme, (y) el de Jesucristo, cuyo Corazón y Alma anhelan por vosotros con pasión y esperanza y Gran Amor. Confiad en el Amor de Mi Hijo Amado, pues Su Corazón es Misericordioso y lleno de Amor, que Él da a cada uno de vosotros con tanta libertad y fuertemente a o con fuerza o con GRANDEZA.
Yo también soy el Señor Dios y Nuestro Amor es el mismo. Volved a Cristo, el Señor Jesús, Mi Más Amado Hijo y sabed que la Gloria de Dios está con vos. Amados Hijos, amad a Cristo y no lo ignoréis o rechacéis. El pecado de este rechazo Me hace rugir en señal de desaprobación o Me duele demasiado. Cristo es Mi Hijo Amado y Mi propio Corazón. Somos Uno y como Uno somos el Amor. Sabed (que) herirlo con vuestro abundante des-Amor es como empujar un cuchillo a través de vuestro propio Corazón. Cuando vosotros no vivís con Cristo Jesús, vos estáis asegurando vuestra muerte Eterna.
Venid a Mí, Mis Hijos. Venid al Señor Dios y Padre que os Ama y anhela vuestro Amor. Corresponded a Mi Amor con gran alegría y confianza. No puedo soportar cualquier cosa menor que todo vuestro Amor y Corazones. Yo soy un Dios celoso y os digo que no podéis servir a dos amos a la vez. Elegidme como vuestro Maestro y tendréis la Gracia y la Alegría del Amor Eterno. Considerad a la oscuridad sin ligereza pero con cautela y recelo. No ahondéis en las cosas oscuras a causa de vuestras curiosidades. Este tipo de curiosidades pueden condenar a los débiles. En su lugar, sed curiosos acerca de Mí; de Mi Amor por vos.
Hay muchos misterios por Mi Amor porque es tan enorme y jubiloso. Amados Hijos, podéis optar por vuestra propia voluntad, pero sabed que Mi Amor es para vos. Vosotros habéis sido creados para la Luz del Amor, no para las ruinas de las tinieblas. Amados Hijos, por tanto, venid a Mí y conoced Mi Gran Amor para vosotros. Amados Hijos, no pequéis más y limpiad vuestras Almas con la Misericordia y el perdón. Participad en el más Santo de los Santos [la Eucaristía] y sabed que tantas bendiciones caen [así] sobre vosotros, vuestras Almas y Corazones. Id a recibir a Cristo a menudo. Él es justo. No puede haber nadie antes de Cristo Jesús. Él es el Señor Dios, y él es Mi Hijo Amado.
Manteneos firmes en vuestra fe y aumentad vuestra confianza en Mí. Conforme vosotros creáis, vosotros entenderéis y se os dan grandes regalos, aquí y en la Vida Eterna. Glorificad a Cristo con vuestras oraciones y alabanzas. Llamad a Él por consuelo y orientación. Somos el único y verdadero Señor. Somos Uno como Dios. Involucrad al Espíritu [Santo] pues Él también deberá guiar vuestros Corazones a Mí. Amados Hijos, os doy Mi Paz, Mi paz Duradera este día y todos los demás, pero orad. Siempre orad.
Amados Hija / Hijos, Yo estoy siempre con vos. No os desviéis de vuestras devociones a Mí. Soy el Poderoso y Eterno. Venid a Mi Misericordia y sabed que vuestro pecado se os perdonará. Vaciad vuestros Corazones a Mí, Mis Hijos, pues Yo os Amo a cada uno de vosotros tan bien. Mi Divinidad habla y Mis Palabras son Amorosas y Misericordiosas. Venid a Mí, Mis Amados. No tengáis miedo. Yo no rechazo a nadie de Mi Amor perdurable y anhelo que todos vosotros vengáis a Mí. Incluso el más humilde pecador, el que esté más lleno de dolor y ansiedad o malestar puede venir a Mí con Amor y Yo os abrazo con Amor y Misericordia. Por lo tanto, os digo, no dudéis en venir a Mí en vuestros grandes pesares o ansiedad.
No tengáis miedo, Mis Hijos. Soy Yo, el que os ama, el que os creó, y el que anhela por vos. Yo os doy la bienvenida a Mis Brazos y calmo vuestro inmenso sufrimiento con el bálsamo de Mi Gran Amor. Amados Hijos, la oscuridad desciende sobre este Mundo pecador. Por lo tanto, os digo, daos prisa y convertid vuestros Corazones a Mí, a través de Mi Amado Hijo, Cristo. El os Ama, y Yo os Amo. No somos inmunes al dolor, Mis pequeños Hijos. Ver a Mis Amados lastimados o con dolor o dirigiéndose a las tinieblas trae gran tristeza y lástima a Mi Adolorido Corazón. Yo ofrezco tantas bendiciones, tantos regalos, cuando os volvéis a Mí con Amor y arrepentimiento. ¿Por qué alguno de Mis Hijos duda de Mi Gran Amor por cada uno de vosotros?
Mi Amor no se cansa, sino perdura y busca a los martirizados, los solitarios, los lastimosos. Yo soy el Amor y, como tal, os busco para que Yo llene vuestros Corazones y almas con Amor y alegría, Paz. No huyáis de Mí, Mis Bellos Corderos. Yo soy el Señor Dios y Mi Amor es vuestro. Tomadlo, y sentid su expansión en vuestros Corazones cansados. Mi Amor es para vos, Mis Hijos. Siempre para vos. No podéis saber el grado de GRANDEZA, LA GRAN EXTENSIÓN de Mi Amor por vosotros. Vuestros propios Corazones no están llenos aun o son lo suficientemente grandes como para comprender. Por lo tanto, os digo, orad y conoceréis la Belleza de Mi Amor en la Vida Eterna.
Amados Hijos, vos tenéis tan poco tiempo y Yo os insto a que aumentéis vuestro Amor por Mí y por vuestros hermanos. Voy a ignorar (perdonar) todos los pecados cuando vengáis a Mí en el Amor, la confianza y el arrepentimiento. Tratad a vuestros hermanos con Mi mansedumbre y Amor, como lo desearíais de Mí. Amados Hijos, no seáis crueles con vuestros hermanos. Por el contrario, vaciad vuestros Corazones, para que Yo los llene de Amor, y Yo soy el Amor. Hijos Apacibles, vos sois Mi Gracia y vuestros Amorosas manos y ojos me traen a vuestro Señor Dios y Padre, tanta alegría o alegría GRANDE.
Enseñad a otros a seguir el Camino Santo que Mi Hijo Amado ha puesto delante de vos. Cristo se vació a Sí mismo sobre este Mundo, para que sea posible que todos tengan Vida Eterna y una alegría tan ferviente e incomprensible. Su Amor por vos es tan GRANDE. No podéis conocer Su grado o profundidad o contenido. Pero Yo os digo, deseadme fervientemente, anhelad Mi Amor y Yo estoy con vosotros, sosteniendo vuestras manos en las Mías, dando Mi Beso sobre vuestras cejas emproblemadas, y llenando el Corazón que me deis con el AMOR MAS GRANDE.
Oh, Amados Hijos, vosotros tenéis poco tiempo, y sin duda este Mundo contemplará el milagro o a la Bendición que es Cristo. Sin duda, Su Nombre será glorificado y ya no más será vilipendiado. Las tormentas harán que este Mundo llore, y los vientos soplen y destrocen a este Mundo, y las lluvias caerán para ahogar la tierra y los incendios se extenderán y se comerán a los planes de este Mundo. Por lo tanto, Yo os digo, rezad Mis Hijos. No seáis frívolos con vuestro Tiempo.
Yo soy el Señor Dios y Yo soy el juez capaz y glorificado. Soy justo y Yo Amo. No supongáis que el castigo o las consecuencias no existen. Esas son las creencias de los insensatos. ¿Pues qué buen padre permite que sus Hijos Amados se comporte como diablillos sin consecuencias? El buen padre disciplina a sus hijos para que se conviertan en moradores firmes de Mi Corazón Beatífico. Por eso Yo os digo, Mis Amados Hijos, no viváis vuestras vidas con arrogancia, pues el MOMENTO llega a cada uno de vosotros. Yo anhelo por todos vosotros y vos enfrentaréis al Justo Juez, con la compasión y la frialdad o la objetividad o frialdad.
[Él Ama, así como él es partidario de la disciplina]
Yo soy el Señor Dios y llamaré a Mi Amado Hijos constantemente y siempre. Mi Amor es benigno y Maravilloso. No ocultéis vuestros Corazones de Mí, de vuestro Creador Amoroso. Amados Hijos, no podéis destruir las bendiciones que Yo os doy a vosotros. Vuestros rechazos marchitan Mi Corazón y destruyen vuestras almas.
Amados Hijos, no rechacéis a Mis Amadas y Amorosas Florecillas [los niños]. Mis Pequeñas Flores son tesoros en el Reino de los Cielos, y cuando una es herida o rechazada, sin duda los Corazones en el Cielo se lamentan en la tristeza.
Amados Hijos, las tinieblas de este Mundo son grandes y en crecimiento. El pecado en este Mundo es cada vez mayor. Descubrid uno y vosotros encontraréis que el otro sigue. Retiraos vosotros mismos de estas oscuridades que no tienen piedad por vuestros Corazones y buscan demoler vuestras almas. Creedme, Mis Amados Hijos, vuestras almas son cosas o entidades tan delicadas y frágiles. Cuando os entregáis a la oscuridad y al pecado, ¡cómo sufre y se destroza vuestra Alma!. Las piezas de vuestras almas son heridas y mordidas o destrozadas o tratadas con violencia. No podéis saber o entender la fetidez de esto. Vosotros no comprendéis vuestras heridas todavía. Por lo tanto Yo os digo, rezad a Mí, Mis Hijos, pues vuestras oraciones son canciones para Mí y Yo respondo a cada una, con Amor en Mis intenciones.
Gloriosos y Amados Hijos, orad siempre y siempre Amad, y ¡cómo vos seréis recompensados por Mí! Dejad vuestros dolores que os cansan en Mis Manos Amorosas, porque Yo sé lo que son para Mí. Amados Hijos, orad y Adoradme, (y) el de Jesucristo, cuyo Corazón y Alma anhelan por vosotros con pasión y esperanza y Gran Amor. Confiad en el Amor de Mi Hijo Amado, pues Su Corazón es Misericordioso y lleno de Amor, que Él da a cada uno de vosotros con tanta libertad y fuertemente a o con fuerza o con GRANDEZA.
Yo también soy el Señor Dios y Nuestro Amor es el mismo. Volved a Cristo, el Señor Jesús, Mi Más Amado Hijo y sabed que la Gloria de Dios está con vos. Amados Hijos, amad a Cristo y no lo ignoréis o rechacéis. El pecado de este rechazo Me hace rugir en señal de desaprobación o Me duele demasiado. Cristo es Mi Hijo Amado y Mi propio Corazón. Somos Uno y como Uno somos el Amor. Sabed (que) herirlo con vuestro abundante des-Amor es como empujar un cuchillo a través de vuestro propio Corazón. Cuando vosotros no vivís con Cristo Jesús, vos estáis asegurando vuestra muerte Eterna.
Venid a Mí, Mis Hijos. Venid al Señor Dios y Padre que os Ama y anhela vuestro Amor. Corresponded a Mi Amor con gran alegría y confianza. No puedo soportar cualquier cosa menor que todo vuestro Amor y Corazones. Yo soy un Dios celoso y os digo que no podéis servir a dos amos a la vez. Elegidme como vuestro Maestro y tendréis la Gracia y la Alegría del Amor Eterno. Considerad a la oscuridad sin ligereza pero con cautela y recelo. No ahondéis en las cosas oscuras a causa de vuestras curiosidades. Este tipo de curiosidades pueden condenar a los débiles. En su lugar, sed curiosos acerca de Mí; de Mi Amor por vos.
Hay muchos misterios por Mi Amor porque es tan enorme y jubiloso. Amados Hijos, podéis optar por vuestra propia voluntad, pero sabed que Mi Amor es para vos. Vosotros habéis sido creados para la Luz del Amor, no para las ruinas de las tinieblas. Amados Hijos, por tanto, venid a Mí y conoced Mi Gran Amor para vosotros. Amados Hijos, no pequéis más y limpiad vuestras Almas con la Misericordia y el perdón. Participad en el más Santo de los Santos [la Eucaristía] y sabed que tantas bendiciones caen [así] sobre vosotros, vuestras Almas y Corazones. Id a recibir a Cristo a menudo. Él es justo. No puede haber nadie antes de Cristo Jesús. Él es el Señor Dios, y él es Mi Hijo Amado.
Manteneos firmes en vuestra fe y aumentad vuestra confianza en Mí. Conforme vosotros creáis, vosotros entenderéis y se os dan grandes regalos, aquí y en la Vida Eterna. Glorificad a Cristo con vuestras oraciones y alabanzas. Llamad a Él por consuelo y orientación. Somos el único y verdadero Señor. Somos Uno como Dios. Involucrad al Espíritu [Santo] pues Él también deberá guiar vuestros Corazones a Mí. Amados Hijos, os doy Mi Paz, Mi paz Duradera este día y todos los demás, pero orad. Siempre orad.

NO TENGÁIS MIEDO
Jueves, 21 de abril 2016 3:10-15:39
Queridos Hijos, Yo estoy con vos, y nunca podréis sorprenderme por vuestros pecados. He conocido a cada uno de vosotros tan íntimamente y me encanta cada parte de vosotros, Mis Hijos. No os desesperéis, sino venid a Mí. Soy vuestro Padre Amoroso y Yo anhelo, tengo sed de vuestro Amor. Amados Hijos, me asombran las distracciones de este Mundo, esas cosas que os alejan de Mí son muchas. Orad, Mis Amados y escuchad Mis Palabras en vuestros Corazones y Almas. Vosotros estáis destinados para Mí, como Yo estoy destinado para vos.
Hijos, no os envolváis en los males de este Mundo. Rezad y llamadme y y Yo os sostengo en Mis brazos y os pongo en el camino del Amor. Hijos heridos, recordad al Hijo de Dios, que sufrió mucho por Su Inmenso Amor por vos y sabed que vuestro lugar en Su Gloria está reservado para vosotros.
Amados Hijos, sed amables unos con otros. Me produce grandes dolores ver el odio y la ira dentro de vuestros corazones. ¿Cómo podéis decir que amáis a vuestro Padre Celestial cuando odiáis a Sus Amadas creaciones? A vuestros hermanos y hermanas? No podéis decir que vos amáis y servís al Señor Dios y a Cristo, cuando no amáis a vuestros hermanos.
Este Amor no puede ser a medias o estar dividido entre Yo y este Mundo. Mi Amor es transparente o aparente y Yo os lo doy a vosotros libremente y con tan gran esperanza de que cada uno de Mis Preciosos y más Amados Hijos os volváis a Mí, vengáis a Mí, con los ojos tristes abatidos en el arrepentimiento y con plena confianza en el Amor y la Compasión de su Padre. Yo perdono y Amo a Mis Pequeños Hijos. No dudéis. No tengáis miedo. Mi Amor es suave y pone paz y alegría en vuestros corazones.
Sabed que esto es cierto: Viene, este día del ajuste de cuentas. Vos vivís en los últimos tiempos y tal furia mece la Tierra. Amados Hijos, aferraos a Mí como niños pequeños. Adheríos a vuestro Padre Santo y conoceréis la alegría de Mi Amor. Oh Hijos, ¿no podéis sentir Mi Amor y Gloria entre vosotros? Yo estoy con vosotros siempre y soplo Mi Amor sobre vuestras frentes. Yo soy el Señor Dios, que ha creado al Hombre por Amor, del Amor y con Amor. Nunca voy a renunciar a Mi Amor por vos. Mi Misericordia y Amor son vuestras para que las toméis.
Oh, Amados Hijos, este regalo es mayor de lo que pudieráis conocer. No puede ser replicado en cualquier grandeza que veáis ante el hombre, pues Mis Hijos no pueden producir la GRANDEZA del milagro de Mi Misericordia. Mi Amado Hijo ha bebido de la copa de Mi Voluntad y ha salvado a todos los Hijos de la Muerte Eterna. Si pudierais conocer o comprender el poder y la Gloria de su Sacrificio de Amor, cómo lloraríais ante Sus Pies y alabaríais Su Nombre, Su Nombre Santo, con grandes cantos de alabanza y Amorosa Alegría en vuestras lenguas. Amados Hijos, no conocéis, ni queréis ver o reconocer el Amor de Cristo. Demasiados descartan Su Amor y Sacrificio y ¿quiénes de vosotros perecerán eternamente en la oscuridad y angustias infernales? Amados Hijos, no dudéis de los castigos o consecuencias de vuestros pecados. Hay muchos pecados y muchos dolores correspondientes o agonías que obrarán como reparación por vuestra falta de Amor por Cristo.
Oh Hijos, Yo estoy deseoso de vuestro Amor y quiero que vuestros Corazones elijan al Amor. Elegid la Gloria y la Alegría de Mi Amor, pues Yo soy Amor y Misericordia y Yo os deseo vehementemente.
Amados Hijos, no podéis ver o atestiguar los hoyos de este Mundo? Cada uno excavará en la Tierra y causará tal destrucción y tinieblas. Prestad atención a Mi Advertencia, Amados Hijos y traed vuestros Corazones vacantes a Mí. Amados Hijos, la tierra llora como Yo lloro. Vosotros debéis dejar los pecados de vuestra vida y venir a Mí, por Mi Gran Amor y Mi Misericordia dispuesta.
No dudéis de Mi Amor por vosotros. Estoy aquí ante vos, con los brazos abiertos y Mi perdón listo para vosotros. No descartéis Mi Amor, Amados Hijos.
Yo soy un juez justo y un Padre Misericordioso. Sabed que esto es cierto, aun cuando Yo ruego por vuestro Amor, demasiados mueren a la oscuridad y sufren incluso ahora. Amados Hijos, anhelo por vos y no quiero perder un solo Hijo, pues todos vosotros sois Amados para Mí. Permitid que Mi Amor sature vuestros corazones, Mis Amados. No hay mayor regalo que Mi Amor y el perdón para vosotros y los ofrezco tan de buena gana. Oh, Amados Hijos, Mi Corazón está dolido y lloro por vos. Oh Hijos, venid a Mí y sed dignos de un lugar en el Reino de los Cielos.
Rezad y Yo os bendigo. Orad y Yo voy a responder. Amad y me hacéis contento. Amadme y vos seréis salvados de toda la oscuridad. Me mueve vuestro Amor a ser feliz y para reunir muchas más Almas por vuestro Amor y oraciones. Me veo obligado a mitigar los grandes desastres que vienen a este Mundo. Oh pecaminosos Hijos, creed con todos vuestros Corazones que Mi Perdón es real y de lo más necesario. Glorificad a Mi Hijo y Amadlo completamente. Él es Mi Hijo Amado, y a quién Él Ame, también el Padre lo Amará. Y aquel que aborrezca al Hijo, perecerá por la Mano del Padre. Glorificad al Hijo del Hombre. Amad al Hijo de Dios plenamente y conoced la paz y la caridad de Mi Amor. Hijos, Yo os digo, orad y sabed que Mi Paz está sobre vos siempre. Paz, Mis Hijos. Paz.
Jueves, 21 de abril 2016 3:10-15:39
Queridos Hijos, Yo estoy con vos, y nunca podréis sorprenderme por vuestros pecados. He conocido a cada uno de vosotros tan íntimamente y me encanta cada parte de vosotros, Mis Hijos. No os desesperéis, sino venid a Mí. Soy vuestro Padre Amoroso y Yo anhelo, tengo sed de vuestro Amor. Amados Hijos, me asombran las distracciones de este Mundo, esas cosas que os alejan de Mí son muchas. Orad, Mis Amados y escuchad Mis Palabras en vuestros Corazones y Almas. Vosotros estáis destinados para Mí, como Yo estoy destinado para vos.
Hijos, no os envolváis en los males de este Mundo. Rezad y llamadme y y Yo os sostengo en Mis brazos y os pongo en el camino del Amor. Hijos heridos, recordad al Hijo de Dios, que sufrió mucho por Su Inmenso Amor por vos y sabed que vuestro lugar en Su Gloria está reservado para vosotros.
Amados Hijos, sed amables unos con otros. Me produce grandes dolores ver el odio y la ira dentro de vuestros corazones. ¿Cómo podéis decir que amáis a vuestro Padre Celestial cuando odiáis a Sus Amadas creaciones? A vuestros hermanos y hermanas? No podéis decir que vos amáis y servís al Señor Dios y a Cristo, cuando no amáis a vuestros hermanos.
Este Amor no puede ser a medias o estar dividido entre Yo y este Mundo. Mi Amor es transparente o aparente y Yo os lo doy a vosotros libremente y con tan gran esperanza de que cada uno de Mis Preciosos y más Amados Hijos os volváis a Mí, vengáis a Mí, con los ojos tristes abatidos en el arrepentimiento y con plena confianza en el Amor y la Compasión de su Padre. Yo perdono y Amo a Mis Pequeños Hijos. No dudéis. No tengáis miedo. Mi Amor es suave y pone paz y alegría en vuestros corazones.
Sabed que esto es cierto: Viene, este día del ajuste de cuentas. Vos vivís en los últimos tiempos y tal furia mece la Tierra. Amados Hijos, aferraos a Mí como niños pequeños. Adheríos a vuestro Padre Santo y conoceréis la alegría de Mi Amor. Oh Hijos, ¿no podéis sentir Mi Amor y Gloria entre vosotros? Yo estoy con vosotros siempre y soplo Mi Amor sobre vuestras frentes. Yo soy el Señor Dios, que ha creado al Hombre por Amor, del Amor y con Amor. Nunca voy a renunciar a Mi Amor por vos. Mi Misericordia y Amor son vuestras para que las toméis.
Oh, Amados Hijos, este regalo es mayor de lo que pudieráis conocer. No puede ser replicado en cualquier grandeza que veáis ante el hombre, pues Mis Hijos no pueden producir la GRANDEZA del milagro de Mi Misericordia. Mi Amado Hijo ha bebido de la copa de Mi Voluntad y ha salvado a todos los Hijos de la Muerte Eterna. Si pudierais conocer o comprender el poder y la Gloria de su Sacrificio de Amor, cómo lloraríais ante Sus Pies y alabaríais Su Nombre, Su Nombre Santo, con grandes cantos de alabanza y Amorosa Alegría en vuestras lenguas. Amados Hijos, no conocéis, ni queréis ver o reconocer el Amor de Cristo. Demasiados descartan Su Amor y Sacrificio y ¿quiénes de vosotros perecerán eternamente en la oscuridad y angustias infernales? Amados Hijos, no dudéis de los castigos o consecuencias de vuestros pecados. Hay muchos pecados y muchos dolores correspondientes o agonías que obrarán como reparación por vuestra falta de Amor por Cristo.
Oh Hijos, Yo estoy deseoso de vuestro Amor y quiero que vuestros Corazones elijan al Amor. Elegid la Gloria y la Alegría de Mi Amor, pues Yo soy Amor y Misericordia y Yo os deseo vehementemente.
Amados Hijos, no podéis ver o atestiguar los hoyos de este Mundo? Cada uno excavará en la Tierra y causará tal destrucción y tinieblas. Prestad atención a Mi Advertencia, Amados Hijos y traed vuestros Corazones vacantes a Mí. Amados Hijos, la tierra llora como Yo lloro. Vosotros debéis dejar los pecados de vuestra vida y venir a Mí, por Mi Gran Amor y Mi Misericordia dispuesta.
No dudéis de Mi Amor por vosotros. Estoy aquí ante vos, con los brazos abiertos y Mi perdón listo para vosotros. No descartéis Mi Amor, Amados Hijos.
Yo soy un juez justo y un Padre Misericordioso. Sabed que esto es cierto, aun cuando Yo ruego por vuestro Amor, demasiados mueren a la oscuridad y sufren incluso ahora. Amados Hijos, anhelo por vos y no quiero perder un solo Hijo, pues todos vosotros sois Amados para Mí. Permitid que Mi Amor sature vuestros corazones, Mis Amados. No hay mayor regalo que Mi Amor y el perdón para vosotros y los ofrezco tan de buena gana. Oh, Amados Hijos, Mi Corazón está dolido y lloro por vos. Oh Hijos, venid a Mí y sed dignos de un lugar en el Reino de los Cielos.
Rezad y Yo os bendigo. Orad y Yo voy a responder. Amad y me hacéis contento. Amadme y vos seréis salvados de toda la oscuridad. Me mueve vuestro Amor a ser feliz y para reunir muchas más Almas por vuestro Amor y oraciones. Me veo obligado a mitigar los grandes desastres que vienen a este Mundo. Oh pecaminosos Hijos, creed con todos vuestros Corazones que Mi Perdón es real y de lo más necesario. Glorificad a Mi Hijo y Amadlo completamente. Él es Mi Hijo Amado, y a quién Él Ame, también el Padre lo Amará. Y aquel que aborrezca al Hijo, perecerá por la Mano del Padre. Glorificad al Hijo del Hombre. Amad al Hijo de Dios plenamente y conoced la paz y la caridad de Mi Amor. Hijos, Yo os digo, orad y sabed que Mi Paz está sobre vos siempre. Paz, Mis Hijos. Paz.

AMOR ASOMBROSO
Miércoles, 13 de abril 2016 3:18-15:58
Amados Hijos, Yo soy para vos, como vos sois para Mí. Descansad vuestra cabeza cansada sobre Mis Hombros de Amor y conoced el significado de la Paz, porque Yo soy el Señor Dios y ¡cuánto añoro a cada uno de Mis Hijos Amados! Venid a Mí en arrepentimiento y Amor, y veréis el Reino de Dios o al Cielo.
Amados Hijos, vos sois Mis Amados Encargos. Vos sois Míos para Amaros y salvaguardaros de las penas del mal. Clamad a Mí, y de este modo, conoced la Gloria de Mi Amor. Amados Hijos, aunque las estrellas puedan caer ante vos y dejaros sofocados sobre el fuego, clamad a Mí y vos seréis salvados. Aunque es posible que seáis considerados como humildes ante los ojos de este Mundo, sin duda vosotros sois grandes ante Mis Ojos Celestiales. Hijos Desconcertados, no sigáis a los pecaminosos, sino id a Cristo, Mi Hijo Amado, y Él os pondrá en el sendero hacia Mí, a la Vida eterna, pues vosotros no podéis tener Vida sin Amor y Yo soy Amor.
Conoced y Amad a Mi Hijo, el Amado y Angustiadísimo Jesucristo. Adoradlo con vuestro Amor y presencia o atención. Su Sagrado Corazón anhela vuestro Amor y de la manera que Améis al Hijo, así Amáis al Padre, y cuando ofendáis al Hijo, así ofendéis al Padre, pero al doble. Jesucristo es Mi Hijo Amado quien se ha enfrentado y sacrificado a la muerte para que podáis tener Vida Eterna. Lloro, pues muchos de Mis Amados Hijos no adoran o no adorarán al que ha salvado al Hombre por toda la Eternidad. Cuando un Hijo niega a Cristo, ¿cómo debe el Padre saludar a ese Hijo, sino con las puertas cerradas?
Venid a Mí, por la Gracia y la Gloria de Jesucristo. Amados Hijos, no arrojéis oro por vidrio. No desperdiciéis el agua cuando el pozo está lleno. Venid a Mí ahora y ved la Gloria de Mi Amor. Amados Hijos, os atesoro. Mi Amor por vos es ilimitado y es dado con tanta alegría. Por favor, Mis Amados, venid a Mí y conoced la fuerza, la fuerza asombrosa, de Mi Amor.
Hijos, no seáis groseros, con odio a vuestros hermanos. Ofreced paz a los que os han despreciado. Perdonad donde os sintáis agraviado y sabed que la Justicia es Mía y sólo Mía. Vosotros sois Mis Hijos Amados y tan pequeños. Vosotros sois tan espectaculares y Amados por Mí. Si vosotros entendierais la profundidad de Mi Amor, incluso por el más humilde y el más alto, seguramente Me adoraríais con gran Amor en vuestros Corazones. Pues Mi Amor es compasivo y siempre generoso para dar Mi Misericordia a los que vengan a Mí.
Yo soy el Señor Dios, el Santo Padre, y digo a este Mundo, cesad vuestro pecado y venid a Mí. Pisad sobre el recto sendero del Amor y la compasión. Seguid siempre a Mi Amado Hijo, que es la Luz y el Cordero. No descartéis Su Amor, Amados Hijos. No rechacéis el Amor que Él anhela daros.
¿Por qué permiten Mis Hijos toda clase de peligro en vuestras vidas y, sin embargo, rechazan el Amor de Cristo con tanta facilidad, como si fuera una plaga, para sobrevivir? ¿Por qué decidís acercaros a la víbora con la mano desnuda y rechazáis la suavidad y la alegría y la seguridad de la paloma? ¿Por qué, Mis Hijos, vos bebéis vinagre burdo cuando Yo os ofrezco lo mejor de los vinos? Vais a decirme que vos preferís los incendios y las agonías del infierno a las alegrías y las gracias del Cielo? ¿Vais a decirme que preferiréis la muerte eterna, con Mi Amor ausente por vosotros, cuando podríais ser abrazados por el Señor Dios?
Oh pecaminosos Hijos, no sabéis lo que hacéis cuando rechazáis Mi Amor y descartáis tan duramente el Amor de Mi Hijo Amado, Beatífico, Glorioso, Cristo Jesús. Os paráis sobre carbones encendidos al rechazar Su Amor. Vos bebéis de la copa venenosa cuando negáis a Mi Hijo, que es tan Amado por Mí. Vos os entregáis a la muerte, cuando volteáis la cara lejos del Amor de Cristo.
Amados Hijos, vos sois tan pequeñas cosas y no concebís lo más espiritual (de esas cosas que son demasiado grandes y desconocidas para explicar). ¡Cómo son vuestras Almas tan debilitadas por el pecado y los males dentro de este Mundo! Si vosotros pudierais ver los resultados o las consecuencias del pecado en vuestras almas, seguro que temblaríais con gran temor y os someteríais a las más duras penitencias para lavaros hasta limpiaros de estos pecados oscuros y mortales. (matanza del Alma)
Yo soy el único Dios verdadero. Venid a Mí, y conoced la Luz de Mi Amor. Rechazadme o volteadme la espalda, a Mí, y las agonías eternas serán vuestras. Oh, Amados Hijos, os deseo vehementemente. Os he hecho para el Amor, con Amor, y por Amor. Corresponded a Mi Amor con el vuestro. Hijos, Yo espero a que cada uno de vosotros volváis a Mí. La alegría es inmensa cuando un Hijo viene a Mí con arrepentimiento y Amor fiel. Hijos, Mi Misericordia y Amor son para vosotros. No rechacéis un regalo tan sorprendente. ¡Es para vosotros!.
Amados Hijos, adorad y Amad a Cristo, porque Él es el Cordero de Sacrificio que fue entregado al Mundo desde tales profundidades de Amor. Yo Amo a Mi Hijo Amado, y deseo que vos lo Améis y lo glorifiquéis con todos vuestros Corazones. No os desviéis de la pasión de vuestro Amor por Cristo, sino encended el fuego y atizad su llama para que vuestro Amor por Él crezca y crezca en vuestras limitaciones Mundanas. ¡Como Cristo se arrebata por vosotros! [Amor increíble GRANDE aquí!] ¡Cómo sois Amados por vuestro Dios Todopoderoso! Elegid el Amor sobre la oscuridad. Elegidme, Mis Hijos. Venid a Mí y Yo os daré consuelo y Amor.
Oh, desconcertados Hijos, no seáis confundidos, no más, porque Yo soy el Señor Dios, el Uno, el Virtuoso, el Amoroso y el Justo. Venid a Mí, con el Corazón lleno y las Almas afligidas para que podáis ser redimidos por el perdón que Mi Amado Hijo adquirió para vosotros por Su Muerte y Resurrección. Así, vendrá con Gran Gloria en Su medio y el Mundo se golpeará con miedo y la tierra se quejará con odio y los dignos serán abrazados en su totalidad por el Amor de Dios, Cristo.
Seguid a Cristo a la Casa de Dios. Orad y Amadme pues Yo anhelo vuestro Amor. Oh Hijos de este Mundo, volved a la luz y a la bondad y el Amor. Apartaos de esas cosas que os llevan fuera del camino de la justicia, el camino de Mi Amado Hijo, Cristo. Amados Hijos, orad, pues todas las oraciones que Yo escucho son como canciones para Mí y respondo a cada uno de vosotros con Gran Amor. ¡Cómo añoro por cada uno de Mis Hijos!
Amados Hijos, no esperéis y no divaguéis. Poned vuestros Corazones en Mis Manos y sabed que la Paz de Dios está con vosotros. Sucumbid al Amor, Mis Hijos. No caigáis hacia el mal y en el pecado. Hay consecuencias por vuestros pecados y os digo, vuestras Almas son dañadas cuando entráis en tinieblas forjadas por el pecado.
Amados Hijos, vos sois Míos y anhelo por vos. Venid a Mí ahora y no seáis frívolos con vuestro Tiempo, pues vosotros no podéis daros ese lujo. Amados Hijos, sabed que esto es cierto: llegará un día en el que desearéis con todo lo que sois que mejor hubierais elegido el camino de la Rectitud. No tengáis miedo de venir a Mí. Puedo perdonar todos los pecados de los destrozados del corazón, a los arrepentidos, y los afligidos. Mi Amor y Misericordia son aún [incluso] vuestros. Amados Hijos, sosteneos firmemente a Mi Amor, Mi Palabra y Mi Misericordia. Son vuestros. Amados Hijos, Yo os digo: Paz.
Paz en este día y en todos los demás. Paz.
Miércoles, 13 de abril 2016 3:18-15:58
Amados Hijos, Yo soy para vos, como vos sois para Mí. Descansad vuestra cabeza cansada sobre Mis Hombros de Amor y conoced el significado de la Paz, porque Yo soy el Señor Dios y ¡cuánto añoro a cada uno de Mis Hijos Amados! Venid a Mí en arrepentimiento y Amor, y veréis el Reino de Dios o al Cielo.
Amados Hijos, vos sois Mis Amados Encargos. Vos sois Míos para Amaros y salvaguardaros de las penas del mal. Clamad a Mí, y de este modo, conoced la Gloria de Mi Amor. Amados Hijos, aunque las estrellas puedan caer ante vos y dejaros sofocados sobre el fuego, clamad a Mí y vos seréis salvados. Aunque es posible que seáis considerados como humildes ante los ojos de este Mundo, sin duda vosotros sois grandes ante Mis Ojos Celestiales. Hijos Desconcertados, no sigáis a los pecaminosos, sino id a Cristo, Mi Hijo Amado, y Él os pondrá en el sendero hacia Mí, a la Vida eterna, pues vosotros no podéis tener Vida sin Amor y Yo soy Amor.
Conoced y Amad a Mi Hijo, el Amado y Angustiadísimo Jesucristo. Adoradlo con vuestro Amor y presencia o atención. Su Sagrado Corazón anhela vuestro Amor y de la manera que Améis al Hijo, así Amáis al Padre, y cuando ofendáis al Hijo, así ofendéis al Padre, pero al doble. Jesucristo es Mi Hijo Amado quien se ha enfrentado y sacrificado a la muerte para que podáis tener Vida Eterna. Lloro, pues muchos de Mis Amados Hijos no adoran o no adorarán al que ha salvado al Hombre por toda la Eternidad. Cuando un Hijo niega a Cristo, ¿cómo debe el Padre saludar a ese Hijo, sino con las puertas cerradas?
Venid a Mí, por la Gracia y la Gloria de Jesucristo. Amados Hijos, no arrojéis oro por vidrio. No desperdiciéis el agua cuando el pozo está lleno. Venid a Mí ahora y ved la Gloria de Mi Amor. Amados Hijos, os atesoro. Mi Amor por vos es ilimitado y es dado con tanta alegría. Por favor, Mis Amados, venid a Mí y conoced la fuerza, la fuerza asombrosa, de Mi Amor.
Hijos, no seáis groseros, con odio a vuestros hermanos. Ofreced paz a los que os han despreciado. Perdonad donde os sintáis agraviado y sabed que la Justicia es Mía y sólo Mía. Vosotros sois Mis Hijos Amados y tan pequeños. Vosotros sois tan espectaculares y Amados por Mí. Si vosotros entendierais la profundidad de Mi Amor, incluso por el más humilde y el más alto, seguramente Me adoraríais con gran Amor en vuestros Corazones. Pues Mi Amor es compasivo y siempre generoso para dar Mi Misericordia a los que vengan a Mí.
Yo soy el Señor Dios, el Santo Padre, y digo a este Mundo, cesad vuestro pecado y venid a Mí. Pisad sobre el recto sendero del Amor y la compasión. Seguid siempre a Mi Amado Hijo, que es la Luz y el Cordero. No descartéis Su Amor, Amados Hijos. No rechacéis el Amor que Él anhela daros.
¿Por qué permiten Mis Hijos toda clase de peligro en vuestras vidas y, sin embargo, rechazan el Amor de Cristo con tanta facilidad, como si fuera una plaga, para sobrevivir? ¿Por qué decidís acercaros a la víbora con la mano desnuda y rechazáis la suavidad y la alegría y la seguridad de la paloma? ¿Por qué, Mis Hijos, vos bebéis vinagre burdo cuando Yo os ofrezco lo mejor de los vinos? Vais a decirme que vos preferís los incendios y las agonías del infierno a las alegrías y las gracias del Cielo? ¿Vais a decirme que preferiréis la muerte eterna, con Mi Amor ausente por vosotros, cuando podríais ser abrazados por el Señor Dios?
Oh pecaminosos Hijos, no sabéis lo que hacéis cuando rechazáis Mi Amor y descartáis tan duramente el Amor de Mi Hijo Amado, Beatífico, Glorioso, Cristo Jesús. Os paráis sobre carbones encendidos al rechazar Su Amor. Vos bebéis de la copa venenosa cuando negáis a Mi Hijo, que es tan Amado por Mí. Vos os entregáis a la muerte, cuando volteáis la cara lejos del Amor de Cristo.
Amados Hijos, vos sois tan pequeñas cosas y no concebís lo más espiritual (de esas cosas que son demasiado grandes y desconocidas para explicar). ¡Cómo son vuestras Almas tan debilitadas por el pecado y los males dentro de este Mundo! Si vosotros pudierais ver los resultados o las consecuencias del pecado en vuestras almas, seguro que temblaríais con gran temor y os someteríais a las más duras penitencias para lavaros hasta limpiaros de estos pecados oscuros y mortales. (matanza del Alma)
Yo soy el único Dios verdadero. Venid a Mí, y conoced la Luz de Mi Amor. Rechazadme o volteadme la espalda, a Mí, y las agonías eternas serán vuestras. Oh, Amados Hijos, os deseo vehementemente. Os he hecho para el Amor, con Amor, y por Amor. Corresponded a Mi Amor con el vuestro. Hijos, Yo espero a que cada uno de vosotros volváis a Mí. La alegría es inmensa cuando un Hijo viene a Mí con arrepentimiento y Amor fiel. Hijos, Mi Misericordia y Amor son para vosotros. No rechacéis un regalo tan sorprendente. ¡Es para vosotros!.
Amados Hijos, adorad y Amad a Cristo, porque Él es el Cordero de Sacrificio que fue entregado al Mundo desde tales profundidades de Amor. Yo Amo a Mi Hijo Amado, y deseo que vos lo Améis y lo glorifiquéis con todos vuestros Corazones. No os desviéis de la pasión de vuestro Amor por Cristo, sino encended el fuego y atizad su llama para que vuestro Amor por Él crezca y crezca en vuestras limitaciones Mundanas. ¡Como Cristo se arrebata por vosotros! [Amor increíble GRANDE aquí!] ¡Cómo sois Amados por vuestro Dios Todopoderoso! Elegid el Amor sobre la oscuridad. Elegidme, Mis Hijos. Venid a Mí y Yo os daré consuelo y Amor.
Oh, desconcertados Hijos, no seáis confundidos, no más, porque Yo soy el Señor Dios, el Uno, el Virtuoso, el Amoroso y el Justo. Venid a Mí, con el Corazón lleno y las Almas afligidas para que podáis ser redimidos por el perdón que Mi Amado Hijo adquirió para vosotros por Su Muerte y Resurrección. Así, vendrá con Gran Gloria en Su medio y el Mundo se golpeará con miedo y la tierra se quejará con odio y los dignos serán abrazados en su totalidad por el Amor de Dios, Cristo.
Seguid a Cristo a la Casa de Dios. Orad y Amadme pues Yo anhelo vuestro Amor. Oh Hijos de este Mundo, volved a la luz y a la bondad y el Amor. Apartaos de esas cosas que os llevan fuera del camino de la justicia, el camino de Mi Amado Hijo, Cristo. Amados Hijos, orad, pues todas las oraciones que Yo escucho son como canciones para Mí y respondo a cada uno de vosotros con Gran Amor. ¡Cómo añoro por cada uno de Mis Hijos!
Amados Hijos, no esperéis y no divaguéis. Poned vuestros Corazones en Mis Manos y sabed que la Paz de Dios está con vosotros. Sucumbid al Amor, Mis Hijos. No caigáis hacia el mal y en el pecado. Hay consecuencias por vuestros pecados y os digo, vuestras Almas son dañadas cuando entráis en tinieblas forjadas por el pecado.
Amados Hijos, vos sois Míos y anhelo por vos. Venid a Mí ahora y no seáis frívolos con vuestro Tiempo, pues vosotros no podéis daros ese lujo. Amados Hijos, sabed que esto es cierto: llegará un día en el que desearéis con todo lo que sois que mejor hubierais elegido el camino de la Rectitud. No tengáis miedo de venir a Mí. Puedo perdonar todos los pecados de los destrozados del corazón, a los arrepentidos, y los afligidos. Mi Amor y Misericordia son aún [incluso] vuestros. Amados Hijos, sosteneos firmemente a Mi Amor, Mi Palabra y Mi Misericordia. Son vuestros. Amados Hijos, Yo os digo: Paz.
Paz en este día y en todos los demás. Paz.

NO PODÉIS APRECIAR A DOS AMOS
Martes, 12 de abril 2016 3:08-15:53
Amada Hija, no abandones a Tu Padre que te ama graciosísimamente, con el afecto del universo o un universo de afecto. Vosotros quedáis obligados a Mí por el Amor y Yo anhelo que vuestra voz y oraciones resuenen en Mis oídos. No Me abandonéis, a vuestro Señor Dios y Padre. Vos sois preciosos, tan preciosos para Mí, y Yo anhelo por la constancia de vuestro Amor. Hijo extraviado, no podéis extraviaros de vuestro Padre Amoroso y ser protegidos. Vosotros debéis estar conmigo y cumplir con Mi Gran Amor por vosotros.
Mi Misericordia para Mis Hijos es interminable y es dada de lo más libremente, con abundante Amor y alegría. Mi Misericordia es para que vosotros la toméis. Venid a Mí con pesar, en arrepentimiento y será vuestra. Qué ganas de daros Mi Gran Misericordia! Anhelo esto, como Yo anhelo vuestro Amor perdurable.
Amados Hijos, el Momento viene pronto, cuando el Mundo verá por su propia infidelidad, la Gloria de Mi Amado Hijo, Cristo. Su Gloria se extenderá o brillará en todo el Mundo y Mis Hijos, vendrán a Mí como uno. Mis Hijos tienen que ver para creer, y cómo rompe esto Mi Amoroso Corazón. Vuestra fe es tan deficiente, y cómo he deseado que cada uno de vosotros vuelva a Mí, a través de vuestra propia confianza y Amor por vuestro Señor Dios. Pero en esta era de la maldad y pecado, Mi Amados Hijos desconfían e incendian con la cólera del odio. Por lo tanto, Mis Amados Hijos tendrán su signo, a pesar de que eso insulta Mi tierno Corazón [la desconfianza], Yo os lo doy para que Mis Hijos se vuelvan a Mí con pesar o disculpándose o con remordimiento y crezcan en su fe y Amor a Mi Amado Hijo, Cristo que ha redimido a este Mundo.
Oh, Hijos impíos, ¿no vendréis a Aquel que os ama con tanta ansiedad y tan profundamente? ¿Por qué os llenaríais de plagas a vosotros mismos con las cargas de este Mundo, cuando Mi Amor os lleva y guía a una Vida eterna que no se puede explicar, pero experimentar? Si tan solo tuvierais aunque sea un atisbo, un pequeño grano de pista del significado, de la situación o circunstancia de la Vida Eterna, [esto fue difícil de entender – como que la Vida eterna no puede describirse como un "lugar" - no había ninguna palabra adecuada. ] seguramente vuestras luchas mundanas caerían a la nada o a lo que es intrascendente. Pues vuestros ojos mirarían hacia los Cielos y anhelarían estar Conmigo, conociendo las grandes gracias de la Vida eterna y la santa alegría inherente a la misma.
Amados Hijos, vos decidís quedaros con una roca áspera cerca de vuestro pecho, cuando Yo os ofrezco a vuestros Corazones un cofre de oro. Vos bebéis tan codiciosamente de una taza de vinagre, cuando Yo os ofrezco serviros el más magnífico de los vinos, endulzado por la miel de Mi Amor duradero. Amados, pero infieles Hijos, vos os preocupáis más con el destino de un día, sin dar un pensamiento hacia lo Eterno. Mis insensatos e ignorantes Hijos, os Amo tanto y os llamo para que podáis conocer el camino hacia Mí. Para que también vos os unáis a Mí en la Vida eterna. Sin embargo, vos añoráis lo que es frívolo y lo que os glorifica de acuerdo a las normas de este Mundo.
Amados Hijos, no os dejéis engañar por las astucias y baratijas sin valor de este Mundo. La riqueza del Mundo es un placer fugaz, y que haréis más tarde, cuando el precio que tengáis que pagar sea intenso con dolor y que vos no estéis habituados para el trabajo y el dolor? Les pido a Mis Hijos que vengan a Mí con vuestro Amor y confianza. Volved a Mi más Amado Hijo y Amadlo, a Cristo Jesús, que busca tranquilizar las heridas de la Humanidad.
Amados Hijos que habéis sufrido en Mi Nombre burlas y transgresiones por las bocas y las manos del Hombre, vos conoceréis grandes gracias. No os desesperéis, sino enfrentad de buen grado la antagonía de los infieles, pues los dones que vosotros ganáis en el Cielo, por vuestro Amor a Mí, llenarán vuestros corazones con tal agradecimiento que vos desearéis haber enfrentado más traición en Mi Nombre. No os desesperéis, sino sabed que Mis Ojos ven tan cariñosamente sobre vosotros, y la Mano del Amor calienta vuestros Corazones con su abrazo.
Mis queridos y desconcertados Hijos, no utilicéis este Mundo para medir lo que vos todavía no entendéis o no sabéis. Se queda tan corto, y por su gran inferioridad, os conduce a conclusiones erróneas y sufrientes o sufribles. Yo soy el Señor Dios y no hay alguien igual. Yo Soy y siempre seré y siempre he Sido. No midáis lo que no podéis saber, Amados Hijos. Conoced y creed con todo vuestro Corazón que Yo soy el Amor y que Mi Amor por vos es más vasto que el cielo de los desiertos y más grande que las montañas más altas que podáis ver, y más devoto que la madre más devota, y comprometido con una alegría para que recibáis destellos de esto, pero sólo destellos. Pues el Espíritu honra este Mundo con estos Santos Destellos de Eterna Alegría y tantos de Mis Hijos no ven o no les importa.
Ay de los Hijos que Me niegan aún, incluso cuando se les dan grandes señales de Mi Amor y el Poder Eterno, Santidad, Grandeza [esto era demasiado grande y brillante para ver o explicar - pensad en GRANDE] Soy el único Dios verdadero. Amad a Mi Hijo y Amaréis al Padre. Aquellos a los que Mi Hijo Ama y aprueba, serán bienvenidos con alegría, totalmente, a través de las puertas del Cielo. Sin embargo, los que desprecien al Señor Cristo con el odio o la lucidez o avergonzándolo o rechazándolo, lamentarán la luz de esos días que los llevaron a su miseria eterna.
Amados Hijos, Mi Amor está en cada rayo de luz solar y en cada brisa que refresca la tierra. Sabed que todas las cosas de la tierra son Mis atesorados regalos para el Hombre. Amados Hijos, soy un Señor Justo y Padre Amoroso. Al igual que un Señor no va a atenerse con el abuso o la falsedad, de lo contrario, el Padre Amoroso tendrá que disciplinar a Sus Hijos extraviados. Amados Hijos, hay gloria en este Mundo porque hay Amor y Misericordia fluyendo a través de Mis Hijos, del uno por el otro. Sin embargo, tanto sigue estando en la oscuridad. Sabed que vuestras oraciones ardientes convierten este Mundo y mitigan los dolores de parto causados por las consecuencias del pecado.
Hijos, no creáis que podéis apreciar y seguir a dos Amos. Soy un Señor celoso y quiero vuestra fidelidad y Amor a Mí mismo. No me podéis amarme y amar al oro. No podéis servirme y servir a vuestro deseo de poder. No podéis amarme, y ser altivos con vuestros hermanos. Vuestro Amor debe venir a Mí, libremente y sin divisiones. ¿Y porque debería equipararse el Dios de todo lo que es Bueno y Santo con el oro o el ansia de poder? ¿Es Mi Amor mucho más valioso que estas cosas? Tal es la mente y el Corazón de los Hombres que vosotros me valoráis tan bajamente.
Amados Hijos, llamadme. Llamadme, y Yo respondo. Escuchad Mi llamado y Mis Amorosas bendiciones y respuestas a vuestras oraciones. Yo escucho a cada uno de vosotros y tomo vuestras oraciones con Amor en Mi Corazón. Amados Hijos, sabed que no hay mayor gloria ni mayor santidad que la Eucaristía. Su santidad también está degradada o infravalorada por el Hombre. Hijos, conoced y Amad y respetad y glorificad la Eucaristía, pues es el Hijo de Dios y Hombre, en Su Gran Divinidad y Amor por vos.
Contemplad la Eucaristía, al Hijo de Dios, y sabed que esta Gran bendición ENORME [es como una Gran explosión de la grandeza que no podemos descifrar] no la tendréis fácilmente en poco tiempo, y entonces Mis Hijos gemirán por su leche y miel. Empapaos de la Bendición Más Grande en la Eucaristía. No sabéis la Gloria de sus bendiciones, la abundancia de bendiciones que recibís.
Amados Hijos, Yo os digo: no deseéis una señal para mantener vuestra fe en Mí, por el contrario, mirad con gran tristeza sobre los que lo así lo desean y orad a Mí con Amor y contrición en vuestros corazones. Yo estoy con vosotros y me obligo con los que rezan con tanta solemnidad y consistencia. Amados Hijos, Mi deseo es daros buenos regalos. Creed en Mí. Confiad en Mí y conoced la paz interior que os doy. Me hacéis feliz por vuestras oraciones y respondo a cada una de ellas para la Gloria de Mi Voluntad. Confiad en el Padre Eterno que os Ama perfectamente. Un Buen Padre no traiciona a Sus Hijos, ni les envía a jugar con víboras o a morir de hambre a Sus Hijos Amados. El Padre desea Amor, confianza y el respeto de Sus Hijos, y cómo adora a todos ellos, con tal afecto y Gran Amor.
Anhelad por Mí, Mis Hijos, como Yo anhelo por vosotros, y estoy siempre con vosotros dándoos Mi Paz. Orad, Hijitos y ahondad (en) la alegría y la paz de Mi Amor Perdurable.
Martes, 12 de abril 2016 3:08-15:53
Amada Hija, no abandones a Tu Padre que te ama graciosísimamente, con el afecto del universo o un universo de afecto. Vosotros quedáis obligados a Mí por el Amor y Yo anhelo que vuestra voz y oraciones resuenen en Mis oídos. No Me abandonéis, a vuestro Señor Dios y Padre. Vos sois preciosos, tan preciosos para Mí, y Yo anhelo por la constancia de vuestro Amor. Hijo extraviado, no podéis extraviaros de vuestro Padre Amoroso y ser protegidos. Vosotros debéis estar conmigo y cumplir con Mi Gran Amor por vosotros.
Mi Misericordia para Mis Hijos es interminable y es dada de lo más libremente, con abundante Amor y alegría. Mi Misericordia es para que vosotros la toméis. Venid a Mí con pesar, en arrepentimiento y será vuestra. Qué ganas de daros Mi Gran Misericordia! Anhelo esto, como Yo anhelo vuestro Amor perdurable.
Amados Hijos, el Momento viene pronto, cuando el Mundo verá por su propia infidelidad, la Gloria de Mi Amado Hijo, Cristo. Su Gloria se extenderá o brillará en todo el Mundo y Mis Hijos, vendrán a Mí como uno. Mis Hijos tienen que ver para creer, y cómo rompe esto Mi Amoroso Corazón. Vuestra fe es tan deficiente, y cómo he deseado que cada uno de vosotros vuelva a Mí, a través de vuestra propia confianza y Amor por vuestro Señor Dios. Pero en esta era de la maldad y pecado, Mi Amados Hijos desconfían e incendian con la cólera del odio. Por lo tanto, Mis Amados Hijos tendrán su signo, a pesar de que eso insulta Mi tierno Corazón [la desconfianza], Yo os lo doy para que Mis Hijos se vuelvan a Mí con pesar o disculpándose o con remordimiento y crezcan en su fe y Amor a Mi Amado Hijo, Cristo que ha redimido a este Mundo.
Oh, Hijos impíos, ¿no vendréis a Aquel que os ama con tanta ansiedad y tan profundamente? ¿Por qué os llenaríais de plagas a vosotros mismos con las cargas de este Mundo, cuando Mi Amor os lleva y guía a una Vida eterna que no se puede explicar, pero experimentar? Si tan solo tuvierais aunque sea un atisbo, un pequeño grano de pista del significado, de la situación o circunstancia de la Vida Eterna, [esto fue difícil de entender – como que la Vida eterna no puede describirse como un "lugar" - no había ninguna palabra adecuada. ] seguramente vuestras luchas mundanas caerían a la nada o a lo que es intrascendente. Pues vuestros ojos mirarían hacia los Cielos y anhelarían estar Conmigo, conociendo las grandes gracias de la Vida eterna y la santa alegría inherente a la misma.
Amados Hijos, vos decidís quedaros con una roca áspera cerca de vuestro pecho, cuando Yo os ofrezco a vuestros Corazones un cofre de oro. Vos bebéis tan codiciosamente de una taza de vinagre, cuando Yo os ofrezco serviros el más magnífico de los vinos, endulzado por la miel de Mi Amor duradero. Amados, pero infieles Hijos, vos os preocupáis más con el destino de un día, sin dar un pensamiento hacia lo Eterno. Mis insensatos e ignorantes Hijos, os Amo tanto y os llamo para que podáis conocer el camino hacia Mí. Para que también vos os unáis a Mí en la Vida eterna. Sin embargo, vos añoráis lo que es frívolo y lo que os glorifica de acuerdo a las normas de este Mundo.
Amados Hijos, no os dejéis engañar por las astucias y baratijas sin valor de este Mundo. La riqueza del Mundo es un placer fugaz, y que haréis más tarde, cuando el precio que tengáis que pagar sea intenso con dolor y que vos no estéis habituados para el trabajo y el dolor? Les pido a Mis Hijos que vengan a Mí con vuestro Amor y confianza. Volved a Mi más Amado Hijo y Amadlo, a Cristo Jesús, que busca tranquilizar las heridas de la Humanidad.
Amados Hijos que habéis sufrido en Mi Nombre burlas y transgresiones por las bocas y las manos del Hombre, vos conoceréis grandes gracias. No os desesperéis, sino enfrentad de buen grado la antagonía de los infieles, pues los dones que vosotros ganáis en el Cielo, por vuestro Amor a Mí, llenarán vuestros corazones con tal agradecimiento que vos desearéis haber enfrentado más traición en Mi Nombre. No os desesperéis, sino sabed que Mis Ojos ven tan cariñosamente sobre vosotros, y la Mano del Amor calienta vuestros Corazones con su abrazo.
Mis queridos y desconcertados Hijos, no utilicéis este Mundo para medir lo que vos todavía no entendéis o no sabéis. Se queda tan corto, y por su gran inferioridad, os conduce a conclusiones erróneas y sufrientes o sufribles. Yo soy el Señor Dios y no hay alguien igual. Yo Soy y siempre seré y siempre he Sido. No midáis lo que no podéis saber, Amados Hijos. Conoced y creed con todo vuestro Corazón que Yo soy el Amor y que Mi Amor por vos es más vasto que el cielo de los desiertos y más grande que las montañas más altas que podáis ver, y más devoto que la madre más devota, y comprometido con una alegría para que recibáis destellos de esto, pero sólo destellos. Pues el Espíritu honra este Mundo con estos Santos Destellos de Eterna Alegría y tantos de Mis Hijos no ven o no les importa.
Ay de los Hijos que Me niegan aún, incluso cuando se les dan grandes señales de Mi Amor y el Poder Eterno, Santidad, Grandeza [esto era demasiado grande y brillante para ver o explicar - pensad en GRANDE] Soy el único Dios verdadero. Amad a Mi Hijo y Amaréis al Padre. Aquellos a los que Mi Hijo Ama y aprueba, serán bienvenidos con alegría, totalmente, a través de las puertas del Cielo. Sin embargo, los que desprecien al Señor Cristo con el odio o la lucidez o avergonzándolo o rechazándolo, lamentarán la luz de esos días que los llevaron a su miseria eterna.
Amados Hijos, Mi Amor está en cada rayo de luz solar y en cada brisa que refresca la tierra. Sabed que todas las cosas de la tierra son Mis atesorados regalos para el Hombre. Amados Hijos, soy un Señor Justo y Padre Amoroso. Al igual que un Señor no va a atenerse con el abuso o la falsedad, de lo contrario, el Padre Amoroso tendrá que disciplinar a Sus Hijos extraviados. Amados Hijos, hay gloria en este Mundo porque hay Amor y Misericordia fluyendo a través de Mis Hijos, del uno por el otro. Sin embargo, tanto sigue estando en la oscuridad. Sabed que vuestras oraciones ardientes convierten este Mundo y mitigan los dolores de parto causados por las consecuencias del pecado.
Hijos, no creáis que podéis apreciar y seguir a dos Amos. Soy un Señor celoso y quiero vuestra fidelidad y Amor a Mí mismo. No me podéis amarme y amar al oro. No podéis servirme y servir a vuestro deseo de poder. No podéis amarme, y ser altivos con vuestros hermanos. Vuestro Amor debe venir a Mí, libremente y sin divisiones. ¿Y porque debería equipararse el Dios de todo lo que es Bueno y Santo con el oro o el ansia de poder? ¿Es Mi Amor mucho más valioso que estas cosas? Tal es la mente y el Corazón de los Hombres que vosotros me valoráis tan bajamente.
Amados Hijos, llamadme. Llamadme, y Yo respondo. Escuchad Mi llamado y Mis Amorosas bendiciones y respuestas a vuestras oraciones. Yo escucho a cada uno de vosotros y tomo vuestras oraciones con Amor en Mi Corazón. Amados Hijos, sabed que no hay mayor gloria ni mayor santidad que la Eucaristía. Su santidad también está degradada o infravalorada por el Hombre. Hijos, conoced y Amad y respetad y glorificad la Eucaristía, pues es el Hijo de Dios y Hombre, en Su Gran Divinidad y Amor por vos.
Contemplad la Eucaristía, al Hijo de Dios, y sabed que esta Gran bendición ENORME [es como una Gran explosión de la grandeza que no podemos descifrar] no la tendréis fácilmente en poco tiempo, y entonces Mis Hijos gemirán por su leche y miel. Empapaos de la Bendición Más Grande en la Eucaristía. No sabéis la Gloria de sus bendiciones, la abundancia de bendiciones que recibís.
Amados Hijos, Yo os digo: no deseéis una señal para mantener vuestra fe en Mí, por el contrario, mirad con gran tristeza sobre los que lo así lo desean y orad a Mí con Amor y contrición en vuestros corazones. Yo estoy con vosotros y me obligo con los que rezan con tanta solemnidad y consistencia. Amados Hijos, Mi deseo es daros buenos regalos. Creed en Mí. Confiad en Mí y conoced la paz interior que os doy. Me hacéis feliz por vuestras oraciones y respondo a cada una de ellas para la Gloria de Mi Voluntad. Confiad en el Padre Eterno que os Ama perfectamente. Un Buen Padre no traiciona a Sus Hijos, ni les envía a jugar con víboras o a morir de hambre a Sus Hijos Amados. El Padre desea Amor, confianza y el respeto de Sus Hijos, y cómo adora a todos ellos, con tal afecto y Gran Amor.
Anhelad por Mí, Mis Hijos, como Yo anhelo por vosotros, y estoy siempre con vosotros dándoos Mi Paz. Orad, Hijitos y ahondad (en) la alegría y la paz de Mi Amor Perdurable.

UN ASOMBROSO, PROFUNDAMENTE AMOROSO, MENSAJE DE DIOS / AMOR
Viernes, 18 de marzo 2016 ~ 1: 38 - 15:04 Adoración
Tu nos levantas cuando estamos apenados [arrepentidos]. Incluso después de repetir nuestros pecados, Tú nos perdonas y nos levantas. *** ¿Quiénes somos nosotros para odiar ... a ladrones, los violentos, los violadores, los pederastas, cuando se nos miente, cuando somos humillados, odiados? ¿Quiénes somos nosotros para juzgar? Cristo murió por nosotros, e incluso si solamente yo estuviera aquí, Él se sacrificaría, sólo por Mí. O solo por un pedófilo. O simplemente por un asesino. Nadie es mejor o peor que el otro, porque no podemos juzgar. Se supone que debemos perdonar, y lo hacemos cuando es más difícil; cómo Te sonríes, ¿verdad?
Amados Hijos, os digo hoy que vosotros sois tiernamente Amados por vuestro Señor Dios y Padre. No me siento de brazos cruzados, esperando por vuestro Amor en reciprocidad, sino que activamente, todos los días llamo a cada uno de vosotros para que Me Amen, se den cuenta de Mis Llamados de Amor, y para que respondan a mis Llamados de Amor.
Escuchadme, Amados Hijos, pues Yo no susurro a vuestros Corazones, sino que los llamo con Amor y la ferocidad de la necesidad, o el deseo, o el ansia por vos. El Amor engendra Amor y ¿por qué me negáis, a vuestro Señor Dios y Padre, vuestro Amor que Yo anhelo tan profundamente? Yo no aviento Mi red a unos pocos sino que la tiro sobre todo el Mundo, con gran esperanza y el deseo de que todos mis Hijos, sean atrapados por Mi Amor.
Hijos, no os odiéis entre vos. Es un pecado o es pecaminoso porque el odio engendra el pecado y la ira y motiva a pecar más. Amados Hijos, Amad como Yo os Amo. Perdonad como Yo os perdono. No hay fin ni límite a Mi Amorosa Misericordia por cada uno de vosotros. Sabed que esto es cierto: No se puede tener Vida sin Mí. Mi Amado Hijo, Cristo ha quitado los candados a la puerta del Cielo por Su Sacrificio y cada uno de vosotros sois tan bienvenidos por Nuestro Amor. Por favor, Mis Amados Hijos, mirad a vuestro Señor Dios y Padre. Mirad a Mi Amado Hijo, Cristo, en busca de Su perdón, Amor, consuelo, alegría y Vida eterna.
No se puede vivir sin Mí, mis Hijos, por lo que os digo, rezad Mis Amados, pues vuestras Vidas dependen de vuestras oraciones y vuestro Amor por Mí. Amados Hijos, no asediéis a Mi más Amado Hijo con vuestras negaciones de Amor, por vuestro desdeño, y por el odio, hacia los demás, hacia vosotros mismos, y siempre, hacia el mismo Jesús, que es Todo Santo, Todo Amor, y que debe tratarse con el MÁS GRANDE respeto, asombro, adoración, Amor, sorpresa, GRANDE! [Está envuelto en tremenda admiración por Él - increíble]. Él es vuestro Salvador y la promesa hecha a vosotros de Vida Perpetua y Eterna. Si tuvierais tan solo una idea de la GRANDEZA de esto, de la Eternidad o la Vida Eterna y de Su Gran Sacrificio, sin duda vosotros os pondríais diariamente de rodillas con alegría, y en adoración al Señor Cristo. No lo podéis saber y, por tanto, os digo que confiéis en Mí. Confiad en el Amor de Cristo Jesús y conoced la Vida Eterna. No podéis vivir sin Amor, y yo soy el Amor.
Amados Hijos, no creáis o penséis que vuestros pecados pasan desapercibidos por Mí. Me traen tanto dolor. Se os ofrece Mi Compasión y perdón, si tan sólo recurrierais a Mí. Cuando rechazáis a Mi Amor y negáis a Cristo, seguramente la Vida Eterna os abandonará y veréis el dolor y la agonía de la Muerte Eterna. No hay cosa más oscura, más espantosa, más terrible, (que) estar sin esperanza de Mí, de Mi Presencia, de Mi Gracia Salvífica. Es una oscuridad más allá de la imaginación, y por lo tanto os digo, Mis Amados Hijos, ahora es el momento de recurrir a Mí, a vuestro Señor Dios y Padre. Ahora es el momento de recurrir a Mi Hijo Más Amado en busca de Su Amor y compasión. No esperéis o penséis o discutáis sobre cosas que no podéis saber.
Vuestra fe y Amor y confianza en Mí es un regalo alegre al que yo correspondo, pero no alejéis al Amor. Es sólo causa de vuestro Eterno Detrimento. Creed en Mí, en vuestro Señor Dios. Yo Soy simplemente el Amor [una sensación tan grande de Amor aquí] y pido sólo vuestro Amor. Amados Hijos, ¿es tan difícil aceptar al Amor? El Más Puro, el MÁS GRANDE Amor? Así que os digo, no esperéis, pues la Gloria de Dios viene y Mi Hijo os mostrará vuestros errores y pecados. No enfrentéis a la Gloria con tales pecados sobre vuestros pechos. Que terrible será cuando no hayáis aprovechado Mi Amorosa oferta de Misericordia.
Por favor, Mis Amados Hijos, volved a Mí, a vuestro Amoroso Padre y Creador. Os he hecho de Amor, para el Amor, y porque os Amo. Oh fatigados Hijos. No seáis inquietos, sino obtened consuelo en Mi Misericordia y Amor. Amados Hijos, sabed que Yo estoy siempre con vosotros. Cuando las nubes se oscurezcan del gris al negro y los fuegos caigan de los cielos y el dragón os persiga, llamadme y Yo voy a responder con el Amor y el poder y castigaré a los demonios o leviatanes ante vos. Ni un cabello de la cabeza de Mis Amados Hijos será tocado o chamuscado por el mal.
Confía en Mí. No confiéis en los caprichos y farsas o las mentiras de este mundo. Sin duda, vuestros Corazones no están preparados para soportar el peso del pecado. Volved [recurrid] a Mí. Volved a la Misericordia y voy a aligerar el peso que lleváis, con Amor y Mi Santo Perdón.
Hijos, ahora es el Momento. No os detengáis ni consideréis que vuestras almas sean tan indignas de Mi perdón Oportuno. No podéis saber vuestro día ni la hora. Yo soy el Señor Dios. Es solo para Mí conocerlo y juzgar. Reconciliaos conmigo, vuestro más Amado y suave Padre, pues yo anhelo por vosotros con el Amor MÁS GRANDE. [Tan amoroso y hermoso ... UN CORAZÓN LLENO.] Venid a conocerme, como un niño conoce a su Padre. Amadme, como un niño ama a su Padre. Vosotros no conoceréis ningún dolor por Mi Amor por vos. Regocijaos en Mi Gloria y sabed que la Mano de Dios no será levantada contra mis Hijos que Aman, o que Me aman y a Mi Amado Hijo, Cristo. Pues no podéis Amar al Hijo y no al Padre y cuando vos negáis al Hijo, así también negaréis al Padre y la Vida Eterna estará perdida.
Amados Hijos, Yo os adoro con tanto Amor y estoy constantemente lleno de alegría y feliz por vuestra particularidad o singularidad. [Tal sensación de dulzura aquí.] Buscadme. Seguid el camino de Cristo, y venid a tener la Vida Eterna. Echo Mis redes a lo largo y ancho y deseo que Todos mis Hijos busquen y tengan Vida Eterna conmigo, vuestro Señor Dios.
Volved a Mí, Amados Hijos. Los cielos se rasgarán y el fuego lloverá sobre los que Me nieguen. Amados Hijos, los cielos se oscurecerán y la tormenta será furiosa. Las tierras se dispersarán y se romperán y huecos sobre la tierra se abrirán de golpe frente al Hombre, y entonces, los que Me hayan negado, o negado a Jesucristo, sabrán que la destrucción ha llegado a convertir a los pecadores a Mí, en su miedo. Amados Hijos, no esperéis hasta que la tormenta llegue para cerrar vuestras ventanas. No esperéis hasta que las langostas empiecen a comer los cultivos antes de cosechar vuestros frutos. No esperéis hasta que haya caído la noche para llenar vuestras lámparas con aceite, pues vos (no) vais a ver lo que está ahí para tropezaros o hacer que os caigáis al suelo sin poder hacer nada.
Amados Hijos, Yo ofrezco tales bendiciones [surgiendo]de Mi Gran Corazón Amoroso. Venid a Mí, y disfrutad de la Misericordia y el Amor y el perdón que Yo ofrezco. Orad, Mis Hijos. Orad, Mis Pequeños Constantes en la Oración. La tormenta está cerca, y seguramente que el Hombre verá las obras de Gloria del Hijo de Dios y sabrá que las Luces de este Mundo deben ser Glorificadas. Amados Hijos, orad y Yo responderé a todas vuestras oraciones. Amad, y Yo Amo. Perdonad y Yo perdono. Amados Hijos, os doy Mi Paz este día de hoy y siempre. Orad, Mis Amados y [Mi Paz]será vuestra.
Viernes, 18 de marzo 2016 ~ 1: 38 - 15:04 Adoración
Tu nos levantas cuando estamos apenados [arrepentidos]. Incluso después de repetir nuestros pecados, Tú nos perdonas y nos levantas. *** ¿Quiénes somos nosotros para odiar ... a ladrones, los violentos, los violadores, los pederastas, cuando se nos miente, cuando somos humillados, odiados? ¿Quiénes somos nosotros para juzgar? Cristo murió por nosotros, e incluso si solamente yo estuviera aquí, Él se sacrificaría, sólo por Mí. O solo por un pedófilo. O simplemente por un asesino. Nadie es mejor o peor que el otro, porque no podemos juzgar. Se supone que debemos perdonar, y lo hacemos cuando es más difícil; cómo Te sonríes, ¿verdad?
Amados Hijos, os digo hoy que vosotros sois tiernamente Amados por vuestro Señor Dios y Padre. No me siento de brazos cruzados, esperando por vuestro Amor en reciprocidad, sino que activamente, todos los días llamo a cada uno de vosotros para que Me Amen, se den cuenta de Mis Llamados de Amor, y para que respondan a mis Llamados de Amor.
Escuchadme, Amados Hijos, pues Yo no susurro a vuestros Corazones, sino que los llamo con Amor y la ferocidad de la necesidad, o el deseo, o el ansia por vos. El Amor engendra Amor y ¿por qué me negáis, a vuestro Señor Dios y Padre, vuestro Amor que Yo anhelo tan profundamente? Yo no aviento Mi red a unos pocos sino que la tiro sobre todo el Mundo, con gran esperanza y el deseo de que todos mis Hijos, sean atrapados por Mi Amor.
Hijos, no os odiéis entre vos. Es un pecado o es pecaminoso porque el odio engendra el pecado y la ira y motiva a pecar más. Amados Hijos, Amad como Yo os Amo. Perdonad como Yo os perdono. No hay fin ni límite a Mi Amorosa Misericordia por cada uno de vosotros. Sabed que esto es cierto: No se puede tener Vida sin Mí. Mi Amado Hijo, Cristo ha quitado los candados a la puerta del Cielo por Su Sacrificio y cada uno de vosotros sois tan bienvenidos por Nuestro Amor. Por favor, Mis Amados Hijos, mirad a vuestro Señor Dios y Padre. Mirad a Mi Amado Hijo, Cristo, en busca de Su perdón, Amor, consuelo, alegría y Vida eterna.
No se puede vivir sin Mí, mis Hijos, por lo que os digo, rezad Mis Amados, pues vuestras Vidas dependen de vuestras oraciones y vuestro Amor por Mí. Amados Hijos, no asediéis a Mi más Amado Hijo con vuestras negaciones de Amor, por vuestro desdeño, y por el odio, hacia los demás, hacia vosotros mismos, y siempre, hacia el mismo Jesús, que es Todo Santo, Todo Amor, y que debe tratarse con el MÁS GRANDE respeto, asombro, adoración, Amor, sorpresa, GRANDE! [Está envuelto en tremenda admiración por Él - increíble]. Él es vuestro Salvador y la promesa hecha a vosotros de Vida Perpetua y Eterna. Si tuvierais tan solo una idea de la GRANDEZA de esto, de la Eternidad o la Vida Eterna y de Su Gran Sacrificio, sin duda vosotros os pondríais diariamente de rodillas con alegría, y en adoración al Señor Cristo. No lo podéis saber y, por tanto, os digo que confiéis en Mí. Confiad en el Amor de Cristo Jesús y conoced la Vida Eterna. No podéis vivir sin Amor, y yo soy el Amor.
Amados Hijos, no creáis o penséis que vuestros pecados pasan desapercibidos por Mí. Me traen tanto dolor. Se os ofrece Mi Compasión y perdón, si tan sólo recurrierais a Mí. Cuando rechazáis a Mi Amor y negáis a Cristo, seguramente la Vida Eterna os abandonará y veréis el dolor y la agonía de la Muerte Eterna. No hay cosa más oscura, más espantosa, más terrible, (que) estar sin esperanza de Mí, de Mi Presencia, de Mi Gracia Salvífica. Es una oscuridad más allá de la imaginación, y por lo tanto os digo, Mis Amados Hijos, ahora es el momento de recurrir a Mí, a vuestro Señor Dios y Padre. Ahora es el momento de recurrir a Mi Hijo Más Amado en busca de Su Amor y compasión. No esperéis o penséis o discutáis sobre cosas que no podéis saber.
Vuestra fe y Amor y confianza en Mí es un regalo alegre al que yo correspondo, pero no alejéis al Amor. Es sólo causa de vuestro Eterno Detrimento. Creed en Mí, en vuestro Señor Dios. Yo Soy simplemente el Amor [una sensación tan grande de Amor aquí] y pido sólo vuestro Amor. Amados Hijos, ¿es tan difícil aceptar al Amor? El Más Puro, el MÁS GRANDE Amor? Así que os digo, no esperéis, pues la Gloria de Dios viene y Mi Hijo os mostrará vuestros errores y pecados. No enfrentéis a la Gloria con tales pecados sobre vuestros pechos. Que terrible será cuando no hayáis aprovechado Mi Amorosa oferta de Misericordia.
Por favor, Mis Amados Hijos, volved a Mí, a vuestro Amoroso Padre y Creador. Os he hecho de Amor, para el Amor, y porque os Amo. Oh fatigados Hijos. No seáis inquietos, sino obtened consuelo en Mi Misericordia y Amor. Amados Hijos, sabed que Yo estoy siempre con vosotros. Cuando las nubes se oscurezcan del gris al negro y los fuegos caigan de los cielos y el dragón os persiga, llamadme y Yo voy a responder con el Amor y el poder y castigaré a los demonios o leviatanes ante vos. Ni un cabello de la cabeza de Mis Amados Hijos será tocado o chamuscado por el mal.
Confía en Mí. No confiéis en los caprichos y farsas o las mentiras de este mundo. Sin duda, vuestros Corazones no están preparados para soportar el peso del pecado. Volved [recurrid] a Mí. Volved a la Misericordia y voy a aligerar el peso que lleváis, con Amor y Mi Santo Perdón.
Hijos, ahora es el Momento. No os detengáis ni consideréis que vuestras almas sean tan indignas de Mi perdón Oportuno. No podéis saber vuestro día ni la hora. Yo soy el Señor Dios. Es solo para Mí conocerlo y juzgar. Reconciliaos conmigo, vuestro más Amado y suave Padre, pues yo anhelo por vosotros con el Amor MÁS GRANDE. [Tan amoroso y hermoso ... UN CORAZÓN LLENO.] Venid a conocerme, como un niño conoce a su Padre. Amadme, como un niño ama a su Padre. Vosotros no conoceréis ningún dolor por Mi Amor por vos. Regocijaos en Mi Gloria y sabed que la Mano de Dios no será levantada contra mis Hijos que Aman, o que Me aman y a Mi Amado Hijo, Cristo. Pues no podéis Amar al Hijo y no al Padre y cuando vos negáis al Hijo, así también negaréis al Padre y la Vida Eterna estará perdida.
Amados Hijos, Yo os adoro con tanto Amor y estoy constantemente lleno de alegría y feliz por vuestra particularidad o singularidad. [Tal sensación de dulzura aquí.] Buscadme. Seguid el camino de Cristo, y venid a tener la Vida Eterna. Echo Mis redes a lo largo y ancho y deseo que Todos mis Hijos busquen y tengan Vida Eterna conmigo, vuestro Señor Dios.
Volved a Mí, Amados Hijos. Los cielos se rasgarán y el fuego lloverá sobre los que Me nieguen. Amados Hijos, los cielos se oscurecerán y la tormenta será furiosa. Las tierras se dispersarán y se romperán y huecos sobre la tierra se abrirán de golpe frente al Hombre, y entonces, los que Me hayan negado, o negado a Jesucristo, sabrán que la destrucción ha llegado a convertir a los pecadores a Mí, en su miedo. Amados Hijos, no esperéis hasta que la tormenta llegue para cerrar vuestras ventanas. No esperéis hasta que las langostas empiecen a comer los cultivos antes de cosechar vuestros frutos. No esperéis hasta que haya caído la noche para llenar vuestras lámparas con aceite, pues vos (no) vais a ver lo que está ahí para tropezaros o hacer que os caigáis al suelo sin poder hacer nada.
Amados Hijos, Yo ofrezco tales bendiciones [surgiendo]de Mi Gran Corazón Amoroso. Venid a Mí, y disfrutad de la Misericordia y el Amor y el perdón que Yo ofrezco. Orad, Mis Hijos. Orad, Mis Pequeños Constantes en la Oración. La tormenta está cerca, y seguramente que el Hombre verá las obras de Gloria del Hijo de Dios y sabrá que las Luces de este Mundo deben ser Glorificadas. Amados Hijos, orad y Yo responderé a todas vuestras oraciones. Amad, y Yo Amo. Perdonad y Yo perdono. Amados Hijos, os doy Mi Paz este día de hoy y siempre. Orad, Mis Amados y [Mi Paz]será vuestra.

GRANDES GRACIAS / MILAGROS / BENDICIONES!
Jueves, 10 de marzo 2016 2:37-15:10
Oh Precioso Corazón de Jesús, ayúdame a caminar en Tu Luz.
Amados Hijos, escuchadme, pues yo soy el Dios de Israel y el Señor de esta tierra y de los Cielos. Los ángeles cantan Mis Alabanzas y se ponen de rodillas para honrar y adorar y alabar a Mi Nombre. Yo soy el Señor Dios y Padre. Mi voluntad es recta y justa. Mi Mano es fuerte y desciende o cae como un martillo sobre los suelos o las montañas con ira y con demandas para Mis Amados Hijos. Voy a martillar sobre las Montañas de Kale [arcaica - dinero] y a agitar las ramas de los árboles y a arrojar a todos los pueblos en escombros.
Por Mi Santa Mano hago esto, pero por la Gran Misericordia legada a vosotros por Mi Preciosísimo y Amado Hijo, Jesucristo, que vive en los Corazones de muchos o en los Corazones de los constantes en la oración, detengo los castigos que están destinados para el Hombre y el mal y el pecado de vuestras formas. Amad a Mi Hijo Amado, Jesucristo, que os salva por Su misma muerte. Corred hacia Él con Corazones abiertos y almas arrepentidas. Pues no podéis subir a encontrar al Padre cuando vos no amáis y adoráis al Hijo.
Amados Hijos, las manos [como siervos] del Cielo están sorprendidos y asombrados o conmocionados por la miseria que dais a vuestro Amado Señor Dios. Me habéis alejado, a favor de vuestro oro y música y las alegrías llenas que no sirven al Espíritu, sino a los excesos de vuestros cuerpos por una voluntad corrupta. Mis Amados Hijos caen a los fosos de enorme oscuridad donde no hay luz que brille sobre vosotros, pero (son) recibidos con sufrimiento únicamente, y todo porque Mis Amados y pequeños Hijos se alejan del Amor mismo. Vosotros habéis alejado vuestros rostros del Señor Dios, quien es todo Amor y compasivísimo [el más Misericordioso] en Mi Amor por vos.
Oh, Amados Hijos, vuestra falta de fe me desconcierta y me hace llorar por vuestras Almas. ¿Cómo dais vuestra espalda a Mi Amor, cuando es a través del Amor que vos sois así salvados? Los ángeles se lamentan al ver como el Hijo del Hombre es burlado y entregado en manos del enemigo con desdén y tal regocijo. Hijos, Cristo es vuestra puerta de entrada a Mí. Cristo es el arco del Cielo y frena al mal para que vos podáis ver el Reino de Dios en todas sus Gracias. Y sin embargo, muchos de Mis Amados Hijos rechazan a Cristo y la Misericordia que ofrece con tanta ternura y esperanza.
Amados Hijos, no rechacéis a Cristo, pues Él es Mi Hijo y no hay mayor Amor que el Amor del Señor Dios en Cristo. Amados Hijos sed absueltos de vuestros pecados con arrepentimiento en vuestros corazones. Perdono al corazón arrepentido con tanta alegría y Amor. Todo el Cielo celebra en la alegría y asombro cuando sólo un Hijo se vuelve hacia Mí, a cualquier hora de la Vida. Mis Hijos, vos sois para Mí como yo soy para vos.
Deponed vuestras armas el uno contra el otro y Amad a vuestros Hermanos y Hermanas. Vosotros podéis tener la Misericordia que Yo ofrezco abundantemente, mientras vea vuestra Amorosa Misericordia dada a los que os intentan derribar. Tened piedad de aquellos que miran hacia el Mundo en la infidelidad y extended en sus oídos Mi Palabra de Amor, que es Cristo, el Señor Jesús. Id a los vacíos, los inofensivos, y mudos y dejad que queden llenos y sin daño alguno ... con las canciones de Mi Gloria. Esparcid Mi Amor por medio de vuestras palabras y acciones y conoceréis el Reino de los Cielos.
Por lo tanto, expongo esto a vosotros: Orad, pues requiero de vuestras oraciones y hago gran júbilo gracias a ellas en Mi GRANDÍSIMO Amor por vos. Orad, y sabed que Yo voy a responder con Amor y la Más Grande Misericordia. Tened misericordia con vuestros Hermanos y Hermanas. Perdonad, ya que es lo que Yo pido de vos, como vosotros lo pediríais a Mí. Amad. Amad, Mis Hijos. Es el bálsamo que cura todas las heridas y une a todos los Hijos. Adorad a Mi Amado Hijo, Cristo, y tomad las GRANDES GRACIAS / MILAGROS/ BENDICIONES !!! de la Eucaristía misma, pues Él es Mi Hijo, el Cordero Inmolado, enviado a vos para que pudierais ser liberados.
Hijos, daos prisa. El Reino de Dios está cerca. No seáis como el compañero caprichoso que es sorprendido con pereza, fuera de las puertas en la oscuridad, pues las puertas serán cerradas a vos y la justicia es una cosa fría. Amados Hijos, pedid y recibid con Amor Mi Misericordia que es ofrecida a cada uno de vosotros con el Corazón lleno de esperanza y de Amor EXTREMO. Aprovechad este ofrecimiento de Misericordia y contemplad como estaréis agradecidos por esto.
No le deis la espalda al Gran Sacrificio del Cordero. Cuando le rechazáis, vos renunciáis a vuestra Vida. Cuando Lo rechazáis, habréis invitado a la muerte en vuestra Alma. Por eso os digo, Amad y adorad al Señor Cristo. Él está en Mí y Yo en él, y Nosotros nos encontramos en vos, en cada uno de vosotros. Amados Hijos, no os detengáis o esperéis a contemplar lo que vos no podéis comprender. Yo soy el Señor Dios y Padre y lo más incomprensible para la pequeñez del Hombre. Por lo tanto os digo, confiad en Mí, el Señor Dios, pues Yo doy a Mis Amados Hijos grandes regalos y GRANDÍSIMO Amor.
Sed constantes en la oración, misericordiosos y tiernos y perdonad as los que están entre vosotros. Los insignificantes serán los primeros y aquellos que han sufrido marcharán con alegría en Mi Casa, hecha hermosa para y por ellos. Y los que se han sentado en las grandes sillas de prosperidad, sin piedad ni pensamiento por los pobres no encontrarán alivio. Vosotros existís por Mi Bendita y Santa Voluntad. No supongáis [dudéis] que Mi Mano pueda moler montañas hasta el polvo o colocar a un pobre hombre en el trono de un Rey. Yo soy el Señor Dios y Mi Santa Voluntad es buena y justa, porque soy Amor Eterno.
Captad esto, Mis Hijos. Captad esto y postraos de rodillas delante del Hijo de Dios, ya que Él es Misericordioso, Amoroso y tierno. Amados Hijos, debéis seguir orando, pues todas las cosas de destrucción son mitigadas por vuestra demostración sincera de Amor para vuestro Padre, con vuestras oraciones Amorosas. No os alejéis de Mí, sino buscadme. Clamad por Mí. No seáis un extraño para vuestro Señor Dios, pues cuando las puertas sean cerradas para vosotros, afuera será oscuridad mientras estéis de pie.
Amados Hijos, Yo lleno vuestros corazones con Mi Amor y Misericordia. Asíos a la Misericordia ofrecida a vosotros y sabed que Mi Amor por vos es GRANDIOSO / ENORME / GRANDE.
Jueves, 10 de marzo 2016 2:37-15:10
Oh Precioso Corazón de Jesús, ayúdame a caminar en Tu Luz.
Amados Hijos, escuchadme, pues yo soy el Dios de Israel y el Señor de esta tierra y de los Cielos. Los ángeles cantan Mis Alabanzas y se ponen de rodillas para honrar y adorar y alabar a Mi Nombre. Yo soy el Señor Dios y Padre. Mi voluntad es recta y justa. Mi Mano es fuerte y desciende o cae como un martillo sobre los suelos o las montañas con ira y con demandas para Mis Amados Hijos. Voy a martillar sobre las Montañas de Kale [arcaica - dinero] y a agitar las ramas de los árboles y a arrojar a todos los pueblos en escombros.
Por Mi Santa Mano hago esto, pero por la Gran Misericordia legada a vosotros por Mi Preciosísimo y Amado Hijo, Jesucristo, que vive en los Corazones de muchos o en los Corazones de los constantes en la oración, detengo los castigos que están destinados para el Hombre y el mal y el pecado de vuestras formas. Amad a Mi Hijo Amado, Jesucristo, que os salva por Su misma muerte. Corred hacia Él con Corazones abiertos y almas arrepentidas. Pues no podéis subir a encontrar al Padre cuando vos no amáis y adoráis al Hijo.
Amados Hijos, las manos [como siervos] del Cielo están sorprendidos y asombrados o conmocionados por la miseria que dais a vuestro Amado Señor Dios. Me habéis alejado, a favor de vuestro oro y música y las alegrías llenas que no sirven al Espíritu, sino a los excesos de vuestros cuerpos por una voluntad corrupta. Mis Amados Hijos caen a los fosos de enorme oscuridad donde no hay luz que brille sobre vosotros, pero (son) recibidos con sufrimiento únicamente, y todo porque Mis Amados y pequeños Hijos se alejan del Amor mismo. Vosotros habéis alejado vuestros rostros del Señor Dios, quien es todo Amor y compasivísimo [el más Misericordioso] en Mi Amor por vos.
Oh, Amados Hijos, vuestra falta de fe me desconcierta y me hace llorar por vuestras Almas. ¿Cómo dais vuestra espalda a Mi Amor, cuando es a través del Amor que vos sois así salvados? Los ángeles se lamentan al ver como el Hijo del Hombre es burlado y entregado en manos del enemigo con desdén y tal regocijo. Hijos, Cristo es vuestra puerta de entrada a Mí. Cristo es el arco del Cielo y frena al mal para que vos podáis ver el Reino de Dios en todas sus Gracias. Y sin embargo, muchos de Mis Amados Hijos rechazan a Cristo y la Misericordia que ofrece con tanta ternura y esperanza.
Amados Hijos, no rechacéis a Cristo, pues Él es Mi Hijo y no hay mayor Amor que el Amor del Señor Dios en Cristo. Amados Hijos sed absueltos de vuestros pecados con arrepentimiento en vuestros corazones. Perdono al corazón arrepentido con tanta alegría y Amor. Todo el Cielo celebra en la alegría y asombro cuando sólo un Hijo se vuelve hacia Mí, a cualquier hora de la Vida. Mis Hijos, vos sois para Mí como yo soy para vos.
Deponed vuestras armas el uno contra el otro y Amad a vuestros Hermanos y Hermanas. Vosotros podéis tener la Misericordia que Yo ofrezco abundantemente, mientras vea vuestra Amorosa Misericordia dada a los que os intentan derribar. Tened piedad de aquellos que miran hacia el Mundo en la infidelidad y extended en sus oídos Mi Palabra de Amor, que es Cristo, el Señor Jesús. Id a los vacíos, los inofensivos, y mudos y dejad que queden llenos y sin daño alguno ... con las canciones de Mi Gloria. Esparcid Mi Amor por medio de vuestras palabras y acciones y conoceréis el Reino de los Cielos.
Por lo tanto, expongo esto a vosotros: Orad, pues requiero de vuestras oraciones y hago gran júbilo gracias a ellas en Mi GRANDÍSIMO Amor por vos. Orad, y sabed que Yo voy a responder con Amor y la Más Grande Misericordia. Tened misericordia con vuestros Hermanos y Hermanas. Perdonad, ya que es lo que Yo pido de vos, como vosotros lo pediríais a Mí. Amad. Amad, Mis Hijos. Es el bálsamo que cura todas las heridas y une a todos los Hijos. Adorad a Mi Amado Hijo, Cristo, y tomad las GRANDES GRACIAS / MILAGROS/ BENDICIONES !!! de la Eucaristía misma, pues Él es Mi Hijo, el Cordero Inmolado, enviado a vos para que pudierais ser liberados.
Hijos, daos prisa. El Reino de Dios está cerca. No seáis como el compañero caprichoso que es sorprendido con pereza, fuera de las puertas en la oscuridad, pues las puertas serán cerradas a vos y la justicia es una cosa fría. Amados Hijos, pedid y recibid con Amor Mi Misericordia que es ofrecida a cada uno de vosotros con el Corazón lleno de esperanza y de Amor EXTREMO. Aprovechad este ofrecimiento de Misericordia y contemplad como estaréis agradecidos por esto.
No le deis la espalda al Gran Sacrificio del Cordero. Cuando le rechazáis, vos renunciáis a vuestra Vida. Cuando Lo rechazáis, habréis invitado a la muerte en vuestra Alma. Por eso os digo, Amad y adorad al Señor Cristo. Él está en Mí y Yo en él, y Nosotros nos encontramos en vos, en cada uno de vosotros. Amados Hijos, no os detengáis o esperéis a contemplar lo que vos no podéis comprender. Yo soy el Señor Dios y Padre y lo más incomprensible para la pequeñez del Hombre. Por lo tanto os digo, confiad en Mí, el Señor Dios, pues Yo doy a Mis Amados Hijos grandes regalos y GRANDÍSIMO Amor.
Sed constantes en la oración, misericordiosos y tiernos y perdonad as los que están entre vosotros. Los insignificantes serán los primeros y aquellos que han sufrido marcharán con alegría en Mi Casa, hecha hermosa para y por ellos. Y los que se han sentado en las grandes sillas de prosperidad, sin piedad ni pensamiento por los pobres no encontrarán alivio. Vosotros existís por Mi Bendita y Santa Voluntad. No supongáis [dudéis] que Mi Mano pueda moler montañas hasta el polvo o colocar a un pobre hombre en el trono de un Rey. Yo soy el Señor Dios y Mi Santa Voluntad es buena y justa, porque soy Amor Eterno.
Captad esto, Mis Hijos. Captad esto y postraos de rodillas delante del Hijo de Dios, ya que Él es Misericordioso, Amoroso y tierno. Amados Hijos, debéis seguir orando, pues todas las cosas de destrucción son mitigadas por vuestra demostración sincera de Amor para vuestro Padre, con vuestras oraciones Amorosas. No os alejéis de Mí, sino buscadme. Clamad por Mí. No seáis un extraño para vuestro Señor Dios, pues cuando las puertas sean cerradas para vosotros, afuera será oscuridad mientras estéis de pie.
Amados Hijos, Yo lleno vuestros corazones con Mi Amor y Misericordia. Asíos a la Misericordia ofrecida a vosotros y sabed que Mi Amor por vos es GRANDIOSO / ENORME / GRANDE.

MIS HIJOS SON MÍOS
Jueves, 03 de marzo 2016 3:30-16:14
Venid a Mí, oh Hijos de Israel. Soy vuestro consuelo y espíritu. Os doy a vosotros tales bendiciones eternas y los invito u os insto a venir a Mí en vuestra hora de angustia. Amados Hijos, no tenéis tiempo, porque el pasado es el pasado y lo que viene vendrá, porque es Mi voluntad, y yo soy el Santísimo y Eterno Padre. Yo soy el Amor o el Dios de todo Amor. Venid a Mí, y despojaos de las agonías de vuestros espíritus. No estéis desamparados, oh Hijos Míos. Vosotros sois Míos y yo estoy siempre con vosotros. No desmayéis, sino clamad a vuestro Padre Celestial que os Ama y que os responderá. ¿Qué persona o gente os pueden Amar más que Yo? No hay nadie o ninguna cosa que vaya a proporcionar a vuestras Almas el sustento como Yo puedo. Alejarse de Mí en busca de esas cosas no (está) no encaja dentro de Mis Planes para vos, y me trae tristeza a Mi Corazón Amoroso.
Sed un amigo de Mi Hijo Amado. Adoradlo y Amadlo poderosamente. Él es la llave de la puerta del Cielo. Él es Mi Hijo Amado, y cuando vos dais Amor y alabanza y adoración a Mi Hijo, ¡cómo se inflama Mi Corazón de alegría Eterna!. Vuestro Amor que corresponde al Mío propio, es queridísimo por Mí. Es un tesoro para Mí, y para aquellos que están en los Cielos. Hay alegría en vuestro Amor y en vuestro perdón. Caminad por el camino que Mi Hijo ha trazado para vosotros. Hijos, no caminéis con pesar. Ese camino es oscuro y no os sostendrá sino que se llevará vuestro Espíritu y apagará las llamas de Amor [que lleva] dentro.
Amados Hijos, no dudéis de que el infierno está aquí o que el infierno existe. Hacéis tal daño a vuestras Amadas Almas por vuestro pecado y capricho y aun no creéis que las consecuencias de vuestra transigencia [con el pecado] conduzca al infierno. Es un lugar o entidad fría y viciosa o vacuidad. [Como la nada absoluta, el vacío] Está lleno de dolor y antagonía. Vos conoceréis tal dolor porque Yo no voy a estar con vosotros y la antítesis del Amor es la oscuridad y la tortura o el dolor. Por cada pecado, hay una consecuencia.
Por vuestro Amor por Mí y vuestro sincero arrepentimiento, vos sois salvados por vuestro compasivísimo y misericordioso Señor Dios. ¿Qué criatura puede venir a Mi casa sin ser invitado? Ninguno puede entrar sino a través de la Gloria de la Misericordia y la compasión. Amados Hijos, anhelo daros Vida Eterna, pero dudáis de Mí y de Mi Hijo y / o de Sus Palabras. No soy vengativo ni odio. Yo Amo y quiero a cada uno de Mis Amados Hijos conmigo.
No os preocupéis por estas cosas que no podéis disipar o controlar. Donde [cuando] vosotros estéis preocupados de aquellas cosas que no podáis combatir en vuestra pequeñez, oh Hijos, recurrid a vuestro Padre Celestial. Yo anhelo daros Mi Amor duradero. Estoy lleno y listo para derramar Mi Amor sobre vos o sobre este Mundo. Oíd Me, oh Hijos. Su sordera no puede continuar. Oíd Me, oh Hijos. No podéis ser ciegos. Amados Hijos, no os perdáis porque yo soy el Señor Dios y yo os deseo, Mis Hijos, a cada uno de vosotros, Conmigo.
¿Cómo se puede estar conmigo cuando estáis contra Mí? Cuando despedís a Cristo y favorecéis las tinieblas de este Mundo, no estáis con Cristo, sino con el anti-Cristo. Aquellos que no confían, pero que buscan mentir y llevar por el mal camino a Mis Amados Hijos, lejos del Señor Dios y Padre, están pecando gravemente y padecerán las profundidades del infierno por este pecado. Mis Hijos son Míos. No deforméis los corazones de Mis Hijos deseándolos [para el mal] o llevándolos al pecado. Yo soy un Dios Amoroso y juicioso. No acepto el pecado, y por eso os digo, Amados Hijos, no transijáis [pactéis] con el pecado.
El oro es todavía oro, ya sea que se trate de una roca o polvo. La miel es miel aún si está en los panales o en vuestra lengua. El agua sigue siendo agua, ya sea que ruja en el océano o caiga de los cielos. Así es el pecado. Puede tomar muchas formas y ofender a vuestro Señor Dios tan profundamente, pero (y) es pecado aun. Conocedme, Mis Amados Hijos. Vuestro sendero es uno de Amor y facilidad, cuando tomáis de la mano al Padre y recorréis el camino de Cristo. Conocedme, Amados Hijos. Conoced lo que Amo y lo que no Amo. Sabed que acepto y lo que no acepto.
Yo no transijo cuando los pecados son traídos delante de Mí sin expiación o pesar. No transijáis con el pecado. Sabed que toma formas insondables. Mis Amados Hijos no pueden ser perfectos, pero vuestra Voluntad es lo que os trae Luz a vuestros corazones o la oscuridad. El Amor no puede ser forzado [por Mí] y es por vuestra propia elección que vosotros vayáis a llamarme. Yo os llamo y deseo vuestra respuesta o clamor por Mi Amor. Sabed que esto es cierto: Los que me desprecian y Me arrojan en Mi Santo Rostro el Amor y perdón que Yo ofrezco, perecerán.
Amadme y llevad vuestros Corazones contritos a Mí, y Yo os elevo.
¡Cómo Amo a cada uno de Mis Hijos Amados! Vos sois tan pequeñas y bellas cosas [SE INFLAMA EL GRAN AMOR!!] Yo os consuelo con Amor. Os traigo alegría con Amor. Yo calmo los dolores de vuestros corazones con Amor. Por lo tanto os digo, dad la espalda al pecado y depositad vuestra confianza en vuestro Dios todopoderoso, que os Ama como un padre perfecto y prevaleciente. Amad, Mis Hijos. Amad y perdonad como vos deseéis ser Amados y perdonados. Por cada acto de Misericordia, vosotros os acercáis a Mí. Cuando Amáis y perdonáis a vuestro Hermano, todo el Cielo se deleita en vos y glorifica a Mi Nombre por vuestro Amor. Amados Hijos, sed misericordiosos y amables unos con otros. La Bondad y la Misericordia son de Mí, de vuestro Señor Dios y Padre Eterno. La ira y la falta de amabilidad y la discordia no son de Mí y están en contra del Señor Jesucristo. Sed cariñosos, misericordiosos y compasivos. No podéis pasar frente a vuestros hermanos sin dar refugio a aquel que lo necesite. Hacer lo contrario, es apartarse de Mi Hijo Amado, y debéis expiar por esto.
Amados Hijos, el trono de Dios os espera. La luz será insoportablemente brillante para aquellos que no me conozcan, y su sola presencia se perderá en medio de la iluminación del Hombre. Orad, Mis Amados y vivid una Vida con Mi Hijo Amado. Nosotros somos Uno y vos sois muy pero muy Amados por nosotros. Hijos errantes, que vivís en el dolor y la rabia, no dudéis que vos sois especialmente Amados y apreciados por Mí. Amados Hijos, no os desesperéis ni temáis. Soy la Luz de este Mundo y les traigo consuelo en el temperamento de la tormenta.
Orad, Amados Hijos, y adorad a Cristo, cuyo Corazón Sagrado y Eterno se abre para vos. Amad y sed guiados por Mi Amado y Eterno Hijo, y seguramente Me conoceréis. Amados Hijos, no os escondáis con miedo o lloréis con dolor. Pues la Mano de Dios está cerca de vosotros y busca el Amor y no el anti-Amor. No destrozo las montañas en Mi Amor por vos, sino que os protejo de sus avalanchas mientras oréis. La oración mitiga la destrucción o la imposición o la caída de todas las cosas.
Soy Maestro y Señor del Hombre. Venid al Señor y ofreced vuestros corazones a Mí. Así me hacéis feliz. Yo anhelo por vos, Mis Hijos. Añoro por vos, y también tengo una gran angustia o preocupación o inquietud sobre el Corazón del Hombre o los Corazones sin fe del Hombre. Oh, Amados Hijos, camináis en la oscuridad cuando vos no tenéis Luz. No se puede vivir en este Mundo sin tomar de la mano a Cristo, que os da la Vida Eterna por medio de Su Amor por vos. No neguéis a Cristo vuestro Amor. No rechacéis Su Amado y Sagrado Corazón.
Amados Hijos, no descanséis en vuestras oraciones, pues los constantes en la oración cosecharán los beneficios de sus esfuerzos y tendrán consuelo en sus Corazones, cuando los cielos se rompan y el fuego caiga desde Los Cielos en lo alto. Yo respondo a todas vuestras oraciones y mitigo los sufrimientos de este Mundo por vuestras oraciones. Anhelo vuestro Amor y oraciones, y por eso os digo, Mis Amados Hijos: dadme vuestro Amor. Amados Hijos, orad. Rezad y alejaos del pecado. Hagan esto en vuestro total beneficio. Orad, Mis Hijos. Yo os consuelo con Mi Amor y el perdón y la Paz más grande.
Jueves, 03 de marzo 2016 3:30-16:14
Venid a Mí, oh Hijos de Israel. Soy vuestro consuelo y espíritu. Os doy a vosotros tales bendiciones eternas y los invito u os insto a venir a Mí en vuestra hora de angustia. Amados Hijos, no tenéis tiempo, porque el pasado es el pasado y lo que viene vendrá, porque es Mi voluntad, y yo soy el Santísimo y Eterno Padre. Yo soy el Amor o el Dios de todo Amor. Venid a Mí, y despojaos de las agonías de vuestros espíritus. No estéis desamparados, oh Hijos Míos. Vosotros sois Míos y yo estoy siempre con vosotros. No desmayéis, sino clamad a vuestro Padre Celestial que os Ama y que os responderá. ¿Qué persona o gente os pueden Amar más que Yo? No hay nadie o ninguna cosa que vaya a proporcionar a vuestras Almas el sustento como Yo puedo. Alejarse de Mí en busca de esas cosas no (está) no encaja dentro de Mis Planes para vos, y me trae tristeza a Mi Corazón Amoroso.
Sed un amigo de Mi Hijo Amado. Adoradlo y Amadlo poderosamente. Él es la llave de la puerta del Cielo. Él es Mi Hijo Amado, y cuando vos dais Amor y alabanza y adoración a Mi Hijo, ¡cómo se inflama Mi Corazón de alegría Eterna!. Vuestro Amor que corresponde al Mío propio, es queridísimo por Mí. Es un tesoro para Mí, y para aquellos que están en los Cielos. Hay alegría en vuestro Amor y en vuestro perdón. Caminad por el camino que Mi Hijo ha trazado para vosotros. Hijos, no caminéis con pesar. Ese camino es oscuro y no os sostendrá sino que se llevará vuestro Espíritu y apagará las llamas de Amor [que lleva] dentro.
Amados Hijos, no dudéis de que el infierno está aquí o que el infierno existe. Hacéis tal daño a vuestras Amadas Almas por vuestro pecado y capricho y aun no creéis que las consecuencias de vuestra transigencia [con el pecado] conduzca al infierno. Es un lugar o entidad fría y viciosa o vacuidad. [Como la nada absoluta, el vacío] Está lleno de dolor y antagonía. Vos conoceréis tal dolor porque Yo no voy a estar con vosotros y la antítesis del Amor es la oscuridad y la tortura o el dolor. Por cada pecado, hay una consecuencia.
Por vuestro Amor por Mí y vuestro sincero arrepentimiento, vos sois salvados por vuestro compasivísimo y misericordioso Señor Dios. ¿Qué criatura puede venir a Mi casa sin ser invitado? Ninguno puede entrar sino a través de la Gloria de la Misericordia y la compasión. Amados Hijos, anhelo daros Vida Eterna, pero dudáis de Mí y de Mi Hijo y / o de Sus Palabras. No soy vengativo ni odio. Yo Amo y quiero a cada uno de Mis Amados Hijos conmigo.
No os preocupéis por estas cosas que no podéis disipar o controlar. Donde [cuando] vosotros estéis preocupados de aquellas cosas que no podáis combatir en vuestra pequeñez, oh Hijos, recurrid a vuestro Padre Celestial. Yo anhelo daros Mi Amor duradero. Estoy lleno y listo para derramar Mi Amor sobre vos o sobre este Mundo. Oíd Me, oh Hijos. Su sordera no puede continuar. Oíd Me, oh Hijos. No podéis ser ciegos. Amados Hijos, no os perdáis porque yo soy el Señor Dios y yo os deseo, Mis Hijos, a cada uno de vosotros, Conmigo.
¿Cómo se puede estar conmigo cuando estáis contra Mí? Cuando despedís a Cristo y favorecéis las tinieblas de este Mundo, no estáis con Cristo, sino con el anti-Cristo. Aquellos que no confían, pero que buscan mentir y llevar por el mal camino a Mis Amados Hijos, lejos del Señor Dios y Padre, están pecando gravemente y padecerán las profundidades del infierno por este pecado. Mis Hijos son Míos. No deforméis los corazones de Mis Hijos deseándolos [para el mal] o llevándolos al pecado. Yo soy un Dios Amoroso y juicioso. No acepto el pecado, y por eso os digo, Amados Hijos, no transijáis [pactéis] con el pecado.
El oro es todavía oro, ya sea que se trate de una roca o polvo. La miel es miel aún si está en los panales o en vuestra lengua. El agua sigue siendo agua, ya sea que ruja en el océano o caiga de los cielos. Así es el pecado. Puede tomar muchas formas y ofender a vuestro Señor Dios tan profundamente, pero (y) es pecado aun. Conocedme, Mis Amados Hijos. Vuestro sendero es uno de Amor y facilidad, cuando tomáis de la mano al Padre y recorréis el camino de Cristo. Conocedme, Amados Hijos. Conoced lo que Amo y lo que no Amo. Sabed que acepto y lo que no acepto.
Yo no transijo cuando los pecados son traídos delante de Mí sin expiación o pesar. No transijáis con el pecado. Sabed que toma formas insondables. Mis Amados Hijos no pueden ser perfectos, pero vuestra Voluntad es lo que os trae Luz a vuestros corazones o la oscuridad. El Amor no puede ser forzado [por Mí] y es por vuestra propia elección que vosotros vayáis a llamarme. Yo os llamo y deseo vuestra respuesta o clamor por Mi Amor. Sabed que esto es cierto: Los que me desprecian y Me arrojan en Mi Santo Rostro el Amor y perdón que Yo ofrezco, perecerán.
Amadme y llevad vuestros Corazones contritos a Mí, y Yo os elevo.
¡Cómo Amo a cada uno de Mis Hijos Amados! Vos sois tan pequeñas y bellas cosas [SE INFLAMA EL GRAN AMOR!!] Yo os consuelo con Amor. Os traigo alegría con Amor. Yo calmo los dolores de vuestros corazones con Amor. Por lo tanto os digo, dad la espalda al pecado y depositad vuestra confianza en vuestro Dios todopoderoso, que os Ama como un padre perfecto y prevaleciente. Amad, Mis Hijos. Amad y perdonad como vos deseéis ser Amados y perdonados. Por cada acto de Misericordia, vosotros os acercáis a Mí. Cuando Amáis y perdonáis a vuestro Hermano, todo el Cielo se deleita en vos y glorifica a Mi Nombre por vuestro Amor. Amados Hijos, sed misericordiosos y amables unos con otros. La Bondad y la Misericordia son de Mí, de vuestro Señor Dios y Padre Eterno. La ira y la falta de amabilidad y la discordia no son de Mí y están en contra del Señor Jesucristo. Sed cariñosos, misericordiosos y compasivos. No podéis pasar frente a vuestros hermanos sin dar refugio a aquel que lo necesite. Hacer lo contrario, es apartarse de Mi Hijo Amado, y debéis expiar por esto.
Amados Hijos, el trono de Dios os espera. La luz será insoportablemente brillante para aquellos que no me conozcan, y su sola presencia se perderá en medio de la iluminación del Hombre. Orad, Mis Amados y vivid una Vida con Mi Hijo Amado. Nosotros somos Uno y vos sois muy pero muy Amados por nosotros. Hijos errantes, que vivís en el dolor y la rabia, no dudéis que vos sois especialmente Amados y apreciados por Mí. Amados Hijos, no os desesperéis ni temáis. Soy la Luz de este Mundo y les traigo consuelo en el temperamento de la tormenta.
Orad, Amados Hijos, y adorad a Cristo, cuyo Corazón Sagrado y Eterno se abre para vos. Amad y sed guiados por Mi Amado y Eterno Hijo, y seguramente Me conoceréis. Amados Hijos, no os escondáis con miedo o lloréis con dolor. Pues la Mano de Dios está cerca de vosotros y busca el Amor y no el anti-Amor. No destrozo las montañas en Mi Amor por vos, sino que os protejo de sus avalanchas mientras oréis. La oración mitiga la destrucción o la imposición o la caída de todas las cosas.
Soy Maestro y Señor del Hombre. Venid al Señor y ofreced vuestros corazones a Mí. Así me hacéis feliz. Yo anhelo por vos, Mis Hijos. Añoro por vos, y también tengo una gran angustia o preocupación o inquietud sobre el Corazón del Hombre o los Corazones sin fe del Hombre. Oh, Amados Hijos, camináis en la oscuridad cuando vos no tenéis Luz. No se puede vivir en este Mundo sin tomar de la mano a Cristo, que os da la Vida Eterna por medio de Su Amor por vos. No neguéis a Cristo vuestro Amor. No rechacéis Su Amado y Sagrado Corazón.
Amados Hijos, no descanséis en vuestras oraciones, pues los constantes en la oración cosecharán los beneficios de sus esfuerzos y tendrán consuelo en sus Corazones, cuando los cielos se rompan y el fuego caiga desde Los Cielos en lo alto. Yo respondo a todas vuestras oraciones y mitigo los sufrimientos de este Mundo por vuestras oraciones. Anhelo vuestro Amor y oraciones, y por eso os digo, Mis Amados Hijos: dadme vuestro Amor. Amados Hijos, orad. Rezad y alejaos del pecado. Hagan esto en vuestro total beneficio. Orad, Mis Hijos. Yo os consuelo con Mi Amor y el perdón y la Paz más grande.

MI VOLUNTAD ES JUSTA Y BUENA
Miércoles, 24 de febrero 2016 1:55-14:32
Amados Hijos, no me desagraden con vuestros silencios. Más que cualquier otra cosa, yo quiero vuestro Amor. Cuando estáis conmigo, estáis en las Manos del Santo. Yo estoy siempre con vosotros y Mi Amor por vos es tan grande.
Amados Hijos, son tan pequeños y las cosas eternas os desconciertan, como deben o deberían. Vos sois Mis Amados. No podéis comprender vuestra pequeñez, como no podéis imaginar Mi Amor por vosotros o Mi Gran Divinidad. Hijos, no juguéis con o en las cosas que no son vuestras para que las tengáis o las conozcáis. Es por Mi Amorosa Voluntad que vos sois hechos llenos de conocimiento. No os preocupéis por esas cosas que no entendáis o sepáis. Yo soy el Señor Dios y Mis Planes o Voluntad para vosotros son buenos y Benditos.
Hijitos, debéis orar. Debéis ensartar la aguja del perdón y sabed que Yo voy a producir vuestra prenda de vestir con todo Mi Amor y Misericordia. Todo Mi Amor es vuestro y anhelo por vuestra reciprocidad.
Sabed que esto es cierto: Todos los dragones dentro de este Mundo son como polvo para Mí. Ellos no pueden ni tocar Me ni dañar a los que Yo Amo tanto. Ellos no observarán Mi Rostro para contemplar Mi Gran Gloria, ni han de vivir en el Amor Eterno y el descanso. No temáis sino orad, Mis Amados Hijitos.
Confiad en Mí, vuestro Señor Dios quien os cuida como un Padre Amoroso, pues eso es lo que Soy. Vuestro Padre Amoroso y Señor Dios, que os da gracias y buenos regalos.
Amados Hijos, ¿qué debo deciros para que traigáis vuestro Amor a Mí? Vos sabéis que voy a responder a todas vuestras oraciones. Yo voy a proveer a vos como un Padre Amoroso. Yo os llevaré en Mis Brazos Amorosos y Generosos y os concederé todas las Misericordias por Mi Hijo, la Redención de Cristo. Por lo tanto, ¿por qué dudáis de Mí? ¿Por qué dudáis que vaya a responder a todas vuestras oraciones y ansiar cada palabra vuestra y anhelar por vuestro Amor tan completamente? Amados Hijos, sed como niños, Mis Pequeñas Florecillas, tan hermosas e inocentes, confiando en Mí como ellas lo hacen. Confiad en Mí, pues Yo soy el Señor Dios y Padre y Mi Voluntad para vosotros es justa y buena.
Amados Hijos, me habéis dicho, “yo sufro”. Vos, pequeños Hijos de tan grande orgullo. No habéis sufrido la Muerte de la Redención y Misericordia. Pues Mi Amado Hijo, Cristo Jesús, Él mismo se ha sometido a las agonías del Hombre y a los dolores de la tortura y a las atrocidades del odio. Sufrid en Su Nombre y Yo veo vuestro sufrimiento. Los marginados y los que sufren vivirán la Vida Eterna. No temáis u os preocupéis en este Mundo transitorio, sino poned vuestros ojos en el Cielo y lo que os espera.
Amados Hijos, no pretendáis [finjáis] tener Amor por Mí. Os llamo todos los días y deseo vehementemente vuestro Amor. Dadme éste a Mí libremente, como Yo os doy Mi Misericordia y Amor. Oh Hijos, vuestro Tiempo viene y los que os Aman así, se cansan cada vez más de esperar a que vosotros volváis a Mi Amor. Vuestra Madre siempre Eterna viene a Mí en vuestro nombre y pide Misericordia, para aquellos que no Me conocerán, [pidiendo] por [más] tiempo y mitigaciones para que más almas puedan ser Mías y no sometidos al Caído. ¡Cuánto ama Ella a cada uno de vosotros!, casi tanto como vuestro Padre y Su Amadísimo Hijo. Ella reza para mitigar los estruendos de este Mundo y ve o conoce las ofensas que Me afligen tan profundamente. ¡Cómo Ama Ella al Hombre y busca vuestra bondad!
Amados Hijos, vos no entendéis esas cosas Santas y Altas. No podéis, pues sois Mis pequeños Hijos, y a qué niño se le da el conocimiento de sus padres? ¿Qué niño comprende las acciones y la voluntad de su Padre? Vos no podéis conocer Mi Voluntad hasta que Yo la haya puesto ante vos con Gran Amor. Por lo tanto, dejad vuestra soberbia y volved a Mí como lo hacen los Hijos a su Padre Amoroso. Confiad en Mí como un Niño confía. Mirad a Mí en todas las cosas. Rogad por Mi Guía y será vuestra. Confiad en Mi Guía para vos y sabed que es buena, incluso cuando vosotros no la conocéis o no la entendáis.
Amados Hijos, Amad y adorad a Cristo, quien es Poderoso y Amado. Él es Mi Amadísimo Hijo, y anhelo verlo a Él elevado en lo más alto en vuestros corazones. Colocadlo a Él y a Su Amor en vuestros corazones, por encima de todas las cosas y andad en Su camino. Así, realmente vos llegáis a Mí, a través de Mi Amado Hijo.
Amados Hijos, este Mundo está al borde del peligro total. No desperdiciéis los Grandes Dones de Amor y Misericordia que Yo os doy. Vos no rechazáis un gran banquete. Vos no ignoráis un bello paisaje. Vos no rechazáis un regalo de oro. ¿Por qué entonces vos rechazáis y miráis hacia otro lado e ignoráis el Regalo del Amor y de Vida Eterna de vuestro Santísimo y Todopoderoso Dios? Os pregunto esto, Mis Hijos, para que vosotros consideréis efectivamente o muy de cerca o profundamente el estado de vuestras Almas, vuestros Corazones y los Corazones dentro de este Mundo. Rectificad lo que falte, por medio de vuestras absolutas [irrevocables] devociones a Mi Hijo y con oraciones constantes.
Amados Hijos, Yo espero, con el oído doblado, escuchar vuestras oraciones derramándose de vuestros labios como la miel. Son canciones para Mi Santo Oídos. Hijos, Yo estoy siempre con vosotros. Elegidme siempre. Siempre habrán los trabajos Mundanos que soportar o realizar o hacer, pero siempre, colocadme en primer lugar. No os embarquéis en esas cosas que sabéis que van a desagradarme. Vosotros debéis hacer vuestro trabajo en esta vida. Vos tenéis que Amar y caminar sobre los terrenos de este mundo. Por lo tanto, os digo, tened cuidado de por donde camináis en este Mundo. No todo el suelo es seguro o limpio. No llevéis a cabo el trabajo que no es vuestro para hacer o que sabéis que va a desagradarme. Confiad en el Espíritu para guiaros en estas cosas. Donde debéis dar un paso, cómo debéis trabajar, donde debéis inhalar aire, y de quien debéis tomar (vuestro) refugio. La oración conduce a la iluminación o la comprensión o discernimiento de Mi Guía u Orientación. Escuchad a vuestro Señor Dios que os guía y os protege.
Mi corazón es siempre vuestro. Volved a Mí por el Amor y la compasión. Os concederé grandes Misericordias, aquellas que son insondables para vos ahora, pero que son demasado, muy cruciales dentro de la Vida Eterna. Por lo tanto, os digo, no rechacéis estos dones, sino tomadlos con sencillez y con gran humildad. Ellos han sido ganados por la muerte de Mi Hijo Amado y por Su Gran Amor por cada uno de vosotros. Sabed esto, vosotros sois, cada uno, extremadamente valiosos para Mí. Vosotros no podéis hacer nada para cambiar Mi Amor por vos. Sólo podéis rechazar Mi Amor. Considerad esto en serio, en el Corazón, Mis Fatigados Hijos, y confiad en Mí siempre.
Amados Hijos, os doy Mi Paz a vosotros. Descansad y orad y sed consolados por vuestras oraciones, porque ellas son, sin duda, contestadas por el Padre en las Alturas. quien os ama.
Paz, Mis Hijos. Orad y tened Mi Paz.
Miércoles, 24 de febrero 2016 1:55-14:32
Amados Hijos, no me desagraden con vuestros silencios. Más que cualquier otra cosa, yo quiero vuestro Amor. Cuando estáis conmigo, estáis en las Manos del Santo. Yo estoy siempre con vosotros y Mi Amor por vos es tan grande.
Amados Hijos, son tan pequeños y las cosas eternas os desconciertan, como deben o deberían. Vos sois Mis Amados. No podéis comprender vuestra pequeñez, como no podéis imaginar Mi Amor por vosotros o Mi Gran Divinidad. Hijos, no juguéis con o en las cosas que no son vuestras para que las tengáis o las conozcáis. Es por Mi Amorosa Voluntad que vos sois hechos llenos de conocimiento. No os preocupéis por esas cosas que no entendáis o sepáis. Yo soy el Señor Dios y Mis Planes o Voluntad para vosotros son buenos y Benditos.
Hijitos, debéis orar. Debéis ensartar la aguja del perdón y sabed que Yo voy a producir vuestra prenda de vestir con todo Mi Amor y Misericordia. Todo Mi Amor es vuestro y anhelo por vuestra reciprocidad.
Sabed que esto es cierto: Todos los dragones dentro de este Mundo son como polvo para Mí. Ellos no pueden ni tocar Me ni dañar a los que Yo Amo tanto. Ellos no observarán Mi Rostro para contemplar Mi Gran Gloria, ni han de vivir en el Amor Eterno y el descanso. No temáis sino orad, Mis Amados Hijitos.
Confiad en Mí, vuestro Señor Dios quien os cuida como un Padre Amoroso, pues eso es lo que Soy. Vuestro Padre Amoroso y Señor Dios, que os da gracias y buenos regalos.
Amados Hijos, ¿qué debo deciros para que traigáis vuestro Amor a Mí? Vos sabéis que voy a responder a todas vuestras oraciones. Yo voy a proveer a vos como un Padre Amoroso. Yo os llevaré en Mis Brazos Amorosos y Generosos y os concederé todas las Misericordias por Mi Hijo, la Redención de Cristo. Por lo tanto, ¿por qué dudáis de Mí? ¿Por qué dudáis que vaya a responder a todas vuestras oraciones y ansiar cada palabra vuestra y anhelar por vuestro Amor tan completamente? Amados Hijos, sed como niños, Mis Pequeñas Florecillas, tan hermosas e inocentes, confiando en Mí como ellas lo hacen. Confiad en Mí, pues Yo soy el Señor Dios y Padre y Mi Voluntad para vosotros es justa y buena.
Amados Hijos, me habéis dicho, “yo sufro”. Vos, pequeños Hijos de tan grande orgullo. No habéis sufrido la Muerte de la Redención y Misericordia. Pues Mi Amado Hijo, Cristo Jesús, Él mismo se ha sometido a las agonías del Hombre y a los dolores de la tortura y a las atrocidades del odio. Sufrid en Su Nombre y Yo veo vuestro sufrimiento. Los marginados y los que sufren vivirán la Vida Eterna. No temáis u os preocupéis en este Mundo transitorio, sino poned vuestros ojos en el Cielo y lo que os espera.
Amados Hijos, no pretendáis [finjáis] tener Amor por Mí. Os llamo todos los días y deseo vehementemente vuestro Amor. Dadme éste a Mí libremente, como Yo os doy Mi Misericordia y Amor. Oh Hijos, vuestro Tiempo viene y los que os Aman así, se cansan cada vez más de esperar a que vosotros volváis a Mi Amor. Vuestra Madre siempre Eterna viene a Mí en vuestro nombre y pide Misericordia, para aquellos que no Me conocerán, [pidiendo] por [más] tiempo y mitigaciones para que más almas puedan ser Mías y no sometidos al Caído. ¡Cuánto ama Ella a cada uno de vosotros!, casi tanto como vuestro Padre y Su Amadísimo Hijo. Ella reza para mitigar los estruendos de este Mundo y ve o conoce las ofensas que Me afligen tan profundamente. ¡Cómo Ama Ella al Hombre y busca vuestra bondad!
Amados Hijos, vos no entendéis esas cosas Santas y Altas. No podéis, pues sois Mis pequeños Hijos, y a qué niño se le da el conocimiento de sus padres? ¿Qué niño comprende las acciones y la voluntad de su Padre? Vos no podéis conocer Mi Voluntad hasta que Yo la haya puesto ante vos con Gran Amor. Por lo tanto, dejad vuestra soberbia y volved a Mí como lo hacen los Hijos a su Padre Amoroso. Confiad en Mí como un Niño confía. Mirad a Mí en todas las cosas. Rogad por Mi Guía y será vuestra. Confiad en Mi Guía para vos y sabed que es buena, incluso cuando vosotros no la conocéis o no la entendáis.
Amados Hijos, Amad y adorad a Cristo, quien es Poderoso y Amado. Él es Mi Amadísimo Hijo, y anhelo verlo a Él elevado en lo más alto en vuestros corazones. Colocadlo a Él y a Su Amor en vuestros corazones, por encima de todas las cosas y andad en Su camino. Así, realmente vos llegáis a Mí, a través de Mi Amado Hijo.
Amados Hijos, este Mundo está al borde del peligro total. No desperdiciéis los Grandes Dones de Amor y Misericordia que Yo os doy. Vos no rechazáis un gran banquete. Vos no ignoráis un bello paisaje. Vos no rechazáis un regalo de oro. ¿Por qué entonces vos rechazáis y miráis hacia otro lado e ignoráis el Regalo del Amor y de Vida Eterna de vuestro Santísimo y Todopoderoso Dios? Os pregunto esto, Mis Hijos, para que vosotros consideréis efectivamente o muy de cerca o profundamente el estado de vuestras Almas, vuestros Corazones y los Corazones dentro de este Mundo. Rectificad lo que falte, por medio de vuestras absolutas [irrevocables] devociones a Mi Hijo y con oraciones constantes.
Amados Hijos, Yo espero, con el oído doblado, escuchar vuestras oraciones derramándose de vuestros labios como la miel. Son canciones para Mi Santo Oídos. Hijos, Yo estoy siempre con vosotros. Elegidme siempre. Siempre habrán los trabajos Mundanos que soportar o realizar o hacer, pero siempre, colocadme en primer lugar. No os embarquéis en esas cosas que sabéis que van a desagradarme. Vosotros debéis hacer vuestro trabajo en esta vida. Vos tenéis que Amar y caminar sobre los terrenos de este mundo. Por lo tanto, os digo, tened cuidado de por donde camináis en este Mundo. No todo el suelo es seguro o limpio. No llevéis a cabo el trabajo que no es vuestro para hacer o que sabéis que va a desagradarme. Confiad en el Espíritu para guiaros en estas cosas. Donde debéis dar un paso, cómo debéis trabajar, donde debéis inhalar aire, y de quien debéis tomar (vuestro) refugio. La oración conduce a la iluminación o la comprensión o discernimiento de Mi Guía u Orientación. Escuchad a vuestro Señor Dios que os guía y os protege.
Mi corazón es siempre vuestro. Volved a Mí por el Amor y la compasión. Os concederé grandes Misericordias, aquellas que son insondables para vos ahora, pero que son demasado, muy cruciales dentro de la Vida Eterna. Por lo tanto, os digo, no rechacéis estos dones, sino tomadlos con sencillez y con gran humildad. Ellos han sido ganados por la muerte de Mi Hijo Amado y por Su Gran Amor por cada uno de vosotros. Sabed esto, vosotros sois, cada uno, extremadamente valiosos para Mí. Vosotros no podéis hacer nada para cambiar Mi Amor por vos. Sólo podéis rechazar Mi Amor. Considerad esto en serio, en el Corazón, Mis Fatigados Hijos, y confiad en Mí siempre.
Amados Hijos, os doy Mi Paz a vosotros. Descansad y orad y sed consolados por vuestras oraciones, porque ellas son, sin duda, contestadas por el Padre en las Alturas. quien os ama.
Paz, Mis Hijos. Orad y tened Mi Paz.

TEMO RENUNCIAR A CUALQUIER ALMA
Viernes, 19 de febrero 2016 3:14 - 3:18-15:49
Ya veo. Jesús, sufrió por nosotros, pero también experimentó cosas a las que estamos sometidos. Sé que Tú sabes por quien he sentido rencores asquerosos, y Tú me pediste que los perdonara. Ya veo. No es sólo para que podamos tener Misericordia (creo). Es también porque es lo menos que puedo hacer. Perdonaste a Judas que a Ti te entregó. Perdonaste a Pedro por ser una gallina y Tú perdonaste a la gente que Te torturó y Te mató. Así que cuando Tú nos pides que perdonemos a alguien por mentirnos, por no invitarnos a una fiesta de cumpleaños o no saludarnos o por decir algo en lo que no estamos de acuerdo, debemos pensar en lo que Tú perdonaste y lo difícil que sería para nosotros y luego olvidar. Nunca nos has pedido que hagamos nada que Tú no lo hayas hecho ya.
15:18
Amados Hijos, soy vuestro bondadoso, amado Señor Dios. Soy para vos, ya que vos sois para Mí. Atendáis a Mí con fidelidad y Yo atenderé a vosotros como un buen padre adora a un hijo. Amados Hijos, sois Míos, como yo soy vuestro. Apreciad la Misericordia se os ofrece y se os da. Vuestros ojos necesitan mirar solamente una vez al Cielo con pesar y arrepentimiento y Mi Misericordia es vuestra. Solo hay que clamar a Mí una vez, y Mi misericordia y el perdón son vuestros. Voy a arrancar el más grave de los pecadores y os traeré a mi Amoroso Pecho. Pues vos sois los Hijos que que anhelo y os Amo.
Amados Hijos, no esperéis, sino venid a Mí con todos vuestros problemas y dolores y preocupaciones e inquietudes. Orad a vuestro Señor Dios y Padre, y seguramente os voy a responder con Gran Amor y afecto. Oh, Hijos de este mundo contaminado y lleno de pecado, debéis dejar de traer a vuestro Padre tanto dolor. Vosotros debéis hacer frente a vuestros pecados con los ojos limpios y saber que estas cosas no son de Mí. Yo voy a limpiaros de estas iniquidades y Amaros todavía. Arrepentíos, Mis Amados. Comprended que vuestro Tiempo está tan cerca, y me da miedo o me hace mal el renunciar a cualquier alma al siniestro. Venid a Mí, Hijos de este Mundo. Someteos a Mí, y conoced el Amor, la paz y el perdón de los pecados.
Sabed esto, mis Amados Hijos. Demasiados de vosotros han desconcertado a Mi más Amado Hijo, Cristo. Él está desconcertado por vuestros pecados contra Él y el afecto que os falta por Su Más Amoroso y Sagrado Corazón. [La sensación es muy pesada de tristeza ... tristeza ENORME] Él aprecia a cada uno de vosotros y anhela que compartáis la vida eterna con el Amor. ¿Por qué llevar al Dios del Hombre tanto dolor? ¿Por qué volteáis la cara lejos de lo que es tan Bendito y Bueno y en su lugar, ofrecéis vuestros corazones en peligro a aquellos que os presentarían al maligno y a una eternidad de infierno? Elegid el camino del único y verdadero Dios, el camino de Cristo Jesús, que busca vuestro Amor. Él ofrece consuelo y perdón a los que se vuelvan a Él.
Oh, Amados Hijos, el don de la Misericordia es insondable. [“Insondable” no es una palabra lo suficientemente grande como para definir cuán grande es el don de la misericordia ...] Vos no veis esto, pues todos vosotros son todavía cosas tan pequeñas y preciosas. Si, tan solo entendierais una fracción de lo que es la Eternidad, caeríais de rodillas ante Cristo y lloraríais por vuestros años perdidos del culto y pediríais Misericordia a Cristo hasta que vos seáis llamados a juicio. A vos no os es dada tal visión o el discernimiento porque creer en Mí es un acto de fe. Elegirme es un regalo porque vosotros ofrecéis a vuestro Amoroso Señor vuestro Amor sin ataduras libremente. No soy un Dios intrusivo, y deseo vehementemente que mis Hijos Me elijan por encima de la cuestión transitoria y peligrosa de este Mundo.
Mis Amados Hijos, solo sois salvados por vuestro Amor a Mi Amadísimo y Beatífico Hijo, Cristo. Mantenedlo siempre como lo más importante en vuestras mentes y corazones. No os paréis a escuchar Su Nombre Sagrado ensuciado en los labios de la Humanidad, sino honradlo con vuestro Amor y ofreced Amor a los que le ofenden, para que ellos también puedan entender el Amor de Cristo por cada uno de ellos y dejen de ofender al Dios de tierra. Él es Mi Hijo. Ofrecedle todo lo que es adoración, bendición, y Amor. ¡Cómo añoramos por vuestro Amor!
Amados Hijos, no esperéis, sino volved a Mí ahora. Llevad a otros a Mí y a Mi perdón. El hombre no puede pasar las puertas del Cielo sin la Glorificación y el Amor de Mi Amado Hijo, Cristo. Estoy consternado por las multitudes de pecados y pido que oréis por vuestros hermanos y hermanas que me ofenden tan profundamente. Orad por ellos con Corazones llenos y Amorosos, porque en verdad sus Almas están en peligro.
Amados Hijos, sed pacientes y orad. Soy vuestro Bueno y Poderoso Padre. Yo hago guardia sobre vos y respiro Mi Amor y alegría en vos. ¿Por qué dejáis que vuestros corazones se encojan de miedo por este Mundo que sólo es transitorio? ¿No veis que yo soy el Señor Dios, el Poderoso, Santo Planificador de vuestras vidas? Miro a cada una de vuestras necesidades y reparto u os proporciono el sustento sin falta. Si tan solo vosotros confiareis en Mí, y concentraréis todos vuestros esfuerzos terrenales en Amarme y en Amar a vuestros hermanos y hermanas.
Amados Hijos, orad. Pues la Misericordia es vuestra para que la pidáis. Orad, y voy a mitigar el poder de las tormentas y la destrucción de las montañas. Ay de los que están en los caminos de los dolores de parto de la tierra, y que no rezan. Las enormes rocas se saltarán por encima o (rodearán) en torno a las casas o cuerpos de los constantes en la oración, pero aplastarán a los que no Me conocen. ¡Ay de los que no quieren orar y me niegan a pesar de Mi Gran Amor por ellos. Los fuegos de los cielos lloverán sobre sus cabezas y prenderán fuego a sus casas, y ellos conocerán su error.
Amados Hijos, Amadme, a vuestro Señor Dios y Padre. Orad y amad a vuestros hermanos y hermanas. Perdonad, donde o cuando sea necesario y no creáis que vuestra Misericordia y caridad pasan desapercibidas por vuestro Señor Dios. No seáis una trompeta con vuestras buenas acciones, pero podéis estar seguros en vuestro corazón que habéis seguido el camino de Cristo y habéis traído alegría y júbilo a vuestro Señor Dios y Padre.
Orad, Amados Hijos, e incrementad aun más vuestra fuerza espiritual y Amor al participar en el Más Preciado Santo de los Santos. No podéis conocer las bendiciones o la grandeza espiritual de la Santísima Eucaristía. Vosotros estáis en completa comunión con Cristo y todo el Cielo se inclina en sus rodillas para adorar a Cristo. Amados Hijos, os doy Mi paz. Amados Hijos, orad. Amados Hijos, vos sois Mis muy apreciados Hijos.
Viernes, 19 de febrero 2016 3:14 - 3:18-15:49
Ya veo. Jesús, sufrió por nosotros, pero también experimentó cosas a las que estamos sometidos. Sé que Tú sabes por quien he sentido rencores asquerosos, y Tú me pediste que los perdonara. Ya veo. No es sólo para que podamos tener Misericordia (creo). Es también porque es lo menos que puedo hacer. Perdonaste a Judas que a Ti te entregó. Perdonaste a Pedro por ser una gallina y Tú perdonaste a la gente que Te torturó y Te mató. Así que cuando Tú nos pides que perdonemos a alguien por mentirnos, por no invitarnos a una fiesta de cumpleaños o no saludarnos o por decir algo en lo que no estamos de acuerdo, debemos pensar en lo que Tú perdonaste y lo difícil que sería para nosotros y luego olvidar. Nunca nos has pedido que hagamos nada que Tú no lo hayas hecho ya.
15:18
Amados Hijos, soy vuestro bondadoso, amado Señor Dios. Soy para vos, ya que vos sois para Mí. Atendáis a Mí con fidelidad y Yo atenderé a vosotros como un buen padre adora a un hijo. Amados Hijos, sois Míos, como yo soy vuestro. Apreciad la Misericordia se os ofrece y se os da. Vuestros ojos necesitan mirar solamente una vez al Cielo con pesar y arrepentimiento y Mi Misericordia es vuestra. Solo hay que clamar a Mí una vez, y Mi misericordia y el perdón son vuestros. Voy a arrancar el más grave de los pecadores y os traeré a mi Amoroso Pecho. Pues vos sois los Hijos que que anhelo y os Amo.
Amados Hijos, no esperéis, sino venid a Mí con todos vuestros problemas y dolores y preocupaciones e inquietudes. Orad a vuestro Señor Dios y Padre, y seguramente os voy a responder con Gran Amor y afecto. Oh, Hijos de este mundo contaminado y lleno de pecado, debéis dejar de traer a vuestro Padre tanto dolor. Vosotros debéis hacer frente a vuestros pecados con los ojos limpios y saber que estas cosas no son de Mí. Yo voy a limpiaros de estas iniquidades y Amaros todavía. Arrepentíos, Mis Amados. Comprended que vuestro Tiempo está tan cerca, y me da miedo o me hace mal el renunciar a cualquier alma al siniestro. Venid a Mí, Hijos de este Mundo. Someteos a Mí, y conoced el Amor, la paz y el perdón de los pecados.
Sabed esto, mis Amados Hijos. Demasiados de vosotros han desconcertado a Mi más Amado Hijo, Cristo. Él está desconcertado por vuestros pecados contra Él y el afecto que os falta por Su Más Amoroso y Sagrado Corazón. [La sensación es muy pesada de tristeza ... tristeza ENORME] Él aprecia a cada uno de vosotros y anhela que compartáis la vida eterna con el Amor. ¿Por qué llevar al Dios del Hombre tanto dolor? ¿Por qué volteáis la cara lejos de lo que es tan Bendito y Bueno y en su lugar, ofrecéis vuestros corazones en peligro a aquellos que os presentarían al maligno y a una eternidad de infierno? Elegid el camino del único y verdadero Dios, el camino de Cristo Jesús, que busca vuestro Amor. Él ofrece consuelo y perdón a los que se vuelvan a Él.
Oh, Amados Hijos, el don de la Misericordia es insondable. [“Insondable” no es una palabra lo suficientemente grande como para definir cuán grande es el don de la misericordia ...] Vos no veis esto, pues todos vosotros son todavía cosas tan pequeñas y preciosas. Si, tan solo entendierais una fracción de lo que es la Eternidad, caeríais de rodillas ante Cristo y lloraríais por vuestros años perdidos del culto y pediríais Misericordia a Cristo hasta que vos seáis llamados a juicio. A vos no os es dada tal visión o el discernimiento porque creer en Mí es un acto de fe. Elegirme es un regalo porque vosotros ofrecéis a vuestro Amoroso Señor vuestro Amor sin ataduras libremente. No soy un Dios intrusivo, y deseo vehementemente que mis Hijos Me elijan por encima de la cuestión transitoria y peligrosa de este Mundo.
Mis Amados Hijos, solo sois salvados por vuestro Amor a Mi Amadísimo y Beatífico Hijo, Cristo. Mantenedlo siempre como lo más importante en vuestras mentes y corazones. No os paréis a escuchar Su Nombre Sagrado ensuciado en los labios de la Humanidad, sino honradlo con vuestro Amor y ofreced Amor a los que le ofenden, para que ellos también puedan entender el Amor de Cristo por cada uno de ellos y dejen de ofender al Dios de tierra. Él es Mi Hijo. Ofrecedle todo lo que es adoración, bendición, y Amor. ¡Cómo añoramos por vuestro Amor!
Amados Hijos, no esperéis, sino volved a Mí ahora. Llevad a otros a Mí y a Mi perdón. El hombre no puede pasar las puertas del Cielo sin la Glorificación y el Amor de Mi Amado Hijo, Cristo. Estoy consternado por las multitudes de pecados y pido que oréis por vuestros hermanos y hermanas que me ofenden tan profundamente. Orad por ellos con Corazones llenos y Amorosos, porque en verdad sus Almas están en peligro.
Amados Hijos, sed pacientes y orad. Soy vuestro Bueno y Poderoso Padre. Yo hago guardia sobre vos y respiro Mi Amor y alegría en vos. ¿Por qué dejáis que vuestros corazones se encojan de miedo por este Mundo que sólo es transitorio? ¿No veis que yo soy el Señor Dios, el Poderoso, Santo Planificador de vuestras vidas? Miro a cada una de vuestras necesidades y reparto u os proporciono el sustento sin falta. Si tan solo vosotros confiareis en Mí, y concentraréis todos vuestros esfuerzos terrenales en Amarme y en Amar a vuestros hermanos y hermanas.
Amados Hijos, orad. Pues la Misericordia es vuestra para que la pidáis. Orad, y voy a mitigar el poder de las tormentas y la destrucción de las montañas. Ay de los que están en los caminos de los dolores de parto de la tierra, y que no rezan. Las enormes rocas se saltarán por encima o (rodearán) en torno a las casas o cuerpos de los constantes en la oración, pero aplastarán a los que no Me conocen. ¡Ay de los que no quieren orar y me niegan a pesar de Mi Gran Amor por ellos. Los fuegos de los cielos lloverán sobre sus cabezas y prenderán fuego a sus casas, y ellos conocerán su error.
Amados Hijos, Amadme, a vuestro Señor Dios y Padre. Orad y amad a vuestros hermanos y hermanas. Perdonad, donde o cuando sea necesario y no creáis que vuestra Misericordia y caridad pasan desapercibidas por vuestro Señor Dios. No seáis una trompeta con vuestras buenas acciones, pero podéis estar seguros en vuestro corazón que habéis seguido el camino de Cristo y habéis traído alegría y júbilo a vuestro Señor Dios y Padre.
Orad, Amados Hijos, e incrementad aun más vuestra fuerza espiritual y Amor al participar en el Más Preciado Santo de los Santos. No podéis conocer las bendiciones o la grandeza espiritual de la Santísima Eucaristía. Vosotros estáis en completa comunión con Cristo y todo el Cielo se inclina en sus rodillas para adorar a Cristo. Amados Hijos, os doy Mi paz. Amados Hijos, orad. Amados Hijos, vos sois Mis muy apreciados Hijos.

NO PASÉIS A UN HERMANO HAMBRIENTO
Martes, 16 de febrero 2016 3:16-15:51
Queridos Hijos, las multitudes vienen. Buscad (examinad?) vuestros Corazones y saludadlos con la Gloria y el Poder de Mi Amor por vuestros propios Corazones. Estoy entre vosotros y con Amor llamo en voz alta vuestros nombres. Yo conozco a Mis Pequeños Hijos íntimamente, y os digo, no temáis lo que vos teméis y pídanme en todas las cosas. Yo os guío correctamente y Yo doy a Mis queridos Hijos buenos regalos. Las multitudes vendrán, y sin duda los pobres e indigentes conocerán Mi Gloria. Tomad a vuestro hermano en vuestros brazos, Mis Hijos. Cuando lo apartáis por la codicia [debido a la avaricia] o disgusto o la infamia, vos herís al Sagrado Corazón de Mi Amado Hijo, el Señor Jesucristo, y quien se sorprenderá cuando la puerta de la Misericordia y el consuelo se cierre antes vos? Por lo tanto, no dejéis pasar a un hermano muerto de hambre sin ofrecerle alimentos. No dejéis pasar a un hermano con frío, que tiembla en el viento, sin darle vuestro manto y callado también. No dejéis de mirar a los ojos de los pobres y no ver al Hijo del Hombre, esperando por vuestro corazón para Glorificarlo con vuestro Amor.
Podéis ser ricos con Mi Gracia. Vosotros no entendéis la mayor riqueza cuando no Me conocéis. Yo Soy la única riqueza que vos necesitáis. Mi Amor por vos es ilimitado. Vuestro oro aquí es sólo finito. Mi Amor está más allá del valor o más allá de nuestro concepto de valor. Su oro no se compara con la riqueza de Mi Amor. Así que os digo, no améis a la riqueza del oro. Más bien, Amad la riqueza del Amor.
Hijos Hermosos, Yo ansío por cada uno de vosotros. Mi Hijo os llama [atrae] a vosotros con Su adolorido y Sacratísimo Corazón. Encontrad Misericordia en Su Muerte, Amados Hijos. No abandonéis a Cristo cuando vos estáis en la hora de mayor necesidad. Su Regalo es una cosa Divina y Mis Hijos no imaginan la Divinidad y la GRANDEZA del don que Él os otorga. Él anhela traeros Su Consuelo y Paz. Él anhela por vuestros Corazones.
Mis Amados Hijos, dadme Corazones duraderos. No seáis tibios en vuestro Amor por Mí. No dividáis vuestra atención para Mí con las especies innecesarias de este Mundo. Porque yo soy el Señor Dios y Mi Palabra es Mi Hijo y Mi Palabra se le ha dado a este Mundo. Mis Hijos no pueden Amarme y Amar lo que es transitorio en este Mundo, y sabed que todas las cosas de este Mundo son transitorias. No podéis encontrar valor en cualquier cosa en este Mundo, excepto en el Amor del Hombre y Mi Amor por vos.
Amados Hijos, alabad y postraos ante Cristo, ante Sus pies Beatíficos. Limpiad vuestros Corazones por Su Amor y responded a Su Gran Amor con adulación y adoración y Amor. Porque Cristo es el Hijo de Dios o Mi Hijo. Descartar al Hijo es descartar al Padre. Cuando vos Amáis al Hijo, vos Amáis al Padre, y quien de vos puede pretender a la perfección de este modo?
Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo pido vuestras oraciones por la paz en este Mundo tambaleante. Sed prudentes y despertad a la esencia de Mi Amor. Es puro y Glorioso y Santísimo. Respetad a vuestro Señor Dios y Padre Eterno. No podéis fingir que Amáis, porque Yo veo en vuestros Corazones. No Me podéis dar sólo la mitad de vuestros Corazones. Es un pecado grave rechazar al Señor Dios como lo haríais con un sirviente. Todo el Cielo grita con consternación y llora por Mis Hijos Amados que marchan hacia el enemigo con tal pasión y arrojo. Amados Hijos, el infierno es real, como es el Reino de los Cielos. No podéis jugar con o hacer una locura de la Eternidad cuando no podéis concebir su dimensión. ¿Vosotros compraríais un caballo antes de verlo correr? ¿Vosotros compraríais un acre de tierra sin ver sus pastizales?
No Me abandonéis, Mis Hijos. No neguéis a Cristo vuestro Amor. No contengáis vuestro Amor lejos de Mí. En su lugar, traed vuestro Amor a Mí. Buscad Mi Compasión y Misericordia. Cada uno de vosotros es un pecador, y Yo os doy Gracias y Misericordia divinas, si así lo deseáis, pero venid a Mí. Busco vuestro Amor como vosotros debéis buscar Mi Misericordia Abundante. Mi Corazón está abierto a todas vuestras adoraciones, y sin embargo muchos de Mis Hijos están mudos.
Oh, Hijos, ¿no veis las tinieblas que devastan a los Hijos de este Mundo? ¿No entendéis Mi ansiedad por vosotros? Amados Hijos, no podéis entender la Luz hasta que estáis inmersos en la oscuridad. Entonces vos vais a clamar a Mí por la Luz de este Mundo. No podéis vivir una vida feliz sin Mí. No busquéis la oscuridad, sino buscad la Luz Divina de Mi Hijo, quien es Misericordia y Amor a la vez.
Amados Hijos, marcad el día y yo le mostraré al Mundo la Gloria de un Rey en lo Alto. El hombre llorará ante la maravilla de Mi Gloria y los animales caerán sobre los suelos ante vos y todos estos esplendores cegarán a toda la Humanidad, de manera que aquellos que no crean, creerán, y los que estén ciegos, verán. Vasto es el dolor del fuego limpiando a los hierros. Ningún hombre se sostendrá a sí mismo, por este Mundo. El hombre sólo va a vivir por [gracias a] Mi gloria. Volved a Mí, Amados Hijos, y sabed que soy un juez severo y un Padre Amoroso. ¿A quien querréis ver cuando llegue el momento?
Las puertas del norte y el este se abren y los dragones dentro, que son de color rojo o vestido de rojo, salen volando como grandes pájaros en el fuego. La totalidad de la(s) tierra(s) se derrumban bajo su tacto y las montañas se desmoronan en su presencia. No os dejéis engañar por su belleza y encanto. Estos harán daño a Mis Hijos y os mancharán por vuestra curiosidad y riqueza. Manteneos alejados de los dragones que vuelan más allá de este Mundo. Las fauces se abren a toda amplitud y la oscuridad dentro de ellas devorarán a Mis Amados Hijos. Manteneos firmes en vuestro Amor y fe por Mí y por Mi Amado Hijo, el Señor Jesucristo. No temáis a aquello que está contra vosotros, porque Yo estoy con vosotros, y por vuestras oraciones vos sois hechos completos [fuertes].
Orad, Mis Hijos. Orad y participad de la Eucaristía Salvadora. Es la más grande de todos los grandes regalos. No podéis concebir los dones y gracias que recibís por ella. Sabed Amados Hijos, que el tiempo es corto y el Reino viene. La llamada sonará en la puerta. La tierra retumbará en respuesta. Los cielos se tornarán negros, tan negros como el día de la Gloria de Cristo y su muerte como Hombre, y seguramente sabrán que el Señor Dios es el Rey de lo Eterno y de este benigno Mundo.
Queridos Hijos, orad en todas las cosas. Yo os guio y doy Mi dirección Amada. No luchéis contra vuestro Padre Amoroso. En su lugar, confiad en Mí y en Mi Amor por vos. Vos sois Mis queridos Hijos y el Padre protege a Sus Hijos con ferocidad de Sus enemigos. Queridos Hijos, no temáis, porque Yo soy para vos, como vos sois para Mí. Orad, Amados Hijos. Amad, Mis Queridos Hijos. No rechacéis a vuestros hermanos. Orad.
Martes, 16 de febrero 2016 3:16-15:51
Queridos Hijos, las multitudes vienen. Buscad (examinad?) vuestros Corazones y saludadlos con la Gloria y el Poder de Mi Amor por vuestros propios Corazones. Estoy entre vosotros y con Amor llamo en voz alta vuestros nombres. Yo conozco a Mis Pequeños Hijos íntimamente, y os digo, no temáis lo que vos teméis y pídanme en todas las cosas. Yo os guío correctamente y Yo doy a Mis queridos Hijos buenos regalos. Las multitudes vendrán, y sin duda los pobres e indigentes conocerán Mi Gloria. Tomad a vuestro hermano en vuestros brazos, Mis Hijos. Cuando lo apartáis por la codicia [debido a la avaricia] o disgusto o la infamia, vos herís al Sagrado Corazón de Mi Amado Hijo, el Señor Jesucristo, y quien se sorprenderá cuando la puerta de la Misericordia y el consuelo se cierre antes vos? Por lo tanto, no dejéis pasar a un hermano muerto de hambre sin ofrecerle alimentos. No dejéis pasar a un hermano con frío, que tiembla en el viento, sin darle vuestro manto y callado también. No dejéis de mirar a los ojos de los pobres y no ver al Hijo del Hombre, esperando por vuestro corazón para Glorificarlo con vuestro Amor.
Podéis ser ricos con Mi Gracia. Vosotros no entendéis la mayor riqueza cuando no Me conocéis. Yo Soy la única riqueza que vos necesitáis. Mi Amor por vos es ilimitado. Vuestro oro aquí es sólo finito. Mi Amor está más allá del valor o más allá de nuestro concepto de valor. Su oro no se compara con la riqueza de Mi Amor. Así que os digo, no améis a la riqueza del oro. Más bien, Amad la riqueza del Amor.
Hijos Hermosos, Yo ansío por cada uno de vosotros. Mi Hijo os llama [atrae] a vosotros con Su adolorido y Sacratísimo Corazón. Encontrad Misericordia en Su Muerte, Amados Hijos. No abandonéis a Cristo cuando vos estáis en la hora de mayor necesidad. Su Regalo es una cosa Divina y Mis Hijos no imaginan la Divinidad y la GRANDEZA del don que Él os otorga. Él anhela traeros Su Consuelo y Paz. Él anhela por vuestros Corazones.
Mis Amados Hijos, dadme Corazones duraderos. No seáis tibios en vuestro Amor por Mí. No dividáis vuestra atención para Mí con las especies innecesarias de este Mundo. Porque yo soy el Señor Dios y Mi Palabra es Mi Hijo y Mi Palabra se le ha dado a este Mundo. Mis Hijos no pueden Amarme y Amar lo que es transitorio en este Mundo, y sabed que todas las cosas de este Mundo son transitorias. No podéis encontrar valor en cualquier cosa en este Mundo, excepto en el Amor del Hombre y Mi Amor por vos.
Amados Hijos, alabad y postraos ante Cristo, ante Sus pies Beatíficos. Limpiad vuestros Corazones por Su Amor y responded a Su Gran Amor con adulación y adoración y Amor. Porque Cristo es el Hijo de Dios o Mi Hijo. Descartar al Hijo es descartar al Padre. Cuando vos Amáis al Hijo, vos Amáis al Padre, y quien de vos puede pretender a la perfección de este modo?
Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo pido vuestras oraciones por la paz en este Mundo tambaleante. Sed prudentes y despertad a la esencia de Mi Amor. Es puro y Glorioso y Santísimo. Respetad a vuestro Señor Dios y Padre Eterno. No podéis fingir que Amáis, porque Yo veo en vuestros Corazones. No Me podéis dar sólo la mitad de vuestros Corazones. Es un pecado grave rechazar al Señor Dios como lo haríais con un sirviente. Todo el Cielo grita con consternación y llora por Mis Hijos Amados que marchan hacia el enemigo con tal pasión y arrojo. Amados Hijos, el infierno es real, como es el Reino de los Cielos. No podéis jugar con o hacer una locura de la Eternidad cuando no podéis concebir su dimensión. ¿Vosotros compraríais un caballo antes de verlo correr? ¿Vosotros compraríais un acre de tierra sin ver sus pastizales?
No Me abandonéis, Mis Hijos. No neguéis a Cristo vuestro Amor. No contengáis vuestro Amor lejos de Mí. En su lugar, traed vuestro Amor a Mí. Buscad Mi Compasión y Misericordia. Cada uno de vosotros es un pecador, y Yo os doy Gracias y Misericordia divinas, si así lo deseáis, pero venid a Mí. Busco vuestro Amor como vosotros debéis buscar Mi Misericordia Abundante. Mi Corazón está abierto a todas vuestras adoraciones, y sin embargo muchos de Mis Hijos están mudos.
Oh, Hijos, ¿no veis las tinieblas que devastan a los Hijos de este Mundo? ¿No entendéis Mi ansiedad por vosotros? Amados Hijos, no podéis entender la Luz hasta que estáis inmersos en la oscuridad. Entonces vos vais a clamar a Mí por la Luz de este Mundo. No podéis vivir una vida feliz sin Mí. No busquéis la oscuridad, sino buscad la Luz Divina de Mi Hijo, quien es Misericordia y Amor a la vez.
Amados Hijos, marcad el día y yo le mostraré al Mundo la Gloria de un Rey en lo Alto. El hombre llorará ante la maravilla de Mi Gloria y los animales caerán sobre los suelos ante vos y todos estos esplendores cegarán a toda la Humanidad, de manera que aquellos que no crean, creerán, y los que estén ciegos, verán. Vasto es el dolor del fuego limpiando a los hierros. Ningún hombre se sostendrá a sí mismo, por este Mundo. El hombre sólo va a vivir por [gracias a] Mi gloria. Volved a Mí, Amados Hijos, y sabed que soy un juez severo y un Padre Amoroso. ¿A quien querréis ver cuando llegue el momento?
Las puertas del norte y el este se abren y los dragones dentro, que son de color rojo o vestido de rojo, salen volando como grandes pájaros en el fuego. La totalidad de la(s) tierra(s) se derrumban bajo su tacto y las montañas se desmoronan en su presencia. No os dejéis engañar por su belleza y encanto. Estos harán daño a Mis Hijos y os mancharán por vuestra curiosidad y riqueza. Manteneos alejados de los dragones que vuelan más allá de este Mundo. Las fauces se abren a toda amplitud y la oscuridad dentro de ellas devorarán a Mis Amados Hijos. Manteneos firmes en vuestro Amor y fe por Mí y por Mi Amado Hijo, el Señor Jesucristo. No temáis a aquello que está contra vosotros, porque Yo estoy con vosotros, y por vuestras oraciones vos sois hechos completos [fuertes].
Orad, Mis Hijos. Orad y participad de la Eucaristía Salvadora. Es la más grande de todos los grandes regalos. No podéis concebir los dones y gracias que recibís por ella. Sabed Amados Hijos, que el tiempo es corto y el Reino viene. La llamada sonará en la puerta. La tierra retumbará en respuesta. Los cielos se tornarán negros, tan negros como el día de la Gloria de Cristo y su muerte como Hombre, y seguramente sabrán que el Señor Dios es el Rey de lo Eterno y de este benigno Mundo.
Queridos Hijos, orad en todas las cosas. Yo os guio y doy Mi dirección Amada. No luchéis contra vuestro Padre Amoroso. En su lugar, confiad en Mí y en Mi Amor por vos. Vos sois Mis queridos Hijos y el Padre protege a Sus Hijos con ferocidad de Sus enemigos. Queridos Hijos, no temáis, porque Yo soy para vos, como vos sois para Mí. Orad, Amados Hijos. Amad, Mis Queridos Hijos. No rechacéis a vuestros hermanos. Orad.

NO ESPEREIS
Sábado, 13 de febrero 2016 3:10-15:43
Amado Hija, escucha a tu Amado Dios y Padre que busca darte Mis regalos Más Grandes a través de Mi Amado y querido Hijo, Jesucristo. Siempre estoy con vosotros, escuchando vuestras oraciones y respondiendo, incluso cuando tu no Me escuchas. Aun cuando no me puedas ver. Siempre estoy contigo, Mi Hija, y a través de vuestras imperfecciones veo directamente en vuestro Corazón y lo que Yo encuentro o veo es Preciosismo y perfectísimo para Mí. Te pido que ames como yo Amo. Te Amo, Mi Hija, sin condiciones, sin límites y con un Amor tan grande, que es demasiado grande o muy grande para que tu lo podáis imaginar. Mi Amor por vos es incomparable.
Las arenas [de los océanos] son tan dulces, pero tú eres más dulce. El viento es demasiado fuerte, pero Yo te hago más fuerte. Mi Amor es tan infinito y Yo quiero tu Amor y dedicación a cambio. Ámame, Querida. Guía a mis Otros Hijos a Amarme. ¡Cómo me encantan tus oraciones por los demás! Por cada angustia que vives, diez almas se salvan y son llevadas a la Gloria de Mi Reino.
Atesorados Hijos, debéis recurrir a Mí ahora. No esperéis hasta que la fruta se eche a perder para comer de ella. No esperéis hasta que la tormenta esté presente para bloquear las ventanas y puertas. No esperéis a que una plaga o plagas golpeen, antes de ser cautelosos sobre vuestra salud. Ahora es el momento de prepararse. Preparaos para las tormentas, a través de oraciones profundas y maravillosas. Comed de los frutos que os doy a vosotros, mientras que estos están maduros y dulces. Haced que vuestro cuerpo este fuerte, para que cuando se enfrente a problemas de salud, os recuperéis rápidamente por Mi Gracia.
Al igual que pesas pero espiritualmente?
Queridos Hijos, sois de Mi propiedad para Amaros y ¡cuánto vuestro Amado y Eterno Padre os ama!
No hay que buscar la destrucción o la venganza de vuestros hermanos y hermanas. Cesad vuestro juicio o dictamen sobre los demás, porque estas cosas son para Mí y cómo os podéis dignar a juzgar lo que es injuzgable para vos?? Mis Hijos, vosotros sois pequeños gránulos de arena ligera; juntos, vos brilláis intensamente, cálidamente. Cuando estáis solos, la llama de vuestro Corazón parpadeará hasta apagarse, si no la encendéis o cuidáis de ella. Yo soy el Señor Dios y busco a los Hijos que Me Quieren. Mi Amado Hijo ha abierto las puertas de la Misericordia ampliamente y aún así muchos de vosotros dudáis y desconocéis y rechazáis Su Amor y Su Más Grande Don.
Amados Hijos, Cristo ha resucitado ante vosotros. No debéis dudar sino dar a Nosotros todos vuestros Corazones. No esperéis, mis Hijos. No esperéis. Todo lo que pretendo daros es bueno. Es de Mi voluntad, y Mi voluntad para vosotros es muy Amorosa y amable. Hijos, confiad en Mí, vuestro Señor Dios y Padre. El Amor en Mi Corazón es encendido por vuestro Amor por Mí. Tal reciprocidad me trae tanta alegría y todo el Cielo se regocija en este Amor. Amados Hijos, poned a Mis Ángeles a la tarea. Rezad con ellos y escucho las Glorias de vuestro culto con el de ellos, y las canciones de Amor Me llenan con tanta alegría y con Amor cada vez mayor. El Amor engendra Amor y se expande y aumenta el Amor.
Sabed que esto es cierto, mis Hijos. Llega un momento en que las puertas de la salvación serán bloqueadas contra los pecadores y la alegría de Mi Gente comenzará dentro. Estad Conmigo, Hijos. Uníos a Mi Amor por vos. No coloquéis a vosotros mismos en tal peligro, porque cuando la puerta esté cerrada [para entrar] al Reino, ¿cómo seréis sostenidos en contra de las pruebas y las furias de este Mundo? No podéis, Mis Amados Hijos.¡Cómo sufriréis!, esos Hijos que me rechazan. Al igual que el extraño que no es bienvenido en la noche a cualquier calidez, vosotros seréis sometidos a tales fatalidades y dolor. La tormenta es implacable si se enfrenta sin ninguna protección.
Yo soy el Señor Dios. Mi Amado Hijo es la Palabra o Mi Palabra. Él es el calor y la Luz de este Mundo y las puertas a Su Sagrado y Bendito Corazón están abiertas o se han abierto ante vos. Tomad este regalo de la Misericordia en vuestros corazones. Asidlo en vosotros o mantenedlo con vosotros, pues la Misericordia es un regalo que os traerá consuelo y alegría. El os proporcionará la redención, como pecadores, porque el Corazón de Mi Hijo Amado ha sido perforado para salvar a los que Él Ama, que es a todos vosotros, los que viven, han mentido, y vivirán. Consolaos con la misericordia que Él provee. Llevadlo en vuestro pecho y no renunciéis a vuestro abrazo de Su Corazón Amoroso, cuando los vientos de este Mundo tratan de influir en vosotros.
Él es el Señor Dios e Hijo del Hombre. Él os Salva de la miseria y la tinieblas y penas del infierno. Traed vuestro Amor a Él con Amor y alegría. Pedid por Sus gracias y conoceréis la alegría. Sólo debéis pedirla y Su Misericordia es vuestra, Mis Amados Hijos. Por lo tanto os digo, encended el fuego dentro de vuestros Corazones con el Amor de Cristo y por el Amor de Cristo. Adorad a Mi Hijo con Amor y orad por todas las cosas.
Soy vuestro proveedor Santo y Eterno y yo soy vuestro Padre Amoroso. Proporciono buenos dones para mis Hijos. Sólo necesitáis pedirlos. Orad mis Hijos y sabed que las Gracias de Dios están sobre vos. Soy la Luz y verdad y majestad. Mi Amor os sostiene, mis Hijos. Así que os digo, no descartéis aquello que Yo os he dado. Hacerlo va en completo detrimento de vuestras almas. Muchos caen de sus vidas y caen en los hoyos del demonio. Mis Hijos caen y caerán a pesar de Mi Grandísimo Amor para vosotros. Yo clamo a vosotros, siempre con Mi Corazón anhelando fervientemente para vuestro Amor. No caminéis en la oscuridad, Mis Hijos, sino vivid dentro del manto de Mi Gran Amor y Orientación. Sentid el Amor del Señor Dios pulsando a través de vosotros. Esta es la fuerza del Amor y Conmigo: vuestros enemigos huirán de vosotros y los desastres del Mundo os evitarán y los castigos de las almas no os aplastarán en lo absoluto. Por lo tanto os digo, dad a Mí todo vuestro Amor, mis Hijos. No esperéis, pues la Gloria de Dios viene y vos desearéis estar siempre conmigo.
Mi Amados Hijitos, no es necesario entender todo lo que ven y oyen, sino sólo confiad en Cristo Jesús, porque Su Amor es puro y verdadero y Su Camino virtuoso. Amad, Mis Hijos. Amad. Orad y Amad y Me hacéis feliz vosotros.
Queridos Hijos, os doy Mi Paz el día de hoy y siempre.
Sábado, 13 de febrero 2016 3:10-15:43
Amado Hija, escucha a tu Amado Dios y Padre que busca darte Mis regalos Más Grandes a través de Mi Amado y querido Hijo, Jesucristo. Siempre estoy con vosotros, escuchando vuestras oraciones y respondiendo, incluso cuando tu no Me escuchas. Aun cuando no me puedas ver. Siempre estoy contigo, Mi Hija, y a través de vuestras imperfecciones veo directamente en vuestro Corazón y lo que Yo encuentro o veo es Preciosismo y perfectísimo para Mí. Te pido que ames como yo Amo. Te Amo, Mi Hija, sin condiciones, sin límites y con un Amor tan grande, que es demasiado grande o muy grande para que tu lo podáis imaginar. Mi Amor por vos es incomparable.
Las arenas [de los océanos] son tan dulces, pero tú eres más dulce. El viento es demasiado fuerte, pero Yo te hago más fuerte. Mi Amor es tan infinito y Yo quiero tu Amor y dedicación a cambio. Ámame, Querida. Guía a mis Otros Hijos a Amarme. ¡Cómo me encantan tus oraciones por los demás! Por cada angustia que vives, diez almas se salvan y son llevadas a la Gloria de Mi Reino.
Atesorados Hijos, debéis recurrir a Mí ahora. No esperéis hasta que la fruta se eche a perder para comer de ella. No esperéis hasta que la tormenta esté presente para bloquear las ventanas y puertas. No esperéis a que una plaga o plagas golpeen, antes de ser cautelosos sobre vuestra salud. Ahora es el momento de prepararse. Preparaos para las tormentas, a través de oraciones profundas y maravillosas. Comed de los frutos que os doy a vosotros, mientras que estos están maduros y dulces. Haced que vuestro cuerpo este fuerte, para que cuando se enfrente a problemas de salud, os recuperéis rápidamente por Mi Gracia.
Al igual que pesas pero espiritualmente?
Queridos Hijos, sois de Mi propiedad para Amaros y ¡cuánto vuestro Amado y Eterno Padre os ama!
No hay que buscar la destrucción o la venganza de vuestros hermanos y hermanas. Cesad vuestro juicio o dictamen sobre los demás, porque estas cosas son para Mí y cómo os podéis dignar a juzgar lo que es injuzgable para vos?? Mis Hijos, vosotros sois pequeños gránulos de arena ligera; juntos, vos brilláis intensamente, cálidamente. Cuando estáis solos, la llama de vuestro Corazón parpadeará hasta apagarse, si no la encendéis o cuidáis de ella. Yo soy el Señor Dios y busco a los Hijos que Me Quieren. Mi Amado Hijo ha abierto las puertas de la Misericordia ampliamente y aún así muchos de vosotros dudáis y desconocéis y rechazáis Su Amor y Su Más Grande Don.
Amados Hijos, Cristo ha resucitado ante vosotros. No debéis dudar sino dar a Nosotros todos vuestros Corazones. No esperéis, mis Hijos. No esperéis. Todo lo que pretendo daros es bueno. Es de Mi voluntad, y Mi voluntad para vosotros es muy Amorosa y amable. Hijos, confiad en Mí, vuestro Señor Dios y Padre. El Amor en Mi Corazón es encendido por vuestro Amor por Mí. Tal reciprocidad me trae tanta alegría y todo el Cielo se regocija en este Amor. Amados Hijos, poned a Mis Ángeles a la tarea. Rezad con ellos y escucho las Glorias de vuestro culto con el de ellos, y las canciones de Amor Me llenan con tanta alegría y con Amor cada vez mayor. El Amor engendra Amor y se expande y aumenta el Amor.
Sabed que esto es cierto, mis Hijos. Llega un momento en que las puertas de la salvación serán bloqueadas contra los pecadores y la alegría de Mi Gente comenzará dentro. Estad Conmigo, Hijos. Uníos a Mi Amor por vos. No coloquéis a vosotros mismos en tal peligro, porque cuando la puerta esté cerrada [para entrar] al Reino, ¿cómo seréis sostenidos en contra de las pruebas y las furias de este Mundo? No podéis, Mis Amados Hijos.¡Cómo sufriréis!, esos Hijos que me rechazan. Al igual que el extraño que no es bienvenido en la noche a cualquier calidez, vosotros seréis sometidos a tales fatalidades y dolor. La tormenta es implacable si se enfrenta sin ninguna protección.
Yo soy el Señor Dios. Mi Amado Hijo es la Palabra o Mi Palabra. Él es el calor y la Luz de este Mundo y las puertas a Su Sagrado y Bendito Corazón están abiertas o se han abierto ante vos. Tomad este regalo de la Misericordia en vuestros corazones. Asidlo en vosotros o mantenedlo con vosotros, pues la Misericordia es un regalo que os traerá consuelo y alegría. El os proporcionará la redención, como pecadores, porque el Corazón de Mi Hijo Amado ha sido perforado para salvar a los que Él Ama, que es a todos vosotros, los que viven, han mentido, y vivirán. Consolaos con la misericordia que Él provee. Llevadlo en vuestro pecho y no renunciéis a vuestro abrazo de Su Corazón Amoroso, cuando los vientos de este Mundo tratan de influir en vosotros.
Él es el Señor Dios e Hijo del Hombre. Él os Salva de la miseria y la tinieblas y penas del infierno. Traed vuestro Amor a Él con Amor y alegría. Pedid por Sus gracias y conoceréis la alegría. Sólo debéis pedirla y Su Misericordia es vuestra, Mis Amados Hijos. Por lo tanto os digo, encended el fuego dentro de vuestros Corazones con el Amor de Cristo y por el Amor de Cristo. Adorad a Mi Hijo con Amor y orad por todas las cosas.
Soy vuestro proveedor Santo y Eterno y yo soy vuestro Padre Amoroso. Proporciono buenos dones para mis Hijos. Sólo necesitáis pedirlos. Orad mis Hijos y sabed que las Gracias de Dios están sobre vos. Soy la Luz y verdad y majestad. Mi Amor os sostiene, mis Hijos. Así que os digo, no descartéis aquello que Yo os he dado. Hacerlo va en completo detrimento de vuestras almas. Muchos caen de sus vidas y caen en los hoyos del demonio. Mis Hijos caen y caerán a pesar de Mi Grandísimo Amor para vosotros. Yo clamo a vosotros, siempre con Mi Corazón anhelando fervientemente para vuestro Amor. No caminéis en la oscuridad, Mis Hijos, sino vivid dentro del manto de Mi Gran Amor y Orientación. Sentid el Amor del Señor Dios pulsando a través de vosotros. Esta es la fuerza del Amor y Conmigo: vuestros enemigos huirán de vosotros y los desastres del Mundo os evitarán y los castigos de las almas no os aplastarán en lo absoluto. Por lo tanto os digo, dad a Mí todo vuestro Amor, mis Hijos. No esperéis, pues la Gloria de Dios viene y vos desearéis estar siempre conmigo.
Mi Amados Hijitos, no es necesario entender todo lo que ven y oyen, sino sólo confiad en Cristo Jesús, porque Su Amor es puro y verdadero y Su Camino virtuoso. Amad, Mis Hijos. Amad. Orad y Amad y Me hacéis feliz vosotros.
Queridos Hijos, os doy Mi Paz el día de hoy y siempre.

PERSEVERAD
Martes, 02 de febrero 2016 3:10-15:41
Amados Hijos, vosotros no tenéis que esperar mucho. El tiempo es más que un abrir y cerrar de ojos y la eternidad no tiene fin. Hijos Hermosos, no es para vosotros el entender estas cosas que son lo más beatífico y santo. Confiad en Mí, vuestro Señor Dios y yo os guiaré con rectitud sobre el camino hacia Mi Casa. Anhelo a cada uno de vosotros, Mis Hijos. Anhelo a cada uno de vosotros. Orad, Mis Hijitos pues muchos no lo hacen. Muchos de Mis Amados Hijos Me traicionan, aun cuando Yo lloro por ellos.
Orad para que ellos escuchen la llamada de vuestro Señor Cristo. Escuchad Mis llamados, del Señor y Padre de todas las cosas. Orad para que Mis Hijos vengan a Mí con gran prisa. Yo soy el Dios que perdona. Ofrezco a cada uno de vosotros la compasión y el perdón. Estas cosas son para vos por la gracia de Mi Beatífico Hijo, el Señor Jesucristo. Salúdenlo siempre con gran fervor, pues su don de Amor no tiene límites. El tesoro de este regalo es innombrable. Atesorad y Amad a Cristo, porque sólo Él es digno de Amor pleno y abundante. Más aun, en su Amor por el Hombre, Él ha derribado al maligno y ha retirado el manto de la oscuridad para todas las personas. Por su Sacrificio Poderoso, vosotros, Mis Hijos, habéis sido hechos limpios.
Vosotros estáis a salvo de todas las cosas que son contrarias a Cristo. Él derramó Su Preciosa Sangre, y la vertió sobre las Almas y los Corazones de toda la Humanidad. Bendecid vuestras Almas diariamente con esta firme convicción en vuestros Corazones. Mi Hijo Amado ha muerto para que viváis. Atesorad este regalo, Mis Pequeños. No podéis comprender su importancia para vosotros. Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo invoco a Mis Hijos a que me llamen a Mí en reciprocidad. Amadme, pues Yo Amo a cada uno de vosotros y Mi Amor es puro y nunca va a claudicar.
Amados Hijos, no os sintáis traicionados por los Cielos del Este, sino mirad hacia el Norte, a todo lo que os sea posible ver. Yo Revelo Mi Gloria a los Hijos de Dios. Así verá el mundo Mi Santa Templanza. Así verá el Hombre como su duda que ha flagelado a sus Almas. Amados Hijos, a petición de Su Padre, Cristo el Señor me glorificará pronto ****. Ceñid vuestros cinturones y orad. No hay mayor poder que la oración. ¿Cuando vais a conocer y confiar en Mí plenamente con todos vuestros seres? Yo soy el Uno. Yo soy el Señor Dios que os ama y tiene Misericordia por vosotros y quien perdona los pecados de la humanidad.
Hijos, no Me tratéis equivocadamente, con prisas, sin paciencia, sin Amor. ¡Cómo lloro al ser rechazado por Mis Hijos tan fácilmente! Aquellos que adoran, que oran, y que creen, tendrán asientos en Mi Mesa. Es un banquete para los Amorosos y obedientes. La indiferencia del Hombre ha hecho la entrada [al Cielo] casi imposible. Los que van a morir sin pedir perdón se encontrarán simplemente solos. Por lo tanto, os digo: orad por estos hombres y mujeres que no tienen la valentía de expresar su Amor por Mí. ¡Ay del Hombre que talla sus ídolos de piedra y rocas de gemas (avaricia) y descarta al Señor Dios y Padre.
Yo soy Él, quien permite a las Almas [entrar] a Mi Amoroso y Hogar. No podéis rechazar al Rey del Amor y venir a Mí. Descartar y rechazar a mi Hijo Amado os encierra lejos de Mi Corazón. Cuando vosotros adoráis y Amáis a mi Hijo Amado, que feliz que me hacéis! Por lo tanto, os digo, Hijos, no neguéis la fuerza de Su Amor por vosotros. No descartéis Su Amor. Adoradlo, porque Él es Santo y merecedor únicamente de vuestro Amor.
Perseverad Mis Amores. Este no es un momento sencillo y tiempos aun más difíciles vendrán todavía. Orad siempre y Mi Mano se acerca a vos perpetuamente. Amados Hijos, orad. Hago hincapié en esto. Vosotros debéis orar y confiar en mi Amor por vos. No dudéis. Dudar es permitir a la oscuridad una victoria. La duda os aleja de Mí. Confiad en Mí plenamente, y nunca fallo a Mis Amados Hijos.
Sabed que esto es cierto: Tenéis vista débil y no entendéis las bendiciones eternas. No podéis adivinar la maravilla de la vida eterna. Por lo tanto, confiad en Mí, como un bebé confía en su madre y su padre. Reconoced que el Hijo de Dios y el Hombre se abre ante vos y derrama su Sangre Preciosa sobre este Mundo que lo hiere a Él, incluso ahora. Por lo tanto, Mis Hijos, orad por el perdón y se os concede con gran Amor y alegría.
Amados Hijos, algunas cosas vosotros no conocéis. Algunas cosas no tenéis derecho de conocer, sino es a través de Mi don del discernimiento. Algunas cosas vosotros vais a conocer. No juguéis con Mi Amor. Orad. Yo no soy un adivino de fortuna. Yo soy el Señor Dios y Padre de todo lo que es. Yo soy el Amor y seré y siempre lo he sido. No dudéis. No cometáis la insensatez de no escuchar Mis palabras de advertencia. No cometáis la insensatez desestimar Mi Amor. Un día deberéis soportar la carga del escrutinio y juicio del Señor Jesucristo. Vais a soportar Mi escrutinio.
Amad y perdonad. Sed misericordiosos, tal como deseáis [recibir] Mi Misericordia. Daos a Mí. Jesús es vuestro camino hacia Mí. Adoradlo y amadlo como corresponde. Hacerlo de manera diferente es pecar y abandonar vuestra alma a los muertos. Amados Hijos, orad. Escucho vuestras oraciones y respondo a vosotros con Gran Amor y Misericordia. Paz, Hijos míos. Os doy Mi Paz.
Martes, 02 de febrero 2016 3:10-15:41
Amados Hijos, vosotros no tenéis que esperar mucho. El tiempo es más que un abrir y cerrar de ojos y la eternidad no tiene fin. Hijos Hermosos, no es para vosotros el entender estas cosas que son lo más beatífico y santo. Confiad en Mí, vuestro Señor Dios y yo os guiaré con rectitud sobre el camino hacia Mi Casa. Anhelo a cada uno de vosotros, Mis Hijos. Anhelo a cada uno de vosotros. Orad, Mis Hijitos pues muchos no lo hacen. Muchos de Mis Amados Hijos Me traicionan, aun cuando Yo lloro por ellos.
Orad para que ellos escuchen la llamada de vuestro Señor Cristo. Escuchad Mis llamados, del Señor y Padre de todas las cosas. Orad para que Mis Hijos vengan a Mí con gran prisa. Yo soy el Dios que perdona. Ofrezco a cada uno de vosotros la compasión y el perdón. Estas cosas son para vos por la gracia de Mi Beatífico Hijo, el Señor Jesucristo. Salúdenlo siempre con gran fervor, pues su don de Amor no tiene límites. El tesoro de este regalo es innombrable. Atesorad y Amad a Cristo, porque sólo Él es digno de Amor pleno y abundante. Más aun, en su Amor por el Hombre, Él ha derribado al maligno y ha retirado el manto de la oscuridad para todas las personas. Por su Sacrificio Poderoso, vosotros, Mis Hijos, habéis sido hechos limpios.
Vosotros estáis a salvo de todas las cosas que son contrarias a Cristo. Él derramó Su Preciosa Sangre, y la vertió sobre las Almas y los Corazones de toda la Humanidad. Bendecid vuestras Almas diariamente con esta firme convicción en vuestros Corazones. Mi Hijo Amado ha muerto para que viváis. Atesorad este regalo, Mis Pequeños. No podéis comprender su importancia para vosotros. Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo invoco a Mis Hijos a que me llamen a Mí en reciprocidad. Amadme, pues Yo Amo a cada uno de vosotros y Mi Amor es puro y nunca va a claudicar.
Amados Hijos, no os sintáis traicionados por los Cielos del Este, sino mirad hacia el Norte, a todo lo que os sea posible ver. Yo Revelo Mi Gloria a los Hijos de Dios. Así verá el mundo Mi Santa Templanza. Así verá el Hombre como su duda que ha flagelado a sus Almas. Amados Hijos, a petición de Su Padre, Cristo el Señor me glorificará pronto ****. Ceñid vuestros cinturones y orad. No hay mayor poder que la oración. ¿Cuando vais a conocer y confiar en Mí plenamente con todos vuestros seres? Yo soy el Uno. Yo soy el Señor Dios que os ama y tiene Misericordia por vosotros y quien perdona los pecados de la humanidad.
Hijos, no Me tratéis equivocadamente, con prisas, sin paciencia, sin Amor. ¡Cómo lloro al ser rechazado por Mis Hijos tan fácilmente! Aquellos que adoran, que oran, y que creen, tendrán asientos en Mi Mesa. Es un banquete para los Amorosos y obedientes. La indiferencia del Hombre ha hecho la entrada [al Cielo] casi imposible. Los que van a morir sin pedir perdón se encontrarán simplemente solos. Por lo tanto, os digo: orad por estos hombres y mujeres que no tienen la valentía de expresar su Amor por Mí. ¡Ay del Hombre que talla sus ídolos de piedra y rocas de gemas (avaricia) y descarta al Señor Dios y Padre.
Yo soy Él, quien permite a las Almas [entrar] a Mi Amoroso y Hogar. No podéis rechazar al Rey del Amor y venir a Mí. Descartar y rechazar a mi Hijo Amado os encierra lejos de Mi Corazón. Cuando vosotros adoráis y Amáis a mi Hijo Amado, que feliz que me hacéis! Por lo tanto, os digo, Hijos, no neguéis la fuerza de Su Amor por vosotros. No descartéis Su Amor. Adoradlo, porque Él es Santo y merecedor únicamente de vuestro Amor.
Perseverad Mis Amores. Este no es un momento sencillo y tiempos aun más difíciles vendrán todavía. Orad siempre y Mi Mano se acerca a vos perpetuamente. Amados Hijos, orad. Hago hincapié en esto. Vosotros debéis orar y confiar en mi Amor por vos. No dudéis. Dudar es permitir a la oscuridad una victoria. La duda os aleja de Mí. Confiad en Mí plenamente, y nunca fallo a Mis Amados Hijos.
Sabed que esto es cierto: Tenéis vista débil y no entendéis las bendiciones eternas. No podéis adivinar la maravilla de la vida eterna. Por lo tanto, confiad en Mí, como un bebé confía en su madre y su padre. Reconoced que el Hijo de Dios y el Hombre se abre ante vos y derrama su Sangre Preciosa sobre este Mundo que lo hiere a Él, incluso ahora. Por lo tanto, Mis Hijos, orad por el perdón y se os concede con gran Amor y alegría.
Amados Hijos, algunas cosas vosotros no conocéis. Algunas cosas no tenéis derecho de conocer, sino es a través de Mi don del discernimiento. Algunas cosas vosotros vais a conocer. No juguéis con Mi Amor. Orad. Yo no soy un adivino de fortuna. Yo soy el Señor Dios y Padre de todo lo que es. Yo soy el Amor y seré y siempre lo he sido. No dudéis. No cometáis la insensatez de no escuchar Mis palabras de advertencia. No cometáis la insensatez desestimar Mi Amor. Un día deberéis soportar la carga del escrutinio y juicio del Señor Jesucristo. Vais a soportar Mi escrutinio.
Amad y perdonad. Sed misericordiosos, tal como deseáis [recibir] Mi Misericordia. Daos a Mí. Jesús es vuestro camino hacia Mí. Adoradlo y amadlo como corresponde. Hacerlo de manera diferente es pecar y abandonar vuestra alma a los muertos. Amados Hijos, orad. Escucho vuestras oraciones y respondo a vosotros con Gran Amor y Misericordia. Paz, Hijos míos. Os doy Mi Paz.

MIS IMPACIENTES, YO OS AMO
Miércoles, 18 de enero 2016 2:49-15:13
Padre, ¿por qué los hombres trataron a Jesús peor que los otros dos tipos en las cruces? Quiero decir, los clavos en particular. Jesús debe haber estado muy asustado ....
Amados Hijos, no seáis negligentes en vuestras oraciones a Mí. Yo soy el Señor Dios arriba y abajo, y vuestras oraciones son oblaciones a Mi Corazón. Prestadme vuestros oídos [ponedme atención], fieles Hijos. Escuchad lo que os digo: orad Mis Amados. La oración mitiga todo lo que teméis. Yo soy un Dios de Amor. Yo no soy un Dios enojado. Deseo que Mis Amados Hijos entren en Mis Brazos de Gloria, para buscar la compasión y Mi Amor y el perdón. Yo estoy aquí para vosotros, como un padre Amoroso y tierno. Espero que mis Hijos vengan a Mí, y sin embargo, muy pocos lo hacen o lo harán.
Amados Hijos, los puntales son fuertes, pero los cimientos deben ser más fuertes todavía. No se puede construir vuestra casa sobre la arena, pues se hundirá con el tiempo. No se puede construir vuestra casa sobre barro. Con el tiempo, también se hundirá. Vosotros construís vuestra morada sobre la roca, sobre piedra. Así, cuando llegue la tormenta poderosa, vuestro hogar sea seguro y fuerte contra los vientos y seguro contra la destrucción de las lluvias torrenciales. Amados Hijos, construid vuestra fe como un hogar, con una base sólida. Vosotros sois puestos o seréis puestos a prueba todos los días. ¿Creéis que vuestra propia voluntad puede sosteneros? Miradme, Hijos Amados. Clamadme, y Yo os Amo y perdono y os invito a que vengáis a la Presencia del Señor Dios.
Quiero a Mis Amados Hijos conmigo. Añoro vuestros Corazones y deseo con tanto entusiasmo traeros a la belleza paradisíaca o al paraíso de los Cielos. Yo gobierno el Reino de los Cielos y es una Santa maravilla. Vosotros no sabéis el calibre de recompensas que están a la espera de vosotros. Si tuvierais tan solo una pequeñísima idea [de estas], vosotros os postraríais delante de Mí con entusiasmo, con gran fe y Amor adorador. Vosotros os postraríais delante del Hijo de Dios y Hombre en acción de gracias por la redención que Él os ha dado. Si supierais tan solo un poco. Si se os diera tan sólo un vistazo. Pero Yo no Me impongo a vosotros, pero deseo vehementemente que vosotros Me elijáis desde vuestras propias voluntades y Corazones. Yo ansío que Mi Gran Amor sea correspondido por Mis Amados Hijos.
Oh Amados, mirad hacia el Este en el amanecer. Ved al sol rojo incendiando las tierras. Ved al dragón rojo torturando al Hombre. Vosotros no escaparéis de su destrucción, pero podéis mitigar todas las calamidades por medio de vuestras oraciones a Mí. Vosotros no podéis adivinar sobre el poder de vuestras oraciones.
Amados Hijos, Mis Amados impacientes, Yo os Amo. Agarraos fuertemente a esto con gran confianza y fe. Yo os guío suavemente y susurro Mis Palabras de Amor en vuestros Corazones. Escuchad mientras Yo os guío. Confiad en la Voluntad de vuestro Padre Amoroso y Santo. Respondo a vuestras oraciones, incluso cuando vosotros no reconocéis esto o ellas. Amados Hijos, Mis Pacientes, ¡cómo me deleitáis con vuestra constancia y Amor! Miro sobre vosotros con Gran Amor y os doy Mi Paz y Bendición.
Amados Hijos, con el tiempo, vosotros os maravillaréis de lo que no veis. Orad por discernimiento y abrid los ojos. Orad por orientación y Yo os dejo oír. Orad por la comprensión y Yo coloco dulzura sobre vuestras lenguas. Amados Hijos hay una mayor dulzura todavía. Una que vosotros debéis, Mis Hijos, debéis obedecerme en esto: Participad en la Eucaristía. Veneradla. Es Santísima y sus dones son insondables. El Hijo de Dios os fortalece por Su Gran Amor por vos. Él ha dado Su Vida para que viváis. Por lo tanto, os digo, obedecedme en esto. Fortaleced vuestras almas y participad de la Eucaristía. Vosotros no podéis saber las glorias y Misericordias otorgadas sobre vosotros. Los ángeles saltan con alegría y se postran devotamente ante el Hijo de Dios, el Señor Jesucristo. ¿Cuánto más, como humanos, mis Hijos hechos en Mi propia imagen, deberíais adorar y Amar a Cristo?
Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestro tiempo. La hora viene y vosotros seréis testigos de Mi Gloria. Toda la Humanidad se quedará muda y se sorprenderá por la Gloria Poderosa del Señor Dios en las Alturas.
Amados Hijos, Amad. Amad y sed misericordiosos los unos a los otros como vosotros esperaríais que Mi Misericordia fuera con vosotros. Cuando vosotros sois misericordiosos y Amorosos con vuestros Hermanos y Hermanas: Mi Corazón se inflama. Cuando perdonáis a vuestros enemigos sin condiciones y con un Amor total y genuino por ellos, Me hacéis maravillosamente feliz. Es una cosa fácil de perdonar a los que ya has Amado. ¿Cuánto más es el peso del perdón y de Amar a los que os han encolerizado o despreciado o causado algún daño? Involucraos en la Misericordia y el perdón, Mis Hijos. La Misericordia es un regalo y eleva al Corazón de las tinieblas y lo levanta hacia la Luz del Amor y agradecimiento. Por lo tanto, os digo, sed indulgentes, misericordiosos. No pretendáis perdonar. No esperéis nada a cambio y regocijaos cuando vuestro enemigo se convierte en vuestro querido hermano. Toco los Corazones de muchos y miro hacia el Amoroso y Misericordioso por o para proveer Mi Orientación y sabiduría.
Amados Hijos, mirad hacia el Este y sabed que la destrucción de las llamas ardientes consumirá la tierra. Orad por las madres con Hijos en sus vientres. Orad y el Amoroso Señor Dios, vuestro Padre Amoroso, mitiga los desastres a los que os enfrentáis. Los estruendos se producen incluso ahora. El Norte no conocerá el fuego, y no sabrá nada de la lluvia. Lo que antes era un océano, un vasto océano, se volverá estéril. La tierra morirá de sed y los animales serán cortados donde estén parados. Vosotros tendréis sed y Me llamaréis y conoceréis la sed que siento por vuestro Amor.
Amados Hijos, orad. Yo soy un Dios celoso y veo la adulación del oro y los falsos ídolos en forma abundante delante de Mí. Hijos, no os caséis con vuestro dinero o con vuestro fama y popularidad. No os aferréis a vuestra oficina y riqueza y salud. No adoréis estas cosas, porque ellas no hacen más que devastar con vuestras almas. Creed que Yo os doy estas cosas y las puedo quitar a vosotros otra vez, al igual que Yo puedo dar y quitar la Vida. Vosotros sois bendecidos por Mi Amorosa Voluntad. Cuando veo a mis Hijos con necesidad, Yo os guío a vuestro Padre Celestial por tantos medios diferentes. Por lo tanto, os digo, Amados Hijos, no pongáis vuestra fe en este Mundo. Es una cosa pasajera; a cambio, confiad en vuestro Señor Dios Eterno que os ama como ningún otro.
Paz, Hijos Míos. Paz.
Miércoles, 18 de enero 2016 2:49-15:13
Padre, ¿por qué los hombres trataron a Jesús peor que los otros dos tipos en las cruces? Quiero decir, los clavos en particular. Jesús debe haber estado muy asustado ....
Amados Hijos, no seáis negligentes en vuestras oraciones a Mí. Yo soy el Señor Dios arriba y abajo, y vuestras oraciones son oblaciones a Mi Corazón. Prestadme vuestros oídos [ponedme atención], fieles Hijos. Escuchad lo que os digo: orad Mis Amados. La oración mitiga todo lo que teméis. Yo soy un Dios de Amor. Yo no soy un Dios enojado. Deseo que Mis Amados Hijos entren en Mis Brazos de Gloria, para buscar la compasión y Mi Amor y el perdón. Yo estoy aquí para vosotros, como un padre Amoroso y tierno. Espero que mis Hijos vengan a Mí, y sin embargo, muy pocos lo hacen o lo harán.
Amados Hijos, los puntales son fuertes, pero los cimientos deben ser más fuertes todavía. No se puede construir vuestra casa sobre la arena, pues se hundirá con el tiempo. No se puede construir vuestra casa sobre barro. Con el tiempo, también se hundirá. Vosotros construís vuestra morada sobre la roca, sobre piedra. Así, cuando llegue la tormenta poderosa, vuestro hogar sea seguro y fuerte contra los vientos y seguro contra la destrucción de las lluvias torrenciales. Amados Hijos, construid vuestra fe como un hogar, con una base sólida. Vosotros sois puestos o seréis puestos a prueba todos los días. ¿Creéis que vuestra propia voluntad puede sosteneros? Miradme, Hijos Amados. Clamadme, y Yo os Amo y perdono y os invito a que vengáis a la Presencia del Señor Dios.
Quiero a Mis Amados Hijos conmigo. Añoro vuestros Corazones y deseo con tanto entusiasmo traeros a la belleza paradisíaca o al paraíso de los Cielos. Yo gobierno el Reino de los Cielos y es una Santa maravilla. Vosotros no sabéis el calibre de recompensas que están a la espera de vosotros. Si tuvierais tan solo una pequeñísima idea [de estas], vosotros os postraríais delante de Mí con entusiasmo, con gran fe y Amor adorador. Vosotros os postraríais delante del Hijo de Dios y Hombre en acción de gracias por la redención que Él os ha dado. Si supierais tan solo un poco. Si se os diera tan sólo un vistazo. Pero Yo no Me impongo a vosotros, pero deseo vehementemente que vosotros Me elijáis desde vuestras propias voluntades y Corazones. Yo ansío que Mi Gran Amor sea correspondido por Mis Amados Hijos.
Oh Amados, mirad hacia el Este en el amanecer. Ved al sol rojo incendiando las tierras. Ved al dragón rojo torturando al Hombre. Vosotros no escaparéis de su destrucción, pero podéis mitigar todas las calamidades por medio de vuestras oraciones a Mí. Vosotros no podéis adivinar sobre el poder de vuestras oraciones.
Amados Hijos, Mis Amados impacientes, Yo os Amo. Agarraos fuertemente a esto con gran confianza y fe. Yo os guío suavemente y susurro Mis Palabras de Amor en vuestros Corazones. Escuchad mientras Yo os guío. Confiad en la Voluntad de vuestro Padre Amoroso y Santo. Respondo a vuestras oraciones, incluso cuando vosotros no reconocéis esto o ellas. Amados Hijos, Mis Pacientes, ¡cómo me deleitáis con vuestra constancia y Amor! Miro sobre vosotros con Gran Amor y os doy Mi Paz y Bendición.
Amados Hijos, con el tiempo, vosotros os maravillaréis de lo que no veis. Orad por discernimiento y abrid los ojos. Orad por orientación y Yo os dejo oír. Orad por la comprensión y Yo coloco dulzura sobre vuestras lenguas. Amados Hijos hay una mayor dulzura todavía. Una que vosotros debéis, Mis Hijos, debéis obedecerme en esto: Participad en la Eucaristía. Veneradla. Es Santísima y sus dones son insondables. El Hijo de Dios os fortalece por Su Gran Amor por vos. Él ha dado Su Vida para que viváis. Por lo tanto, os digo, obedecedme en esto. Fortaleced vuestras almas y participad de la Eucaristía. Vosotros no podéis saber las glorias y Misericordias otorgadas sobre vosotros. Los ángeles saltan con alegría y se postran devotamente ante el Hijo de Dios, el Señor Jesucristo. ¿Cuánto más, como humanos, mis Hijos hechos en Mi propia imagen, deberíais adorar y Amar a Cristo?
Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestro tiempo. La hora viene y vosotros seréis testigos de Mi Gloria. Toda la Humanidad se quedará muda y se sorprenderá por la Gloria Poderosa del Señor Dios en las Alturas.
Amados Hijos, Amad. Amad y sed misericordiosos los unos a los otros como vosotros esperaríais que Mi Misericordia fuera con vosotros. Cuando vosotros sois misericordiosos y Amorosos con vuestros Hermanos y Hermanas: Mi Corazón se inflama. Cuando perdonáis a vuestros enemigos sin condiciones y con un Amor total y genuino por ellos, Me hacéis maravillosamente feliz. Es una cosa fácil de perdonar a los que ya has Amado. ¿Cuánto más es el peso del perdón y de Amar a los que os han encolerizado o despreciado o causado algún daño? Involucraos en la Misericordia y el perdón, Mis Hijos. La Misericordia es un regalo y eleva al Corazón de las tinieblas y lo levanta hacia la Luz del Amor y agradecimiento. Por lo tanto, os digo, sed indulgentes, misericordiosos. No pretendáis perdonar. No esperéis nada a cambio y regocijaos cuando vuestro enemigo se convierte en vuestro querido hermano. Toco los Corazones de muchos y miro hacia el Amoroso y Misericordioso por o para proveer Mi Orientación y sabiduría.
Amados Hijos, mirad hacia el Este y sabed que la destrucción de las llamas ardientes consumirá la tierra. Orad por las madres con Hijos en sus vientres. Orad y el Amoroso Señor Dios, vuestro Padre Amoroso, mitiga los desastres a los que os enfrentáis. Los estruendos se producen incluso ahora. El Norte no conocerá el fuego, y no sabrá nada de la lluvia. Lo que antes era un océano, un vasto océano, se volverá estéril. La tierra morirá de sed y los animales serán cortados donde estén parados. Vosotros tendréis sed y Me llamaréis y conoceréis la sed que siento por vuestro Amor.
Amados Hijos, orad. Yo soy un Dios celoso y veo la adulación del oro y los falsos ídolos en forma abundante delante de Mí. Hijos, no os caséis con vuestro dinero o con vuestro fama y popularidad. No os aferréis a vuestra oficina y riqueza y salud. No adoréis estas cosas, porque ellas no hacen más que devastar con vuestras almas. Creed que Yo os doy estas cosas y las puedo quitar a vosotros otra vez, al igual que Yo puedo dar y quitar la Vida. Vosotros sois bendecidos por Mi Amorosa Voluntad. Cuando veo a mis Hijos con necesidad, Yo os guío a vuestro Padre Celestial por tantos medios diferentes. Por lo tanto, os digo, Amados Hijos, no pongáis vuestra fe en este Mundo. Es una cosa pasajera; a cambio, confiad en vuestro Señor Dios Eterno que os ama como ningún otro.
Paz, Hijos Míos. Paz.

EL ESPÍRITU INGRESA EN VOSOTROS
Miércoles, 13 de enero 2016 2:49-15:13
Padre, está bien orar en lenguas? ¿Y quién es Elías ??
Volved a Jesús, Mis Amados y mantenedlo cerca de vuestros Corazones. Suya es la Luz y el camino hacia Mí. Él es el que viene delante de Mí y Lo Amo como Yo os Amo. Amados Hijos, alabadme y Amadme con todos vuestros Corazones. Cuando una cosa está contra Mí, el Espíritu habla dentro de vuestros Corazones. Cuando es algo para Mí, es correcto y justo. Es una oración alada que Me Encanta y vosotros no estáis para negarme, al Señor Dios, este regalo de canciones.
Orad, Amados Hijos, pues vuestro discernimiento es mínimo y vos debéis entender Mi Voluntad. Mi Voluntad para vos es buena y correcta; sin embargo, muchos de Mis Amados Hijos se apartan de Mis planes para ellos. Les traerá terror cuando hayan caído detrás de Mí en la oscuridad de la fosa, donde no hay ninguna razón, ni Amor. Amados Hijos, debéis orar a vuestro Señor Dios. Orad cuando os despertéis y mientras trabajáis y antes que vuestros ojos estén cerrados otra vez a este Mundo. Hijos, orad y Yo oigo vuestros llamados. Escucho y Me quedo con vosotros siempre.
El Amado Cristo llama a vosotros. Él es Mi Hijo Amado quien se ha sacrificado por Amor. Por Amor a vosotros. No rechacéis el Sacrificio y el Amor del Señor Jesucristo. ¿No conocéis la naturaleza de Su Amor por vos? Orad y entended que Su presencia ahuyenta la enfermedad y la ociosidad. Él es la Luz de este Mundo y el Hijo de Dios y el Hombre. Amo a Mi Amado Hijo, Cristo. Adoradle de acuerdo con Mi Amor. Buscad al Cordero y sabed que vos seréis guiados al Amor. No podéis respirar vida sin Mi Amor.
El Espíritu entra en vos y hace brillar una Luz santa sobre vuestros Corazones. Poned atención a Su Luz pues ésta Me glorificará y os llevará a través de los días más oscuros. La Luz del Espíritu está dentro de vos. Dejad que esté presente a través de todas vuestras vidas y el camino hacia Mi Reino se hará derecho. Amados Hijos, mirad a Mi Hijo en todas las cosas. Su voluntad es Mi Voluntad y anhelo dar a Mis Hijos el perdón y la compasión.
Ved el Norte y ellos no buscan perdón por sus iniquidades contra el Hijo de Dios. Ved las caras de los pobres y miserables y ellos no son preservados, sus vidas, pero ellos cosecharán sus recompensa en el Cielo. No os recompenséis a vosotros mismos en este Mundo, porque estos son dones temporales y no les hacen bien en la muerte. ¿De qué sirve una piedra preciosa o una pepita de oro cuando os hayáis muerto? Yo no necesito piedras y oro; es como el polvo para Mí. Por lo tanto, os digo, olvidad vuestro oro y olvidad las piedras con las que vosotros construís en esta vida y ved a Mí por la compasión y perdón. Mi Misericordia es para vosotros. La doy libremente a los que vienen a Mí en arrepentimiento y con Amor y adoración y confianza en vuestros Corazones.
Amados Hijos, no podéis huir de la destrucción que viene, pero Yo os digo, no tengáis miedo. Yo soy vuestro Padre Celestial y no dejaré que ningún mal acontezca a los Hijos que rezan. Anhelo vuestras oraciones y quiero que oren a menudo a Mí, para que Yo pueda oír la dulzura de vuestras Palabras.
Amados Hijos, mirad hacia el Este y el cielo se blasona con fuego. Los árboles se marchitan y quema y la tierra se volverá negra de hollín. No cierres los ojos, pero ved hacia el Oriente ante vos y añorad por la Palabra de Dios. Anheladme como Yo lo hago por vos. Así que Yo os digo, el Norte será inhabitable y el Este un montículo negro. Todos Mis Hijos llorarán por Mí y Yo voy a escuchar a los constantes en la oración.
Amados Hijos, Yo os digo: orad. Orad pues Yo Amo las oraciones de Mis Hijos. Confiad en Mi Voluntad para vosotros y arrasen con vuestras dudas. Mi Amor es un Amor sencillo y Yo pido vuestro Amor a cambio. Mi Amor es tan suave como una paloma en reposo y Yo coloco este Amor en vuestros Corazones minuciosamente. Amados Hijos, sabed que esto es cierto. Yo soy el Señor Dios. Yo estoy con vosotros, pero Yo soy un Dios discreto y soy Padre. Yo no Me impongo a Mis Hijos, pero permito que vosotros os impongáis a vosotros mismos sobre Mí con gran alegría!
Por lo tanto, os digo, venid a Mí por la renovación y el Amor. Venid a Mí por Misericordia y perdón. Venid a Mí con vuestro Amor y Mi Corazón se inflama con vuestra ofrenda de Amor. Amados Hijos, no os desviéis de Jesús, sino seguid siempre Sus pasos. El camino de Cristo es el camino hacia Mí, vuestro Señor Dios y Padre. Esto Yo os digo, Amad a Mi Hijo con todos vuestros Corazones y adoradle con fervor.
Amados Hijos, vuestra fe será puesta a prueba y vos debéis ser constantes en la oración. Aquellos que se desvíen, incluso un poco, fallarán en su testimonio al Señor Dios y que se podrá decir después?
Orad y sed fieles a vuestro Señor Dios y Mi Fuerza y Amor os guiarán siempre. Orad, Amados Hijos. Orad.
Miércoles, 13 de enero 2016 2:49-15:13
Padre, está bien orar en lenguas? ¿Y quién es Elías ??
Volved a Jesús, Mis Amados y mantenedlo cerca de vuestros Corazones. Suya es la Luz y el camino hacia Mí. Él es el que viene delante de Mí y Lo Amo como Yo os Amo. Amados Hijos, alabadme y Amadme con todos vuestros Corazones. Cuando una cosa está contra Mí, el Espíritu habla dentro de vuestros Corazones. Cuando es algo para Mí, es correcto y justo. Es una oración alada que Me Encanta y vosotros no estáis para negarme, al Señor Dios, este regalo de canciones.
Orad, Amados Hijos, pues vuestro discernimiento es mínimo y vos debéis entender Mi Voluntad. Mi Voluntad para vos es buena y correcta; sin embargo, muchos de Mis Amados Hijos se apartan de Mis planes para ellos. Les traerá terror cuando hayan caído detrás de Mí en la oscuridad de la fosa, donde no hay ninguna razón, ni Amor. Amados Hijos, debéis orar a vuestro Señor Dios. Orad cuando os despertéis y mientras trabajáis y antes que vuestros ojos estén cerrados otra vez a este Mundo. Hijos, orad y Yo oigo vuestros llamados. Escucho y Me quedo con vosotros siempre.
El Amado Cristo llama a vosotros. Él es Mi Hijo Amado quien se ha sacrificado por Amor. Por Amor a vosotros. No rechacéis el Sacrificio y el Amor del Señor Jesucristo. ¿No conocéis la naturaleza de Su Amor por vos? Orad y entended que Su presencia ahuyenta la enfermedad y la ociosidad. Él es la Luz de este Mundo y el Hijo de Dios y el Hombre. Amo a Mi Amado Hijo, Cristo. Adoradle de acuerdo con Mi Amor. Buscad al Cordero y sabed que vos seréis guiados al Amor. No podéis respirar vida sin Mi Amor.
El Espíritu entra en vos y hace brillar una Luz santa sobre vuestros Corazones. Poned atención a Su Luz pues ésta Me glorificará y os llevará a través de los días más oscuros. La Luz del Espíritu está dentro de vos. Dejad que esté presente a través de todas vuestras vidas y el camino hacia Mi Reino se hará derecho. Amados Hijos, mirad a Mi Hijo en todas las cosas. Su voluntad es Mi Voluntad y anhelo dar a Mis Hijos el perdón y la compasión.
Ved el Norte y ellos no buscan perdón por sus iniquidades contra el Hijo de Dios. Ved las caras de los pobres y miserables y ellos no son preservados, sus vidas, pero ellos cosecharán sus recompensa en el Cielo. No os recompenséis a vosotros mismos en este Mundo, porque estos son dones temporales y no les hacen bien en la muerte. ¿De qué sirve una piedra preciosa o una pepita de oro cuando os hayáis muerto? Yo no necesito piedras y oro; es como el polvo para Mí. Por lo tanto, os digo, olvidad vuestro oro y olvidad las piedras con las que vosotros construís en esta vida y ved a Mí por la compasión y perdón. Mi Misericordia es para vosotros. La doy libremente a los que vienen a Mí en arrepentimiento y con Amor y adoración y confianza en vuestros Corazones.
Amados Hijos, no podéis huir de la destrucción que viene, pero Yo os digo, no tengáis miedo. Yo soy vuestro Padre Celestial y no dejaré que ningún mal acontezca a los Hijos que rezan. Anhelo vuestras oraciones y quiero que oren a menudo a Mí, para que Yo pueda oír la dulzura de vuestras Palabras.
Amados Hijos, mirad hacia el Este y el cielo se blasona con fuego. Los árboles se marchitan y quema y la tierra se volverá negra de hollín. No cierres los ojos, pero ved hacia el Oriente ante vos y añorad por la Palabra de Dios. Anheladme como Yo lo hago por vos. Así que Yo os digo, el Norte será inhabitable y el Este un montículo negro. Todos Mis Hijos llorarán por Mí y Yo voy a escuchar a los constantes en la oración.
Amados Hijos, Yo os digo: orad. Orad pues Yo Amo las oraciones de Mis Hijos. Confiad en Mi Voluntad para vosotros y arrasen con vuestras dudas. Mi Amor es un Amor sencillo y Yo pido vuestro Amor a cambio. Mi Amor es tan suave como una paloma en reposo y Yo coloco este Amor en vuestros Corazones minuciosamente. Amados Hijos, sabed que esto es cierto. Yo soy el Señor Dios. Yo estoy con vosotros, pero Yo soy un Dios discreto y soy Padre. Yo no Me impongo a Mis Hijos, pero permito que vosotros os impongáis a vosotros mismos sobre Mí con gran alegría!
Por lo tanto, os digo, venid a Mí por la renovación y el Amor. Venid a Mí por Misericordia y perdón. Venid a Mí con vuestro Amor y Mi Corazón se inflama con vuestra ofrenda de Amor. Amados Hijos, no os desviéis de Jesús, sino seguid siempre Sus pasos. El camino de Cristo es el camino hacia Mí, vuestro Señor Dios y Padre. Esto Yo os digo, Amad a Mi Hijo con todos vuestros Corazones y adoradle con fervor.
Amados Hijos, vuestra fe será puesta a prueba y vos debéis ser constantes en la oración. Aquellos que se desvíen, incluso un poco, fallarán en su testimonio al Señor Dios y que se podrá decir después?
Orad y sed fieles a vuestro Señor Dios y Mi Fuerza y Amor os guiarán siempre. Orad, Amados Hijos. Orad.

UN PARPADEO EN EL TIEMPO
Jueves, 07 de enero 2016 3:24-15:54
Amado Padre, gracias por llenarme de Tu Amor y alegría. Bendice a nuestros sacerdotes con Tu guía y Amor.
Amados Hijos, Yo estoy antes de vosotros, como el sol sale antes de la noche. Vosotros sois Mis Hijos y Yo adoro a cada uno de vosotros tal como Yo os he hecho. Venid a Mí, con vuestras oblaciones Amorosas, y conoced la paz y el consuelo de Mi Perdón y Gran Amor por vos. El Mío es un Amor Eterno, y tan grande que no se puede comprender o entender. Yo soy para vosotros como vos sois para Mí.
Entended esto, Mis Hijos, vuestros pecados son muchos y son graves. ¡Cómo Amo a Mi Hijos Pecadores! incluso cuando vosotros tendréis que dar cuenta a Mí por cada pecado. Mi Alegría está en vuestro Amor por Mí, por vuestro Señor Dios y Padre. Me regocijo en las Almas de Mis Hijos y miro con Amor gozoso a medida que cada uno de vos os dirigís hacia Mí.
Amados Hijos, seguid a la verdad y la Vida. Seguid la verdad y el Amor de Mi Amado Hijo, Jesucristo, que está también con vosotros mientras vosotros vivís y muráis en esta era de pecado. Nunca temáis al Amor del Señor. Soy un Señor justo y compasivo. Cuando vosotros venís a Mí con dolor y con un Corazón Amoroso y arrepentido, Yo, con Amor y alegría, os llevo hasta Mi Pecho y os abrazo con Amor y el perdón. Hijos, soy el Señor Dios y sabréis que Yo soy el Amor. Vosotros no podéis conocer el Amor sin Amor. Así que os digo: salid a este Mundo y Amad a vuestros Hermanos y Hermanas. Hablad con ellos con Amor y no por “limosna” dentro de vuestros corazones. [Es decir, no porque vosotros tengáis que, sino por puro Amor a la gente.] Amad a vuestros Hermanos y Hermanas siempre, totalmente y sin condiciones. Sabed en vuestros Corazones que esta petición es razonable para vuestras Almas. Sabed esto. Mi muy Querido y Celestial Hijo fue odiado por los que deberían haberlo amarlo. No caminéis con los que han odiado y que odian sino que orad por ellos y amadlos con paciencia y consistencia.
Amados Hijos, sed misericordiosos al caminar en este Mundo. El Amor y la Misericordia de vuestro Señor Dios y Padre tendrán eco en el vuestro. Por lo tanto, cuando vosotros perdonáis una deuda, así Yo perdono las vuestras. Cuando perdonáis una transgresión, me complace perdonaros las muchas transgresiones de vuestra cuenta. Cuando vosotros sois misericordiosos en vuestro comportamiento o acciones, es el Amor quien habla y vosotros sentiréis la Gloria de Dios obrando o transitando a través de vos. Oh, Amados Hijos, emulad la Misericordia y el Amor que Cristo ha otorgado a vosotros, pues El [Amor]suyo fue un Amor perfecto en la Humanidad como lo es un Amor perfecto en la Divinidad.
Dejad a un lado vuestra ira y pesadumbre con vuestros Hermanas y Hermanos. Ofreced Amor cuándo ellos odien. Ofreced Amor cuando seáis acusados. Ofreced Amor cuando el Mundo os condene. Ofreced Amor cuando otros os desprecien. Mi Hijo, Mi Amado Hijo es omnisapiente y ve vuestro Amor y misericordia por los demás. ¡Tanta alegría que esto trae a Su Divino y Beatífico Corazón. Hijos, Amar no es una cosa dura [difícil] cuando os hayáis vaciado a vos mismos para que Yo pueda llenaros de Mis Gracias. Confiad en vuestro Señor Dios y Padre, y ved cómo este Mundo cambiará para vosotros.
Amados Hijos, os digo, disfrutad o aprovechad las muchas Bendiciones de la Eucaristía. Cuando vosotros participáis de este Santísimo de todos los Santos, vos recibís una abundancia de gracias y bendiciones. Sabed que un día, cuando saldréis al encuentro del enemigo, vos estaréis grandemente fortalecidos por la Eucaristía. Y cuando sois fieles a Cristo y Lo honráis y Le adoráis por Su Grandísimo Sacrificio, vosotros daréis testimonio de su fuerza y santidad [de la Eucaristía]. Vosotros tendréis acceso a la Hostia Divina cuando nadie más lo encontrará. A los fieles se les dará un camino iluminado para alcanzar las Gracias de la Sagrada Eucaristía, mientras que otros se morirán por saberlo. Así que os digo: reuníos en su Santidad [de la Eucaristía] y participad de este Grandísimo don Santo. Es la redención y la Vida. Es Cristo resucitado, y Él es Mi Más Amado Hijo. Se os dan grandes misericordias por Su GRAN Amor por vos. Sed devotos a Cristo. Amad a Mi Hijo Amado profunda y completamente a través de vuestros Corazones y conoceréis la dulzura de la Redención y evitaréis las tinieblas absolutas de la condena.
Amados Hijos, os digo, orad. Yo siempre voy a pediros que oréis. Yo escucho vuestras oraciones y las respondo correctamente por Mi Voluntad para vosotros. Aunque vosotros podáis sufrir ahora, qué regalos os esperan después! Yo besaré vuestras frentes y os daré la bienvenida en el Reino de los Cielos. No lloréis en vuestros esfuerzos y dificultades. Yo estoy con vosotros. Veo vuestro sufrimiento y miro a vosotros con Amor en Mis Ojos y con alegría en Mi Corazón por vuestro paciente sufrimiento en vuestras agonías. Amados Hijos, es mejor sufrir en la tierra, que desmayarse en el dolor de los Purgatorios. Los Purgatorios son diferentes y cada uno de vosotros se purifica de acuerdo con Mi Voluntad. No tengáis miedo, Mis Hijos, pero sabed que cualquier sufrimiento soportado por vosotros en Mi nombre, en el Nombre de Cristo Jesús, os hace más queridos por Mí y Yo os acerco a Mi Luz Amorosa cada día.
Amados Hijos, este tiempo o vuestro tiempo en este Mundo no es más que un abrir y cerrar de tiempo en la Eternidad. Así que os digo, vivid pacientemente en el conocimiento de que este dolor, al igual que las recompensas en este Mundo, son temporales. Amados Hijos, compartid Mi Amor y reunid a Mis Almas para Mí. Tengo sed de vuestro Amor, Mis Hijos. Paz, Hijos míos. Os doy Mi Paz Maravillosa.
Jueves, 07 de enero 2016 3:24-15:54
Amado Padre, gracias por llenarme de Tu Amor y alegría. Bendice a nuestros sacerdotes con Tu guía y Amor.
Amados Hijos, Yo estoy antes de vosotros, como el sol sale antes de la noche. Vosotros sois Mis Hijos y Yo adoro a cada uno de vosotros tal como Yo os he hecho. Venid a Mí, con vuestras oblaciones Amorosas, y conoced la paz y el consuelo de Mi Perdón y Gran Amor por vos. El Mío es un Amor Eterno, y tan grande que no se puede comprender o entender. Yo soy para vosotros como vos sois para Mí.
Entended esto, Mis Hijos, vuestros pecados son muchos y son graves. ¡Cómo Amo a Mi Hijos Pecadores! incluso cuando vosotros tendréis que dar cuenta a Mí por cada pecado. Mi Alegría está en vuestro Amor por Mí, por vuestro Señor Dios y Padre. Me regocijo en las Almas de Mis Hijos y miro con Amor gozoso a medida que cada uno de vos os dirigís hacia Mí.
Amados Hijos, seguid a la verdad y la Vida. Seguid la verdad y el Amor de Mi Amado Hijo, Jesucristo, que está también con vosotros mientras vosotros vivís y muráis en esta era de pecado. Nunca temáis al Amor del Señor. Soy un Señor justo y compasivo. Cuando vosotros venís a Mí con dolor y con un Corazón Amoroso y arrepentido, Yo, con Amor y alegría, os llevo hasta Mi Pecho y os abrazo con Amor y el perdón. Hijos, soy el Señor Dios y sabréis que Yo soy el Amor. Vosotros no podéis conocer el Amor sin Amor. Así que os digo: salid a este Mundo y Amad a vuestros Hermanos y Hermanas. Hablad con ellos con Amor y no por “limosna” dentro de vuestros corazones. [Es decir, no porque vosotros tengáis que, sino por puro Amor a la gente.] Amad a vuestros Hermanos y Hermanas siempre, totalmente y sin condiciones. Sabed en vuestros Corazones que esta petición es razonable para vuestras Almas. Sabed esto. Mi muy Querido y Celestial Hijo fue odiado por los que deberían haberlo amarlo. No caminéis con los que han odiado y que odian sino que orad por ellos y amadlos con paciencia y consistencia.
Amados Hijos, sed misericordiosos al caminar en este Mundo. El Amor y la Misericordia de vuestro Señor Dios y Padre tendrán eco en el vuestro. Por lo tanto, cuando vosotros perdonáis una deuda, así Yo perdono las vuestras. Cuando perdonáis una transgresión, me complace perdonaros las muchas transgresiones de vuestra cuenta. Cuando vosotros sois misericordiosos en vuestro comportamiento o acciones, es el Amor quien habla y vosotros sentiréis la Gloria de Dios obrando o transitando a través de vos. Oh, Amados Hijos, emulad la Misericordia y el Amor que Cristo ha otorgado a vosotros, pues El [Amor]suyo fue un Amor perfecto en la Humanidad como lo es un Amor perfecto en la Divinidad.
Dejad a un lado vuestra ira y pesadumbre con vuestros Hermanas y Hermanos. Ofreced Amor cuándo ellos odien. Ofreced Amor cuando seáis acusados. Ofreced Amor cuando el Mundo os condene. Ofreced Amor cuando otros os desprecien. Mi Hijo, Mi Amado Hijo es omnisapiente y ve vuestro Amor y misericordia por los demás. ¡Tanta alegría que esto trae a Su Divino y Beatífico Corazón. Hijos, Amar no es una cosa dura [difícil] cuando os hayáis vaciado a vos mismos para que Yo pueda llenaros de Mis Gracias. Confiad en vuestro Señor Dios y Padre, y ved cómo este Mundo cambiará para vosotros.
Amados Hijos, os digo, disfrutad o aprovechad las muchas Bendiciones de la Eucaristía. Cuando vosotros participáis de este Santísimo de todos los Santos, vos recibís una abundancia de gracias y bendiciones. Sabed que un día, cuando saldréis al encuentro del enemigo, vos estaréis grandemente fortalecidos por la Eucaristía. Y cuando sois fieles a Cristo y Lo honráis y Le adoráis por Su Grandísimo Sacrificio, vosotros daréis testimonio de su fuerza y santidad [de la Eucaristía]. Vosotros tendréis acceso a la Hostia Divina cuando nadie más lo encontrará. A los fieles se les dará un camino iluminado para alcanzar las Gracias de la Sagrada Eucaristía, mientras que otros se morirán por saberlo. Así que os digo: reuníos en su Santidad [de la Eucaristía] y participad de este Grandísimo don Santo. Es la redención y la Vida. Es Cristo resucitado, y Él es Mi Más Amado Hijo. Se os dan grandes misericordias por Su GRAN Amor por vos. Sed devotos a Cristo. Amad a Mi Hijo Amado profunda y completamente a través de vuestros Corazones y conoceréis la dulzura de la Redención y evitaréis las tinieblas absolutas de la condena.
Amados Hijos, os digo, orad. Yo siempre voy a pediros que oréis. Yo escucho vuestras oraciones y las respondo correctamente por Mi Voluntad para vosotros. Aunque vosotros podáis sufrir ahora, qué regalos os esperan después! Yo besaré vuestras frentes y os daré la bienvenida en el Reino de los Cielos. No lloréis en vuestros esfuerzos y dificultades. Yo estoy con vosotros. Veo vuestro sufrimiento y miro a vosotros con Amor en Mis Ojos y con alegría en Mi Corazón por vuestro paciente sufrimiento en vuestras agonías. Amados Hijos, es mejor sufrir en la tierra, que desmayarse en el dolor de los Purgatorios. Los Purgatorios son diferentes y cada uno de vosotros se purifica de acuerdo con Mi Voluntad. No tengáis miedo, Mis Hijos, pero sabed que cualquier sufrimiento soportado por vosotros en Mi nombre, en el Nombre de Cristo Jesús, os hace más queridos por Mí y Yo os acerco a Mi Luz Amorosa cada día.
Amados Hijos, este tiempo o vuestro tiempo en este Mundo no es más que un abrir y cerrar de tiempo en la Eternidad. Así que os digo, vivid pacientemente en el conocimiento de que este dolor, al igual que las recompensas en este Mundo, son temporales. Amados Hijos, compartid Mi Amor y reunid a Mis Almas para Mí. Tengo sed de vuestro Amor, Mis Hijos. Paz, Hijos míos. Os doy Mi Paz Maravillosa.

YO TENDRÉ MISERICORDIA ....
Miércoles, 06 de enero 2016 4:13-16:44
Amado Hija, busca dentro de ti misma y sabe que te acaricio con Mi Amor Abundante. Sí, tú eres para Mí, Niña Pequeña, como Yo soy para ti. No esperes o no te debilites por los constantes tirones y miserias de este Mundo, porque yo estoy perpetuamente entre ustedes, Amándolos, apreciándolos, guiándolos hasta Mí.
Escuchad, oh Hijos Míos, la oración es el elemento más importante de vuestras almas. Vosotros no podéis conocerme o a mi Corazón y Voluntad si no profundizáis en el Amor por la oración. Hablo en voz suave a mis Hijos y respondo a aquellos cuyas oraciones son constantes. Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo reino en el Cielo como voy a reinar en este Mundo. Todas las cosas de este Mundo son temporales. No os dejéis engañar por el que busca (vuestros almas) o que le gustaría embrutecerlos. Mis queridos Hijos, vos sois Míos y Yo busco a cada uno de vosotros para que estéis en Mi Santa y Eterna compañía.
Venid a Mí, oh Hijos de la Luz. Sed guardianes de esos Hijos que no me conocen. Orad para que los demás se vuelvan a Mí y se alejen del pecado. Vuestras oraciones os conceden mitigaciones a todo lo que viene. Vuestro desastre se reduce. Vuestro tiempo se amplía. Vuestros corazones se abren a Mí y Yo respondo a vuestros llamados, Mis Amados Hijos. Oh, Amados Hijos, hay tanto pecado contra mi Amado Hijo, Cristo quien se ha sacrificado para su redención. Tales pecados queman dentro de su tierno Corazón y Él llora por vuestras Almas. No pequéis contra Mi Jesucristo, porque Él es mi más Amado Hijo y yo adoro a los que le adoran y yo Amo a los que le Aman y Yo aborrezco a los que abusan del Nombre de Mi Hijo y de Su Corazón.
Voltead a Mí en todos vuestros retos o dificultades. ¿No sabéis que estoy aquí para vos como un padre adora y protege a Su Hijo? Yo soy para vos y espero con anhelo por vuestros llamados. Amados Hijos, Amad a Mi Beatífico Hijo, Cristo Jesús. Vosotros debéis saber (que) el Corazón de Jesús está lleno de tanto Amor como de temor por Vosotros. ¡Oh, cómo ama Él a cada uno de vosotros tan a fondo! Su Amor es exquisito y los pecados del hombre le traen tanto dolor, al igual que me traen tanto dolor a Mí. ¿No entendéis o veis que yo soy el Amor? No deseo desgracias sobre Mis Amados Hijos. Me regocijo en vuestro Amor y disfruto en la alegría de alcanzar el (las) Alma (s) de todos mis Hijos.
Amados Hijos, su Madre, la Virgen llora para que Vosotros Améis a su Hijo, Jesús, porque Él es digno sólo de Amor y adoración. Su Sagrado Corazón anhela por vuestro Amor y ella procura mostraros el camino para Amarlo. ¡Oh esplendor! ¡Amada y Bendita Madre, cómo llora ella por toda la Humanidad! ¡Cómo llora por la traición del Hombre a su Amado Hijo! Hijos de Dios, escuchad sus llamados. Escuchad Mis llamados! Yo os llamo a la acción, mis Hijos! Los invito a que Améis a vuestros Hermanos y Hermanas. Llenaos de Amor y voltead vuestras caras lejos del pecado. ¡Orad! Orad, pues es a través de la oración que son posibles todas las cosas.
Fortaleced vuestra fe, Mis Amados Hijos. ¡Cómo serán puestos a prueba sus verdaderos cimientos [de la fe] por este Mundo! Cómo seréis puestos a prueba! Por lo tanto, sumergíos en el Amor de Cristo y fortaleced vuestras almas con la contemplación de Su Pasión y al participar en el Santísimo de todos los Santos, aquello que es Su Cuerpo y Sangre hecho Divinidad. Amados Hijos, bebed de este regalo que se os da a Vosotros y descansad cálidamente y con certeza con vuestros corazones en Mis Manos Celestiales. Glorificad al Hijo del Hombre, y apartaos de los pecados.
Venid a Mí con arrepentimiento, y tendré Misericordia de cada Hijo con pesar en su Corazón y Amor en su Alma. Venid a Mí por dirección y por reposo. Yo soy un Dios Amoroso compasivo, Misericordioso. No quiero ver a mis Hijos sufrir por regodearse en el pecado. Amados Hijos, sois renovados por Mi Amor sin fin y el perdón siempre dispuesto. Ved la Mano de Dios que se extiende hacia vosotros para que vos podáis ser levantados por el Amor y la Misericordia. Tomad Mi Mano, Mis Amados. Sed uno con Cristo. Él es quien salva al Hombre de una eternidad de miseria, del "no" o de un vacío eterno y os alegraréis en este conocimiento y que habéis confiado correctamente en el Hijo de Dios.
Vosotros venís a Mí a través de Su Amor [de Cristo] por vos. No abandonéis Su Amor, a cambio, compartid Su Amor generosamente con los demás y no tengáis miedo de declarar Mi Gloria y Amor por este Mundo. Venid a Mí Hijos, y conoced el consuelo y alivio del perdón y de la misericordia, pues la Misericordia es un regalo. Dejad que vuestros corazones descansen sobre este conocimiento firme o absoluta confianza y fe. Yo soy vuestro Señor Dios y Padre y deseo sólo cosas buenas para mi querido Hijos. Confiad en Mí, Mis Amados, y dadme vuestro Corazones.
Orad, mis Hijos y yo responderé a vuestros llamados. Sabed que estoy siempre con vosotros, Amándoos y bendiciéndoos con regalos de Amor. Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestro tiempo. Apartaos del pecado. No penséis en esperar a mañana, porque vuestro Tiempo puede llegar de repente y que diríais cuando ya no haya oración de alabanza en vuestras lenguas? Estad dedicados a Mí siempre, Hijos Míos. Seguid el camino del Señor Jesucristo. Su Amor calmará vuestras Almas si vos así lo deseáis, pero dejadlo entrar. Amados Hijos, orad y sabed que Mi Paz está con vosotros siempre. No temáis, pues cuando sois para Mí, Yo soy para vos. Vosotros sois guiados hacia el mal camino en este Mundo por las tentaciones del pecado. Por lo tanto, os digo, fortificaos con la oración y el Amor. Amados Hijos, fortificad a vosotros mismos.
Miércoles, 06 de enero 2016 4:13-16:44
Amado Hija, busca dentro de ti misma y sabe que te acaricio con Mi Amor Abundante. Sí, tú eres para Mí, Niña Pequeña, como Yo soy para ti. No esperes o no te debilites por los constantes tirones y miserias de este Mundo, porque yo estoy perpetuamente entre ustedes, Amándolos, apreciándolos, guiándolos hasta Mí.
Escuchad, oh Hijos Míos, la oración es el elemento más importante de vuestras almas. Vosotros no podéis conocerme o a mi Corazón y Voluntad si no profundizáis en el Amor por la oración. Hablo en voz suave a mis Hijos y respondo a aquellos cuyas oraciones son constantes. Yo soy el Señor Dios y Padre. Yo reino en el Cielo como voy a reinar en este Mundo. Todas las cosas de este Mundo son temporales. No os dejéis engañar por el que busca (vuestros almas) o que le gustaría embrutecerlos. Mis queridos Hijos, vos sois Míos y Yo busco a cada uno de vosotros para que estéis en Mi Santa y Eterna compañía.
Venid a Mí, oh Hijos de la Luz. Sed guardianes de esos Hijos que no me conocen. Orad para que los demás se vuelvan a Mí y se alejen del pecado. Vuestras oraciones os conceden mitigaciones a todo lo que viene. Vuestro desastre se reduce. Vuestro tiempo se amplía. Vuestros corazones se abren a Mí y Yo respondo a vuestros llamados, Mis Amados Hijos. Oh, Amados Hijos, hay tanto pecado contra mi Amado Hijo, Cristo quien se ha sacrificado para su redención. Tales pecados queman dentro de su tierno Corazón y Él llora por vuestras Almas. No pequéis contra Mi Jesucristo, porque Él es mi más Amado Hijo y yo adoro a los que le adoran y yo Amo a los que le Aman y Yo aborrezco a los que abusan del Nombre de Mi Hijo y de Su Corazón.
Voltead a Mí en todos vuestros retos o dificultades. ¿No sabéis que estoy aquí para vos como un padre adora y protege a Su Hijo? Yo soy para vos y espero con anhelo por vuestros llamados. Amados Hijos, Amad a Mi Beatífico Hijo, Cristo Jesús. Vosotros debéis saber (que) el Corazón de Jesús está lleno de tanto Amor como de temor por Vosotros. ¡Oh, cómo ama Él a cada uno de vosotros tan a fondo! Su Amor es exquisito y los pecados del hombre le traen tanto dolor, al igual que me traen tanto dolor a Mí. ¿No entendéis o veis que yo soy el Amor? No deseo desgracias sobre Mis Amados Hijos. Me regocijo en vuestro Amor y disfruto en la alegría de alcanzar el (las) Alma (s) de todos mis Hijos.
Amados Hijos, su Madre, la Virgen llora para que Vosotros Améis a su Hijo, Jesús, porque Él es digno sólo de Amor y adoración. Su Sagrado Corazón anhela por vuestro Amor y ella procura mostraros el camino para Amarlo. ¡Oh esplendor! ¡Amada y Bendita Madre, cómo llora ella por toda la Humanidad! ¡Cómo llora por la traición del Hombre a su Amado Hijo! Hijos de Dios, escuchad sus llamados. Escuchad Mis llamados! Yo os llamo a la acción, mis Hijos! Los invito a que Améis a vuestros Hermanos y Hermanas. Llenaos de Amor y voltead vuestras caras lejos del pecado. ¡Orad! Orad, pues es a través de la oración que son posibles todas las cosas.
Fortaleced vuestra fe, Mis Amados Hijos. ¡Cómo serán puestos a prueba sus verdaderos cimientos [de la fe] por este Mundo! Cómo seréis puestos a prueba! Por lo tanto, sumergíos en el Amor de Cristo y fortaleced vuestras almas con la contemplación de Su Pasión y al participar en el Santísimo de todos los Santos, aquello que es Su Cuerpo y Sangre hecho Divinidad. Amados Hijos, bebed de este regalo que se os da a Vosotros y descansad cálidamente y con certeza con vuestros corazones en Mis Manos Celestiales. Glorificad al Hijo del Hombre, y apartaos de los pecados.
Venid a Mí con arrepentimiento, y tendré Misericordia de cada Hijo con pesar en su Corazón y Amor en su Alma. Venid a Mí por dirección y por reposo. Yo soy un Dios Amoroso compasivo, Misericordioso. No quiero ver a mis Hijos sufrir por regodearse en el pecado. Amados Hijos, sois renovados por Mi Amor sin fin y el perdón siempre dispuesto. Ved la Mano de Dios que se extiende hacia vosotros para que vos podáis ser levantados por el Amor y la Misericordia. Tomad Mi Mano, Mis Amados. Sed uno con Cristo. Él es quien salva al Hombre de una eternidad de miseria, del "no" o de un vacío eterno y os alegraréis en este conocimiento y que habéis confiado correctamente en el Hijo de Dios.
Vosotros venís a Mí a través de Su Amor [de Cristo] por vos. No abandonéis Su Amor, a cambio, compartid Su Amor generosamente con los demás y no tengáis miedo de declarar Mi Gloria y Amor por este Mundo. Venid a Mí Hijos, y conoced el consuelo y alivio del perdón y de la misericordia, pues la Misericordia es un regalo. Dejad que vuestros corazones descansen sobre este conocimiento firme o absoluta confianza y fe. Yo soy vuestro Señor Dios y Padre y deseo sólo cosas buenas para mi querido Hijos. Confiad en Mí, Mis Amados, y dadme vuestro Corazones.
Orad, mis Hijos y yo responderé a vuestros llamados. Sabed que estoy siempre con vosotros, Amándoos y bendiciéndoos con regalos de Amor. Amados Hijos, no seáis frívolos con vuestro tiempo. Apartaos del pecado. No penséis en esperar a mañana, porque vuestro Tiempo puede llegar de repente y que diríais cuando ya no haya oración de alabanza en vuestras lenguas? Estad dedicados a Mí siempre, Hijos Míos. Seguid el camino del Señor Jesucristo. Su Amor calmará vuestras Almas si vos así lo deseáis, pero dejadlo entrar. Amados Hijos, orad y sabed que Mi Paz está con vosotros siempre. No temáis, pues cuando sois para Mí, Yo soy para vos. Vosotros sois guiados hacia el mal camino en este Mundo por las tentaciones del pecado. Por lo tanto, os digo, fortificaos con la oración y el Amor. Amados Hijos, fortificad a vosotros mismos.